Mi vida como maestro 7. Un dia en el centro comercial en donde la exhibición será el protagonista (parte 2)
Continua la exhibicion de wilmito, esta vez en un restaurante y en una sala de cine.
––Yo: Lo mejor de todo es que permite que se te sé que la crema sin ningún problema ya que tu trasero queda al aire, por eso creo que te quedaras así hasta que se te seque, sin embargo, debemos ir a almorzar y hacer más cosas así que vas a tener que salir del baño así
––Wilmito: ¿Qué? No claro que no, no puedo salir así todos me verían
––Yo: No te preocupes nadie te va a ver pues como la camisa te queda larga no se te ve nada, Además afuera hace más viento y se te seca más rápido, sin mencionar que si nos quedamos acá más hombres van a entrar y ahí sí muchos se preguntarán porque estas acá y puede que se te queden viendo, así que salgamos.
––Wilmito: Ay está bien profe, tiene razón entonces vamos
Luego recogí los pantalones y la ropa interior de Wilmito y los metí en una bolsa de esas del supermercado, junto con la ropa interior que le había comprado y la camisa de regalo, luego de esto salimos del baño. Wilmito tenía algo de temor de que alguien lo pudiera ver o algo así, sin embargo, la gente no se fijaba mucho en él, excepto uno que otro hombre que lo miro de reojo, Wilmito nunca se dio cuenta de esto. Después le pregunté a Wilmito que quería de almorzar, él no estaba muy seguro o le daba pena pedir, así que le pregunté que cual era su comida favorita, él me dijo que las hamburguesas, por lo cual fuimos a un restaurante en el cual su especialidad eran las hamburguesas, la ventaja de este es que tenía mesas en una terraza al aire libre, por lo cual era una zona algo aislada, esto para que los meseros o el personal no estuvieran pasado constantemente, así que nos dirigimos allí, Wilmito se iba a sentar pero antes de hacerlo se preocupó por la crema ya que no sabía si con lo que andamos ya se le había secado. Yo vi que un mesero venía a lo lejos para atendernos, así me acerque rápidamente a él y lo gire, me agache y le levanté la camiseta para verificar, efectivamente la crema ya estaba seca, sin embargo, me hice el que estaba mirando que estuviera bien seca hasta que el mesero llegó, Wilmito se dio cuenta y se bajó rápidamente la camisa y se puso rojo, Yo me hice el sorprendido y le pedí disculpas al mesero, diciéndole que estaba revisando que una crema que le había puesto ya estuviera a seca. El mesero tan pronto noto lo que yo hacía miro hacia todos los lados, pero por suerte a esa hora no había nadie aun, el luego dijo que no había problema, nos sentamos y pude notar que el bulto del mesero lucía un poco grande, supongo que se le paró al ver ese par de nalguitas al aire, en ese momento me fije en el mesero, era un hombre moreno bastante guapo, con unos ojos cafés oscuros que parecían negros y una cejas pobladas que me llamaron mucho la atención, la verdad me parecía muy guapo aquel hombre. Cuando nos sentamos yo puse mi maleta y dejé la bolsa con los pantalones de Wilmito en el suelo, pero en la parte interna de la mesa, es decir que casi no se veían, esto porque ya tenía planeado algo. Luego ordenamos lo que íbamos a comer, yo ordené por Wilmito ya que estaba muy rojo y avergonzado, por lo cual no sabía que decir, así que le pedí una hamburguesa de carne y queso con tocineta, con papas a la francesa y bebida. Yo también había escogido la terraza porque como esta era más amplia y las mesas estaban más separadas si Wilmito se le olvidaba bajarse la camisa, las personas de otras mesas podrían verle su pajarito, por ahora él se estaba bajando su camisa con sus manos, sin embargo, cuando llegara su comida no podría hacer esto
Antes de que llegara su comida le dije que no se preocupara que la mesa lo tapaba y que por eso nadie lo podría ver, él no parecía muy seguro, sin embargo, esto yo lo decía para tranquilizarlo. Cuando llegó su comida él al ver la cantidad de comida que era se le olvido que se estaba tapando y empezó a comer su hamburguesa, yo también hice lo mismo y solo veía esa cara de felicidad de ese niño al comer, era algo mágico, algo que realmente me llenaba el corazón, así que disfruté viéndolo comer, mientras hablábamos de cosas del colegio o de qué películas o series le gustaban a él.
Luego de que nos llegara la comida el mesero me trajo los cubiertos y demás, ya que en mi caso pedí una carne, sin embargo fue muy evidente cuando el boto o “dejo caer” un cubierto al suelo, se disculpó y claro se agacho a recogerlo, pero se demoró más de lo habitual en recogerlo, al verlo pude ver sus ojos clavados en la entrepierna de Wilmito, estaba disfrutando la vista del pajarito de este niño, luego se levantó y se fue para cambiarme el cubierto, lo hizo y vi que se metió al baño, supongo que a bajarse la erección que se le marcaba un poco en su pantalón, al tiempo de que estuviéramos comiendo un rato, vi que en otra mesa llegó un hombre con una mujer, creo que eran pareja, se sentaron a comer, sin embargo desde la perspectiva de ambos podían ver perfectamente que Wilmito tenía solo una camiseta puesta y nada más, pues el al estar sentado, la camiseta no le cubría bien la parte de adelante por lo que se le veía todo su penecito. Sin embargo, ellos no me veían del todo a mi pues yo estaba de espaldas a ellos mientras que Wilmito estaba más diagonal de frente, por lo cual quedaba más expuesto a ellos.
