6) Mi Primo Enrique con 15 y yo con 10
-La tension en tu culo me dice que quieres venirte como una perra, quieres estrangularme la verga con el ano y quieres hacer que yo también me venga y te llene por dentro de lefa de macho! no es asi? Otra bofetada me atraveso la cara, su pelvis me aplastaba por completo las nalgas contra la cama.
El auto siguio su camino por veinte minutos mas a travez de la carretera,
de un momento a otro note que nos estabamos acercando a un hotel para
viajeros que van de paso, mire a Teo y el me sonrio picaro y feliz, de golpe
me reacomode en el asiento, ansioso por al fin recibir el trato de putita
que mi macho me habia quedado a deber despues de la mamada que le di,
y en cuestion de segundos pase de la frustracion a la alegria, el auto se
desvio en la entrada del hotel y nos internamos en un enorme
estacionamiento con anuncios que señalaban en letras enormes el
numero de cada una de las construcciones y al centro una habitacion de
menos de un cuarto del tamaño de la «cabaña» mas pequeña que indicaba
con un enorme letrero la palabra «recepcion».
El establecimiento estaba construido para que el tramite de renta se
hiciera desde el coche de los huespedes, tal como si se tratara de una
caseta de cobro carretero, Teo acerco el auto a la ventana abierta de mas
de metro y medio por metro y medio y de inmediato al borde se acerco un
hombre mayor, se trataba de un anciano que al parecer contaba con mas
de 70 años, el señor en plan robotico se presento con Teo, le recito de
memoria los costos por hora o dia de cada uno de los dos modelos de
construccion que tenian en el Motel, los costos de el servicio de agua y
aire acondicionado y apenas acabo le comento cuales eran las «cabañas»
que estaban disponibles, Teo no pidio la sencilla y supuse se debia a que
en las sencillas habia que estacionar el auto afuera de dicha construccion,
mientras que el tipo de «cabaña» que eligio tenia la ventaja de que podias
entrar a la cochera con el auto, bajarte de el y mantenerte fuera de la vista
de cualquiera, se hizo el pago y el hombre con la mejor mascara de
cortesia e interes que quizo usar le dio las gracias y le deseo que
disfrutara su estadia en el local.
Apenas bajamos de el auto y Teo hubo cerrado la cortina metalica y muy
ruidosa, me avalance sobre el, puse ambas manos detras de su nuca y
empujando un poco su cabeza para indicarle que se inclinara a mi altura
empece a besarlo con desesperacion, su saliva aun guardaba un leve
sabor a semen y mientras el posaba sus pesadas manos en mi trasero yo
empece con rapidez a abrir su pantalon, en cuestion de segundos sus
pantalones habian caido al suelo por el peso de el cituron y mis manos
sobaban su verga y trasero, mi mano izquierda acariciaba sus nalgas y la
derecha echaba de atras hacia adelante una y otra vez con suavidad su
prepucio, mi pulgar lo acariciaba abriendose paso por momentos a travez
de esa pielecilla que cubria su glande, sus calzoncillos ya estaban a la
altura de sus rodillas y en un movimiento rapido jalo y empujo mis shorts
de elastico hacia abajo, su mano se abrio paso a travez de mis nalgas
ansisosas y calientitas y trato de meterme el dedo medio en el culo, hice
un gemido, pues estaba muy seco, no habia lubricante alguno en todo mi
perineo y en un movimiento rapido se alejo de mi para que dejara de
comerle la boca, engullo el dedo indice con rapidez atraves de sus labios
y de inmediato me acurruco de frente a el, con ambas manos masajeo mi
trasero, yo me sentia muy ansioso y sus manos pesadas y enormes me
estujaron las nalgas, me planto varias nalgadas duras con ellas y con
rapidez se encargo de abririmelas para clavar lento pero sin vacilar su
