(2) LA FOLLADA
A veces Andy dejaba que su culo fuera penetrado por el pene gordo y tieso de su amigo de 18 años pelirrojo al que estaba penetrando en aquella noche de pasión tras un fantástico día de playa..
(cap 2)
A veces Andy dejaba que su culo fuera penetrado por el pene gordo y tieso de su amigo de 18 años pelirrojo al que estaba penetrando en aquella noche de pasión tras un fantástico día de playa.
Estaban ellos en su frenesí pensando que ya no había nadie en aquel lugar cuando me acerqué yo desnudo y me puse detrás de Andy. Me había empalmado a ver aquella escena. Llevaba rato observando a aquellos chavales a unos veinte metros de distancia. Estaba allí cuando llegó Maikel con su tabla de surf y tapó los ojos de Andy susurrándole al oído y besándole y abrazándole por la espalda, y cuando los chavales se fundieron en un primer beso de pasión que siguió a aquella oleada de besos y abrazos que terminó con los dos niños desnudos mamándose las pollas y el ojete y Andy penetrando a lo perro a su amigo de infancia.
En el frenesí que estaban no se habían percatado de mi presencia. Salí de entre las ramas y me acerqué a los muchachos con mi pene tieso. Me había puesto duro al verles magrearse y estaba empalmado como un hierro. Me quité mi bañador tipo turbo de hombre de negro y me posicioné espaldas a Andy. El ruido de mis pisadas sobre la arena fue imperceptible ante los gemidos de los chavales. Me posicioné detrás de Andy que dio una estocada a Maikel al que clavó su dura polla haciéndole daño (a veces los jóvenes eran tan ardientes y follaban con tanta pasión que dejaban que su instinto animal aflorara). El grito de Maikel excitó más a Andy, que se e ensanchó más su gran pene, lo que hacía que el estrecho culo de Maikel clamase caliente cuando le ensartaba su amiguito su largo pene en su ano. Maikel clamaría venganza follándose duro a Andy cuando este se corriera en sus nalgas. Pero esto no iba a pasar. Cuando Andy se echó hacia atrás para darle una gran estocada a su amigo Maikel y penetrarlo aún más duro con su gordo pene, mi glande tocó sus nalgas… lo que asustó al chaval que no se había enterado de mi aparición.
–Shssss schhsss, ¡¡No pasa nada amiguito! –le dije presentándome mostrándole mi bañador de hombre de negro.
Los chavales podían decidir con quién follar, pero no podían rechazar ser follados por un hombre de negro.
Yo me lo había ganado tras meses de duras pruebas y dejarme follar por aquel gran animal –el cerdo, el perro, el lobo… el caballo…– Y ahora me tocaba disfrutar.
Mi duro glande no penetró el ano de Andy que continuó follando a su amigo Maikel a lo perro, pero ahora yo estaba detrás de él. Y mi glande estaba húmedo, lubricando, manando precum, viendo aquella escena sexual tan tórrida y tan ardiente… por lo que en tres o cuatro embestidas hacia delante y hacia atrás de Andy penetrando a su amigo Maikel, que seguía siendo buen pasivo recibiendo la polla de su amigo mayor, el ano de Andy fue suficientemente empapado con mi presemen como para que cuando Andy se echó hacia atrás la quinta vez, mi grande traspasara su ojete ya lubricado con mis fluidos. ¡¡Y Andy gimió al ser penetrado!! Y yo lo agarré por las caderas para que se echara hacia atrás y le entrase buena parte de mi pene duro como un mástil, en lo que fue cada vez una más dura penetración, porque cada vez que Andy se echaba hacia atrás se clavaba más centímetros de mi mástil. Y Andy no paraba. Estaba en frenesí, cada vez se echaba más hacia atrás para coger más carrerilla para clavarle más fuerte y más profundo su pene en el culo de Maikel, sabiendo que cuanto más atrás se echaba más centímetros de mi pene le trasladaban… 16… 17… 18… Andy gemía… Maikel gemía cada vez más.. Andy era un sandwich. Follaba y estaba siendo follado por un adulto, un hombre de negro, de 22 centímetros de pene… Y no sólo no paraba sino que quería más y más…
Maikel jadeaban cada vez más fuerte. Andy tenía la polla cada vez más gorda (le excitaba estar siendo follado por mí), y yo gemía porque cada vez el culo de Andy iba más hacia atrás clavándose más centimetros de mi pene.
Así pasamos media hora cuando Andy estaba a punto de eyacular. Yo también me había aguantado mucho y no iba a poder aguantar mucho más. Tenía mucho semen acumulado e iba a preñar a aquel escuálido muchacho.
¡¡Qué morbazo me estaba dando la situación!!
¡¡Y aquel chaval moreno y delgado qué bien lo estaba haciendo!! Era su primera vez con un hombre de negro. Se había dejado penetrar por penes de 16-17 centímetros como el de su amigo Maikel pero era la primera vez que le entraba un pene tan gordo y largo como el mío ¡¡Y lo estaba disfrutando!!
Tras el susto del primer momento tenía ganas de más y le gustó la situación. Y sin salirse de su amigo Maikel aceptó su nuevo papel de follar y ser follado, y en vez de parar aumentó la marcha clavándose más y más de mi pene en él. Y cuanto más de mi pene se clavaba más se empalmaba y más duro se ponía su pene y más placer le estaba dando a su amigo Maikel, que nunca había notado tan gordo el pene de su amigo. Y tan excitado que estaba que Maikel no pudo aguantar más y en la última estocada que Andy le dio empezó a correrse a borbotones… Su pene lanzaba semen como una manguera, mientras Andy se la clavaba muy dentro. Andy se excitó a ver a su amigo eyacular con tal potencia sobre la arena y con las dos manos le sujetó de las caderas corriéndose dentro de él cerrando su ano, dejando su pene totalmente clavado dentro de su amigo.
Yo, detrás de Andy, hice lo propio y eyaculé a borbotones dentro del culo de Andy a la par que sentía sus chorros de semen correrse dentro del ano de su amiguito pelirrojo… Maikel estaba en éxtasis, y Andy derrengado. Aún así de su pene manaban chorros de semen en Maikel a la par que yo me corría dentro de él.
Le sujeté de las caderas para que no se saliera mi pene de su ano. Estábamos los tres como un trenecito, y los tres en extasis. Una orgía de semen. El de Maikel cayendo sobre la arena de la playa, el de Andy inundando el culo de Maikel y el mío inundando el culo de Andy.
–Agggggggggggg agggghhhhhhh ¡¡Oh Dios mío!! ¡¡qué corrida!! –exclamé
Escribes divino.