Pies, meadas, cagadas y sumisión con mis 3 amigos los dominantes
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Fuckers.
Viernes, 19 de junio de 2009
Todo había sido planificado al detalle. Los cuatro amigos pasarían unos días en un hotel de Milán. Salían de su ciudad con el trenhotel el día 19, y volverían con el mismo trenhotel el día 23.
Jin: entonces, quedamos a las 19h en la estación, ¿no?
Fuckers: sí, supongo que nos veremos por allí.
Mob: ¿tendremos tiempo para coger el tren?
Fuckers: de sobras, el acceso al andén es un momento y vamos con mucha antelación.
Mayo: bien, allí nos vemos.
Cuando llegó la hora los amigos se encontraron en la puerta de la estación.
Fuckers: veamos, vía 2. Estamos en el coche 5, cabina número 34.
Mob: ¿bajamos ya o no?
Jin: sí, venga.
En media hora ya estaban dentro del tren, esperando que marchara a Milán, sorprendidos de las escasas dimensiones de las cabinas.
Fuckers: joder, dos literas en tan poco espacio.
Estaban los cuatro cambiándose, cuando Mob, para hacer la gracia, puso su pie sobre la cara de Fuckers.
Mob: qué, te gusta?
Fuckers: pues sí, mira como se me pone (les enseña el empinado pene).
Jin: no me jodas que te van esas cosas, buah, ¿y si jugamos un poco contigo?
Fuckers: ¿cómo?
Mayo: tú calla, puto maricón (y le pegó una patada en los huevos).
Jin: chicos, poneros las deportivas. Bueno, tú desnúdate aquí delante.
Fuckers: como queráis, vosotros sois ahora mis amos.
Mientras él se quitaba la ropa, los demás se le reían. Era humillante, él en ese estado indefenso y ellos burlándose.
Mob: pero túmbate en el suelo. Con lo sucio que está te mancharás un poco.
Mayo le puso los pies (con las deportivas Munich puestas) en la cara a Fuckers.
Mayo: límpialas.
Fuckers tuvo que lamerle las suelas de las deportivas. Cuando estaban bien húmedas, Mayo le obligó a arrancárselas con la boca.
Fuckers: sí, amo.
Mayo: ahora, arráncame los calcetines con tu boca y lámeme los pies.
Fuckers: sí, mi amo.
Los pies de Mayo eran bonitos, y el esclavo disfrutó mucho.
Mob: déjamelo un poco, le voy a escupir en la boca.
Mob le escupió una flema y un montón de saliva. Fuckers tragó todo.
Jin: yo quiero seguir esto en el baño. Espera un momento, te voy a poner correa.
Jin cogió un cinturón de su maleta y lo ató al cuello de Fuckers a modo de correa.
Jin: te llevaremos al baño del tren en este estado, desnudo y atado.
Mayo: ponle nuestros calcetines sucios en la boca, para que no hable.
Mob: ¡sí, eso, jaja!
Jin: y si alguien nos pilla, les decimos que es nudista y le gusta ir así, que si hay algún problema volvemos, le vestimos y ya está.
Mayo: si te pegamos una patada en el culo quiero que goces. (en ese momento le pegó una).
Jin: bueno, ya estamos. Cerrad la puerta, que no nos vean.
Mob: ¿qué le vas a hacer aquí?
Jin: ¿tenéis ganas de cagar?
Mob y Mayo: sí.
Jin: pues hacedlo los dos y no tiréis la cadena.
Jin: ahora, mete la cabeza en el wc y rodéate de las mierdas.
Fuckers: sí, como quieras.
Mayo: cómo le gusta. Come un poco.
Fuckers: sí.
Mob: qué asco me das, desnudo, atado y comiendo mierda del váter. Te voy a sacar una foto y luego la subiré a internet para reírme un poco de ti.
Mayo: yo la pasaría por Tuenti a todos los de clase.
Jin: sí, yo haría eso.
Mob: vale, ya verás qué corte le dará a este inútil.
Pero a Fuckers le daba igual, se iría a la uni y quizás no volvía a verles, y si lo hacía pues… creo que él no quería pensar en eso entonces.
Jin: vale, mánchate un poco la cara con la mierda y saca la cabeza del wc. Ponte un trozo en la boca y te hacemos la foto.
Se la hicieron.
Jin: ¿y si le tiramos de la cadena?
Mob: sí, con la cabeza bien adentro.