dedo indice el culo, estuvimos asi por unos minutos, acurrucados uno al
lado del otro, yo masturbando su verga con mi mano derecha y con mi
izquierda alternando acariciando sus pectorales, brazos o torso, el metia
y sacaba con un movimiento pesado el indice de mi recto y me aliviaba
aunque fuese solo en parte la ansiedad por ser poseido por el, su mano
izquierda cada tanto se ensañaba con mi culo y me plantaba manotazos
mas que nalgadas que me hacian quejar de pronto se separo de mi, se
empezo a levantar los pantalones y se acomodo los slips, abrocho el boton
a la altura de su cintura y me dijo que lo siguiera dentro de la «casa»
Segui su ejemplo, me alce la ropa para poder caminar y entre en la
habitacion, era un lugar humilde, pero que cumplia con el precio, era una
cuarto cuadrado, en el centro habia una mesita de cafe y alrededor de
esta habian acomodado un pequeño refrigerador, una television frente a
una cama matrimonial y en lo alto de la pared sobre la que descansaba el
televisor tambien habia una caja de aire acondicionado, el clima dentro se
sentia caliente, pero tan pronto como Teo activo el aire acondicionado se
empezo a refrescar, todo lucia muy aseado y bien tratado, Teo comenzo a
desvestirse y a apilar la ropa en la mesa de cafe en el centro de la
habitacion, yo hice lo mismo y ya desnudos y juntos nos fuimos a la cama.
en la cama coloque la mochila en la que llevaba el lubricante y los
condones que habia traido para la ocasion, empezamos a besarnos y Teo
continuo preparando mi ano para recibirlo, me pidio que me pusiera en
cuatro patas con las piernas abiertas sobre la cama y por primera vez
senti su lengua urgar en mi ano, el toque de su lengua humeda, caliente y
carnosa en mis pliegues anales me fascino, era una practica que a pesar
de haber visto muchas veces en el porno Enrique, mi primo, jamas me
habia hecho, fueron unos besos, lenguetazos y escupitajos en el culo que
a pesar de durar no mas de 10 minutos jamas olvidare, con mi mano
derecha me masturbaba el pene endurecido y tan rigido que por
momentos me provocaba dolor en la base del pubis, con la mano izquierda
me ayudaba para permanecer en la cama ofreciendole mi culo a Teo, el
momento llego y senti como la cama se movio al recibir las rodillas de Teo
al montarse en ella, se acerco con la pelvis hacia mis nalgas y con la
respiracion entrecortada las azoto con varias nalgadas, su mano derecha
pesada azotaba mis nalgas con fuerza y brusquedad, yo solo gemia y
pujaba por momentos debido al dolor, mi verga seguia muy dura, me
levante de la pocision en 4 en la que estaba, el cuerpo de Teo lucia mucho
mas imponente que la ultima vez que follamos en su casa, su pecho y
pubis estaban mucho mas peludos y asperos, su verga lucia poderosa y
humeda debido a el precum que escurria de ella en un hilito transparente
que humedecia las sabanas de la cama.
Ante su mirada tosca y por momentos escalofriante, me meti dos dedos de
la mano derecha en la boca, los puse en mi culo y me los introduje
completos, empece a moverlos de adentro hacia afuera con un ritmo lento
y firme y sin pausas, gemi suavemente, sabia que eso le gustaba, Teo me
miraba complacido y burlon, ese macho de ebano, tosco y bruto en el que
se transformaba al follarme se habia vuelto a hacer presente frente a mi,
el calmado, sensato y tierno Doctor Teo que me habia declinado la idea de
cogerme a orillas de la carretera hace no mas de dos horas se habia ido y
no podria haberlo hecho en mejor momento, se avalanzo sobre mi con
brusquedad y rapidez, senti como su verga se repego con todo y
testiculos velludos a mis nalgas, jalo mi mano derecha por el antebrazo y
me lo torcio con fuerza, haciendome una llave, pego su cara a la mia.
