4) Mi Primo Enrique con 15 y yo con 10
Una tanda de nalgadas duras azotaron mi trasero enrojecido, su piel dejaba caer gotas grandes de sudor en mi cuerpo y el sofa rechinaba en cada embestida, el vello de su pubis y piernas picaba en mis nalgas como de costumbre a gran velocidad.
Después de aquella primera cogida con Teo, hubo muchas mas.
Poco a poco su miembro fue perdiendo la erección y retirándose de las profundidades de mi ano, continuábamos abrazados y ahora que el respetable doctor Teo había recuperado la cordura nos besábamos con ternura y nos hicimos caricias mutuamente, el besaba mis labios y me frotaba el cabello, sin decir nada, sin mas sonido que el de sus labios al besar los míos, a diferencia de los besos salvajes y desesperados de hace apenas unos minutos atrás, ahora sus besos eran quedos, sin prisas ni urgencia, la rigidez de su verga se fue convirtiendo en suavidad hasta que sentimos con claridad el momento en que abandono por completo mi canal anal, unos segundos después nos levantamos de la camilla y empezamos a vestirnos.
Vi a ese macho mulato de mas de 1.80 ponerse de rodillas frente a mi que con las piernas todavía abiertas, una a cada lado de su torso no podía dejar de mirar como desde la base de su pene hacia un circulo con los dedos, mientras sostenía por el tronco con la mano izquierda un condón lleno de lubricante por fuera y semen suyo por dentro, su lefa se notaba abundante dentro del látex del condón, blanca y espesa, con gran habilidad se lo retiro y le hecho un nudo casi al final para impedir que la lefa se saliera, yo miraba toda la escena con una sonrisa, ya estaba satisfecho pero ver ese cuerpo imponente, adulto, fibroso y lleno de vellos oscuros y muy rizados me provocaba deseos de no separarme de el por el resto del día, Teo me miraba de igual manera, sus ojos subían a mi rostro que le sostenía la mirada, bajaban por mi torso hasta mi miembro y huevos y de ahí se clavaba en mi culito, se jalaba levemente con la mano derecha el pene ya flácido, con ese movimiento su prepucio cubría el glande y al jalar hacia atrás el pellejito descubría de nuevo la cabeza de su verga, me dedico una sonrisa y poniéndose de pie se alejo a buscar sus ropas, algunas de las prendas estaban en el suelo y otras apoyadas en el respaldo de una silla, arrojo el condón húmedo por fuera y lleno de lefa por dentro sobre una de las vitrinas de cristal cercanas y empezó a agacharse para recoger sus slip y pantalones del piso, yo me quede ahi sobre la camilla, con movimientos lentos cerré las piernas adoloridas por permanecer por un tiempo tan largo tan abiertas y poco a poco empecé a levantarme pues tenia la sensación que después de meses sin varón mi culito y mi cuerpo en general me dolerían mucho si hacia un movimiento brusco.
La vista era lo mejor, ver a este mulato era un poema unas piernas fuertes asi como unos brazos atleticos, su abdomen casi plano y la gran cantidad de vellos rizados y oscuros que cubrian su piel, todo el me parecia un sueño erotico hecho hombre, me senti orgulloso de haber sido yo el que ese dia habia recibido sus embestidas, estaba orgulloso de que en mi culo hubiera experimentado un orgasmo tan intenso y que le habia drenado tanta lefa de los huevos, para cuando empece a buscar mi ropa dentro de la mochila aun hecha rollo que estaba tirada a lado de la cama, Teo ya se habia colocado los slip, el pantalon y se empezaba a poner de nuevo el reloj y una pulsera de metal en la mano izquierda, el no volteaba a verme ya, estaba muy concentrado en ponerse bien la ropa, de mi culo escurrian gotitas de lubricante, saque un poco de papel de baño de mi mochila, lo hice rollo y poniendolo en mi culo puje un poco para expulsar la mayoria que pudiera y no manchar mi ropa, hice bola el papel mojado y lo lance en un cesto de basura, hice un rollo mas grande y siguiendo los consejos de Enrique aquella primera vez en la que me habia eyaculado dentro me lo coloque como almohadilla entre las nalgas para que absorbiera si es que mas lubricante salia y amenazaba con mojarme la ropa, no queria llamar la atencion en la calle.
Los pectorales de Teo se movian al ponerse su camisa de vestir y con molestia noto como la mancha de sudor seguia fresca empapando el centro de su pecho al abotonarla, en sus axilas tambien habia manchas humedas de sudor y su aroma a macho llenaba tenuemente la habitacion, escucho mi risa y me sonrio, tomo su bata y se la abrocho hasta el ultimo boton para tratar de que no se notaran las manchas de humedad, fue hasta el interfon de la farmacia y le dijo a la vendedora que se iria a su casa, que por el dia de hoy «ese ultimo» habia sido sus ultimo paciente del dia y que la veia mañana.
-Tan cansado esta Doctor?
le dije burlon y coqueto
-Cansado para darte otra cogida no, pero quede apestando a chivo y no me gustaria que mis pacientes me vieran ni me olieran asi
los dos reimos y el se apresuro a abrir las ventanas en la parte superior de la habitacion para que el aroma a sexo se apaciguara, lanzo el condon dentro de la bolsa de basura y la tomo anudandola para llevarsela y deshecharla lejos del consultorio.
-Nos vamos?
me lo dijo amable y encantador, como si salir juntos de algun lugar fuera lo comun para los dos, mire mi reloj mientras lo sacaba de la mochila y me lo ponia de vuelta en la muñeca, eran las siete de la noche, faltaban pocos minutos para que dieran las ocho y afuera ya habia caido la noche por completo, salimos juntos del consultorio por la puerta lateral que no comunicaba ni con la sala de espera ni con la farmacia y despues de decirme
-Ven
lo acompañe hasta su auto,
-Quieres que te acerque a algun lugar?
