Mi nuevo fetiche, me gustan los vagabundos

Pensé que no podía caer mas bajo ya, esta bien, me gustan los hombres feos,desaliñados, sucios, pero esto acabo con la imagen que tenía de mi. Ahora no puedo dejar de pensar en vagabundos, hombres de la calle, como pude ser que una mujer hermosa….
Ya han pasado 3 días desde que folle con Raúl, todos los días últimamente me levanto muy excitada, nose si eso es bueno pero todas mañana antes de ir al trabajo me masturbo como 2 o tres veces casi todos los días. Nose si es bueno pero me hace sentir muy relajada.
Mi vida sexual cada vez se incrementaba más, me gustaba que los hombres me miren, que me digan cosas, ya hasta me gustaba masturbarme e imaginarme cosas tan sucias así como cojer con hombres feos, pero me ocurrió algo en estos días haciendo que ahora sí mi fetiche de cojer y que me gusten los hombres feos sea realizada, a tal punto que me estoy volviendo una ninfomaniaca no puedo dejar de ver a esas personas aún si mi hijo está con migo es una locura pero ya no puedo ocultar mis sentimientos.

Esto me ocurrió hace un par de días. Todos días como les mencioné me levanto muy excitada y me masturbo casi diario pero una mañana tuve un sueño muy pero muy asqueroso.
Yo estaba en la calle caminando tranquilamente y pasaba por un callejón, cuando de pronto un vagabundo me arrestó hacia allí, me llevó al fondo del callejón y me arrastró a su casita de cartones fuera de la vista de todos y todo. De pronto me besa por todo el cuerpo me besaba en la boca, hasta que me arrancó las ropas y no paro de violarme por horas, cuando de repente me desperté de mi sueño toda transpirada, agitada y mi vagina estaba chorreando.
El día transcurrió con normalidad, el trabajo, en la salida del trabajo pero me sentia rara, estuve como muy distraída todo el día.

Me había vestido con un pantalón Oxford de terciopelo bastante ajustado color azul oscuro, unos tacones negros y una musculosa olgada color blanca. Cuando salía de la fábrica y llegaba a la estación de retiro no había mucha gente pero lo que sí veo era un señor que traía una bolsa de basura en la mano de lejos parecía una persona común pero me acerco un poco porque debía pasar por ahí para ir al andén veo que este estaba todo barbudo, tenía una uñas largas, su ropa estaba toda con transpiración y tenia tierra. No me quiero ni imaginar lo que debe ser ese aliento, se ve que no se baña hace bastante porque estando a solo 2 metros de mi el aroma que emanaba este vagabundo era asqueroso.

Aprovechando que no había casi gente, ya que salí más temprano hoy de trabajar, podía mirar al vagabundo desde una distancia segura, nose porque no podía parar de mirarlo, nose si era porque era tan feo y sucio que no podía parar de mirarlo o era el hecho de que quisas me empezaba a agarrar un cierto cosquilleo en vagina que me provocaba este tipo de personas.
A medida que el tiempo pasaba pensé que la estación se iría llenando pero fue todo lo contrario, se ve que el tren tardaba tanto que poca gente que estaba en la estación se iba quizás buscando otro tipo de alternativa como un colectivo. Así que el la estación eramos un viejito que estaba por la parte de adelante, el vagabundo que estaba casi por la parte de atrás y yo que estaba por la parte más atrás del andén.

A eso de los 10 minutos el tren llega a la estación, camino hasta las puertas del tren que todavía no se habían abierto, mientras espero siento que alguien se aproxima a la misma puerta en la que estoy y adivinen quién era? Así es, era el vagabundo que con una mano tenía su bolsa de basura y anda a saber que es lo que tenía. Su olor penetraba mi nariz, es más sentia que tenia olor a pis, era muy asqueroso cuando me me doy vuelta para mirarlo el vago estaba petrificado mirando mi cuerpo entero y cuando hacemos contacto visual me hace una sonrisa muy malévola y pude ver que le faltaban varios dientes, los pocos dientes que tenía eran amarronados y tenía como una pasta blanca arriba de los dientes. Que asquerosidad decía yo dentro mío. En eso se abren las puertas del tren y yo de inmediato busco un asiento libre en el último vagon, había bastantes ya que no subió casi nadie y debíamos esperar unos 10 min para que el tren saliera.

