Mi doble vida

Continuación de mis comienzos en la pedofilia y pederastia .
Ya les conté mi historia con Susy y Carmen en mis dos primeros relatos.

En 2012 conocí dos niñas, una en la casa de una amiga y otra en el trabajo social. A ellas no les hice absolutamente nada pero si me masturbé mucho tiempo en nombre de ellas dos, no recuerdo cómo empezaron mis deseos de pajazo con esas niñas el caso es que casi un año entero estuve haciéndolo. Bueno esto solamente es preámbulo para la tercera víctima llamada Vanessa.

Si leyeron los dos relatos anteriores sabrán que por rutina y más que todo para que no me vayan a buscar para que regrese si decido salirme, he seguido asistiendo a la iglesia y ahí es donde conocí a una hermosa niña de 3 años que es buen juguetona y sociable con quienes tiene confianza, tiene un hermano mayor como de 8 años, sus padres son amigos de la familia. Con ella nunca tuve intención de hacer algo pero un día que fuimos al velorio del papá de un cristiano íbamos todos amontonados y yo cargaba a vos niños, en esos frenos repentinos sentía el esponjoso y suave culito de Vanessa chocando con mi miembro. Fue ahí donde despertó el deseo de seguir en las maldades con ella, como íbamos a un viaje un poco largo entonces se produjeron esos frotamientos en más de una ocasión.

Posteriormente ya en la misma iglesia me las ingeniaba para puyarla aunque fuera un ratito muy pequeño, ya que con tanta gente no era conveniente que alguien observara. De igual manera en el trabajo de su madre, un día le provoqué cosquillas a manera que ella sola se fuera frotando conmigo, no desaprovecho oportunidad de sentir ese placer, pero me contengo por la distancia con la madre que es bien corta de donde se realiza mi perversión.

Normalmente con ella es así de aprovechar los pequeños momentos en que se puede jugar con ella y puyarla. Sin embargo acabo de pasar una experiencia demasiado excitante, fui a visitar la familia en su hogar y estaban todos reunidos tanto padres como hijos, los pequeños buscaban jugar conmigo, primero que los cargara, luego que los atrapará, en fin, me estaban dejando sin energía, en eso se suben los dos a mis piernas para jugar al caballito, el hermano atrás y ella adelante. Como mis piernas aunque son grandes no es que haya mucho espacio al estar sentado la niña se ubicó justo en mi pene, estábamos frente a frente.

En eso yo comienzo a mover mis piernas arriba y abajo para cabalgarlos y sosteniendo al hermanito de la espalda para que ninguno se cayera, en ese vaivén comienzo a sentir las partes íntimas de la niña, no recuerdo exactamente si el culito o la rayita o un poco de ambas, el caso es que me sentí anonadado al verla a ella como me jalaba la camisa ya que era su caballo y al mismo tiempo verle los ojos con una mirada un poco perdida producto de la sensación que estaba provocándole el frotamiento. Después de un rato se bajó con una mirada sería y como al minuto se volvió a subir y me agarra de la misma forma. Ahí me excité mucho y comencé a cabalgar más fuerte para puyarla más adentro, así estuvimos como por quince minutos. A todo esto su papá estaba en frente viendo televisión. Luego descansaron un poco, el papá de retiró al trabajo,pero la niña que ya le he arrimado mi verga varias veces ella la busca, pude haberme aprovechado un poco más ya que su madre estaba en otra parte de la casa donde no me podía ver en ese instante pero no quise arriesgarme a más después de lo que hice frente a las narices del Tata. Estoy en el dilema si me sigo aprovechando de ella o dejo de hacerlo, puesto que al ser personas conocidas en cualquier momento me podrían pillar.