Visitando a Mi Tia Alicia I

Visitando a mi tia durante mi adolescencia me pajero con todo lo que encuentro en su cuarto y Baño.
Me llamo alejandro, voy a contar mis experiencias fetichistas, entre ellas, las que vivi cuando visitaba a mi tia Alicia, soltera, con  dos hijas grandes que ya no vivian con ella ( mis primas Leti 20 años y Clara de 26).

Durante mi adolescencia de los 14 a los 18 años visite asiduamente la casa de Alicia, hermana de mi madre, ella rondaba los 55 años para esa epoca, era una mujer alta, caderona, con tetas naturales bien grandes, piel blanca, carilinda, pelo negro siempre teñido sin canas y a veces alternaba con mechones de colores, en general rojos o azules.

Como decia era muy culona, vestia en general spandex, vestidos , polleras de cuero, remeras escotadas, y siempre ropa ajustada al culo y las piernas.

Sus manos con uñas largas y de punta cuadrada y sus piecitos con dedos y suelas perfectas eran lo que mas me gustaban.  siempre se pintaba las uñas de colores como negro, rojo, blanco, turqueza, azul, uva… todos esos eran mis preferidos, sobre todo cuando combinaba colores.

A medida que fui entrando en la adolescencia me fui calentando cada vez mas con mi tia, la espiaba cuando limpipaba, cuando se agachaba a buscar algo, le miraba el culo, las tetas, los pies… Y poco a poco me fui quedando mas seguido a dormir en su casa.

Me quedaba de viernes a domingos, y ademas de divertirnos y salir a pasear, la pasabamos muy bien ya que soy su sobrino preferido. Ella dormia en su cuarto y yo en la pieza vacia de mis primas, donde usaba la computadora para mirar porno pero sobre todo descubri una de mis pasiones, que era revisar la ropa que habia quedado…. Tangas de mis primas, leggins, shortcitos cortos, ballerinas, sandalias de  fiesta, ojotas de todo tipo, botas de cuero, zuecos de madera, de corcho… habia medias , polleras escolares, remeritas de mujer… y hasta algunas pinturitas de uñas.

Empece por ponerme unos zuecos que me quedaban casi bien, y a pajearme y acabarme en los pies. Esos zuecos de corcho, con una tira de cuero ancha que me dejaba ver los talones y los deditos de los pies, me volvian loco. Me imaginaba cojiendo zapatos de mi tia, o cojiendo a eklla con los zapoatos puestos!.

Poco a pooco fui progresando en mis pajas, a ponerme tangas, calzas, remeritas, a ponerme pulseras. Me empece a pintar las uñas de los pies y manos y ahi me acababa toda la leche… me sentia muy puta pero a la vez no gay… me imaginaba cojer como una lesbiana.

Cuando iba al baño, tambien comence a revisar el cesto de ropa sucia, y descubri que mi tia era putisima, usaba tangas de hilo o esas que se entierran bien en el culo. Tenian mucho flujo y olor a concha, me las ponia en la nariz  y me pajeaba o me las llebava a la pieza  ala noche para llenarlas de leche…

Con el tiempo mi tia descubrio, pero lejos de enojarse vino la mejor parte…  empezo a compartir toda su ropa, sus zapatitos, sus pinturitas, me hizo un sobrinito crosss y chancho.. con morbos como la caca, el pis, los olores fuertes a pies y a concha o culo. me pedia que no nos bañaramos en todo el fin de semana para sentirnos el olor asqueroso que se acumulaba en nosotros… pero eso queda para la segunda parte. saludoss