Mí tío, mí secreto
Como digo siempre el incesto no era un gusto ni siquiera, lo imaginaba o lo pensaba, pero pasó en mi vida (caso 100 % real).
Como digo siempre el incesto no era un gusto ni siquiera, lo imaginaba o lo pensaba, pero pasó en mi vida (caso 100 % real)
Todo comenzó cuando yo tenía 19 años, y mí tío (Carlos) en ese momento tenía 40 años.
Me describo un poquito, en ese momento, medía (1,68mts), pechos grandes (97 cm), cadera (94 cm), delgada, piel blanca, tenía muy buen cuerpo ya que hacía deportes, jugaba al voley y también participaba en algunos eventos como promotora, y hacía unos 5 meses que no tenía novio. (Obviamente, ya no era virgen)
Este tío es hermano de mi padre, era el más cercano ya que los demás tíos, vivían en ciudades muy lejanas, por eso era el preferido, siempre tuvimos una relación normal de tío sobrina y viceversa, obviamente yo lo quería mucho porque siempre fui su consentida y siempre fuimos muy amigos, normal entre tío y sobrina.
Carlos estaba casado, con mi tía, hacía más de 10 años y un hijo de 5 años, pero se habían separado, hacía de esto ya unos nueve meses, él vivía solo, alquiló una vivienda, a una cuadra de mi casa, al estar viviendo cerca de nuestra casa, entonces nos visitaba, todos los días prácticamente por la tarde, a veces ocurría también que como su casa quedaba, por el camino que deberíamos hacer todos los días, muchas veces yo pasaba a saludarlo y ver como estaba, o hacer hora cuando tenía que ir a un lugar determinado. O si estaba aburrida en mi casa iba a la suya ya que éramos muy compañeros en ese sentido.
Él trabajaba y sus horarios eran de 7 a.m a 16 p.m, entonces muchas veces, él ocupaba su tiempo libre, qué quedaba por la tarde, para ir a visitarnos o hacer otras cosas y tenía su casa un poco desprolija, ya que no se estaba ocupando tanto de ella, entonces iba a poner a alguien para qué sé encargue de la limpieza, como yo, en ese momento no estaba haciendo nada, me ofrecí a hacerlo, ya que no me vendría mal unos pesitos, él aceptó y entonces iba tres veces por semana cerca de 2 horas a limpiar y a ordenar su casa.
Entonces empecé a ir a la tarde a veces él todavía no llegaba de su trabajo o a veces yo llegaba a su casa y él estaba acostado, descansando un poco, así pasaron un par de semanas y todo tranquilo todo en la normalidad.
Un día a la tarde estaba en su casa limpiando y ordenando algunas cosas y estaba agachada, dándole la espalda, él estaba sentado en un sillón mirando un diario, yo me encontraba a unos tres o cuatro metros de él, como dije, agachada y ordenando, a la vez conversábamos también, de repente, yo le hablo dándome vuelta para mirarlo a él, y veo que él rápidamente se acomoda haciéndose el distraído mirando el diario, pero en realidad me estaba mirando a mí, es decir me estaba mirando mientras yo estaba agachada dándole la espalda.
Esa situación quedó ahí, seguimos la charla, después de un rato me fuí a mí casa, pero en algunas oportunidades me quedé pensando en esa situación de que él me estaba mirando, entonces me preguntaba, sí él me estaba mirando como a una mujer ? y no como a una sobrina ? o tal vez, él hecho de que, él esté solo, me miraba y tal vez me deseaba ? o algo asi, pero lo tomé como qué fué un descuido de él y nada más, pasaron los días y todo seguía normal.
Pero a veces como dije antes, pensaba en esa situación, y era una intriga que tenía, sí es que él me estaba mirando como a una mujer y no como una sobrina.
Él a la tarde muchas veces iba a mi casa a visitarnos a estar con nosotros un rato, a tomar algo, etc. Lo que hacía también cuando iba a mi casa, es qué se ocupaba de unas plantas del patio trasero, entonces las cuidaba, las regaba, para hacer algo.
Era época de verano, una de esas tardes que estábamos en mí casa yo tenía ropa que lavar, ropa sucia mía, que lo tenía en él lavadero y este se encontraba, atrás de mi casa.