Su manaza izquierda me aprisonaba el cuello asfixiandome levemente y
me obligo a quedar erguido de rodillas sobre la cama y expuesto ante el y
su atletica hombria, no podia moverme y el brazo y el cuello me dolian,
pero me sentia pleno al saberme dominado como una hembra ante un
macho del calibre de Teo. Despues de todo, eso era lo que en el fondo era
y lo que sin saberlo desde aquella primera vez que tuve la verga de mi
primo Enrique en las profundidades de mi culo, soñaba con ser de por
vida, ser en el lecho la hembra de un macho tosco, bruto y varonil que me
sometiera, me empotrara y me hiciera correrme de gozo, en momentos
como esos era cuando no quedaba lugar en el que escoder mi verdadero
ser, si,queria ser suyo, queria que follara mi culo como si fuera el coño
mas deseable de la region, con rapidez, con sus pesados miembros
aprisionando los mios y el peso de su robusto pubis embistiendo mis
caderas, que me preñara sin condon esta vez y en adelante.
Despues de tantas precauciones puede sonar a una mala decision tomada
a la ligera, pero no, la calentura no me hacia pensar con sesgo, no habia
dudas, ahora sabia que eso era lo que deseaba, ser preñado por la verga
de Teo, este adonis mulato me habia estado follando por meses, y cada
tanto me habia sugerido que ya que nos conociamos y nos eramos
exclusivos «dejaramos» de usar preservativo.
-Porque solo dejas que te folle yo?….. verdad?
Me lo habia preguntado en una ocasion cuando estabamos en su casa
acurrucados y desnudos sobre el sillon de la sala y despues de coger a
nuestras anchas y de el haberse vaciado en un condon dentro de mi culito,
que siempre estaba hambriento de su tronco, su voz me habia sonado con
algo de celos y duda, lo cual era natural ya que casi todo lo que le habia
contado de mi era «editado» o falso.
-Claro que solo dejo que tu me la metas!
se lo dije de una manera comica fingiendo estar ofendido y molesto ante
semejante falta de respeto! jaja.
Pero note que se habia quedado dudoso despues de que por unos
segundos su mirada se perdio en las paredes de la casa, seguia
abrazandome como si yo fuese un cachorro al que protegia del frio, pero
pude ver en ese entonces que mi respuesta no le habia dado la confianza
que deseaba en lo que teniamos, si eramos una relacion exclusiva? o si es
que yo iba por ahi ofreciendole mi culo carnoso a cualquier macho que
estuviera disponible?
Lo tome de la barbilla, le plante un beso que empezo como un pico y se
convirtio en un largo beso de lengua.
-Si, solo tu me follas, hubo alguien antes que tu, y creo que eso es obvio,
pues un virgen no habria demostrado saber hacer lo que hicimos esa
primera vez, pero solo hubo uno antes que tu, desde ese primer dia que
me tomaste como tuyo en tu consultorio yo solo he estado contigo.
Teo me miro a los ojos en todo momento, se que buscaba encontrar en
ellos una rastro de nerviosismo o miedo que me delatara al mentirle, pero
no lo hallo, era la plena verdad, la mas grande y sin editar que le habia
dicho desde el primer dia que lo trate, me sonrio con una mueca tan linda
que me hizo derretirme por dentro por unos segundos y me beso con
ternura y ansias, note de inmediato que mi respuesta y el saber que era
todo cierto lo alegraron mucho, despues de ese beso le agregue..
-Y contigo no necesito a otros…. Eres casi irreal muñeco.
Esto ultimo se lo dije sonriendole picaro y como un gesto de ternura le di
un puñetazo delicado en la mejilla.
Volviendo al momento presente. Teo me tenia sometido de rodillas sobre
la cama, ambos completamente desnudos y con el pene muy erecto,
ansiosos por follar, su mano derecha me tenia aprisionado en una llave
torciendome el antebrazo sobre la espalda y su mano izquierda me jalaba
hacia atras por el cuello obligandome a quedar muy erguido, mis manos
en un gesto de sumision se apoyaban en sus nudillos y el besaba mi cuello,
por momentos con sus dientes me provocaba dolor, podia sentir el tacto
de su piel caliente y sudorosa, su pecho y pubis rizados picaban en mi
espalda y su verga dura y negra estaba por completo apoyada en mis
ancas, era doloroso y placentero por igual, a pesar de las molestias yono
queria que me soltara, de pronto su mano izquierda solto mi cuello de su
poderoso agarre, me tomo por el pectoral derecho con ella y empezo a
susurrarme.