-Si, gracias
Mi culo se sentia pleno, hinchado y humedo, mis caderas levemente acalambradas y las piernas adoloridas pero me sentia muy contento y bien atendido, subi a su auto y le pedi me dejara en una bodega que servia como tienda cercana a la colonia donde vivia, no queria que supiera con ciencia exacta en donde vivia y le invente que tenia que comprar algo para llegar a cenar,
-No te gustaria pasar a comer a mi casa? me lo dijo risueño y travieso despues de ponerme la mano en la pierna casi tocando con sus uñas mis huevos, empece a erectarme debajo del pantalon y puse mi mano sobre la suya con deseo, lo mire a los ojos y el me beso, estabamos en una calle oscura sin farolas ni luces de casas o negocios, nadie cerca y despues de besarnos por unos segundos me tuve que negar
-Suena muy bien, pero tengo que llegar a mi casa, vivo con mi tia y sus hijas y si no llego a dormir se va a molestar
-En que trabajas?
Me pregunto curioso, y mi mente echo mano de la historia prefabricada con la que habia salido de casa ese mismo dia
-Hace unos meses todavia era cajero en (le di el nombre de la capital del estado) pero tuve que renunciar cuando cai en cuenta de que eso no es lo que quiero hacer, vine aqui para estudiar en la escuela de artes y oficios que esta en el pueblo vecino y aprender algunas funciones e irme a los Estados Unidos, el me miraba fijamente mientras hablaba y despues de algunas platicas sin importancia sobre conocidos que tenia en USA y preguntarme si alguna vez habia salido del pais me pidio que intercambiaramos telefonos y que lo buscara en los siguientes dias, baje de su auto y me despedi de el en la puerta de la bodega, no habia nadie en la calle, el cielo estaba gris y el viento soplaba furioso, el me dedico un saludo con la mano y una sonrisa y encendio el auto, tan pronto como vi que las llantas delanteras se empezaron a mover entre en la tienda, me acerque al mostrador y para no llamar la atencion compre unas chucherias rapido, sali de la tienda apenas unos segundos despues y me fui por las calles contrarias a mi casa.
Todo en mi era una mentira, aun era menor de edad, nunca habia trabajado por mi cuenta ni pagado mis gastos, no me llamaba ni siquiera de la manera en la que el pensaba y no queria que lo descubriera pues muy seguramente me sacaria de su vida y no volveria a tener la oportunidad de sentir su verga en mi interior, habia pasado meses sin varon y no pensaba volver a quedarme sin uno, Teo habia resultado un muy buen empotrador, me habia utilizado como a una puta pero tambien habia sabido cuando ser dulce y tierno, mi cuerpo le sirvio para saciar sus deseos pero de paso tambien habia hecho que yo llegara al orgasmo y saciara mis deseos de ser tocado y follado por un varon de verdad, uno rudo y fuerte, de agarre tosco pero lo suficientemente cooperador para ponerse un condon cuando se lo pedi.
Llegue a casa y mi tia y prima estaban en la cocina, sabia que a lo mucho mi cuerpo desprendia el olor del sudor pero nada mas que pudiera incriminarme, puse la mejor cara de fastidio que pude y entre a saludar, ambas estaban platicando mientras mi prima lavaba los platos y mi tia guardaba el super en el refrigerador y la alacena, entre con un caminar pausado y les dije que venia muy cansado pues habia estado jugando basquet con mis amigos de la escuela en el estadio del otro lado del pueblo. me dieron un plato de comida y despues de hablar un rato conmigo se fueron a la sala para ver una telenovela que siempre veian juntas, entre en mi habitacion, busque una toalla y me meti a bañar de una vez, ya en la soledad de la ducha aproveche para lavar a conciencia mi culito, sentia adoloridos los bordes del ano y al enterrarme el dedo medio senti con placer como sin casi oponer resistencia se fue hasta la mano, sonrei para mi mismo, habia tenido dentro una verga mas gruesa que la de Enrique y de mas de 17 cms dandome duro durante varios minutos, por fin despues de meses habia alcanzado el orgasmo anal que tanto echaba de menos, me puse con las nalgas abiertas con ambas manos, abri el chorro a la maxima potencia y apague el agua caliente, deje que el agua fresca mojara mi culo y lo empapara, era delicioso sentir el frio del agua correr por mi anocaliente e hinchado, pasaron unos minutos y volvi a abrir el agua caliente, el cambio de temperatura me encanto y empce a meterme los dedos para verificar en que estado habia quedado el interior de mi culo, se sentia rozado, caliente y dilatado, puje durante un rato y expulse liquido lubricante y aire, termine de bañarme y sali satisfecho, despues de secarme y vestirme me recoste en la cama, revise el telefono y vi que tenia algunos mensajes de Enrique, no me contaba nada nuevo, me decia que por ser viernes iria a una de las BBQ de los amigos de su padre, que estaba trabajando mucho y que me extrañaba
-Si como no?
fue lo que paso por mi cabeza y es que hace apenas unos dias atras habia oido otra de las platicas de mi tia con su padre, hablaban de una tal Rosaura, hija mayor de uno de sus amigos de años con la que el don queria que Enrique probara suerte para ver si se «cuadraban», el hombre le habia contado a mi tia que Enrique se hacia el desinteresado pero que ya lo habia cachado varias veces con la vista clavada en ella y sus formas y que ella no le era para nada indiferente y se notaba que le gustaba sentirse admirada por el.
-Tambien te quiero, cuidate, cuenta tus cheves y hasta luego.
Eso fue lo unico que le conteste.