En eso de los 3 minutos alguien se sienta al lado mío, y era el vago que me volvió a sonreír y yo para no ofenderlo le hice una leve sonrisa de costado como para no incomodarlo. Yo no podía cambiarme de asiento porque me quedé del lado de la pared y el vago del lado del pasillo así que estaba atrapada.

Yo: Disculpe señor no podría sentarse en otro lado hay cientos de asientos vacíos.
Vago: Disculpe dama pasa que me duele mucho la pierna y no me puedo mover.
Yo: esta bien, decía yo fastidiada dentro mío.
Encima su olor era impresionante, no paraba de respirar su horrible olor.
En esa espera de 10 minutos el vago se me habia pegado estábamos hombro con hombro y pierna con pierna bien pegados.
En eso veo que saca algo de la bolsa de basura y era una manzana toda podrida, tenía un color extraño y si no vi mal creo que tenía como gusanos. Casi vomito mientras miraba para la ventana evitando mirar.

Vago: disculpe mis modales quiere un poco?
Yo: pero ni loca, asqueroso ser decía yo por dentro, pero termine diciéndole con un tono medio amable, no gracias ya comí.
Mientras comía pude ver que sus manos además de estar sucia y pegajosas por el jugo de la manzana podrida vi que en sus uñas había restos de comida. Este hombre no puede ser más repugnante, no puedo creer que esté pegada con este bicho.
Mientras pasaban los minutos y yo mirando a la ventana mi nariz se fue acostumbrando a ese olor putrefacto hasta llegando a ser un olor excitante y sumado a eso nose porque se me vino a la mente el sueño que había tenido a la mañana de un vagabundo violandome en un casita de cartones sin parar. De a poco mi cuerpo me traicionaba, sentía un cosquilleo en entre mis piernas y mi corazón se agitaba. Encima el vago no paraba de hablarme.
Vago: mmmm,señorita que rico que huele usted, me encantan las mujeres tan bellas y con rico aroma.
Yo: eh gracias señor, mientras ya le hacía una sonrisa de punta a punta y no tan falsa.
Vago: me encanta como esta vestida, tan elegante y con tan buen cuerpo que tiene usted.
Yo: bueno, gracias le decía pero esta vez de tantos cumplidos me estaba poniendo colorada. Como me puede hacer poner colorada este ser tan repugnante?
Encima cada vez de me hablaba sentia su asqueroso aliento y recordar que se comió esa manzana podrida me provocaba arcadas pero hacia lo posible por no hacerlo.

Antes de que el tren arrancara entro poca gente calculó unas 10 personas más pero se fueron a los vagones de más adelante dejándonos a mi y al vagabundo solos, y bastante juntos.
Una vez cerradas las puertas del tren se anuncia que el viaje tardaría unos 45 minutos por suerte para mi me bajaba 2 estaciones antes de llegar a José León Suárez que era el destino final del tren.
Ni bien comenzó el viaje, el vago seguía bien pegado a mi, era tan Primitivo que hasta se rascaba sus partes íntimas sin total descaro mientras emitía ruidos de alivio.
Vago: ahhhh, ya me siento mejor.

Yo sin poder evitarlo mire de reojo la entre pierna del vago y se notaba que la tenía gruesa y larga, mi cuerpo me seguía traicionando, ya sentía como mi vagina algo húmeda.
Encima el vagabundo a medida que el viaje avanzaba con su pierna que estaba pegada a la mía la empezaba a mover de arriba hacia abajo suavemente sintiendo la suavidad de mi pantalón ajustado de terciopelo ya que el vago tenía puesto un sport negro, yo seguía mirando a la ventana pero ese roce y sus palabras de: «mmm, que suavidad que tiene este pantalón que le queda tan bien, es muy hermosa usted», me estaban poniendo muy cachonda, ya era mucho el alago y ese era mi debilidad.
Yo sin responderle le hago una nueva sonrisa y vuelvo a mirar a la ventana.