Jin puso su pie sobre la cabeza de Fuckers, haciendo fuerza para que no sacara la cabeza del wc sucio. Entonces Mayo tiró de la cadena.
Mayo: te voy a mear en la boca. Desde ahora, siempre que tenga ganas de mear tú serás mi wc.
Mob y Jin: y el mío también.
Mayo: muy bien, todas las gotitas.
Mob: yo me iría ya a dormir, mañana a las 8 de la mañana llegamos.
Mayo: sí, pero ahora Fuckers vuelve solo. Si te ve alguien no es cosa nuestra.
Ellos se metieron corriendo en la cabina y le dejaron ahí. Cuando llegó, se encontró su cama desmontada. Habían quitado el colchón y guardado las sábanas para ellos.
Mob: tú duermes en el suelo. Si tenemos ganas de mear te lo echaremos encima.
Allí durmió, desnudo, con frío e incómodo. A las 4 de la mañana despertó y alguien le había meado encima.
Sábado, 20 de junio de 2009.
Jin: qué aspecto tienes. Has dormido muy mal.
Mayo: sí, y un pelín mojado, he sido yo.
Mob: sobre tu ropa, te la hemos quitado de la maleta y guardado en la nuestra. Te la administraremos como queramos.
Fuckers: ¿con qué ropa salgo hoy del tren?
Mayo: tras mucho pensar, hemos decidido que lleves un pijama.
Mob: te lo hemos tuneado. Le hemos escrito comemierda, cerdo, el esclavo, lluvia dorada, lamedor de pies…
Fuckers miraba atónito su pijama. Estaba lleno de firmas desagradables y tuvo que salir así a la estación. El hotel estaba al lado de la estación.
Mob: la cama de Fuckers la ponemos en la bañera.
Mayo: vale, así tenemos más espacio.
Jin: pero sin sábanas eh, solo el colchón y ya está.
Mob: claro, las sábanas para nosotros.
En ese momento movieron el colchón sin sábanas a la bañera y colgaron el cartel de no entrar a limpiar para que nadie molestara.
Primera noche de hotel.
Mob: te vamos a violar aquí. Desnúdate y déjate hacer.
La situación era similar a esta: Fuckers estaba desnudo en el suelo de la habitación, a cuatro patas. Jin le ponía los pies en la cara y le obligaba a chuparlos, y eventualmente le pegaba alguna torta. Mayo prefirió ir por detrás, y le estuvo penetrando el puño hasta que Fuckers no aguantó más. Mientras, Mob le hacía un footjob con los pies y, cuando quería, le cogía del escroto y le hacía daño.
Cuando la situación avanzó, le pusieron boca arriba. Estaba tumbado mientras: Jin le cagaba enormes mierdas directamente del ano a la boca. Mayo le vomitó encima y le esparció los vómitos por el cuerpo. Mob le pisaba la polla y los huevos con el pie.
Cuando Fuckers estaba agotado, le obligaron a hacer lo más raro: comerles las uñas de los pies y tragarlas. Si lo hacía mal o alguna uña quedaba mal cortada, le caía una torta.
Mayo: yo ha le he dado mis vómitos. Mañana le toca a otro y pasado a otro.
Jin: yo se los daré en el tren de vuelta, o sea que Mob se los dará mañana.
Mayo: Mob, acuérdate de cenar algo fuerte y potente para vomitarle muchos grumos y trozos encima.
Mob: vale, beberé poco y comeré mucho.
Mayo: bueno, vamos a dormir. Tú, esclavo, vete a tu bañera y no molestes. Si sales del baño te pegaremos luego.
La noche fue para Fuckers muy excitante. Le gustó mucho lo que le hicieron sus propios amigos. Por la mañana Mayo le despertó pegándole una patada.
Mayo: venga, vamos a ducharte. Quita el colchón y túmbate.
Empezaron a bañarle con unos trapos que resultaron ser sus ropas. Cuando terminaron le hicieron vestirse con un bañador marca-paquete y una camiseta sin mangas.
Segunda noche de hotel.
Mayo: si esta noche no has cenado es porque te daremos nosotros de cenar. Hemos traído comida aquí.
De la mochila salieron panes, bizcochos, ensalada, jamón de york, queso, cereales, cerezas, filetes de lomo y zumo de naranja. Comida de sobras para varios días.
Mob: comerás lo que nosotros te demos de nuestra boca, previamente masticado y mezclado con la saliva. Es decir, una vez estemos a punto de tragar la comida, te escupiremos la bola para que te la tragues.