La chica le dijo algo al hombre y este miro descaradamente a Wilmito, luego ordenaron pero cada tanto volteaban a mirar hacia nuestra mesa para ver los genitales de Wilmito, más que todo el hombre, y pude notar como en varias ocasiones se sobo el bulto, mientras Wilmito no se daba ni por enterado de que ya tres personas le habían visto su penecito, pues estaba muy concentrado en su comida, tanto así que vi que lo que más le gustaba eran las papas a la francesa y ya casi se le acababan por lo cual llamé al mesero para pedir una orden extra, des pues de todo Wilmito a pesar de tener 13 años, cuando almorzó en mi apartamento el día anterior, me di cuenta que era de buen comer, el mesero regreso y fueron demasiado obvias sus intenciones, pues cuando llegó con la orden de papas, justo antes de irse finge amarrarse un zapato pero era solo para agacharse y ver el penecito de Wilmito.
Luego del descarado movimiento para ver el penecito de este niño el mesero se retiró, cabe mencionar, que él no era el único que tenía una erección, pues mi verga también estaba super erecta a más no poder y ya estaba chorreando líquido preseminal. Cuando llegaron las papas Wilmito me pregunto qué porque las había pedido, yo le dije que por que vi que le gustaron mucho y como se le iban a acabar pues decidí ordenarle más, él se puso muy feliz, verlo con esa sonrisa en su rostro era algo que realmente me encantaba, a pesar de ser poco tiempo el que llevamos compartiendo, yo ya había empezado a querer mucho a Will y a sentir algo muy bonito por él, no digo que fuera amor, pero sí un gran cariño que no había sentido de esa manera antes. Aunque también sentía un gran deseo sexual por él y claro por exponerlo, pero por ahora deje que terminara de comer viendo lo feliz que estaba. Cuando termino de comer le dije que, si quería postre y este muy emocionado me dijo que si, pedimos el postre y cuando lo trajo el mesero tiró nuevamente y “accidentalmente” unas servilletas al suelo, agachándose nuevamente, pero esta vez sí se quedó más tiempo agachado, unos diez segundos diría yo, era fascinante ver como este mesero le había encantado ver las nalguitas de Wilmito y ahora cada vez que podía quería seguir apreciando sus genitales, luego de recogerlas se marchó y las cambio. Wilmito empezó a comer muy emocionado tanto así que se manchó un poco su boca de chocolate, Yo luego de ver como descaradamente este mesero miraba los genitales de Wilmito, me puse muy, muy caliente mi pene seguía chorreando preseminal, ya tenía la ropa interior manchada, cuando vi que Wilmito se había manchado la boca de Chocolate, metí mi mano en mi pantalón y pase mis dedos por mi glande para tomar la mayor cantidad de líquido preseminal posible,
––Yo: Ehhh Will estás un poco manchado de chocolate jeje
––Wilmito: Ay que pena profe, ya me limpio (él se intentó limpiar y lo hizo bien sin embargo le dije que no lo había hecho bien) ¿Ya quedé bien?
––Yo: No, espera te falto un poco déjame ayudarte
Así que saqué mi mano que tenía en mi verga y pelotas y luego pase mi dedo lleno de precum por los labios de Wilmito dejándole untado mi liquido preseminal en sus lindos labios, este luego de eso paso su lengua por sus labios y se los lamió
––Wilmito: (me miró algo extrañado) Profe tus dedos saben salados
––Yo: Si jeje un poco, ¿te gusto el sabor de mi dedo?
––Wilmito: (me miro raro haciendo cara de confundido) mmm pues si profe la verdad si
––Yo: Vale, que bueno, mira por debajo de la mesa
Wilmito se agacho para ver por debajo de la mesa y yo metí mi mano a mis pantalones, como usaba sudadera fue sencillo sacar mi verga erecta, obviamente mire que no viniera ningún mesero y la pareja estaban entretenidos hablando, además mi camisa era algo larga y me cubría por si algo, así que nuevamente enfrente de Wilmito toque mi glande tratando de tomar algo de líquido preseminal la saque, manoseando mi verga y ahí si saque mi mano con mi dedo lleno de precum, luego cuando saque la mano Wilmito volvió a incorporarse y me miró algo sorprendido, yo le acerque mi mano nuevamente y le dije
––Yo: ¿Creo que aun tienes una mancha quieres que te ayude a limpiarla?