Ya habían pasado 2 estaciones, no entraba mucha gente, el fondo del tren seguía vacío.
El vagabundo se ánimo a dar un paso más y fue poner una de sus sucias y pegajosas manos en mi pierna un poco mas arriba de lo que me esperaba, casi tocando mis muslos internos.
Vago: ay disculpe, pero podría dejar mi mano apilada en su piernas, es que no hay mucho lugar y necesito apoyarla en algún lugar para que no se me canse, órdenes del doctor.
Sabia claramente que era mentira pero mi respuesta fue.
Yo: eh, si esta bien no hay problema, si lo dice el doctor, se le decía como suspirando, ya poco a poco no podía creer como me gustaba sentir su mano asquerosa en mi muslo.
Ya de a poco llegábamos a la estación 5, cuando de repente siento que con sus uñas largas llenas de resto de comida comienza a arañar el muslo interno por encima de mi pantalón de terciopelo, mientras con la otra mano se tocaba apenas, yo disimuladamente miraba la esena, mi propia esena de que me manoseaba un hombre repugnante. Así habra estado como 5 minutos, yo ya no aguantaba más y mientras me hacía la que me acomodaba en el asiento me pegue más a el y mientras me hacia la disimulada abría un poco mis piernas como para darle más acceso a mis muslos. Yo ya tenía la respiración entre cortada y cuando el vago se da cuenta de lo que hice el con su mano empieza a tocarme ya sin disimulo la piernas, subía y bajaba, me arañaba suave también.

Hasta que paso lo que ya no aguantaba más, al llega a la estación 6 el vago con sus dos manos se pone de perfil y se me pega del todo tocándome ya mi entrepierna, parte de mi panza, me toca las tetas mientras yo ya dejo de mirar a la ventana y lo miro a el, mientras me sonríe con sus dientes podridos.
Yo totalmente rendida Apoyo la cabeza en el respaldar del asiento y me abro de piernas completamente. Mientras el vago pegaba su cara a mi cuello, mi pelo, exalaba mi perfume, se ve que lo excitaba y cuando paraba de oler mi pelo me decía en el oído, mientras sentía su putrefacto aliento:
Vago: mmm, mi amor pero si estás mojadisima Cachorrita, como podes ser tan puta, tan zorra, sos una barata, no vales nada.
Esas palabras me llegaron tanto que mientras me tocaba mi vagina tuve un leve orgasmo simplemente con sus palabras hirientes haciendo que me estremecía un poco.
Se ve que el vagabundo se dio cuenta que mi debilidad era que me hablen sucio, y ese mientras me seguía tocando la vagina muy suave me seguía diciendo cosas al oído muy fuertes:
Vago: que mojada que estás perra barata, te gusta que te toquen la concha mojada no?
Yo: ahhh,ay si, le respondía yo entre cortada y con mis ojos cerrados.
Vago: mmm, mi amor, no sabia que eras así de putita, se ve que no te tienen cuidada verdad?
Yo: mmmm, basta enfermo, sos una persona asquerosa déjame.
Vago: ay mi amor, que rico perfumito que tenes beba, sos una cachorrita muy bella.
Vago: como te violaría perra barata.
Vago: donde te bajas?
Yo: en ballester, ahhh.
Vago: bueno, esto es lo que va a pasar, vos te vas a bajar con migo una estación más adelante te quedo claro putita?
Yo: pero mi,ahhh ayy que rico siiiii, mi hijo me está esperando.
Vago: ah, encima sos una solterona, con razón estas tan urgida tu hijo se debería sentir muy humillado por tener una puta como madre verdad?
Yo: no, basta, no soy puta, ahhh que rico, BASTA CERDO deje de manosearme.

Mientras me intentaba levantarme, el vagabundo me sentó de vuelta y me empezó a besar por el cuello.
En eso, me ordena que me maquille más mis labios nose porque
Vago: mi amorcito, cuando te bajes con migo quiero que te pintes los labios de fresita que tenes porque nos vamos a matar a besos, reina.
Yo: es..esta bien pero deje de tocarme por favor que ya estoy muy mojada.
El vagabundo paró de tocarme pero lo que quedaba de viaje no paro de darme besos en mis tetas y en mis piernas todo por arriba de mi ropa.

Cuando llegamos a la estación en la cual el vago me obligó a bajar, no había nadie, mejor para mi porque obligó a darle la mano como novios. Habremos caminado así como unas 5 cuadras hasta un callejón que era muy estrecho y tenía varios pasillos.
Yo: no voy a entrar ahí ni loca.
Vagagundo: ah no? Mira que se donde vivís eh, así que compórtate como una buena puntita y entra.
Yo resignada entre sabiendo lo que me esperaba.
Vago: muy bien perrita así, que obediente Cachorrita jajaja.
Yo: al menos puedo llamar a mi hijo para que no me espere?
Vago: de acuerdo hacedlo rápido porque ahí adentro nose porque no hay señal.
Yo: hola hijito, te llamo porque mamá se tiene que quedar un poco más en el trabajo porque surgió un problema si? , te quiero.