Los dias se fueron pasando, esos dias se volvieron semanas y mi nueva rutina ahora incluia intercambiar mensajes con Teo no menos de cuatro veces por dia, quedar para vernos en su casa y desaparecerme a eso de las cuatro de la tarde que era cuando el salia a tomar sus dos horas de comida para verlo en la privacidad de su casa, dejar que me empotrara a como el le diera la gana y pasar el resto del tiempo tirados en su cama o el sofa desnudos o en slips viendo la television, viendo alguna de las muchas peliculas de ciencia ficcion, fantasia o accion que el queria ver o enseñarme o escuchando musica, los condones siempre los llevaba yo y en su casa el se aseguraba de siempre tener a la mano lubricante, en ese tiempo terminamos por familiarizarnos el uno con el otro, su casa habia pasado a ser un segundo hogar para mi y cuando no me tenia con las piernas abiertas, el culo siendo embestido por su verga, besandome y manoseandonos mutuamente en alguna parte de la casa, hablabamos de lo que veiamos en la TV o escuchabamos en el estereo, Era obvio el porque yo preferia mil veces hacer eso que dejar esos espacios vacios para que el me preguntara acerca de mi vida, pero empezaba a calarme el no saber de la suya, ese macho mulato me agradaba mucho y me intrigaba de igual manera, para mi desde la primera semana habia dejado de ser solo mi empotrador y lo veia como un amigo, queria preguntarle tantas cosas solo para saber con mas certeza cual era su historia, pero jamas me atrevia pues no queria que el tambien buscara saciar sus dudas sobre mi.
Enrique seguia llamando y mandanome mensajes, no habia dejado de estar presente, pero sinceramente mis emociones por el a pesar de que seguian ahi con el pasar de ya casi un año desde que se habia ido y varios meses de tener en mi vida a Teo se habian empezado a apaciguar, bien dicen que la lejania es el olvido y que amor de lejos amor de pendejos, con Teo no tenia nada estable a largo plazo, estabamos solo pasando el rato y los dos lo sabiamos, asi como un dia yo me habia aparecido en su vida el podia desaparecer de la mia, pues me habia contado estaba en nuestro pueblo en lo que recibia un llamada de algo mejor para labrarse un futuro profesional estable asi que con el no tenia ilusiones ni sueños, a Enrique aun lo amaba, aun queria estar a su lado, pero en mi mente el futuro juntos habia dejado de ser un deseo desesperado y una ilusion probable para convertirse en un deseo casi infantil a mi parecer, tenia muy presente que en cualquier dia el podria llamarme o mensajearme para decirme que definitivamente se habia acabado, pues sabia que el tan caliente y pasional como era no se iba a aguantar las ganas de coger con la primera mujer que le diera entrada, si yo que lo habia amado tanto habia acabado por ceder a mis instintos que podia esperar de el?
Tenia que ser realista y prepararme para su adios.
Una tarde sucedio que Teo me mensajeo para contarme que no lo buscara por ese dia, pues no estaba en su casa ni estaria por el resto de la tarde, me escibio que se habia tenido que trasladar al pueblo vecino para atender a una paciente y que no volveria a su casa hasta despues de las 11 de la noche, que el sabia que yo estaba en una situacion complicada con mi tia y que nos tendriamos que ver hasta dentro de dos dias, pues solo iria a dormir a su casa, recogeria alguna ropa y saldria de nuevo al pueblo vecino antes de las 8 de la mañana.
Ese mensaje me extraño y aun sin quererlo termine preguntandole que pasaba?
El me conto que se trataba de una paciente por la que ya no habia que hacer, que seria hospitalizada en casa y su familia le habia pagado para que instruyera por unos dias a las cuidadoras en que debian hacer, como y cuando para atenderla.
-Cuidate Teo, te voy a extrañar mucho Papi
-Y yo a ti, tu tambien cuidate y nos vemos el jueves
Pensar en que tendria que aguantarme tantos dias sin el me hizo desearlo todavia mas, empece a pensar en que podria hacer para desaparecerme de la casa y verlo antes de que se fuera en la mañana y conclui que me saldria de la casa y me iria a verlo para dejarle bien vaciados los huevos hasta que regresara jaja
Le escribi y le dije que lo iria a ver, que me ayudaria mucho si el pasara a buscarme a la bodega de aquella vez, le asegure que mi tia jamas habia tenido problemas conmigo y que ni cuenta se daria si me salia y volvia en la madrugada, el me pidio que pensara si de verdad era posible pues segun sus mensajes no queria que tuviera problemas, pero yo estaba seguro de lo que queria y no di mi brazo a torcer, llego la noche y despues de que la casa se sumio en la oscuridad y el silencio y de que mi tia se hubiera metido en su cuarto y roncara como siempre me levante de la cama y me escabulli hasta la puerta principal y ya con la llave de la casa en la mano y afuera del llavero para evitar el tintineo me fui con rumbo a la bodega, las calles estaban casi vacias, el ladrar de los perros y sus aullidos lejanos llenaban los caminos pero a lo lejos veia las luces de la bodega encendidas, llegue y encendi una maquina de monedas para ponerme a jugar en lo que el llegaba por mi y despues de unos diez minutos vi de reojo unas luces pasar de altas a bajas, era el, estaba dentro de su auto y con la mano abierta y una sonrisa tenue me llamo desde la cabina.
Llegamos a su casa y el se fue directo a la cocina para beber agua y comerse en apenas unas cuantas mordidas un paquete entero de galletas, apenas y habiamos cruzado palabras en el carro y se notaba hambriento y sediento, pero mas alla de eso, estaba muy decaido y a pesar de que trataba de mostrarse amigable y sonriente era obvio que por dentro cargaba una tristeza que yo no lograba entender del todo.
