Viviendo unos meses con mi tía

Esta es la historia de cuando tuve que vivir con mi tía, pero me disfruté mucho ese tiempo..
El año pasado yo perdí mi empleo y entré en una mala situación económica, tenía 20 años y no sabía muy bien que hacer, mi tía vivía en un pueblo cerca de donde yo estaba, por lo que le pedí que me dejara vivir con ella unos meses mientras lograba solucionar algunas cosas, ella es una señora de 48 años, algo gorda pero su cuerpo siempre me gustó, tenía tetas grandes y caídas y un culo gordo, ella me tenía aprecio porque años antes vivíamos juntos con mi mamá, entonces por supuesto me dijo que si me podía quedar en su casa. Cuando llegué me di cuenta que era una casa pequeña, humilde, tenía un espacio para la cocina, una sola habitación y el baño ahí mismo, no tenía puertas adentro, así que todo estaba conectado, la casa no estaba muy limpia, había algo de basura en el piso y ropa sucia por ahí, ella vivía un poco desordenada, pero a mi no me importaba, nunca me incomodó vivir así. Llegué algo cansado así que me quería acostar un rato, la habitación era bastante pequeña y sin ventanas, había solo una cama donde dormía mi tía y un sofá al frente donde dormiría yo, apenas vi donde iba a dormir solté mi maleta, me cambié de ropa y me puse algo cómodo, una pantaloneta sin nada más, me recosté en el sofá y dormí un poco, luego de eso ella me llevó algo de comer, comimos y nos quedamos viendo televisión en un pequeño televisor que ella tenía, no tardé mucho en fijarme en lo que llevaba puesto ella, solo una pijama tipo blusa sin nada debajo, me excitó verla así, el escote era bastante amplio y se le veían mucho sus tetas, ella se paró de la cama y fue al baño, se sentó en la taza y comenzó a cagar, yo la veía desde el sofá ya que el baño quedaba frente a la habitación y no tenía puerta, a ella no le importó que yo la viera, a mi se me paró mucho el pene viéndola, me comencé a tocar un poco el pene por encima de la pantaloneta, ella se paró del baño y ni siquiera se limpió ni bajó la cisterna, simplemente vino a sentarse en su cama en su cama, eso me excitaba aún más, nos pusimos a hablar un poco, yo me tocaba el pene mientras hablábamos, ella lo notó pero no le dio importancia, ella me contó que había estado teniendo un dolor en una teta ya que se la había golpeado con una mesa, de repente ella se sacó los senos de la pijama para mostrarme, no de forma sexual ni nada, simplemente porque me tenía confianza, yo llevaba años sin verle las tetas y me excité mucho, ella de las tocaba y me mostraba el morado que tenía en una, luego se las guardó y seguimos hablando, yo me inventé que también tenía un dolor pero en la pelvis, por andar varias horas en moto, pero solo era una excusa para que viera mi pene, ella me dijo que le mostrara donde me dolía, así que me bajé la pantaloneta y mi pene erecto salió al aire, ella se acercó y me preguntó en que parte me dolía, yo le dije que al lado derecho del pene y los testiculos, ella agarró con su mano mi pene duro pero solo para hacerlo a un lado, me tocó un poco donde supuestamente me dolía, me agarró también las bolas que las tenía algo peludas, me dijo que yo había crecido mucho, me agarró el pene y lo pajeo dos o tres veces, mas que algo sexual ella lo hizo con cariño como de madre, yo igual estaba excitado así que cuando ella se volvió a sentar en su cama yo me empecé a pajear ahí frente a ella, había algo de ropa sucia al lado de mi sofá y vi una tanga de ella bastante sucia entre la ropa, la agarré y la vi un poco, tenía manchas de orina y caca, la olí y tenía un aroma fuerte, inmediatamente la llevé a mi pene para pajearme, ella me vio pajeandome con su tanga pero no le vio problema, era muy comprensiva siempre, poco después me vine, dejé todo mi semen en la tanga, me limpié un poco el pene y la puse de nuevo sobre la ropa sucia, ella me dijo que ahora si podía descansar bien, la verdad es que yo ahora tenía ganas de cagar, así que le dije que antes de dormir iría al baño, cuando entré el baño olía fuerte, ella había dejado una caca bastante grande en la taza, también vi que había algo de caca en la ducha, yo no dudé y simplemente me puse a cagar en el baño encima de su caca, la mía salía menos solida así que quedó una plasta bastante grande en el baño entre caca de ella y mia, me di cuenta que ella no tenía papel higiénico ni nada con que limpiarse, yo no podía estar con el culo sucio como ella, así que