Paulette
La amiguita de mi hijastra.
Hace unos días vino la mejor amiga de mi hijastra a jugar, se llama paulette, tiene también once años, una niña morenita de cabello rizado, tiene una cara muy bonita, nariz respingona, ojos lindos y labios carnosos, esa niña tiene un culo enorme.
Mi mujer volvería de trabajar unas cuatro horas más tarde. Cuando su mamá vino a traerla venían caminando ya que no viven muy lejos y Justo llovió fuerte cuando venían a mitad de camino, la mamá de paulette me preguntó si Mariana le podría prestar algo de ropa, ya que el plan es que se iba a quedar hasta la noche por un compromiso que tenía. Yo le dije que estaba bien, que vería qué le podía prestar. Hice pasar a paulette al área de lavado le di una toalla y unas chanclas y le dije que en un momento vendría con algo de ropa. Fui al cuarto de Mariana y le pregunté qué ropa le podría prestar a Paulette ya que vino toda mojada. Me dio una camiseta blanca y un short de Licra que le quedaba ancho. Fui a llevarle la ropa a Paulette. Cuando entré vi que ya se había quitado todo excepto su calzón y su top, estaba ahí parada en ropa interior secándose bien, me dio las gracias y me preguntó si podría quitarse el calzón y el top que se le mojaron también, yo le dije que sí que ya me iba para que terminara de cambiarse. Mientras yo hablaba ella ya se había envuelto la toalla al rededor del pecho y se estaba bajando su calzón, me lo dio y me dijo si podía por favor secar ese también, lo recibí y me salí por un momento, no sé por qué olí el calzón, olía rico; olía a vagina muy tenuemente. Ella me dice que si puedo entrar un momento a ayudarle, entré, me dijo que le dolía el brazo y que no podía quitarse el top sola, seguía sólo con la toalla y se deshizo de ella en cuanto entré, cuando vi ese gesto cerré la puerta detrás de mí con normalidad. Tenía una vulva gordita y se le llegaba a notar un ligero caminito de bellos, apenas visibles. Ella se notaba cómoda estando desnuda, me dijo que en casa siempre estaba desnuda o con poca ropa ya que solo vivía con su mamá y ambas lo hacían. Le dije que tuviera cuidado, no podía desnudarse frente a cualquiera, me dijo que su mamá le ha hablado de esos peligros y riesgos, pero que yo le caía bien, que no le diría a nadie. Eso un poco me relajó. Mientras le ayudaba con el top ella me dijo que sentía mucho frío, que le gustaría un abrazo, le dije que si quería que yo le diera un abrazo, no sé porqué dije eso, pero bueno lo dicho dicho está. Me dijo que si le gustaría, que extrañaba los abrazos de su papá, el hombre había muerto unos pocos años antes. Me sentía extraño, estaba abrazando a una niña de 11 años desnuda mientras me hablaba de que su difunto padre para hacerla dormir le daba unas pequeñas palmaditas en las nalgas, similar a cuando se le quieren sacar los gases a un bebé. Imaginé que me lo decía para que se lo hiciera así que comencé a darle palmaditas en las nalgas, he de reconocer que esa niña tenía un culo impresionante para su edad, de buen tamaño, redondo, yo le comencé a acariciar las piernas muy despacio y la espalda también, me dijo que sentía cosquillitas, yo aprovechaba para rosar su vagina con el dorso de mi mano hasta que me dijo que depronto Mariana bajaba, que mejor se iba a vestir ya, eso me dio a entender que ella sabía que no era correcto lo que hacíamos. Se colocó la blusa y se le llegaban a ver los pezones a través, se colocó el short y le quedaba muy apretado, ese culo parecía que iba a romper la tela, por en frente se le partió la rajita por lo apretado que le quedaba, Mariana tenía un culo redondo y de buen tamaño, pero esta niña tenía un culo de mujer. Me preguntó cómo se veía, le dije que muy bien, que estaba bonita. Me dijo que iba ya a saludar a mariana, que había pasado ya unos 15 minutos desde que llegó. Vi que se le habían quedado unos como juguetes y manillas así que subí a dejárselas, cuando escuché que Mariana se estaba riendo a carcajadas, le decía que cómo era posible que se le marcara tanto la cuca. A mi me hizo gracia, esperé un momento a que ya no hubiera tanto ruido en su cuarto y me asomé para entrar y vi que ambas se habían bajado un poco el short hasta la mitad de la pierna y se observaban mutuamente, yo la verdad no