Despues de todo era un medico, con varios años de experiencia en ver nacer y ver morir a las personas de muchas formas distintas, formas que quizas nisiquiera podia imaginarme, entonces porque la inminente partida de esta señora le afectaba tanto, le conte sobre mi dia y el fue directo a preguntarme como habia estado mi salida de la casa de mi tia y primas, si habia posibilidad de que me hubieran notado partir o si alguien sabia que estaba fuera de mi cuarto, le conteste todo y me fui acercando cada vez mas al tema hasta que de lleno le pregunte.
-Teo, que paso? porque estas tan apagado?
El me miro y despues de sostenerme pensativo la mirada un rato desde el otro lado de la mesa en la que estabamos en su sala, movio su mirada a la tabla y me contesto.
-La mujer que estoy atendiendo tiene el mismo padecimiento que mi hermana menor, esta pasando por los mismos sintomas que mi hermana cuando llego al final de su vida,el mismo dolor, miedo y sufrimiento de una enfermedd que no se la lleva pero tampoco le permite vivir ni una hora de su vida en paz, atenderla me trajo muchos recuerdos de mi hermana y no puedo evitar sentirme de nuevo impotente, inutil y solo.
-Que edad tenia tu hermana?
Le pregunte con un leve temor, pues sabia que estaba pisando terreno desconocido, jamas le habia permitido ahondar en mi vida y las veces que alguno de los dos lo habia intentado al tantear la situacion cada uno habiamos volteado el tema a cualquier otra cosa para evadir nuestras respectivas historias, aunque jamas habia sucedido antes sabia que podia enfadarse o dejar de contestarme y tan mal como se veia pedirme que saliera de su casa pues no tenia animos de atenderme, pero Teo no lo hizo, se levanto de la mesa en pesado silencio y fue a uno de los cajones de su cuarto, saco una caja de madera y me tendio una foto.
-Mi hermana tenia 15 años cuando se fue,
En la imagen aparecia una chica de piel mucho mas oscura que la de Teo, con una sonrisa amplia de blancos dientes un poco chuecos pero deslumbrantes, era gorda, metida en ropa de un tamaño mucho mayor a su cuerpo y de varon, Me tendio otra foto y en esta aparecia con ropa de mujer y mucho mas delgada, se notaba debil pero aun sonriendole a la camara, sentados lado a lado hermano y hermana miraban a la camara mientras un Teo de alrededor de 20 años de edad le plantaba un beso en la mejilla, sonriente y picaro.
Durante la charla me conto como habia sido su vida juntos, que ambos eran hijos de una mujer casi analfabeta que habia sido y hasta la fecha era la casa chica de su padre, de el no me mostro ninguna fotografia pero por la descripcion que me dio era un hombre de piel blanca y no mas de 1.70 de estatura, latino como la mayoria de los que habitan mi pais, ni español ni indigena, una mezcla de ambos, era el supervisor de area de una maquiladora en la que su madre laboro de jovencita y de ahi se juntaron y los tuvieron a ellos dos, la conversacion se alargo un tanto mas y cuando note que en lugar de ayudar estaba afectandole mas todavia le sugeri que nos metieramos juntos a bañar.
El noto que lo hice porque no queria que se pusiera aun mas triste y cansado pero sonriente me contesto
-Se que me tengo que bañar, pero la verdad no quiero, estoy muerto, de seguro apesto horrible no?
-Para nada, si hueles fuerte, pero no me parece peste, de hecho me gusta
-Que mentiroso! jaja!
Fue lo que me dijo, por primera vez con una sonrisa natural y franca
-De veras!
Le decia yo riendome tambien y algo indignado de que por primera vez me me llamara mentiroso por algo que de hecho era la pura verdad
-Te he visto! cada vez que hemos quedado llenos de sudor y el mio te empapa, te metes al baño, te das un regaderazo express o minimo te limpias con agua y papel, te pones desodorante y te hueles muy bien antes de irte para tu casa, no tienes porque mentirme, yo se que huelo fuerte, por mas que me aseo y uso lociones y antitranspirantes, al final rex0na siempre me abandona! jaja!
-Teo, entonces has estado resentido todo este tiempo? pues claro que me limpio la piel pero no es porque me de asco el olor, es porque en casa de mis familiares llamaria mucho la atencion si de pronto llego oliendo tan diferente a el olor que me conocen.
-Jajaja, Mentiroso!
Me dijo con una carcajada y se levanto de la mesa para someterme y exponerme al olor de su piel en un abrazo, no fue dificil para el atraparme, corri un poco por seguirle el juego, pero en menos de cinco zancadas ya me tenia aprisionado y sujeto contra su cuerpo, sus manos me tomaban duro y sin contemplaciones, la derecha por la parte trasera del cuello y la izquierada me jalaban por la espalda baja para restregarse contra mi,
Estabamos de pie frente al sillon, la TV que habiamos dejado encendida hablaba sola sobre las maravillas de un producto para desmanchar la ropa y las tapicerias, nuestros ojos se clavaron mutuamente y le empece a abrir la camisa de vestir que llevaba por los botones de arriba, llevaba una playera sin mangas debajo y la selva de vello oscuro y tan rizado como trocitos de algodoncitos aparecio coronando su pecho tan varonil y masculino, el me ayudo a quitarse la camisa de vestir por las mangas y en un movimiento rapido se quito la camiseta sin mangas, el aroma de su sudor y los restos de su perfume llenaron la habitacion, el aire se sentia tibio y un poco sofocante, seguiamos mirandonos mutuamente y despues de un pico en sus labios pegue por completo mi rostro a el centro de su pecho, el aroma era embriagador, me hacia pensar en lo hermoso que era estar sometido a un macho asi, ser el cuerpo en el que ensartaba su verga dura y gruesa, caliente e insaciable, esa verga que no tenia contemplaciones a la hora de amar, que apenas entraba por el glande y en un movimiento rapido se te metia hasta las tripas, esas poderosas nalgas que en desesperado vaiven me confirmaban con cada embestida que ese era mi lugar en el mundo, servirle de hembra a un macho tan tosco y bruto como era mi Teo, Si mio, porque al menos en esos momentos de agonia, escozor y placer ambos nos perteneciamos unicamente el uno al otro, en esos momentos no habia Enrique ni pasado solo nuestros cuerpos retozando juntos.