El estaba algo nervioso y miró hacia varios lados pero solo estaba la pareja y no nos estaban mirando, así que nadie se habla dado cuenta o eso pensábamos nosotros dos, Wilmito luego me dijo que si y yo tomé nuevamente mi dedo lleno de mi líquido preseminal y se lo pase estaba vez más detalladamente por los labios, y lo deje unos dos segundo segundos ahí tiempo suficiente en que Wilmito intento chuparlo un poco aunque claro para no ser muy obvios yo lo retire rápido y solo alcanzo a chupar la puntita, luego él se lamió los labios y me sonrió de manera picara, yo guarde nuevamente mi verga en mis pantalones y me acomode. Yo le dije que, si le había gustado el postre y él me dijo que sí que mucho, yo le dije que terminara su postre, pero esta vez sí me refería al de chocolate. Wilmito con todo lo que había pasado, la comida más el postre estaba demasiado emocionado por lo cual aún no se bajaba la camiseta para taparse su penecito, pero ahora como yo le había dado su postre especial, su penecito estaba paradito o eso suponía yo. Llame nuevamente al mesero para pagar la cuenta y note que él se hizo más cerca del lado de Wilmito que del mío, me sorprendió que esta vez no se le cayera algo, pero luego supe porque, pues sus ojos se fueron directo a la entrepierna de Wilmito, yo ya creía saber porque pero quería confirmarlo, así que yo le dije que iba a pagar con tarjeta pero cuando se la fui a dar el que la boto fui yo, jajaja, usando su misma técnica, por lo cual me agache rápido a agarrarla del suelo obvio con la excusa de ver debajo de la mesa y efectivamente el penecito de Wilmito estaba super parado por lo cual se salía de su camisa y la levantaba, de tal manera que el mesero en esta ocasión no tuvo que agacharse para apreciar la verguita de Wilmito, este por otro lado no se dio cuenta de nada pues estaba muy concentrado terminando se su postre de chocolate, yo pagué y cuando terminó de procesarse el pago Wilmito también terminó su postre,. Así que me levanté, tomé solo mi maleta, dejando intencionalmente la bolsa con el pantalón y los bóxer de Wilmito ahí y le dije a Wilmito que nos íbamos, le agradecí al mesero y me coloque dándole la espalda a la pareja que estaba en la otra mesa, esto para que no vieran cuando Wilmito se parara, ya que esperaba que se levantara exhibiendo su penecito, el mesero se puso a mi lado como esperando que Wilmito se levantara. Este se limpió un poco la boca con una servilleta y se levantó, sin embargo, no se dio cuenta que su penecito seguía parado y aún más que debido a esto se le alzaba un poco la camisa y dejaba todo a la vista, pelotas incluidas
––Wilmito: Ehhh muchas gracias todo estaba muy rico
––Mesero: Con mucho gusto, me alegra que te haya gustado (luego bajó un poco el tono de su voz) Veo que a tu amiguito también le gusto jeje (miro directamente el penecito de Wilmito,)
––Wilmito: Ay (bajo la mirada y al darse cuenta lo que estaba ocurriendo se puso rojo de inmediato y se tapó con la camisa y con sus manos)
––Mesero: (le revolvió el cabello y aun en voz baja) no te avergüences tienes un muy bonito cuerpo y tu amiguito también está muy lindo, me alegra que se haya parado a saludar, veo que te gusto el postre que tu papa te dio jeje
Luego el mesero procedió a recoger la loza, mientras que yo tome a Will y le dije no se preocupara que el señor era de confianza, este no me dijo nada, así que nuevamente agradecí y tome a Wilmito para irnos, este aún seguía algo rojo, aunque por la vergüenza su penecito ya se había encogido así que ya no le levantaba la camisa. Sin embargo, el con sus manos trataba de mantenerla abajo y lo note algo triste, cuando salimos del restaurante dije que no se sintiera mal, que para que se animara si quería podíamos ir a cine a ver una película, Wilmito tan pronto le dije eso se emocionó mucho y volvió esa linda sonrisa que habla tenido antes,
––Wilmito: ¿Profe y que película veremos?
––Yo: La que tú quieras, ¿hay alguna que quieras ver o que te llame la atención?
––Wilmito: Pues mis compañeros del colegio me han contado que habían visto la de Spiderman, ya que últimamente solo hablaban de esa película y de lo buena que es.
––Yo: Esta bien, y te gustan las palomitas de maíz.
––Wilmito: (me miro con ojos de asombro) De esas que venden en los cines y que tienen mantequilla?
––Yo: ¿Si de esas, te gustan?
––Wilmito: Pues es que nunca las he probado, pero supongo que si
––Yo: Oh (Cuando escuche eso se me hizo raro, pero luego le preguntaría), en ese caso te comprare una cubeta grande de palomitas y una bebida
––Wilmito: ¿De verdad profe?
––Yo: Claro que si pequeño jeje (le acaricie el cabello), ¿estás emocionado?
––Wilmito: Si profe mucho (en ese momento sonrió de una manera muy linda, era evidente que estaba muy feliz)
Pensé que tan pronto saliéramos del restaurante me pediría sus pantalones, pero como le dije lo del cine se puso tan feliz que se le olvido, por suerte, ya que yo intencionalmente la había dejado ahí en el restaurante, luego llegamos al cine y mientras hacíamos la fila para comprar las entradas pude notar como Wilmito estaba muy emocionado a veces pienso en cómo no se da cuenta de esos detalles que lo dejan expuesto por más tiempo.