Una vez que termine de hablar con mi hijo nos metimos en el callejón que era bastante estrecho, mientras pasábamos por ahí el suelo además de estar lleno de basura y moscas por todos lados, por las paredes y el suelo había manchas de orina con bastante olor fuerte, debo ser sincera, la situación y el lugar tan antigienico me estaba poniendo más cachonda de lo normal.

Vago: mi amorcito no te preocupes por la privacidad, aquí no nos verá no pasa nadie, esta bien abandonado este lugar así que vamos a darle duro beba.
Mientras me agarraba de la mano y me seguía llevando hacia adentro del callejón estrecho, veo que nos dirigimos hacia una puerta que estaba toda rota y oxidada.
Vago: aquí vivo, estaremos solitos por mucho tiempo perra, mientras me daba una nalgada en la cola mientras entraba por esa puerta.
Cuando veo a mi alrededor veo una habitación de 5 por 5, un cuadrado súper chiquito, con un colchón en el piso que tenía mucho olor, el ambiente apestaba, había manchas de semen en el colchón y en el suelo, también había muchas bolsas de basura.
Vago: te gusta bebé?
Yo: pero esto es un chiquero.

Mientras siento que de atrás se me apoya el vagabundo mientras me agarra las caderas y me dice al oído
Vago: si, es un chiquero en el que te voy a violar tanto que vas a quedar embaraza.
Una vez diciéndome esto me empuja al colchón, y a la puerta le pone llave para que no pueda salir.
Yo sinceramente no podía hacer nada, estaba atrapada en un cuadrado donde no podía correr, así que para que el vagabundo se tranquilice le dije mientras estaba en encolchon
Yo: esta bien, hace con migo lo que quieras, pero con una condición.
Vago: cual?
Yo: no me puedo quedar mucho tiempo porque mi hijo está solo en casa y no contraté niñera.
Vago: vamos a hacer una cosa gatita. Si no opines resistencia y te portas bien, como una gatita en celo y te abrís de piernas para mi, solo te voy a cojer hasta que me corra.
Vago: luego cuando te vallas, mañana te voy a esperar en esta estación y vas a venir a este mismo lugar. Quedo claro?
Yo: si esta bien, no te preocupes, voy a venir mañana. Puede ser a las 8 de la noche?
Vago: mmm,que traviesa mami, seguro que para que nadie te vea entrando aquí no?
Yo: si, le decía yo ya resignada y mirando para abajo.
Vago: no te preocupes no te voy a tener mucho tiempo es simplemente para quitarme las ganas de follar con una mujer tan preciosa como vos.
Yo: bueno muchas gracias.

Cuando me acompaña a fuera del callejón y se asegura de que no haya nadie antes me dice
Vago: me gusta como te vestís tan elegante pero me gustaría que vengas con menos ropa mañana y más sexi.
Vago: veinte con medias cualquier color, tacos, después veinte como quieras pero ponete medias que me excita mucho.
Vago: y veinte bien perfumada y maquillada como hoy, que nos vamos a matar a besos.
Y se que te gusta lo sucio porque sino no me hubieras seguido la corriente así que cuando nos besamos voy a tratar de estar lo más sucio posible jajaja.

Mientras me daba una nalgada me dejo en la calle.
Yo la verdad es que estaba muy atónita por lo que me ocurrió.

Como pude llegué a casa, me bañe, le di de comer a mi hijo y me fui a dormir. Pero claro toda la noche tuve sueños muy sexuales, me levantaba mojada, caliente, creo que me habré masturbado como 3 veces en toda la noche mientras maldecia a ese vagabundo por haberme atraído a esas garras tan peligrosas y morbosas.
Cuando se hizo de día, yo no fui a trabajar más que nada porque no podía, me sentía muy caliente, la vagina la tenía chorreando cada vez que me agachaba o hacía alguna tarea del hogar. Entonces para que voy a ir a trabajar si no me voy a poder ir al baño tan seguido.
Esto está mal, ya esto de a poco estaba resultando ser una enfermedad pero eso lo contaré en otro relato.
Eran las 12 del medio dia y yo no podía aguantar más, miraba el reloj a cada rato, me acariciaba las piernas, mis manos me temblaban, mi corazón se aceleraba, esto no era normal pero termino de sucumbir a mis deseos más oscuros. Ya que mi hijo estaba en el colegio y no salía dentro de 4 horas decido ir ahora a ver al vagabundo.
Voy a mi ropero y saco unos tacones negros, unas medias de color negras hasta mis muslos con una tanga y ligueros, una falda de tubo que me llegaba a las rodillas y una camisa blanca dejando 2 botones abiertos, me fui al baño y me puse un nuevo perfume de olor a rosas y me maquille. La verdad que mientras me miraba al espejo me insultaba a mi misma mientras me tocaba un poco mi vagina hirviendo.
Yo: viste que sos una perra, te vas a entregar a un vago sucio, que come basura y te lo vas a comer con lengua y todo,puta sos una zorra. Eso me hacía que me calentará más y más. Antes de salir me tomé no una sino 2 pastillas anticonceptivas, ya que quería que el vagabundo se corra dentro mío.