Bese su pecho velludo, oli profundo y sin pausas, el solo suspiraba ansioso por penetrarme ahi mismo, en mi mente paso la idea de que de un momento a otro me diera la vuelta, me arrojara al sillon de rodillas y asi con todo y pantalon aun a la altura de sus rodillas me ensartara la verga negra y cabezona en mi culo, que me hiciera llorar y gemir de placer y ese leve dolor que aun sentia al principio cuando me metia su verga, que me preñara sin condon y me hiciera completamente suyo por fin, que me dejara marcado con el calor de su semen depositandose en mi culo y las nalgas rasguñadas y mordiditas por esa boca de artesano que se cargaba, no lo hizo, siguio quieto, en su pantalon se notaba su verga desesperada por abandonar la prision en que se habia convertido su slip, abri el pantalon y el cinto mientras besaba y lamia su pecho, el acariciaba mis hombros y cabeza, cuando lo abri por completo, baje el pantalon y el slip al mismo tiempo al piso y me puse de rodillas a la altura de su verga que cargada de precum me apuntaba a la cara, nunca lo habia hecho pero si lo habia visto en el porno y queria probar, con mis manos tome sus poderosas piernas y acercandome puse su verga a lado de mi cara, limpie el precum con mis dedos y despues de limpiarme esos dedos en el pantalon que el aun tenia puesto empece a golpearme la cara con su verga dura y caliente, ese mastil estaba completamente erecto, casi rozando el ombligo de su dueño, asi que no era facil moverlo a los lados para que me golpeara,el me miraba divertido, estaba orgulloso y emocionado, puse su glande cerca de mi boca y ante su mirada atenta fingi que me la meteria en la boca, le lance el calor de mi exhalacion y Teo me miraba ansioso por verme engullir ese glande moradito y mamarselo con desesperacion, sin embargo como les cuento yo jamas lo habia hecho y no tenia planes de tener nada sin proteccion con el.
Aunque llevara tanto cogiendome, siempre habia sido con condon y aun tenia muchas dudas en mi cabeza sobre la ETS, pegue mi nariz a sus huevos, olian fuerte a sudor, semen y un poco de orina pero aspire hondo ante su mirada morbosa y complacida, subi mi rostro hasta que mi nariz llego a la altura de su pubis lleno de oscuros vellos largos y muy rizados, su pene seguia sostenido en mi mano que evitaba que el glande me tocara los labios, mi mano estaba cada vez mas mojada de precum que salia lento pero sin pausas de el pene de Teo, con el pulgar le sobaba la cabeza de la verga y jugueteaba su tronco y glande, lo mire a los ojos desde el suelo en el que estaba de rodillas y el de pie y aspire hondo, una, dos, tres, cuatro, cinco, varias veces, el miraba complacido y por fin le dije.
-Ves como no te miento papi?
El sonrio como unica respuesta y ante sus ojos fijos en mi y deseosos de presenciar mas, empece a besarle el pubis, bese con picos sus ingles, pubis, tronco, su pene estaba cada vez mas duro y al final le di un beso en los huevos, levante el pene de Teo y le di un sonoro «mua» en el centro de ambos testiculos, ese fue el final de sus resistencias. Trato de guiar mi cabeza a su glande para que se lo mamara pero la movi a lado contrario para que notara que eso no pensaba hacerlo, al menos no ese dia.
-Ven bonito, ya no aguanto!
me dijo lleno de transpiracion en la cara, sus ojos eran la expresion de la depravacion y la desesperacion, realmente estaba urgido por follarme el culo y yo estaba mas que dispuesto a guardarle su hombria en mi ser.
Me tomo de los hombros y me levanto por las axilas, yo aun estaba vestido pero dure poco tiempo mas asi, me saco la camiseta por encima de la cabeza tan rapido que me dolio el brazo derecho cuando me la jalo sin haberlo sacado de ella, yo al mismo tiempo me habia bajado el pantalon de tela y elastico con todo y calzoncillos de un solo jalon, me habia sacado los zapatos y calcetas con los pies en rapido frenesi y en menos de 10 segundos ambos estabamos completamente desnudos y transpirados besandonos de pie frente al sofa, su mano derecha estaba clavada con la palma hirviente en mi gluteo izquierdo, lo amasaba y estrujaba de una manera deliciosa y con la mano izquierda me jalaba por la parte trasera de la cabeza con el fin de guiarme a sus labios, los besos eran ansiosos, desesperados y rapidos, puse mi mano sobre la suya, me repegue aun mas a el, nuestras erecciones quedaron una a lado de la otra y los vellos de su pubis calaban en el escaso pelo que yo tenia en el mio, comparado a el macho que tenia enfrente, yo lucia lampiño, lleve su mano a mi culo y la movi indicandole a sus dedos que empezaran a urgarlo y lo sintieran, que notara la calidad del tunel carnosos y lubricado que esperaba por su verga, Teo me dejo ir dos dedos de lleno y no pude evitar un
-Ahhhh
-Te gusta perro!?
Siempre era igual, al llegar al limite de su resistencia al deseo Teo se convertia en un Negro malhablado, sucio y tosco…. y eso me fascinaba, era como si saliera con dos tipos a la vez, uno cariñoso, respetuoso y amable al charlar, ver tv o escuchar musica y uno cerdo, depravado y muy caliente cuando me dejaba ir su verga furioso por el culo, mi culo que lo ansiaba follandome y sometiendome.
-Si ya sabes para que preguntas, animal imbecil?