-Pero que es esto?
Me lo decia mientras clavaba la uña de su pulgar en mi pezon, el dolor era
muy molesto pero tambien me gustaba de una manera que no podia
entender del todo.
-Aaahh, aa, aaay
Eran los sonidos que emitia entre el dolor del brazo y su filosa uña en mi
aureola, sin poder contenerme.
-Te estoy lastimando? Me pregunto en un tono de burla y gozo.
No le conteste y de inmediato la mano solto mi pezon para aprisionar mi
cuello con violencia y cortarme un poco el aire.
-Dije que si te estoy lastimando! contesta cuando te hablo puta! pedazo de
mierda!
-Si! me duele.
-Si que?
-Si me duele Don Teo!
De inmediato la mano me solto el cuello y estrujo mi pectoral izquierdo,
esta vez no clavo su uña en el, solo lo amaso con brusquedad.
-Estas cosas no estaban tan carnosas la ultima vez que te vi… como paso?
-Estuve haciendo ejercicios Señor!
La mano derecha solto mi brazo y un resplandor de dolor al volver a su
pocision original me hizo gemir de nuevo, la mano bajo hasta mi vientre,
debajo de mi ombligo y con la palma abierta me empujo hacia atras para
que mis nalgas se restregaran aun mas en su verga endurecida y
babeante.
-Porque?
-Señor?
-Porque hiciste ejercicio? Porque hacerlos crecer justo ahora?
Apenas termino la pregunta y su mano dejo de estar abierta empujando mi
abdomen para cerrarse detras de mi cabezajalandome el cabello por la
parte de atras, el jalon fue duro y dejo mi cuello expuesto a el que regreso
a olisquearlo y lamerlo.
-Porque queria verme mejor para usted.
-Mmmh, no te creo!
Me lo dijo con un tono suave y siniestro que empezo a asustarme un poco,
sus besos se volvieron sonoros picos sobre mi cuello.
-Sabes que creo?
-No, porfavor digame Don Teo.
-Creo que te sentiste solo y al no tenerme por alla para atenderte te fuiste
de puta, empezaste a prepararte para conseguir un macho nuevo, dime es
eso?
Su voz era dulce pero muy tenebrosa, y la fuerza que ejercia al estrujar mi
pectoral y jalarme el cabello iba en aumento.
-No Don Teo, de verdad, lo hice porque queria verme mejor para usted,
queria que cuando volviera al pueblo me encontrara mejor que la ultima
vez que me clavo y se sintiera bienvenido.
-Juramelo.
-Se lo juro don Teo, yo solo tengo ojos para usted!
-Muy bien.. Te creo!, que mas hiciste para darme la bienvenida rey?
La verga de Teo se restregaba contra mis nalgas, pues el hacia un vaiven
que me enloquecia detras de mi, el precum mojaba mi piel y la suya
haciendonos sentir pegajosos y escaldados por momentos.
-Estuve practicando las mamadas con comida, fue asi como le pude dar el
oral en el auto
-Mmmmh, muy bien hecho ese oral debo decirte
Teo cerraba los ojos y oliqueo a profundidad mi cuello.
-Que mas?
-Me rasure para verme mas acicalado para usted, me estuve humectando
la piel para que estuviera mas suave y sedosa y me ejercite con la ilusion
de que le gustara verme mejor.
-Me gusta, me gusta, aprecio todo lo que hiciste rey, por cosas asi es que
te amo.
Me lo dijo de nuevo, me dijo que me amaba y aun en un contexto de
sadismo para mi significaba mucho.
-Me ama?
Le pregunte dudoso.
-Si rey, Te amo.