salí y me limpié con su tanga, la misma con la que me había pajeado, quedó bastante sucia de caca, la puse de nuevo en la ropa sucia, ella me vio limpiándome con su tanga pero no vio nada malo, me dijo que ella estaba acostumbrada a no limpiarse casi nunca, o que si se limpiaba era con las sabanas de la cama, a mi me excitaba mucho todo lo que ella decía, luego de hablar un poco ya nos quedamos dormidos, yo dormí desnudo en el sofá ya que hacía bastante calor, cuando me desperté en la mañana ella seguía durmiendo, me paré a verla, tenía su pijama subida y se le veía la vagina, la tenía bastante peluda y oscura, yo la toqué un poco, pero con cuidado de que no se despertara, como me acababa de levantar tenía muchas ganas de orinar, estaba algo excitado así que decidí orinarle un poco encima de su vagina y sus piernas, comencé a soltar algo de orina y cuando le cayó en la vagina vi que se movió un poco, así que hice mi pene hacia otro lado y seguí orinando porque ya no podía parar, ella se despertó y me vio parado orinando encima de su ropa sucia, creí que se iba a enojar o algo pero simplemente se rió, me dijo que parecía que había amanecido con unas ganas de orinar muy fuertes, creyó que por eso le orinaba la ropa, yo le dije que si, que no alcancé a llegar al baño, ella dijo que no había problema, que ella también lo hacía, hablábamos mientras yo seguía orinando con el pene duro, yo le veía su vagina ya que todavía no se la había tapado, ella se tocó y como sintió mojado creyó que simplemente le había salpicado un poco de mis orines, ella se abrió un poco de piernas y comenzó a soltar un chorro de orines bastante grande ahí mismo sobre su cama, me alcanzó a salpicar un poco de sus orines en las piernas, yo estaba muy excitado ahí mirándola, luego de orinar ella se paró de la cama, dijo que tenía ganas de cagar, fue al baño pero al ver nuestras dos cagadas ahí juntas dijo que tocaba bajar el baño pero para eso había que traer agua de afuera ya que la cisterna no servía, así que ella simplemente trajo una vasija para cagar ahí mientras más tarde limpiabamos el baño, ella puso la vasija sobre mi sofá y comenzó a cagar, yo estaba sentado ahí viéndola mientras me pajeaba, ella cagaba bastante solido y duro, eso me gustaba, luego de que se quitó de la vasija le dije que la dejara ahí porque en un rato yo también tenía que cagar, cuando vi la vasija ella había hecho una caca enorme bastante solida, yo no dudé en agarrar con mis manos un pedazo grande, se lo mostré y le dije que ella cagaba muy duro, ella me dijo que siempre cagaba así, ella también agarró un pedazo de caca y lo comenzó a moldear un poco, le dije que lo probara a ver a que le sabía, ella se echó un pedazo a la boca, nunca le habíamos tenido asco a la caca, ella dijo que sabía algo salado, me dijo que quería ver como era mi caca, yo ya tenía ganas de cagar así que me volteé y puse mi culo sobre la vasija, ella estaba muy cerca mio mirando mi culo, cuando acabé me volteé de nuevo, había cagado bastante, nuestras cacas estaban juntas ahí, la mia menos solida pero también bastante, ella tomó un poco de mi caca y la probó, dijo que la mía sabia mejor, yo estaba muy excitado y me estaba pajeando ahí frente a ella, le dije que a mi me gustaba untarme la caca en el pene ya que había leído que era bueno para la piel de esas partes, ella agarró un poco de nuestra caca y me la untó en el pene, me lo embadurno bastante, el pene y las bolas, me pajeó un poco, luego agarró más caca y ahora la llevó hacia su vagina, se comenzó a untar todo por fuera y se metía un poco adentro con los dedos eso me excitaba demasiado, yo le dije que me dejara ayudarla, agarré bastante caca, mas que nada mia, y se la metí en la vagina, ella me dijo que se sentía caliente la caca y que le gustaba, yo le dije que para que la caca llegara mas adentro de su vagina me dejara penetrarla, que solo era para ayudarla con eso, ella se acercó y puso du vagina sobre mi pene que también estaba lleno de caca, la penetraba y sentía como empujaba la caca para adentro, lo hicimos repetidas veces de forma lenta, era como si no estuviéramos teniendo sexo sino más algo terapéutico, poco después yo me vine dentro de su vagina, saqué mi pene y su vagina chorreaba semen con caca. Luego de eso ambos estábamos cansados y queríamos dormir un rato mas, ni siquiera nos limpiamos, ella se acostó en su cama con la vagina llena de caca y yo con mi pene todo untado de caca.