Cuando salí de casa apresure mi paso para llegar a la estación y poder tomar el tren, tenía que hacer una estación sola y bajarme en chilavert. Me han dicho cada cosa en la calle y en vez de molestarme esto hacia que me calentará más para mi encuentro con el vagabundo.
Para no aburrirnos vamos a la parte importante. Cuando bajo del tren en la estación chilavert, debía caminar las 5 cuadras para llegar al callejón angosto. Mientras caminaba mi corazón esta a mil por hora, así que tomé aire, exhale y entre en el angosto callejón, el pestilente olor en vez de darme arcadas me excitaba en el lugar en donde estaba, mientras iba llegando al final del callejón abandonado y veo la puerta oxidada al fondo, veo que se abre y con una cara de sorpresa el vagabundo me empieza a ver de arriba a bajo. Se ve que lo alerte debido al ruido de mis tacones en un lugar llego de silencio en donde solamente se atreverían a entrar las ratas, o algún otro vago. Sin decir ninguna palabra me quede frente a frente a la puerta oxidada y con la cara de embobado del vagabundo.
Yo: me vas a dejar pasar o me voy a quedar a fuera?
Yo: dale, antes de que salga mi hijo del colegio.
Vago: sisi, entra cachorra.
Mientras entraba el vagabundo se acercó a mi pelo e inalaba mi perfume.
Vago: mmmm, que obediente que sos perra así te quiero bien perfumadita, luego me en la puerta hizo que me detenga y mirándome la boca me dijo:
Vago: que lindos labios que tenes hoy esos labios de fresa me los voy a comer todos, mi lengua está desesperada por jugar con la tuya. Todo esto me lo decía mientras se reía maliciosamente.
Yo seguí caminando hasta que el vago cerro la puerta pero esta vez no la trabó. Yo me quedé frente a frente con aquel vagabundo que se me acercaba cada vez más hasta que puso ambas manos en mis caderas mientras me hablaba bien cerca a la boca, podía sentir de nuevo su asqueroso aliento.
Vago: perra, que pasa que viniste antes? No pudiste aguantar?
Yo no podía emitir ninguna palabra simplemente escuchaba y olía su boca que estaba cerca de la mía.
Mientras me seguíamos pegados una de sus manos baja a mis muslos.
Vago: mmmm, veo que también trajiste medias negras hasta los muslos eh. Sabes que?
Yo: que ? Le decía yo mirándolo fijamente y casi largando un quejido como gatita alzada.
Vago: sos zorra solterona, una mujer tan fácil que te estas entregando a un hombre todo sucio y en un lugar totalmente antihigienico.
Vago: te gusta no? Cojer en lugares feos? Eh zorrita alzada?
Yo: ay me encanta, no aguanto más, porque no me cojes y nos sacamos las ganas.

Apenas dejé eso y el vago y yo nos fundimos en un beso muy pasional, al principio estaba por hacer arcadas pero a medida que nuestras lenguas jugaban apasionadamente el mal sabor se estaba llendo así también como su mal aliento. Cada vez me ponía más cachonda y ya me pegaba cada vez más, yo ya no me resistía.
Al contrario me separé de el y me fui desvistiendo, quedé solamente en medias negras y mis tacones. Cuando el vago me vio desnuda se quedó perplejo.
Vago: ay dios mío, mira que sos linda pero de cuerpo sos perfecta, mira estas tetas tan paradas, y ese culo tan perfecto.