Su mano derecha me tomo por la mejilla izquierda y me atrajo a sus labios,
me beso dulce y brusco y su fuerte agarre sobre mi pectoral desaparecio
para convertirse en caricias y frotamientos pesados, estaba libre para
moverme a mis anchas, me di la vuelta para quedar frente a frente y
despues de unos besos de lengua, me sente sobre la cama, mis piernas se
abrieron y se acomodaron una acada lado de Teo, el tenia sus ojos fijos en
mi rostro, mi espalda se acomodo sobre la cama y el se apresuro a tomar
un abultado cojin regado a un lado del colchon, lo puso bajo mi espalda
baja y se acerco a mi para besarme de nuevo, mis brazos se cerraron a su
alrededor, sus amplias espaldas estaban transpiradas y ese aroma
bronco de su piel inundo todo el cuarto, asi entre besos y caricias senti
como Teo se fue acomodando, no dejabamos de vernos el uno al otro
mientras nuestros labios seguian sin separarse los unos de los otros, su
abdomen estaba completamente contra mi pubis, su pene contra mis
nalgas, el busco la maleta en la cabecera de la cama en la que yo cargaba
los condones y el lubricante, pero cuando los tuvo en la mano, le quite el
condon de los dedos y lo lance sobre un buro, el me miro y yo le sonrei.
-Ya no lo vamos a necesitar.
una pequeña sonrisa se dibujo en sus labios y despues de llenarme el
culito de lubricante y mandarme dos dedos se puso de nuevo sobre mi,
estaba con los codos apoyados en la cama para no aplastarme con todo
su peso y aun asi el peso de su pelvis sobre mis nalgas de sofocaba un
poco, solte el abrazo que tenia sobre el y sus hombros y con la mano
derecha busque a tientas su pene, lo encontre muy rapido, cerre la mano
entorno a el y con el pulgar tome un hilo grueso de precum, me lo lleve a la
boca y lo chupe, el no me quitaba la vista de encima con esa leve sonrisa
aun dibujada en sus labios, mi mano derecha regreso rapidamente a su
verga, la tome por el tronco y la dirigi directamente a mi ano, ahi el glande
apenas sintio el calor y humedad de la abertura de mi culo entre mis
pliegues anales y se introdujo de manera suave y firme hasta la base.
Habian pasado unos dias, pero no supe a ciencia cierta que tanto añoraba
esa sensacion de ser empalado por la verga negra de ese hermosos
mulato hasta que lo tuve dentro de mi de nuevo, la sensacion era de
plenitud al ser llenado, mis paredes anales estaban luchando por
adaptarse a la presion de una pieza de carne de ese tamaño en su interior,
sentia como unas contracciones pequeñas eran la manera de mi cuerpo
de tratar de rechazar a su grueso invitado, Teo no espero mas que unos
segundos para comenzar a mover sus caderas de manera ritmica de
adelante hacia atras, el vaiven como siempre al principio fue lento y firme
para poco a poco volverse tosco y acelerado, el sudor de su piel caia en
mi cuerpo y ese olor de nuestras transpiraciones mezclado con los
residuos de nuestros perfumes no hacia mas que aumentar mi celo.
Durante todo el sexo no nos habiamos dicho nada, solo nos besabamos,
nos mirabamos y yo gemia al recibir sus fuertes embestidas, el vello de su
cuerpo me provocaba comezon y mientras mi mano izquierda lo tenia
sujeto por la nuca la derecha acariciaba el manojo de pelo rizado y crespo
de su pecho, me sentia relamente feliz, pleno y sometido por igual, de
pronto «esa chispa» se manifesto en mi culo.
Mi prostata y mi ano empezaron a tensionarse, mi orgasmo se acercaba.
-Aahhh, AAhhhh, mas suave Teo!, mas suave mi amor! si sigues asi…..!
PLAXX!
Una sonora palmada azoto mi cara, no me dolio pero si me movio la
cabeza y me desconcerto.
-Que maldito irrespeto el tuyo! como me llamo?
-Perdoneme Don Teo!, Aaah! pero me voy a venir! si sigue asi me voy a
venir!