quise interrumpir, sé que son niñas pero ya están en esa etapa de la vida del reconocimiento y auto reconocimiento sexual. No entré pero las observé un minuto desde afuera, Paulette le preguntó a Mariana si podía tocar , Mariana aceptó, vi que le tocaba la vagina pero no como con deseo sexual pero sí con curiosidad. Le abría los labios, un momento después estaba Mariana tocándole también la vagina a Paulette, como reconociendo. Yo más que nada las escuchaba y miraba cuando tenía oportunidad. Escuché que Paulette le dijo que vieran quién las tenía más grandes, me asomé y ya tenían los short subidos, pero las blusas también, se estaban comparando el tamaño de sus muy pequeñas tetas, aquí Mariana era quien las tenía algo más grandes y un poco más redondas y los pezones más parados, se acercaron para juntar sus tetas y se abrazaron, Mariana le agarró las nalgas y pude escuchar que le decía que ya entendía por qué su padrastro (Yo) le tocaba tanto el culo a su mamá. Yo decidí irme sin que supieran que estuve ahí. Me llevé las pulseras y pequeños juguetes conmigo a mi pequeño espacio de trabajo, me senté a redactar algunos correos que debía enviar, sin embargo me sentía excitado y tenía una erección por lo que acababa de ver, un acto interesante. Unos 30 minutos después se aparece Paulette preguntando por el control del tv, le digo que no estoy seguro porque ese tv nunca se encendía, pero que me diera un momento y lo podría buscar en los cajones que tenía en el escritorio, ella entró, cerró y se colocó Justo al lado de la silla, estaba pegando notoriamente su vagina en el reposabrazos, seguramente se sentía bien, quién no hizo eso durante su descubrimiento de lo sexual. Yo no encontré el control ahí, acomodé mi mano en el reposabrazos y toqué suavemente su vagina, ella no se quitó sino que empujó más su cuerpo hacia adelante, yo giré mi mano y con toda la palma de la mano y los dedos le toque la vagina, acepto que no estaba pensando, ella se quedó impresionada, no se movió más, pero tampoco se quitó, yo le acaricié unos segundos mientras le decía que no había encontrado el control en los cajones pero que quizá estaba en la parte superior del librero. En casa usualmente no uso ropa interior, solo pantalones tipo pijama en los que si tengo una erección se va a notar y bastante. Me puse de pie y busqué arriba, vi que Paulette estaba inmóvil aún, me giré y pude notar que su mirada estaba clavada en mi bulto. Me acerqué a ella y le dije que no estaba el control ahí, que le dijera a Mariana que buscaran en el cajón de la sala. Ella me dijo que si le podía dar otro abrazo, pero si la podía cargar. Yo le hice caso sin decirle nada, la levante agarrándole el trasero y la pegué a mi, cayó Justo encima de mi erección, claramente podía sentirla, yo tengo un sillón en la esquina de la oficina, le dije que estaba muy grande, que me pesaba bastante, le dije que me iba a sentar un momento para abrazarla mejor, ella asintió. Me senté y ella quedó con las piernas abiertas de frente a mi, su vagina estaba Justo sobre mi erección, ella comenzó a moverse atrás y adelante, frotando su vagina con mi pene, yo estaba atónito, nunca en mi vida imaginé estas situaciones. Ella luego de un par de minutos me dijo que mariana podría venir, que ella mejor salía, de nuevo dándome a entender que sabe que no es correcto hacer ese tipo de cosas.
les contaré la otra parte de ese día en el próximo relato, en cuanto tenga tiempo de escribir de nuevo, posiblemente esta noche.
si ocurre algo más también lo relataré. Gracias por leer, si me pueden dejar sus comentarios les agradecería, no sé a veces cómo sentirme con estas situaciones.
Que buena historia, espero pronto puedas subir la segunda parte y más historia cada que ocurra algo nuevo 👍🏼
Que te puedo decir, fascinante, he visto y comprobado de vista que la niña de hoy están en un proceso de evolución sexual más rápido que antes, y un desarrollo hermoso, si te soy sincero ahora no solo quiero ver a tu mujer e hijastra sino también a esa niña, no sé que pasará pero debo decir que estás cosas no le pasan a todo el mundo, espero la otra parte con entusiasmo.
Buen relato, ojalá continúes con más sucesos
Excelente muy excitante con morbo y lujuria, espetó la continuación.