Decido ir a lavar esa ropa, entonces voy hacia él lavadero, cuando llego a la puerta de este, escucho unos pequeños ruidos y entonces, me quedo quieta, me escondo y espío por la puerta, y veo a mi tío, que estaba revolviendo con sus manos él canasto, en donde estaban mis ropas sucias, sin hacer ruido me quedé mirando, qué es lo que hacía y en un momento, él de revisar mis ropas, agarra mi ropa interior y las empieza a oler.
Yo al ver eso quedé como en shock, ya qué, no esperaba eso, veía como él olía mis tangas, lo que hice fué, sin hacer ruido, me fuí de allí y lo dejé solo, sin que él se diera cuenta que lo estaba viendo.
Después de ver eso, es como qué, ahí pude de alguna manera confirmar que mí tío, me miraba o me veía como una mujer y no como una sobrina, pasaron unos días y siempre pensaba en eso y la verdad daba un poco de morbo saber que mi tío quizás me deseaba.
A partir de ese momento cada vez que iba a su casa, empecé a hacerle adrede, hacerle cosas a propósito, lo tomé como un juego, para divertirme un poco con él, y de alguna manera calentarlo, iba algo provocativa, ropa que usaba siempre, eso no cambió, sólo qué lo provocaba un poco, iba con polleras cortas y cuando estaba agachada y de espaldas a él, porque seguramente él estaba mirando, a veces me sentaba frente a él, cuando estábamos tomando o comiendo algo, o estábamos charlando, en algún momento dejaba mis piernas un poquito más abiertas de lo normal, disimuladamente para que él pueda ver, iba con remeras escotadas, y a veces no llevaba porta senos y cuando me agachaba frente a él, mí tío podía ver un poquito de más, era un juego para mí, y en ese momento a mí me surgía una adrenalina tremenda, saber que alguien me estaba mirando y yo dejaba que él lo haga.
Reconozco que ese juego que hacía, a la noche, cuando estaba en mi casa, antes de dormir, pensaba en eso y la verdad que me excitaba mucho y pensando en eso, llegué a masturbarme varias veces, en algunas oportunidades hasta soñé de que mi tío me veía desnuda y que a veces me tocaba y me acariciaba, después al otro día recordaba él sueño y decía que me estaba volviendo loca, por tener esos sueños
Pasaron unas semanas y seguía todo de la misma manera, uno de esos días, por la tarde, Él va a mi casa como siempre, hacía mucho calor y en ese momento estaba yo sola limpiando la casa, ya que mi familia había salido, no estaba nadie.
Él llegó, nos saludamos, y justo terminé de limpiar, entonces como hacía mucho calor le dije que me iba a dar una ducha.
Carlos me dijo que entonces mientras tanto, iba atrás, al patio a ver las plantas
Yo le dije que cuando salía de ducharme le iba a avisar, para que entrara y así podríamos tomar algo fresco.
Terminé de ducharme y como solamente había llevado una toalla para liarme, salí del baño, y en ese momento me acerqué a una ventana y le grité, qué ya estaba, qué ya había terminado, ahí fuí a mi habitación a cambiarme, empecé a hacerlo, me había puesto la ropa interior de abajo, la tanga solamente hasta ese momento; cuando se abre un poco la puerta y entra mi tío diciendo » sí, Vero decime qué pasó » que no me había escuchado bién, es ahí, qué me ve cómo estaba yo, desnuda prácticamente.
Él quedó mirándome, sin saber que decir y de igual manera, yo quedé ahí, parada, dura, sin poder decir una palabra, pasaron varios segundos y los dos mirándonos, frente a frente, sin decir nada, él de a poco empezó a acercarse hacia mí, como hacía calor, él solo estaba en pantalón corto ya que se había sacado su remera.
Se quedó parado frente a mí, a 20 cm de distancia, yo dura, sin poder decir palabra, él quedó mirándome y en un momento, me abraza y empieza a besarme por la cara, por el cuello, un poco por la boca, otra vez por el cuello, parte de mis pechos, sentía besos, lamidas de parte de él, y yo seguía dura, sin decir una palabra.