Se ve que no aguanto mas porque su boca se prendió a mis tetas como un bebé.
Mientras yo ya estaba decidida a regalarme a ese vagabundo y aceptar mi destino como mujer.
Apretaba mis tetas, las chupaba, mordía mis pezones suavemente, eso a mi me estaba encantando.
Vago: mm, pero que ricas tetas mi amor tan pataditas como polla.

De pronto soltó mis tetas y me dejó tirada en el colchón, cuando queda totalmente desnudo, además de que estaba lleno de pelos por todos lados y que estaba todo transpirado y sucio también tenía un tremendo pene bien parado se inclinaba para arriba, al rededor del prepucio estaba lleno de algo blanco espeso que tenía olor a queso fuerte.
Yo: eso es esmegma?
Vago: si preciosa y tu vagina se lo va a tragar perrita.
Yo: que estás esperando entonces. Mientras abría mis piernas enfundadas en mis medias negras.
Se tiró en el colchón de manera suave, mientras se subía arriba mío me seguía besando por mi panza mis muslos, mis tetas, hasta que nos besamos un poco más con lengua mientras me acariciaba las piernas. La escena era muy bizarra pero muy caliente, cuando se cansa de besarme me dice.
Vago: estas preparada para que te entren 29 cm de polla?
Yo: ay dale vago asqueroso metemela que tengo que buscar a mi hijo, ahhhhh.

Me la había metido de una, mientras nos mirábamos fijamente el vago seguía metiendo su pene dentro mío, era tan grande que sentía como mi vagina apretaba todo su pene. Yo ya estaba mojadisima y eso hacia que lubricada mucho mejor, el vago aumentaba la velocidad y yo estaba en la gloria.
Yo: ahhh,ahhhhh,si vago de miércoles haceme tuya, me encantan los vagabundos siiiiii, que rico
Mientras me cogia en misionero me decía en el oído,
Vago: así somos todos los vagabundos, la tenemos grande y muchas ganas de cojer, mmmm, que estrecho que es esto ahhh, tenemos tanta leche para darte, solo que las mujeres bellas no entienden de lo que se pierden.
Vago: querés mi mechita en tu concha mamita?
Yo: ahhh, si dale damela toda, tome pastillas así que si dale ahh ahhh.
La verdad que la estaba pasando muy bien, estaba teniendo orgasmo tras orgasmo, el clímax estaba en lo más alto, pero seguíamos cojiendo mientras el vago me besaba y mordía suave el cuello, me sentía dominada y eso me gustaba.
Yo: ahh,ahh,me voy a venir, me voy a venir, AHHH AHHHH.
De pronto un chorro muy potente salió de mi vagina mojando todo el colchón y el cuerpo del vago.
Vago: guau perra, estás más que excitada, estás alzada, veni que te voy a dar la leche.

Me la vuelve a meter y a toda velocidad como un martillo hidráulico empezaba a gemir.
Vago: ahhh ahh, si, me vengo me vengooooooo.
Yo le agarro de la cabeza y lo acerco a mi boca para que mientras se corra sienta mi aliento con el suyo y la suavidad de mis labios.
Fue impresionante la cantidad de semen que entró en mi vagina.
Yo: cuanto que duraste
Vago: recordar que los vagabundos seremos sucios pero somos perros alzados, siempre queremos meterla en algún agujero.
El se quedó arriba mío, mientras su pene seguía bien duro y de mi vagina escurría leche caliente dejando un olor a pescado podrido en mi cuerpo, no podíamos parar de besarnos yo con mis brazos lo abrazaba y lo acariciaba, el me besaba con lengua y me mordía las tetas y mi cuello dejando muy Colorado.

De pronto escucho mi celular y veo que era del colegio. Cuando atiendo me llama la directora informándome que hoy se retirarán más tarde porque una de las maestras no podía venir.