Luego llegamos al cine y cuando estábamos haciendo la fila para comprar las boletas cuando llegó un niño pequeño de la nada corriendo y se acercó a nosotros tendría unos 6 años creo yo. Detrás de él venía su hermano persiguiéndolo este tendría unos 12 años, cuando el niño de 6 estaba cerca de Wilmito se estrello contra este haciéndolo caer, por lo cual la camiseta de Wilmito se le corrió y dejo a la vista de ambos niños todos sus genitales
––Niño 6 años: Mida jajajaj su pedecito está ad aide jajajajaja
––Niño 12 años: (El hermano mayor que lo intentaba atrapar se quedó mirando a Wilmito) jajajajajaja, si es verdad, además que es muy chiquito
––Wilmito: Ay (se puso super rojo y rápido se bajó su camisa) Profe pásame mi ropa por favor
––Yo: Si claro, espérame
En ese momento, me puse entre Wilmito y los niños como cubriéndolo y les dije que donde estaban sus padres y que porque los dejaban solos sin supervisión, les dije que Wilmito tenía una condición especial y por eso estaba así, que si el niño lo hubiera empujado más fuerte algo malo podría haber pasado, el mayor me pidió disculpas y se asustó, Bingo ya había logrado mi objetivo, yo los seguí regañando diciéndoles que si seguían molestando por ahí les contaría todo a sus padres, el mayor se asustó y me dijo que no hiciera eso por favor, que ellos no nos molestarían, yo acepte y luego eso fueron, esto lo hice para que no dijeran nada de la desnudez de Wilmito. Luego si me giré hacia donde Will busqué la bolsa con su ropa y me hice el sorprendido
––Yo Ay no, creo que la dejamos en el restaurante, espera voy rápido, te quedas aquí solo mientras voy si?
––Wilmito: Bueno profe aquí lo espero.
––Yo: Esta bien no te muevas de aquí no tardo
Sali corriendo hacia el restaurante, obviamente sabía que aun estaría allí, pero en caso de que no pues le compraría algo a Wilmito, cuando llegue le pregunte al mesero y le me dijo que sí que se nos había quedado y que él la había guardado, así que entramos a una sección del restaurante en donde los meseros guardaban sus cosas y demás.
––Mesero: Ehhhh mire ( me entregó la tula con la ropa de Wilmito)
––Yo: Ay de verdad muchas gracias
––Mesero: No hay de que, después de todo, lo que hay en esa tula es algo muy especial
––Yo: Si, es verdad o bueno es de alguien muy especial.
––Mesero: Si jeje, veo que tiene una buena relación con su hijo, me gustaría poder volver a verlos algún día
––Yo: Ehhhh gracias jeje, oiga pues si quiere vernos otra vez puede guardarme la bolsa, yo ahora voy a entrar a cine así que cuando salgamos regreso por ella y así nos vuelve a ver
––Mesero: Jeje eso suena genial, entonces aquí la tendré para cuando ustedes vuelvan, sin embargo, salgo en hora y media, así que no sé cuánto se demora la película
––Yo: mmmmm rayos, creo que no alcanzamos, porque la película se demora dos horas
––Mesero: No se preocupe yo los espero, trabajaré media hora más, el dinero me viene bien y si es por volver a verlo a usted y a su hijo pues lo haré
––Yo: Perfecto, es usted un gran hombre, ¿por cierto como se llama?
––Mesero: Me llamo Marcos
––Yo: Pues es un placer Marcos, yo me llamo Mateo (Extendí mi mano para estrechar la suya)
––Mesero: El placer es mío (También me estrechó la mano)
––Yo: Esta bien, entonces ya nos veremos, por cierto, si quiere tome mi número, para luego seguir en contacto
––Mesero: Si eso me gustaría mucho.
Luego de darle mi número al mesero le agradecí nuevamente y regrese rápido donde Wilmito pues la función no tardaba en empezar, aunque la había recuperado a Wilmito no le diría esto, al menos no por ahora. Cuando llegué lo vi ahí sentado ahí paradito donde lo había dejado, estaba viendo unos peluches de Pokémon que había en un puesto cerca del cine, se veía tan tierno y lindo, creo que cada vez sentía más cosas por este niño.
––Yo: Hola Will
––Wilmito: Hola profe, ¿qué ocurrió?
––Yo: Malas noticias, cuando llegue ya no había nada, pregunte y me dijeron que no sabían nada, pero no estaba el mesero que nos atendió ya que había salido a su descanso, puede que el la haya guardado, pero no te quería dejar más tiempo solo, además creo que la película no demora en empezar.
––Wilmito: ¿Ay no y entonces profe, que hago?
––Yo: No pues no te preocupes, en caso tal yo te compro algo, además cuando el mesero regresa de su descanso le podemos preguntar, pero pues ya la función está por empezar, así que tendrías que entrar así al cine, ya cuando salgamos vamos y preguntamos, en caso de que no yo te compro algo, igual no pasa nada en la sala de cine es oscuro así que nadie te vera, no te preocupes.
