María tercera parte
Maria porfin concreta su fantasia.
Tercera parte de María
Otra vez me encontraba en el trabajo, ya era lunes, a primera hora recibí su mensaje diciéndome lo agradable que lo había pasado el sábado pasado y que estaba lista para el siguiente paso, el problema era que el próximo fin de semana estaría ocupada y su prometido la visitaría sábado y domingo, pero ya le urgía verme, había quedado complacida y ganosa de mas, me propuso vernos entre semana, le pedí a mi jefe inmediato el día miércoles para día libre, el acepto inmediatamente asi que confirme a María el día, le dije que seria temprano a las 8am y asi tendríamos la mayor parte del día para nosotros, ella acepto contenta, asi llego el miércoles, me pare temprano para asearme muy bien, me vestí con un pantalón con corte chino color azul marino, camisa blanca a cuadros azul marino para usarcé desfajada con unos tenis puma blanco con azul marino por ende mi vestimenta era casual tirándole a lo jovial, de ropa interior me puse unos boxers dokers color negro, también coloque en el carro dos maletines con algunas cosas que necesitaría para mas adelante.
Esta vez quede de pasar temprano por María pero cerca de su domicilio para comodidad y seguridad de ella pues me dijo que usaría un atuendo muy provocativo y no quería arriesgarse a salir lejos sola, al llegar a un par de cuadras de su casa la vi, no lo podía creer lucia hermosa y tremendamente sexy, vestía un vestido de una sala pieza a medio muslo y blusa con tremendo escote que dejaba ver mitad de sus deliciosos pechos todo el canal abdominal y vientre plano todo en una sola pieza color blanco, también tenia tremendo escote en la espalda, sugería el vestido a la vista por lo ceñido de este que no tenia brasier y usaba tremenda tanguita diminuta. De nuevo baje le abrí la puerta para que subiera al auto y marchamos a un hotel que había reservado previamente, contaba con cama Queen size, el famosísimo sillón del amor, pantalla de 50” y un hidromasaje suficientemente grande para 4 personas. En el camino al hotel platicamos y reíamos ya no lucia nerviosa, se veía decidida, ese espectáculo de atuendo me permitía saborear y admirar su figura. Aparque el auto y le abrí la puerta tomándola de la mano y asi fuimos hasta el cuarto, al pasar por recepción y el pasillo al cuarto los trabajadores y los pocos inquilinos miraban con perversidad y lujuria eso me éxito, saber que era mía ese día solo para mi y su deseo de ellos aumentaba mis ganas de penetrarla, ella también lo noto y a propósito se contoneo mas, provocando que sus generosos atributos resaltaran mas, al entrar al cuarto mi miro y sonrió pícaramente, le dije que se pusiera cómoda que regresaría al auto por unas cosas, al llegar ella estaba sentada en una mesita para dos, abrí mi primer maleta y extraje un par de copas de tallo largo y un vino casillero del diablo blend red para amenizar el momento, ella quedo fascinada son el detalle, le tuve que enseñar algunos detalles sobre como tomar vino, fue evidente que no sabia, después de un par de copas me acerque a ella le tome el la mano y le confesé que me fascinaba su fortaleza como mujer, me sonrió y acaricio mi mejilla y asi es como me empezó a besar, primero besos tiernos y pronto pasando a mas intensos fue asi como me empezó a desabotonar la camisa en un movimiento rápido le baje el vestido dejando ver esa piel morena apiñonada toda tersa, la recosté en la cama y le quite su tanguita blanca quedando solo con tacones le repase mis labios por toda su pierna y llegue a su panochita toda rasurada y empecé a jugar mis labios en su vulva para después bajar a sus labios vaginales y lamer, ella soltaba ligeros gemidos, en un movimiento ágil abrí el segundo maletín y extraje un pequeño vibrador para clítoris y lo frote sobre este con pequeñas revoluciones sin dejar de lengüetearla, ella ya estaba frenética, lengüeteaba mas intensamente, succionaba e introducía mis dedos, ya estaba mojada y de repente me dijo en modo frenético y suplicante “métemela, métemela por favor yaaaa”, mi verga ya la tenia bien dura y lista para penetrarla y eso hice subiéndome sobre ella embistiéndola suave y luego pasando a un ritmo mas rápido lamiéndole sus ya duros mientras la manoseaba intensamente escuchándose el golpeteo de nuestros genitales ya mojados, ella no paraba de gemir agarrándome de los cabellos súbitamente pare y la voltee colocándola de a perrito y continúe embistiéndola mirándole tremendo trasero bien formado, le alcance el cuello besándolo y le dije quiere un poco de sexo fuerte?, ella me miro excitada diciéndome si, casi gimiendo y empecé a penetrarla con un poco de violencia tomándole su extensa cabellera jalándosela moderadamente, hasta que se adapto al ritmo fue como empecé a darle ligeras nalgadas al ritmo de mis embestidas pasando a un tono mas fuerte, pare súbitamente otra vez la incorpore y la recargue en el sillón del amor empinándola ligeramente y se la deje ir toda manoseándola por todas partes besándola frenéticamente mientras la embestía, ella ya se avía corrido varias veces, la voltee recostándola boca arriba subiendo sus piernas a mis hombros, le junte sus piernas y la volví a penetrar dándole duro hasta sonar fuerte, estaba al limite yo, se la saque y eyacule en su vulva y vientre, nos quedamos viendo satisfechos y jadeantes. Paso un rato para entrar en el hidromasaje sirviéndole mas vino entre platicas ella se notaba con hambre de mas, me agarro mi verga y empezó a mamármela suave y no tardando a mas profundo y rápido, cuando ya no pude mas la subí en mi para que se diera sentones a su ritmo, el agua chasqueaba fuerte y yo mamándole sus tetas morenas, suaves y generosa mente grandes, me miro y me dijo intentemos por detrás pero ten cuidado es mi primera vez, eso que me dijo me la puso mas dura, se volteo recargándose en los limites del hidromasaje parando ese esplendido culo, fue ágil mi movimiento para llegar a ella y empecé a lengüetearle su culito e introduciendo un poco mi dedo, saque de el segundo maletín un lubricante untándoselo despacio y empecé a penetrarla lento, al sentirla de inmediato soltó gemidos, hasta que le entro toda, empezando el ritmo de vaivén lento a rápido, dándole nalgadas, tirando de sus cabellos, apretándole sus tetas bien, fue cuando me dijo excitada, adoro el choque de tus huevos en mi vagina, esas palabras me pusieron frenético y empecé a darle mas duro hasta venirme en su ano, quedamos paralizados, jadeantes, sudorosos y cansados. El resto del día y tarde repetimos dos veces, cuando termino el día disfrute verla vestirse agotada y feliz, la lleve cerca de su casa y me despedí dándonos un beso largo y lento, ella fue mía durante cinco meses mas viéndonos una ves por semana, realizamos variadas posiciones y formas de placer al sexto mes ella se caso, no me invito por obvias razones, solo la vi de lejos por un rato fumándome un cigarrillo. Si les sigue gustando les daré la cuarta parte
Aquí seguimos pendientes
Excelente relato espero la siguiente