Mi primera vez
Eran 20 cm.
Yo siempre he sido heterosexual pero desde mis 13 años quise explorar mi sexualidad. En una ocasión tomé un cepillo de dientes y me lo metí en la orillita del ano. Puse jabón con agua en la puntita y la sensación me provocaba placer que mi yo heterosexual se negaba a aceptar pero mi yo inquieto deseaba disfrutar.
Esa fue una práctica que continué durante algunas ocasiones en mi adolescencia y después dejé de hacerlo. Cuando no tenía el mango de algún cepillo dental disponible, hacía mucha espuma en la regadera y me metía el dedo en mi anito virgen y cerradito.
Eso lo practiqué por años y habían ocasiones en que durante las noches era tanta mi calentura que quería masturbarme pero no podía porque compartía la habitación con mi hermana y su hijo.
En las tardes después de la escuela me encantaba ver porno y entre tantas cosas que veía y descargaba encontré fotos de morritas y morritos. Casi no me llamaba la atención ese tipo de porno pero con el tiempo preste atención a lo bien que se desarrollaban las niñas de hoy en día y comencé a ver ese porno con un morbo tremendo. Me calentaba ver a las morritas en pleno desarrollo y me dejaban súper calientes esas imágenes.
Para la hora de irme a dormir solamente veía esos cuerpos tan perfectos y celestiales. No me podía masturbar y comencé a guardar mi verga hacia atrás para que no se me viera al estar acostado. Qué pinche satisfacción tan indescriptible comencé a sentir! Me vine tantas veces así que me lo tomé como hábito.
Ya más grande teniendo dinero propio comencé a ver porno en mi propio espacio y comencé a experimentar más con mi cuerpo.
En una ocasión me animé a ir a una tienda de juguetes sexuales después de ver videos de hombres penetrándose a sí mismos con dildos. Primero comencé con uno pequeño de silicona rosa transparente y suave y sentía que estaba en la gloria cada que iba a bañarme. Me masturbaba tan rico hasta que quedaba bien exprimido.
Hubo algunas ocasiones en que me lo llevé insertado debajo de la ropa a la calle y eso me prendía y al llegar a la casa me la jalaba tan sabroso que terminaba enseguida.
Así estuve por un tiempo y no me animaba a un dildo más grande porque ya antes había intentado hacer un dildo casero y sin experiencia me ardió el ano con la vaselina, aceite de bebé, shampoo, jabón, etcétera. Y aparte me había desgarrado la piel del esfinter. Y eso arde hasta su puta madre.
Pasé más tiempo viendo videos porno de todo tipo y en una ocasión estaba tan calente que tomé aceite de olivo para mi mini dildo y me sentí en la gloria!!!
Desde allí no podía dejar de usar mi mini dildo con aceite para jalármela mucho mejor y poco a poco fui encontrando más y más satisfacción en mis chaquetas.
Por fin decidí ir a comprarme un dildo más grande porque el que tenía ya no era suficiente y mi curiosidad me mataba. De repente encontraba videos gays o de trannies y me preguntaba qué se sentiría recibir un trozo así por detrás.
En fin, me decidí ir al banco a sacar dinero y me compré un dildo mediano para no romperme el culo.
Mi calentura era tanta que me grabé y lo subí a una página porno y después lo borré.
Nunca pensé que me entraría todo!!!
Y mucho menos pensé que me gustaría sentir un trozo tan grande dentro.
Anteriormente había visto videos de chicos vergones en internet y sentía culpa porque me comenzaba a exitar. Después comencé a verlos igual que videos de mujeres o parejas y me prendían igual.
Una vez que conseguí mi dildo dejé de imaginar qué se sentiría tener una verga así de grande en el culo porque ahora ya sabía que se sentía delicioso. Al usar mi dildo con mi aceite de oliva para lubricar me entraba tan rico que quería más y tuve que cortarle las bolas a mi dildo para que me entraran los 20 cms completos entre mis nalgas redonditas.
Ese dildo me estaba dando un placer desconocido por mí anteriormente. Me entraba y salía tan rico que me perdía en el placer. Me senté en un banco circular con respaldo de espaldas a manera de tener el respaldo contra mi pecho y me grabé por detrás. Era tan erótico poder ver mi culo ensartado con mi juguete de 20 centímetros. Esa fue mi primera vez con un dildo de grosor real y lo disfruté sin saber cuánto me gustaría.
Me di cuenta que sentir un dildo en mi culo me quitaba el estrés.
Me siguen gustando las mujeres y especialmente las jovencitas pero ese placer de un dildo no me lo voy a negar.
Creo que no quisiera estar con otro hombre pero si acaso se llegara a dar sería algún chico flaco y lampiño que no sea controlador. Pero no por eso considero que soy gay. Aunque sí iría a una orgía y si hay algún chico con las características que me interesan podría decir que soy bisexual o bicurioso como dicen los gringos.
Cuenten si ustedes también disfrutan de un buen dildo o una buena verga en el culo y unas buenas tetas y una buena panocha.
Uff deliciosos relato, yo soy igual. Me encanta jugar con mi culo, masturbarme hasta el cansancio, pero tambien me gustan las chicas tetonas, 😍🤤. Pero me dejeria de un femboy o nalgon o vergon 🥵🥰
Telegram: Franjosep
No hay nada mejor que disfrutar de la sexualidad para uno mismo 😛
Creo que a mí también me gustaría pero con un trans que parezca mucho a mujer.
En chaturbate encontré una trans que se llama My_Other_Half y está uff 😛