Decidi participar mas en sus juegos en ese preciso momento y Teo sin sorprenderse demasiado, me sonrio sombrio y burlon
-Con que animal? pedazo de mierda!
Me lo dijo sonriendo y en un movimiento rapido me dio una palmada en la cara, no fue una bofetada pero su mano si azoto mi cachete, me giro, me lanzo contra el sofa y me ordeno que me pusiera en cuatro, que parara tambien el culo para el.
-Vas a ver ahorita maldito mocoso, lo que este animal te va a hacer,
Rapido y muy emocionado puse mi culo en pompa, mi verga estaba dura y babeante, me sentia muy excitado y nervioso, podia sentir la humedad mojar mis ingles y abdomen, mis huevos colgaban por el calor, esperaba que hundiera sus dedos en mi, pero en lugar de eso recibi varias nalgadas duras y dolorosas.
-Ayyyyyy
Lo dije sinceramente pues el dolor habia sido inesperado y me habia asustado un poco.
-Eres un mocoso con un hocico muy sucio! Mira que hablarme asi!?
Lo decia en un tono brusco y paternal que me provocaba aun mas, mas nalgadas azotaron mis nalgas, quite el culo de como lo tenia, en pompa y voltee a mirar a Teo, estaba completamente mojado en sudor, su cara, su pecho y su abdomen lucian humedecidos por la transpiracion que se hacia cada vez mas densa en la habitacion, los brillitos del agua resltaban por momentos en el vello de su cuerpo, verlo asi me asusto un poco y Teo lo noto pues su cara se ilumino aun mas al notarme confundido por unos segundos, pero crei lo mejor era continuar con lo que habia empezado
-Si señor, eso me lo han dicho!, porfavor perdoneme, no se controlar mi hocico
-Al menos lo reconoces muchacho, te puedo perdonar…… pero tiene que ser una disculpa a la medida de lo que dijiste!
-Si señor, porfavor perdoneme.
Me puse de pie rapido y de rodillas frente a el y con mi verga muy endurecida por tanta excitacion (jamas habia jugado un juego de roles, pero me estaba encantando a pesar de que era terreno inexplorado) le rogue que me perdonara.
-Porfavor Don Teo disculpeme, fui un idiota
Se lo dije con la mirada en sus pies y el se inclino de inmediato para verme a la cara, sus ojos estaban llenos de ansias, me levanto la barbilla y volvio a ponerse erguido, ahora mas que antes y me lanzo una escupida que me cayo en el pecho, eso contrario a lo que crei al ver porno en otros tiempos me gusto y su voz resono autoritaria en la habitacion.
-Vas a decir lo que yo te diga, es la unica manera en que podria perdonarte
-Si Don Teo digamelo y yo lo dire.
Teo se invento un discurso en el que le pedi perdon por ser tan estupido, le decia que aun era un niño idiota y que no merecia estar con alguien como el, que estaba deseoso de crecer y que necesitaba que me enseñara lo que era que me follara un verdadero rabo de macho.
Asi lo hice, le dije todo lo que el me pidio y ansioso me odeno que me pusiera en cuatro en el sillon, pues «me iba a cumplir mi deseo»
Apenas estuve de rodillas sobre el sillon senti el cuerpo de Teo subir ansioso, se abalanzo sobre mi cuando aun no me colocaba en pocision y de manera ruda me tiro con el pecho abrazando un cojin abultado, me levanto el culo, se calzo un condon mientras me ordenaba que me pusiera con las piernas bien abiertas para recibirlo como se debia y me enterro el glande en el culo, ese dolor aparecio como un relampago en mi interior y despues de poner mas lubricante que salio a borbotones ante el apreton duro de Teo a la botella, el resto de su verga se enterro en mi, me dolia un poco pero el vaiven de Teo era rapido, urguido y profundo, sentia su verga inundar mi culo, gemi, puje y Teo me cabalgaba la colita de una manera genial.
-Don Teo te va a ayudar mocoos, el dia de hoy aprenderas bien a usar esto que te cargas entre las nalgas.
Me lo dijo furioso y sudoroso, una tanda de nalgadas duras azotaron mi trasero enrojecido, su piel dejaba caer gotas grandes de sudor en mi cuerpo y el sofa rechinaba en cada embestida, el vello de su pubis y piernas picaba en mis nalgas como de costumbre a gran velocidad esta vez, mi nariz ya habia perdido la sensibilidad a su olor y el aroma de la habitacion cada vez me parecia mas comun, yo mismo estaba bañado en sudor suyo y mio, me sentia caliente muy caliente, sudoroso y desesperado porque esa verga se hundiera aun mas rapido en mi culo, queria venirme ya, me urguia alcanzar mi orgasmo, queria venirme y que Teo me cogiera por mas tiempo para que pudiera venirme todas las veces posibles con el y su verga enorme en mi interior, al poco rato mis cintura se movia tambien de adelante hacia atras al encuentro de su verga, y de un momento a otro lo senti.
La chispa de mi orgasmo empezo a despuntar y Teo sintio como mi culo empezo a tratar de contraerse solo ante el inminente climax.
-Ya te vas a correr tan pronto? me lo dijo burlon
-Si don Teo, Me quiero correr, metamelo mas duro DonTeo!
No me contesto pero sus caderas se apresurarron a aumentar el ritmo de las embestidas ahora mas ruidosas, sus testiculos pegaban duro en mi perineo provocando un sonido como de aplauso ansioso y demente y casi se azotaban con los mios por momentos, empece a gemir y pujar para que mi culo se contrayera sobre su verga y se acercara mas mi orgasmo.
-Ya viene Don Teo, si asi! folleme la cola asi!