La experiencia fue desagradable al principio, pero muy divertida después. Algunos alimentos daban más respeto que otros, por ejemplo el queso bien masticado que Fuckers tuvo que tragar.
Jin hizo un bocadillo con jamón y queso y le hizo tragárselo entero previamente masticado. Mayo se metía cantidades enormes de cereales en la boca y, una vez convertidos en una masa desagradable a la vista, la escupía a la boca y se la hacía tragar poco a poco, para que todos los grumos se disolvieran por la boca. Y Mob comía el lomo y se lo devolvía. Luego, tocaba el postre. Los tres cogían cerezas, escupían el hueso en el cuerpo de Fuckers y seguían el mismo proceso con el resto de la cereza que con la comida. Por último, se metían un trago de zumo en la boca y se lo escupían en la cara. Fuckers estaba lleno.
Mob: ahora es mi intervención.
Mob cogió un tubo que conectaba su boca con la de Fuckers, se provocó el vómito y obligó a tragar los litros de vómito caliente a Fuckers. Fue algo directamente de la boca.
Jin: este está muy lleno.
Mayo: que se vomite encima.
Fuckers: sí, amos, estoy a vuestras órdenes.
Fuckers se metió los dedos en la garganta y se vomitó encima.
Mob: hueles muy mal tío, vete al baño pero no te duches. Dormirás vomitado y mañana te bañarás.
La noche fue mala para él, pues el olor no le dejaba dormir.
Vuelta en trenhotel.
Pasadas las vacaciones había que volver a casa.
Jin: el trenhotel sale tarde, a las 23h.
Fuckers: ¿podréis dejarme comer mucha mierda? Me habéis dado poca.
Mayo: no he cagado todavía para que tragues kilos y kilos, y además Jin te vomitará.
Mob: yo te penetraré mucho y muy fuerte.
Jin: y yo te agarraré los testículos con mis pies hasta que grites de dolor.
Entraron a la cabina y el tren marchó.
Mob: te vamos a violar. Yo por el culo, y Jin y Mayo por la boca.
Fue difícil para Fuckers. Mayo tenía muy grande la polla. Consiguieron eyacular a la vez, causando un gran orgasmo en Fuckers.
Mayo: ahora te cagaré en la boca. Si no tragas te pegaré una torta. Mientras Jin te pellizcará los huevos.
Mob: y yo me subiré encima tuyo desnudo, y empezaré a mearte.
Fuckers nunca tuvo una experiencia parecida. Muy cercana al sado y con 3 conocidos. Fue muy estimulante. Mayo cagaba sin parar y no dejaba casi respirar a Fuckers, que tragaba las enormes cagadas masticando a toda prisa. Cuando quería, Mayo le pegaba una fuerte torta en la cara y a veces le pisaba con fuerza con los pies. Pero es que mientras Fuckers pasaba ese mal trago, Jin le cogía de los testículos y se los pellizcaba con fuerza mirándole con cara de superioridad. Y por si fuera poco, mientras el esclavo se coordinaba para hacer todo esto Mob, aprovechándose de ser el más delgado y pequeño, se le subía encima de la tripa, meándole cuando quería.
Jin: me toca potarte encima.
Jin juntó su boca a la de Fuckers y empezó a vomitar. Fue algo directo, de boca a boca. Mob aprovechó para masturbarse y, una vez corrido, le ordenó a Fuckers que le tragara el semen directamente del cuerpo.
Mob: tengo ganas de pisarte más aún.
Mob puso plana la polla de Fuckers y puso su pie derecho encima, haciendo fuerza. El pie izquierdo lo metía en la boca de su esclavo que chupaba sin parar.
Fuckers gritaba de dolor, y para evitarlo le metieron calcetines sucios en la boca.
Mayo: ha estado bien, me va esto del sado.
Jin y Mob: y a nosotros.
Mob: si os puedo contar un secreto, os diré que ya había practicado estas cosas con otros chicos y chicas de clase, casi todos somos amantes del scat, fetiches y tal.
Jin: yo tengo otra sorpresa. Me han llamado los de clase y me han dicho que por lo menos 30 personas coincidiremos en la misma universidad.
Fuckers: yo sé que hay más amantes de la sumisión y fetichismo en clase, así que para otra vez podemos quedar con todos y montar esto a lo grande.
En septiembre confirmaron que todos iban a la misma universidad, y empezó el vicio para ellos y ellas. Pero eso es otra historia.
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