––Wilmito: (el agacho la cabeza) Está bien profe, creo que si lo que usted dice es lo mejor.
––Yo: Si, no te preocupes, vamos tenemos que comprar las palomitas.
––Wilmito: Ay si es verdad las palomitas, vamos
––Yo: (pedí las palomitas) Will quieres que les pongan mantequilla ?
––Wilmito: Si profe, suena rico jeje}
––Yo: Jeje está bien (luego me las dieron)
––Wilmito: Wow profe son enormes, no pensé que fueran tan grandes
––Yo: Si, aunque veras como se acaban rápido, igual son todas tuyas
––Wilmito: ¿Ay de verdad profe?
––Yo: Si claro que sí, tómalas (se las pase para que el las llevara mientras yo tomaba las bebidas)
––Wilmito: Ay profe muchas gracias.
––Yo: Con gusto, pequeño
Luego fuimos por los dulces y finalmente entramos a la sala. Buscamos Nuestros asientos, los cuales eran bastante al fondo y nos sentamos, por suerte a esa función no entró mucha gente, solo un par de familias con niños. Esto debido a que la película ya llevaba semanas en cartelera, Empezó la película y empezamos a comer con Wilmito, obvio yo dejaba que él comiera más, cuando iba a tomar su bebida yo la Deje mal tapada lo que provocó que al momento de intentar tomar se derramara un poco sobre su camiseta y silla.
––Wilmito: Ay profe se me regó la bebida
––Yo: rayos, ven miro si se mojó mucho (con mi mano toque el pecho y baje hasta el borde de esta donde estaba su penecito) Si es verdad se te mojo bastante, vas a tener que quitartela
––Wilmito: ¿qué? No profe No me puedo quedar sin nada
––Yo: pero tampoco te puedes quedar con la camiseta mojada, quítate la y la ponemos aquí en la silla de al lado para ver qué tan mojada está y si se alcanza a secar para el final de la película.
––Wilmito: ¿Ay profe de verdad.?
––Yo: Si en este caso, nos toca ya que si la dejamos mojada te puedes enfermar y también se te va a transparentar toda cuando salgamos y no quieres eso ¿verdad?
––Wilmito: No claro que no profe
––Yo: dale alza los brazos
Wilmito alzó los brazos y yo rápidamente le quité la camisa dejándolo completamente desnudo en esa sala de cine, yo puse la camiseta en la silla de al lado, extendida, Wilmito se puso rojito de inmediato y se tapó su penecito
––Yo: no tengas vergüenza, está oscuro y nadie te ve, mejor come (le pase las palomitas)
––Wilmito: Mmmmm está bien profe
Wilmito se dejó de tapar su penecito, antes de que acabarán los cortos ya estaban por acabarse las palomitas por lo cual tras unos minutos de película ya no había más palomitas, Yo puse mi mano sobre la pierna desnuda de Wilmito y este me miró por un segundo pero luego siguió mirando la pantalla, yo empecé a subir mi mano lentamente por su pierna, yo lo hacía lentamente, sin embargo notaba que Wilmito se ponía más tenso a medida que mi mano subía, cuando ya estuvo casi en su entrepierna detuvo mi mano con la suya
––Wilmito: No profe aquí no, alguien se podría dar cuenta.
––Yo: No te preocupes, todos están concentrados en la película, tú también concéntrate jeje yo solo quiero sentir un poco tu piel jeje
––Wilmito: mmmmm bueno profe está bien
Yo seguí subiendo mi mano hasta tocar tu penecito, también empecé a acariciar sus bolitas con mis dedos acariciaba su lindo tronco y baje su prepucio para empezar a pasar mis dedos por su glande, luego de tener un poco de su esencia en mis dedos lleve mis dedos a su boca e hice que los chupara. Vi que esto le gusto porque su penecito se puso duro inmediatamente, ese penecito se veía tan apetecible que no me pude resistir, me agaché y me lo metí en la boca. Sabía muy rico, ya que tenía un poco se esencia de orina y sudor de niño, yo empecé a pasar mi lengua por todo su glande y tronco mientras Wilmito parecía darle cosquillas, esto solo al principio ya que luego solo aumento un poco su respiración, así que continúe con mi labor, recorriendo cada centímetro de ese pajarito, para luego sacarme su penecito de la boca y pasar a sus bolitas, las empecé a lengüetear y me las metí a la boca succionándolas un poco, cuando lo hice Wilmito se estremeció y soltó un gran suspiro, por suerte el sonido de la película era más fuerte y no se escuchó seguí pasando mi lengua por todos sus genitales, chupando su penecito hasta que en un momento Wilmito se estremeció y lanzó unos chorros de leche en mi boca, esto fue muy placentero y morboso, pues inmediatamente los retuve en mi boca y me acerque a la suya y lo bese pasándole su semen mientras lo besaba, el me correspondió el beso, cuando se dio cuenta que le estaba pasando su semen se asustó un poco, pero yo seguí besándolo así que no le quedo otra que aceptar y pasarnos la leche de una boca a la otra, hasta que poco a poco se fue perdiendo en nuestras gargantas. Luego del beso me regresé a mi asiento y noté que la camisa de Wilmito aún seguía muy mojada, por suerte la película era larga pero tal vez no lo suficiente.
