Nuestro macho dominante
Comunidad masculina. Honraré al varón activo sobre todas las cosas, aceptaré su miembro y saciaré su hambre carnal..
Eran las 5:30 de la mañana y Raúl despertó antes de su hora habitual, el espacio en la cama de su pareja, Julián, estaba solo, otra vez no había llegado a dormir, Raúl necesitaba sentir el cuerpo varonil de su hombre, necesitaba un macho, ser poseído por si fuerza, oler su aroma y que su macho vaciara su semilla masculina en su intimidad, la verga de Raúl estaba erecta y su ano palpitaba, se levantó al baño, saliendo de su habitación y recorriendo el pasillo, solo portaba un suspensorio blanco manchado de rastros de esperma que dejaba ver sus nalgas carnosas y peludos con una panza velluda que colgada encima de su bulto varonil.
Recorre el pasillo y pasa por la recámara de su amado hijo, Alonso, el primer amor de su vida, un muchacho inteligente y amante de la natación, lo cual le ha dado un cuerpo de Adonis, que con sus cortos 15 años, ha llamado la atención de más de un varón calentado. Al pasar por su puerta entreabierta, Raúl ve una escena que lo asombra, su novio, su amante y su vida en la cama con su amado descendiente, Raúl ve el acto carnal que su macho, Julián, un varón de 30 años, dominante y masculino, realiza con su joven muchacho, Julián sostiene por el cabello Alonso, lo tiene con la cara en las almohadas y la cadera alta dejando el ano a su Merced, en cuclillas, Julián coge a Alonso con movimientos rápidos y duros como los de un simio caliente mientras sus testículos rebotan chocando con los del muchacho, la verga venuda entra y sale de ese joven ano, llena de líquido preseminal, crema y un poco de mierda del chico, lo que hace que se resbale más placenteramente, Julián gime silencioso, disfrutando del ano de su hijastro, su verga lo taladra a pelo porque necesita poseer a ese hombre, el muchacho ya es suyo, Julián es ahora el macho alfa de la casa y Raúl con el corazón roto lo sabe, sabe que a sus 42 años ya no tiene la agilidad ni morbosidad que su hijo, sabe que su macho necesita coger, así es su naturaleza, y el debe servir y respetar a su varón.
Entre gemidos ahogados se escucha un —¡dame más! — Alonso disfruta y necesita más verga.
— ¿Que te dé más puta? ¡Eres igual de insaciable que el joto de tu padre!— contesta el macho arrecho, lo gira y abofetea, lo domina, abre sus piernas y mete la verga de una sola vez mientras que lo bombea lo empieza a abofetear cada vez más fuerte. El muchacho reciente el mal trato y su violar lo obliga a aguantar.
— ¿No te gusta, zorra? Tu te la pasa seduciéndome y ahora lloras, esto es tener un macho, aprende a tu papá que me aguanta todo, tú me debes lo mismo, aguanta verga puto. —
En eso mete la verga con fuerza haciendo que Alonso grite de dolor, al ver el hermoso rostro de su hijo lleno de lágrimas de dolor, Raúl corre hacia con el para ayudarlo, entra a la cama acacia su cara y seca las lágrimas, lo toma de su mano como señal de apoyo y lo besa en el rostro susurrando en su oído. —Vamos amor, papy está aquí, papy no va a dejarte, tu puedes mi vida, tu pueden aguantar verga, eres fuerte— apoya a su muchacho como buen pasivo.
—¡Papy me duele!—
—Soporta rey, debes ser buen pasivo, si tú activo es duro debemos aguantar, conozco su pene y sé que duele, pero lo podemos hacer amor— Raúl besa a su hijo y soba su pene que por el dolor está dormido y acaricia su pezón mientras el macho coge como animal en celo. Julián embiste y chorrea sudor, el cuarto huele a macho comienza a nalguear al pobre muchacho y acomoda al padre con el culo a la vista, se escupe una la mano y comienza a desear a su pareja, mete el debo al ritmo que mete el pene en su hijo, quiere meter la mano completa pero no puede, falta lubricación, pero aún así lo hace, Raúl grita de dolor junto a su hijo, Julián, penetra a ambos disfruta de esos anos, anos que son suyo y están a su voluntad, Julián gime y siente que llega el climax, mete de golpe el puño y la verga, grita y gime deslecha en el joven ano, los tres queda sudados, el olor a macho domina el cuarto, olor a culo, olor a patas, olor a varón y a toda su gloria, Julián deja que su verga pierda fuerza dentro de Alonso y besa el ano de Raúl, antes se sacar su miembro del adolescente libera su vejiga orinando dentro del culo, sale de él y se va.
En la cama quedan padre e hijo sudados, violados y usados por ese macho, ellos saben que deben obedecer y deben satisfacer al macho alfa de la casa, Raúl cura a su hijo, lo limpia y se acuesta con él para calmar el llanto de su muchacho, había Sido violado, pero debe saber que ese es su rol y debe satisfacer al varón, así lo dicta el pastor en la religión y su papá sabía que esto pasaría cuando dejó entrar a un macho activo a casa, así como lo dicta el mandamientos, Honraré al varón activo sobre todas las cosas, aceptaré su miembro y saciaré su hambre carnal.
Danny J
me encanta un buen macho dominante que me llene de leche