Cuando corto la llamada le digo esto al vagabundo.
Yo: hubo un problema en el colegio de mi hijo.
Vago: que ocurrió?
Yo: una maestra no puede ir y se retirarán más tarde.
Yo: así que debo irme, la pasé muy bien pero debo irme.
Mientras me estoy tratando de poner la pollera siento al vago detrás mío que me toma de las caderas, mientras me besa el cuello
Vago: ya te vas?
Yo: si, te dije que mi hijo sale más temprano hoy.
Vago: pero segura que te tenes que ir? Mientras sentía su pene bien duro y bien parado otra vez pegado en la entrada de mi vagina que estaba abierta y llena de semen todavía.
Vago: uy, mira como sigue mi pene, quiere seguir conociendo tu agujerito me parece.
Yo seguía con el celular, pero el vago me estaba poniendo otra vez cachonda. Mientras me besaba el cuello.
Yo: no, basta tengo que irme.
Vago: dale mi amorcito, un poquito más tu hijo puede esperar en la secretaría eh, dale. Me lo dice con un tono de lastima que me dejo pensando. El vago seguía pegado a mi vagina pero ahora viendo que yo no me oponía resistencia, el vago metió la punta del pene en la entrada de mi vagina haciendo que pegue un saltito de la sorpresa, ese saltito hizo que el pene se enterara más adentro provocando que gima un poco.
Yo: ayy, mm, no basta sacala, de enserio me tengo que ir.
Vago: bueno dale andate, pero desclavate de mi pija.
Yo: sácala, vos la pusiste.
Mientras seguíamos con ese jueguito el vago tomo otro paso más y fue ahora estrujar mis tetas, yo ya no me movía, ni tenía intenciones de irme.
Yo: ahh, bueno, mi hijo puede esperar un poquito no?
Vago: si perra, además no tardo en volver a llenarte con mi semen.
Me la ensarto hasta el fondo, entro tan fácil por el semen que me escurría. No tuvimos tiempo de ir al colchón ya que me la estaba metiendo mientras estábamos de pie.
Yo: ayy ahhh, que alzado que estás por favor ahhhhh.
Vago: mmmm,sabía que era una zorra pero no sabia que tanto.
Estuvimos en esa posición como 10 minutos hasta que me estaba cansando.
Mientras me estaba cayendo en el colchón
De la rapidez con la que me estaba penetrando, seguimos cojiendo de perrito, me agarraba de las caderas yo otra vez estaba con varios orgasmos pero esta vez los chorros que largaba de mi vagina era más, mi vagina convulsionaba.
El vago me nalgueaba bastante, tenía mi culo bien colorado, me ardía pero creo que me estaba gustando esto nuevo que me estaban haciendo. Habremos estado cogiendo como 30 minutos más.
Yo: ayy ayy ay, si si dale más, nalgueame más dale aahhhh, si.
Vago: ahhh si, te gusta perra, te gusta que te azoten zorra barata?
Yo: si si si ah ah ah.
Ahora el vago con una mano me jalaba del pelo mientras me apretaba una tetas.
Yo: mmmm, me gusta que seas tan agresivo ahhhh siii. Veinte papito dale llenarme toda.
De pronto volvió a agarrarme con las dos manos mis caderas mientras me sigue azotando, con más velocidad mientras me arrancaba orgasmos más profundos, el vago me dice que se va a correr
Vago: no aguanto, no aguanto, me voy a venir. AHHHHH, SIII PERRA BARATA.
nos quedamos unos minutos pegados como perros alzados. Hasta que su pene se iba bajando.
Yo: ya era hora. Horas me tuviste así.
Vago: pasa que estás tan buena.

Me vesti lo más rápido que pude y antes de salir del callejón para ir a la estación a ir a buscar a mi hijo el vagabundo me dice:
Vago: zorrita, escúchame, para que lo sepas, si estás tan sedienta de sexo y si te gusta follar en lugares así, los vagabundos somos los mejores para estas cosas.
Yo: lo tendré en cuenta bebé.

Para no aburrirnos, esto termina así, cuando llego al colegio, antes de ir a buscar a mi hijo me perfumo un poco y me pintó un poco los labios.
Cuando entro a secretaria le digo a la directora que tuve un problema en el trabajo y no pude oírlo a buscar.
Directora: y porque no envió un mensaje acá su hijo está preocupado.
Yo: ay disculpe mala mía.
Directora: buenos próxima trate de avisar.

Cuando llegamos a casa, le pedí perdón a mi hijo por llegar tarde y le compré un helado.
Yo me fui a bañar y puse a lavar la ropa porque estaba toda manchada.

En mi conciencia me sentí culpable por lo que hice, casi lloro por dejarme cojer y dejar a mi hijo solo pero la realidad es que cada vez me siento más ansiosa, me cuesta estar quieta, me siento muy caliente muy seguido, no puedo trabajar porque no puedo parar de pensar en sexo. Eso en otro relato me diagnosticaran que tengo hipersexualidad, pero cuando voy al médico, ocurre algo malo y mi vida da una vuelta más para mal, pero para mi cuerpo y mis agujeros para bien.