––Yo: Will este pues tu camiseta si está bastante mojada, más de lo que pensé, por lo cual no creo que para el final de la película esté seca.
––Wilmito: Ay profe de verdad, y entonces ¿qué hago?
––Yo: Pues solo se me ocurre una cosa y es ir a una lavandería que queda aquí en el centro comercial para que la sequen, lo que espero es que la tengas lista para antes de que termine la película
––Wilmito: Ay si profe es verdad, pero ¿cómo hacemos para eso?
––Yo: Pues yo tendría que ir y averiguar, mientras tú te quedas aquí viendo la película, ¿está bien?
––Wilmito: mmmmmm pero no se demora ¿si profe?
––Yo: No para nada, voy y regreso rápido
––Wilmito: Bueno profe, está bien.
Yo me levante, tome la camiseta de Wilmito y salí de la sala, mire mi reloj y según lo que indicaba la cartelera, a la película le quedaba todavía una hora y diez minutos más o menos, por lo cual fui al baño a limpiarme un poco luego de aquel beso blanco y fui a la lavandería, en donde me dijeron que la tendrían lista la camisa seca en media hora, esto me pareció perfecto, la entregue y regrese con Wilmito.
––Wilmito: Hola profe, que le dijeron, ¿en cuatro tiempos estará seca?
––Yo: Me dijeron que en una hora
––Wilmito: Una hora, ¿pero si será tiempo suficiente antes de que acabe la película?
––Yo: Pues espero que si
––Wilmito: mmmmm está bien.
Yo notaba a Wilmito muy intranquilo, pues a pesar de que si estaba viendo la película y le estaba gustando, si lo veía algo nervioso, primero por el hecho de estar completamente desnudo en una sala de cine y segundo porque tal vez su camiseta, su única oportunidad de cubrirse no estaría lista para cuando la función terminará, así pasaron cincuenta minutos, cuando llegó el momento le dije a Wilmito que iría a reclamar su camiseta, que tan pronto me la entregaran me vendría corriendo para la sala, él dijo que bueno aunque se le notaban los nervios, yo fui por la camiseta y efectivamente ya estaba seca, pues ellos me habían dicho treinta minutos, sin embargo yo quería exhibir más a Wilmito por eso me tarde en ir, luego de eso me tomé mi tiempo y fui al baño, cuando regrese al cine note que la película aún le quedaban unos minutos, así que antes de entrar del todo y que Wilmito me viera, espere a que ya estuviera a punto de terminar, cuando note que este era el momento entre a la sala y me dirigí hasta donde estaba Wilmito este estaba super intranquilo y al verme fue como si el alma le volviera al cuerpo, yo me disculpe por la demora, y le dije que se tardaron un poco más, luego le entregue la camisa y justo en ese momento encendieron las luces. Cuando eso ocurrió Wilmito entró en pánico, se puso super rojo y se agacho para que nadie lo viera, al tiempo que trataba de ponerse la camiseta, pero al estar agachado le era muy difícil, por lo que irremediablemente se tuvo que levantar por unos segundos y se puso su camiseta, al hacerlo y alzar sus brazos pude evidenciar gracias a las luces su lindo cuerpo lampiño, sus axilas suaves, pero lo mejor fue ver su penecito y bolitas, las cuales estaban reducidas por el miedo y la vergüenza que él estaba sintiendo en ese momento. Sin embargo, por la rapidez se puso su camiseta al revés, yo no le dije nada hasta después. Cuando ya se puso la camiseta miró hacia todos lados, pero por suerte como habíamos hecho hasta atrás nadie se dio cuenta, pues todos se levantaron y se fueron de la sala.
Luego de eso salimos del cine y nos dirigimos al restaurante, yo realmente me sentía extasiado de estar paseando con un niño que solo traía una camiseta puesta y nada más, era algo realmente morboso y con lo que seguramente me masturbaría al llegar a casa, mientras íbamos caminando le dije que se había puesto su camiseta al revés, este se sorprendió un poco, pero yo le dije que luego se la cambiaria, por ahora nuestro objetivo era llegar al restaurante, llegamos y preguntamos por el mesero, nos dijeron que estaba en la parte de los casilleros, ya que justo estaba terminando su turno, le dijimos que si podíamos hablar con él, le preguntaron, este salió, al ver que era yo acepto y nos dejaron pasar, al parecer era jefe de meseros o tenía mucha confianza con la dueña del restaurante ya que le dijo algo y entramos con Wilmito al área de casilleros, la cual era una área cerrada con una puerta, en donde habían varios casilleros y un espacio en la mitad con una silla, supongo que ahí se cambiaban los meseros, al entrar ahí estaba él, tan guapo como en la mañana por suerte el aún tenía puesto el uniforme de mesero.
––Mesero: Hola, que gusto volver a verlos a los dos
––Yo: Hola, gracias jeje, para nosotros también es un gusto, lo que ocurre es que cuando nos fuimos se nos olvidó una bolsa que traíamos, ¿no se si de pronto la viste o algo así?