Él seguía con sus besos y lamidas por él cuello, la cara, la boca y entonces en un momento, reaccioné, y también con besos, y ahí empezamos a besarnos los dos.
Seguíamos besándonos, él besaba mí cuello, sentía su lengua por mis pechos, nos besábamos sentía su lengua en mi boca la mía también, en la de él, y empieza a llevarme hacia atrás y me acuesta, en mí cama y seguíamos con los besos lamidas caricias.
Empieza a bajar por mi pecho con los besos y lamidas, llega hasta mi panza parte del ombligo y sigue bajando hasta llegar a la ingle y en ese momento empieza a sacar mi ropa interior, una vez, que ya estaba sin ella, empezó a besar, lamer, y chupar mi entrepierna, ahí se quedó haciéndome un oral, por más de cuarenta minutos, a lo cual yo me vine un par de veces, estaba empapadísima no podía más de la calentura.
Como él estaba en pantalón corto, en algún momento se lo quitó, yo la verdad no me di cuenta, empezó a subir otra vez, con sus besos y lamidas por mi panza, hasta llegar a los pechos, cuello y boca otra vez.
Nos besábamos desaforadamente su lengua en mi boca, mientras sentía como su miembro rozaba mis partes, sentía algo duro y caliente que rozaba mis partes, en un momento lleva su mano derecha para agarrar su miembro y apuntarlo en mi vagina, de lo mojada y empapada que estaba, apenas lo acercó y mojó con mis partes, dió un empujóncito y lo sentí que entró parte de su cabeza, mientras él me besaba y su lengua en mi boca, casi llegando a mi garganta, ahí nomás, siento otro gran y fuerte empujón, que él da, y ya entró en su mayoría, di un gran suspiro al sentir eso, porque pude sentir cada centímetro que ingresaba, tenía su lengua en mi garganta y su miembro en el fondo de mi vagina, empezó a bombear muy despacio, entraba y salía lentamente, como dije, podía sentir cada centímetro que ingresaba y que salía, a medida que pasaba, empezó a darle más ritmo y cada vez más rápido, hasta que en un momento era prácticamente a toda velocidad y con fuetes empujones, lo cuál, me hacía ver las estrellas, estaba loca de placer, lo estaba disfrutando cada segundo que pasaba, mí tío, seguía con el meta y saque!!, una y otra vez, de repente, le dije que terminara afuera, porque no nos estábamos cuidando, después de un rato más, él la sacó y acabó afuera.
Carlos agarró la toalla y empezó a limpiarse, a secarse, hasta la última gota, se lo limpió, pero seguía totalmente duro su miembro de la calentura que traía, después de no salir más semen, me miró, yo seguía sin moverme en la misma posición que había quedado, tomando aire de la cojida que había tenido, después de meses.
El tío, nuevamente muy lentamente va metiéndose entré mis piernas, hasta quedar sobre mí y empezó a darme por segunda vez, a full con el meta y saque, está vez ya fué mas rápido y fuerte, en momento lo hacía lento, pero con fuertes embestidas, que me parecía, que cada embestidas me tocaría hasta la garganta.
Pasaron los minutos y sé salió, para acabar nuevamente y en ese momento, le dije, que ya estaba, porque se hizo tarde y podrían venir mi familia, obviamente los dos estábamos exhaustos y totalmente mojados transpirados ya que hacía calor y no dio tiempo a que prenda la ventilación.
Quedemos unos minutos, ahí quietos, en la posición que habíamos quedado, el sobre mí, con todo su peso, mojados, transpirados, nuestros cuerpos quemaban, pero tomamos un poco del aire, que nos faltaba, en silencio, sin decir ni una sola palabra.
Luego él se levantó, sé vistió y me dijo que ya se iba.
Esa fue la primera vez que lo hicimos, con Carlos ( mí tío), la primera vez de muchos años, de estar a escondidas, teniendo nuestros encuentros en secreto, a pesar que cada uno seguía con sus vidas.
Sí les gustó háganmelo saber, y seguiré contando, qué pasó después y como seguimos en los siguientes encuentros.
Que rico fue su relato me encanto..donde veo los siguentes relatos..quede a full..cariños para ud