Mi mano masturbaba mi pene ansiosa con mi propia saliva y mi ano perdio el control al llegarme el orgasmo, dejo de ser un tunel estable y carnoso para empezar a contraerse violento sobre el pene de Teo, el bajo un poco la velocidad pero no dejo de cogerme, a medida que el orgasmo desaparecia y yo recuperaba el control sobre mi voz y respiracion, su verga parecia aumentar cada vez un poco mas la velocidad de sus embestidas contra mis nalgas, en pocos minutos el bombeo de nuevo era violento y denso contra mi culo, me sentia muy incomodo, incapaz de seguir pero puse de mi parte jaja
Literalmente, me arroje de pecho sobre el cojin y a pesar de que sentia una gran necesidad de cerrar las piernas y sacar su pene de mi interior, cerre los ojos y mantuve mi culo en pompa para que mi macho saciara su hambre de sexo, senti como su pene empezo a contraerse despues de unos minutos, yo estaba sudoroso, con los ojos cerrados y completamente ausente, pensando en nada, solo sintiendo el recorrer de su verga en mi culito que dilatado disfrutaba de las arremetidas de su macho, empece a bombear de nuevo, para que se corriera y despues de unas cuantas nalgadas y unas profundas embestidas que me hicieron sentir dolor al ir demasiado adentro senti como depositaba en el condon los chorros calientitos de lefa.
-Aahhhh
Permanecimos en silencio y sudorosos un momento, yo con las piernas muy abiertas, los pies apoyados uno en el respaldo del sofa y otro en el asiento, con el culo abierto y unido a el miembro de Teo y el erguido sobre el sillon de rodillas, unos segundos despues se dejo caer encima de mi espalda y se quedo duro dentro de mi culo abrazandome desde atras, nos acomodamos en el sofa y quedamos de lado, puso su cabeza a lado de la mia mientras suspiraba, su verga seguia muy dura dentro de mi y ahora ambos mirabamos en silencio la tv, se estaba promocionando un juego de trastes para cocina y de un momento a otro asi cubiertos en sudor Teo me tomo por la mejilla derecha y jalo mi rostro un poco hacia atras para darme un beso, nos besamos un buen rato, su verga se resistia a perder la dureza y echando mi mano derecha hacia atras tome su miembro por la base, presione alrededor y me lo saque del culo, el condon estaba lleno de lefa, cuando salio por completo de entre mis nalgas enrojecidas y adoloridas me puse de pie y busque otro condon, lubricante y papel de baño, Teo ahora estaba tumbado boca arriba con la verga negra y cabezona que tanto me gustaba forrada en el preservativo lleno de semen que se salia un poco por abajo a la altura de su tronco, se limpiaba el sudor sin exito de la cara y se frotaba los ojos, lucia cansado sudoroso pero muy satisfecho, me subi al sofa con mi culo chorreando lubricante.
-Hicimos un desastre Don Teo.
Se lo dije al ofrecerle un trozo grande de papel de baño para que pudiera secarse el sudor de la cara, con tono de burla y ambos reimos
Me subi con las piernas abiertas y con el ano tocando la tela del sofa, tome mucho rollo, le limpie el tronco, tome el condon por la base y haciendo una donita con mis dedos jale la lefa hacia arriba, saque su pene del condon, lo anude y le empece a limpiar el pene con crema, el pubis estaba lleno de sudor y lefa, lo limpie y al comprobar que la ereccion no se bajaba, puse un condon sobre su glande ante su mirada travieza, se lo coloque hasta la base y lanzando todo al otro lado de la sala me puse de nuevo de cucharita a su lado, termine de vaciar el bote de lubricante y me empape el culo.
-Me ayudas?
Le dije coqueto y necesitado
Teo empezo a meter sus dedos dentro de mi culito para que el lubricante me llegara a lo mas hondo posible, me puse en pocision y el de inmediato me volvio a hundir su verga en el ano, esta vez el sexo fue lento, suave y lleno de caricias suyas en mi pecho y abdomen, sus dedos prensaban con ternura mis tetillas, sus manos se posaban en mi cintura o estomago, era un sexo dulce y amoroso, nuestro orgasmo llego de pronto, senti su verga latir sin ritmo y mientras me jalaba la verga me entregue a la sensacion de ser cogido por el, gemimos juntos y de nuevo senti como el semen contenido en sus huevotes ahora mas vacios se depositaba en el condon, nosquedamos de nuevo en silencio abrazados y con su verga en mi culo, la habitacion era muy sofocante y el calor de nuestras pieles embriagador, cuando por fin perdio la ereccion, me gire y lo abrace, puso mi cabeza contra su hombro y me empezo a acariciar como solo el hacia, sus manos recorrieron mi espalda, mi cabeza y orejas, por momentos me tomaba de la barbilla para plantarme un pico y despues de volver a colocarme en pocision de abrazo seguia masajeandome el cuerpo.
Nos quedamos cabeceando por un rato, nuestras pieles desnudas y calientes nos hicieron caer en una siesta y ya pasaba de las dos
de la mañana cuando nos levantamos para tomar un baño, Pues en apenas cuatro horas Teo tendria que irse a ver a su paciente y yo a casa de mi tia, asi desnudos como estabamos nos levantamos del sofa, nos fuimos juntos a la regadera y despues de verificar que el agua caliente funcionaba entramos en ella para tomar un baño, tuve por primera vez el placer de lavarle el pecho, el torso, las axillas y la espalda, tambien lave su pubis y entre risas le jale un poco el pene al enjabonarselo, cuando quize enjabonar sus nalgas el me lo impidio riendo y señalando mi verga a medio parar.