––Mesero: (él se quitó el corbatín de su traje y se desabrocho el primer botón de la camisa) Una bolsa mmmm creo que si (me miro algo extrañado pero comprendió mis intenciones al instante y se giró a mirar algo en su casillero)
––Yo: Si, que suerte, es que ahí tenemos algo muy importante de Wilmito
––Mesero: (Él seguía buscando algo en su casillero, dándonos la espalda) ohhhhhhh ya veo (Él se giró y cuando lo hizo ya tenía dos botones más de la camisa desabrochados, por lo cual se le apreciaba su pecho con sus dos gran des pectorales) Disculpa pequeño, Hola, no te salude, ¿cómo vas?
––Wilmito: Ehhhh Hola, bien gracias
––Mesero: Qué bueno eso, me alegra (luego siguió buscando) listo, ¿será esta la bolsa? (me paso la bolsa)
––Yo: Si esa es, de verdad muchísimas gracias
––Mesero: No hay de que (siguió desabotonando su camisa hasta que esta reveló todo su gran pecho, no era marcado sin embargo si se le notaba un buen pecho y un abdomen plano con un camino de finos vellos que se perdían en su pantalón) la verdad cuando vi la bolsa si, pensé que era de ustedes y por eso decidí guardarla (al terminar de decir esto se quitó su camisa por completo, revelando también unos brazos que sin ser musculoso, me parecían muy sexys)
––Yo: Si es que soy muy olvidadizo de verdad muchísimas gracias (Supongo que en este momento se me noto que yo no dejaba de ver a este hombre pues me miro de una manera picara)
––Mesero: No pasa nada, de verdad, ¿oigan nos les importa si me termino de cambiar mientras están aquí verdad?
––Yo: No, para nada, es más Wilmito tú también deberías aprovechar y cambiarte aquí
––Wilmito: ¿Aquí, pero es que … y si mejor vamos al baño?
––Yo: Aquí es más rápido, además es más privado, mira hasta el también se va a cambiar así que no hay problema
––Mesero: Si no te preocupes, no tengas pena, mira yo también me voy a cambiar para que no te de vergüenza
El mesero se desabrocho el botón del pantalón y bajó su cremallera, revelando una sexy ropa interior blanca, luego se bajó su pantalón, pero al hacerlo, lo hizo algo rápido, lo que provocó que se le bajara un poco su ropa interior revelando un poco de su vello púbico, el cual se veía negro y en ese momento casi me agacho y me voy directo a esa zona, pero me contuve, cuando lo noto rápidamente se subió otra vez su ropa interior, esta ropa interior hacía que se le marcara un buen bulto, que desde lo que yo podía observar ya tenía su pene un poco morcillón, por lo cual supe que esta situación lo estaba calentando, así que decidí calentarlo aún más, pues este hombre desde que lo vi me había parecido muy guapo y quería ver lo mas que pudiera de su anatomía
––Yo: Ves él también se está cambiando, no tienes nada de qué avergonzarte además recuerda que debes girarte la camiseta, pues te la pusiste al revés, ven alza los brazos para que te pongas la camisa al derecho
Wilmito me miro algo avergonzado, pero luego se resignó y alzó los brazos tome la camiseta de Wilmito y se la quite dejándolo expuesto ante el mesero, al hacer esto note que el mesero se quedó algo sorprendido y sus ojo se fueron al penecito de Wilmito, para luego sobarse el bulto, el cual ya mostraba una erección, Wilmito tan pronto como pudo se tapó su penecito y se puso super rojo
––Mesero: No te avergüences, ambos somos hombres no pasa nada, es más mira yo también me tengo que cambiar mi ropa interior
Luego él procedió a bajarse la ropa interior, saltando de esta una gran verga morena, con unos perfectos huevos redondos y con la cantidad adecuada de vello, se nota que se recortaba el vello, aunque en su pubis si lo tenía más largo, yo me quede embobado viendo el pene de este hombre, pues era casi como una obra maestra para mí, ver esa verga erecta era algo fenomenal, ver su tronco con esas venas que lo adornaban y luego su cabecita rosadita haciendo contraste con su piel morena era algo que realmente me prendía mucho, por lo cual como se imaginaran yo ya tenía una gran erección en mis pantalones. Miré a Wilmito y él también se había quedado embobado viendo la verga de este hombre.
