Mis recuerdos masturbatorios

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola amigos, lo que voy a contarles son algunas de las experiencias que me ocurrieron cuando niño me inicie en este asunto "de satisfacer esa hermosa sensación de tener unas pantimedias en mis genitales" y en el "mi pequeño y ansioso pene" todavía disfruta a cada momento.

Hasta donde recuerdo, cuando iba al kinder tuve esa curiosidad de "acariciar mi pequeño falo" con mi mano, pero en la medida que fue pasando el tiempo me dí cuenta que se hizo un "hábito y a la vez necesidad de mi parte" , el ver en algunas ocasiones a mis tías "cómo se ponían sus pantimedias" a tal grado que sirvieron de fuente de inspiración para realizartal cosa.

Cuando ya estaba en la primaria lo que recuerdo es que "de verdad me clavaba mucho en los comerciales que anunciaban pantimedias" no importando la marca, hasta con decirles "que tenía buena memoria para acordarme" de cómo iban vestidas las maestras de la primaria en que estudiaba, "y de cómo luicían sus piernas para que me excitará", e incluso "llegué a tomar prestadas unas pantimedias (por cierto marca Foreva) de la tía Pau. Todo esto fue "placentero hasta llegar a la adoslescencia".

Esta etapa es la que me marcó TOTALMENTE porque en ese entonces, nos cambiamos a casa de una tía, hermana de mi papá (se llamaba Clara), ya que "sus pantimedias Foreva serían la fuente de inspiración para satisfacerme".Antes que nada, ya había tomado unas pantimedias Doring Grey de la tía Luz color gris, que tuve "husmear en uno de los cajones de su tocador". Ya una tarde que mi mamá no estaba, y que regresé temprano de la escuela, se me "ocurrió la gran idea de que en vez de "sacar mi pequeño pene y con las pantys acariciarlo, porque mejor me las ponía como lo hace las mujeres a ver que se siente, y grande fue mi sorpresa que al llegar al mero climax EXPULSO A CHORROS EL GLORIOSO SEMEN, quedé fascinado por esto.

Hasta aquí me quedo, no sin antes contarles que hay una segunda parte de estos recuerdos masturbatorios con ayuda de las pantimedias de tías y amigas, hasta luego.