-No gracias, no vayas a desconocer
Ambos reimos y ante mis ojos se enjabono por si mismo, le aclare el cabello con el flujo de agua de la regadera y masajee su cuerpo para quitarle los restos de jabon, no habia lugar a dudas Teo era un macho hermoso por donde lo viera, la manera en que sus musculos esbeltos pero fornidos se contraian al tallarse el cabello o los hombros me parecian dignos de una maravilla, su piel mulata me parecia aun mas linda que antes, tan tersa, firme y lustrosa, ya habiamos terminado con el cuerpo de el y crei se saldria para secarse y vestirse, me di la vuelta para tomar un jabon del estante del baño pero cuando volvi a la regadera el seguia ahi, desnudo, con el pene a medio parar igual que yo y me quito con suavidad el envase de las manos, me dio un beso en los labios y empezo a enjabonar mis cabellos, yo me deje querer, sus manos eran muy grandes y toscas, pero me tocaba con cuidado y suavidad, lavo mi cabeza, mi pecho y mi pene y ano, suavemente toco mis nalgas y las froto, me aclaro el jabon y salimos juntos del baño, nos secamos bien el cuerpo sin decir nada, solo mirandonos, ya teniamos de nuevo erectos los miembros, mi culo estaba adolorido pero estaba muy excitado y dispuesto a tener tanto sexo con Teo como el quisiera, De nuevo sentia que le pertenecia a alguien y que ese alguien disfrutaba de mi compañia, por un momento el darme cuenta de eso me asusto pues recorde que Enrique aun decia que me esperaba, pero lo aleje rapido de mi mente.
Lo importante era esa noche, que frente a mi tenia a un hombre hermoso, vigoroso y dulce que ademas me deseaba y sentia cariño por mi, que deseaba satisfacerme tanto como yo a el, que era capaz de hacerme sentir tan querido como me sentia en ese momento, no debia pensar en nada mas.
Teo me presto una pijama suya que me quedo enorme y nos acostamos en su cama, estabamos muy cansados los parpados se nos cerraban solos, teo me abrazo por detras como enrique solia hacerlo y me quede dormido en sus brazos, el olor de su piel se mezclaba con el aroma a shampoo y jabon, me dio mucha paz, sentir su cuerpo tan robusto y atletico abrazarme contra el, Teo se acomodo de boca arriba, me atrajo hacia el para que me acostara sobre su pecho en el lado derecho de la cama y nos quedamos dormidos
Al dia siguiente, con la total claridad de la calle colandose por la ventana me desperte y de inmediato cai en cuenta de lo tarde que era, mire su reloj y pasaba de las diez de la mañana.
-Teo! Teo! TEO!
tuve que gritarle para que despertara por fin, El abrio los ojos que estaban muy rosados por lo poco que habia dormido comparado con lo que su cuerpo necesitaba despues de tantas horas despierto, me miro confundido y pasaba sus ojos de mi cara a las paredes de su habitacion
-Pasa de las diez!
-Que!?
Me lo grito sobresaltado.
-No te pases de verga!
Se levanto de la cama de un salto y empezo a urgar en sus cajones para buscar su ropa, pantalon de vestir, calcetas, slip, camiseta y camisa, la iba aventando en la cama y asi en pelotas pasando de un cajon a otro con su verga y huevos moviendose de aca para alla maldecia a su suerte por ser tan descuidado y haberse olvidado de poner la alarma
Yo lo veia desde la cama sentado y con la cabeza recargada en su cabecera, con la pijama enorme casi saliendose de mi cintura debajo de la cobija, esa imagen hasta el dia de hoy me inunda el pensamiento de manera sorpresiva y me saca una sonrisa, Teo era todo un macho, alto, bien parecido, velludo, fornido, bien dotado y varonil, por un momento pense en lo feliz que seria si pudiera quedarme con un hombre como el de por vida, alguien de quien cuidar y que me cuidara, antes pensaba que ese podia ser Enrique, las cosas parecian insinuar que eso no pasaria nunca y Teo aunque era todo lo que me gustaria tener tampoco seria mio, debia ser realista, nadie se quedaba a mi lado.
Nadie me mantenia a su lado, y probablemeente era porque no valia la pena, me entristeci de golpe, note que Teo me miro de pronto y se impacto al verme con los ojos llorosos, al encontrar sus ojos con los mios, me senti el mas estupido de lo tipos, le sonrei de inmediato y fingi que nada pasaba, empece a bostezar para fingir que mis ojos llorosos se debian al sueño y su mirada no dejaba de buscar la mia, yo estaba muy nervioso.
Por eso nadie se quedaba a mi lado, Porque era un verdadero estupido, una molestia, un blandengue lloron! segui tratando de fingir que estaba ante una marejada de bostezos incontrolables que me hacian llorar los ojos, Teo se puso unos calzoncillos frente a mi, vi como se acomodo los huevos y la verga dentro del slip y se empezo a colocar los calcetines, me habia olvidado de mi tia! para esta hora ya estaria saliendo de la casa despues de desayunar y seguramente ya habria entrado a mi cuarto con la llave que tenia y habia descubierto mi cama destendida pero vacia.
Me levante de un salto igual que Teo que me miraba todavia curioso y con duda, tome mi ropa, mis pantalones, slip, calcetas y zapatos seguian hechos bola en el suelo de la sala, mire el sofa mientras me vestia y no pude evitar sonreir al ver lo humedecido que se notaba aun y recordar lo rico que me habia follado Teo apenas hace unas horas en el, Teo paso a la cocina, metio comida en una bolsa y se despidio de mi en la puerta, yo un no me anudaba los zapatos pero el me dijo en el marco de la puerta antes de cerrarla.
-Porfavor cierras!, checa las ventanas, apaga el boiler y revisa la estufa, a y pon el seguro, nos vemos amor!
La puerta se cerro muy rapido y enseguida se oyo el motor del auto arrancar, se fue en un dos por tres, me quede anudandome los zapatos con duda, de verdad habia oido bien? Teo me habia dicho Amor? o era solo que mi mente somnolienta y confundida oia lo que queria oir?
comos igue