––Mesero: Ves no pasa nada, tenemos lo mismo, ¿hasta tu papa también tiene lo mismo verdad? (en ese momento me giro a ver y se fijó en mi bulto y en mi notoria erección)
––Yo: Si, si jeje es verdad (me puse un poco nervioso al tener a aquel hombre delante mío en esas condiciones) todos tenemos lo mismo, así que este …. este no tienes que tener vergüenza
––Wilmito: mmmmm bueno pues si tienen razón, supongo (luego se destapó su penecito y pude apreciar que también estaba erecto, después de todo lo que había visto era imposible que no lo estuviera)
––Mesero: Si jeje, bien me voy a seguir vistiendo no demora en venir alguien más a cambiarse (aunque antes de hacerlo le dio una buena repasada al penecito de Wilmito)
––Yo: Ay si es verdad jeje, dale Will acábate de cambiar
Wilmito rápidamente saco su ropa interior y se la puso, se le veía muy rica su veguita apretada por su ropita interior, luego saco el resto de su ropa y se acabó de vestir. Mientras el mesero aún nos seguía deleitando con la vista espectacular de su miembro viril, pues primero se puso una camiseta que le quedaba algo corta, por lo cual nos seguía dejando apreciar su masculinidad, también se puso un suéter con cremallera, este parecía estar modelando para nosotros, pues hacía movimientos lentos y algo sensuales, luego guardo con mucha calma todo su uniforme en su maleta, para finalmente sacar un pantalón de jean y ponérselo, así sin ropa interior, este se lo subió pero no se lo abrocho, por lo cual su gran verga aun la tenía por fuera del pantalón, este se sentó y se amarro los zapatos, para finalmente levantarse y masajear un poco su gran mástil, finalmente lo guardó en sus pantalones, yo trate de acomodarme mi verga para que no fuera tan evidente la erección.
luego de esto todos salimos del vestuario, pues ya era obvio que nos habíamos demorado mucho, sin embargo, en ese momento había entrado mucha gente al restaurante por lo cual todos estaban muy atareados y concentrados en eso, así que ni cuenta se dieron que nos tardamos mucho o que Wilmito entró sin pantalones y salió con ellos puestos, en fin, nos despedimos del mesero, aunque este antes de irse me giño un ojo, yo como un adolescente puberto me sonroje y no sabía que hacer, pues este hombre me tenía a sus pies y creo que él lo sabía, luego nos fimos a mi auto pues ya casi era hora de llevar a Wilmito nuevamente hasta su casa. Nos subimos en el auto y arrancamos para su casa.
––Yo: ¿Bien y que te parecido la película, te gusto?
––Wilmito: Si profe, estuvo chévere, me gusto bastante
––Yo: ¿Ah sí? ¿Dirías que es una de las mejores que has visto en cine o has visto mejores?
––Wilmito: Ehhh no profe, lo que pasa es que yo nunca había ido a cine, esta es mi primera vez
––Yo: Ohhhh vale (en ese momento algo se rompió en mi interior, como era posible que en esta época un niño a los 13 años nunca haya ido a cine, ahí recordé que dijo que nunca había comido palomitas) ¿Por eso dijiste que nunca habías probado las palomitas de maíz?
––Wilmito: Si profe por eso jeje (agacho un poco la cabeza)
––Yo: Entiendo, entonces ten por seguro que vendremos mas seguido a cine, vas a ver muchas películas de ahora en adelante
––Wilmito: Ay de verdad, muchísimas gracias profe, aunque preferiblemente con ropa jajaja
––Yo: Si jajajaja, ya te prometo que las próximas veces tendrás tu ropa puesta, a no ser que tu decidas quitártela jeje
––Wilmito: jajajajjaja, no creo que eso pase, por cierto a propósito de eso profe, tengo una duda, el mesero porque no se colocó ropa interior cuando se estaba vistiendo?
––Yo: eso fue porque algunas personas se sienten mas cómodas sin ropa interior, sienten mas libertad, sienten que sus genitales pueden respirar mas
––Wilmito: ohhhh vale, ya veo gracias profe
––Yo: Porque lo preguntas, ya has salido sin ropa interior o te gustaría hacerlo?
––Wilmito: No, no profe para nada, solo tenia la curiosidad
––Yo: Entiendo pequeño, pues deberías intentarlo algun dia, quien quita que te guste jeje
––Wilmito: No, profe, no creo
––Yo: Entiendo, igual sabes que cuentas conmigo para lo que necesites, si quieres hablar o contarme algo o si tienes más dudad yo estaré aquí para responderlas
––Wilmito: Si profe, muchas gracias por eso
––Yo: Vale, mira ya estamos llegando a tu casa (yo me estacione, esta vez era mas temprano así que no habría problema de que su papa llegara)
––Wilmito: Muchas gracias profe por traerme y por todo de verdad hoy fue un día genial (él se bajó del carro)
––Yo: Vale no te preocupes, es con mucho gusto y piensa en lo ultimo que te dije, quien quita que si lo pruebas te gusté
Wilmito se rio y luego entro a su casa, yo finalmente me regrese a mi casa y tan pronto llegue, me baje del auto y me olvide hasta del expediente de Wilmito que estaba revisando en la mañana, pero no importa igual lo revisaría al día siguiente, sin embargo de lo caliente que estaba entre a mi apartamento me desnude y me masturbe muy intensamente, pensando en todo lo que había hecho en el día, pero sobre todo en aquel mesero que había conocido, realmente me había encantado y ahora que tenía la imagen de todo su cuerpo y su vergo, no paraba de fantasear con él, luego me quede desnudo y profundamente dormido.
Muy bien, sigue así estas llendo por un camión emocionante.
Oye te gustaría platicar por tele, compartir ideas e inspiración para escribir
Como sigue?
Pronto lo averiguaras