El ritmo de sus caderas no disminuia, su verga seguia recoriendo de cabo
a rabo mi tunel anal con la misma fuerza y opresion, me esforce por
frenar, la presion de mi culo, aun no me queria venir, deseaba que Teo me
bombeara por mucho tiempo mas, mas que los deliciosos orgasmos que el
me proporcionaba extrañaba tenerlo asi conmigo, abrazado, tosco y
empapando mi piel con su aroma,
-No quieres venirte todavia?
-No don Teo no quiero venirme!
Segui luchando por relajar mis contracciones anales, era una lucha por
frenar lo inevitable, la sensacion de opresion en mi abdomen y culo
aumentaba, sentia mi culo cerrarse entorno a la verga de Teo y el seguia
embistiendome sin freno.
-Eso no es lo que dice tu culo!, sabes lo que me dice este culote
hambriento de semen?
-No se? que le dice?
-La tension en tu culo me dice que quieres venirte como una perra,
quieres extrangularme la verga con el ano y quieres hacer que yo tambien
me venga y te llene por dentro de lefa de macho! no es asi?
Otra bofetada me atraveso la cara, su pelvis me aplastaba por completo
las nalgas contra la cama y mi mano derecha desesperada jalaba de los
vellos de su pecho mientras que la izquierda le arañaba la espalda.
-A si!?
Me lo dijo molesto y las embestidas se hicieron mas y mas profundas, mas
y mas veloces y mi culo aun mas tenso, sentia como ahora ya no sostenia
su cuerpo con los codos, el peso era aun mayor ahora sus antebrazos
eran los que frenaban que me aplastara por completo, sus brazos se
cerraron en torno a mi cabeza me besaba con violencia y sin tientos, sus
dientes mordian mis labios y los jalaban levemente.
-Aaaah, Papasito porfavor! ya no me puedo aguantar! sacalo!
Me retorcia en la cama pero sus brazos me mantenian preso ante su
asfixiante bombeo
-No! Quiero que te corras, para eso te arreglaste para mi no? para que te
hiciera correrte como la puta que eres! no? Mi puta! no es asi? bueno pues
deseo concedido bonito, eres mi puta! y mi puta se corre cuando a mi me
sale de los huevos!
Las embestidas aceleraron y deje de luchar, mi tunel anal se relajo y en
menos de diez segundos mi orgasmo exploto, por un momento mi cuerpo
se quedo en ese colchon mientras mi ser era lanzado hacia arriba, mi
verga libero chorro tras chorro de lefa que se pego en el abdomen y pecho
de Teo, sentia la respiracion y el pulso acelerados, la cabeza aturdida, un
calor sofocante bajo el cuerpo de Teo a comparacion de lo fresco de la
habitacion, las contracciones de mi culito hicieron mella en el rabo de mi
semental que empezo a bufar.
-Ya viene, uffff! ya viene!
Teo hizo el intento de salir de mi, lo supe por la manera en la que solto mi
cabeza de su abrazo y trato de levantarse de rodillas, supe que queria
venirse en mi cara, pero no pensaba hacerlo, ya le habia cumplido un
deseo a el, hacerle un oral digno de su corrida e incluso teniendo su lefa
en mi boca, ahora me tocaba a mi, deseaba sentir su eyaculacion inundar
mi culo, fuera poco o mucho despues de la mamada que le habia dado en
el auto antes de llegar a esta «cabañita» pero lo queria dentro mio, volver
a sentir como la lefa de un hombre se precipitaba lentamente hacia afuera
de mi culo era una de las sensaciones mas ricas y que mas extrañaba
desde que mi primo Enrique habia emigrado.
-Porfavor Don Teo, vengase adentro, quiero su lefa en mi culo, porfavor
Don Teo marqueme!
Teo me miro y sonrio de oreja a oreja.
-Muy bien! a mi putita lo que pida!
Acelero sus embestidas, despues del orgasmo mi ano habia quedado muy
tenso y sensible, pero a pesar de que el impulso que sentia era de tratar
de cerrar las piernas me obligue a abrirlas y darle via libre a mi macho
para que me preñara.
-Ooooooh!
Fue lo que oi en el preciso momento en el que la verga de Teo se contrajo
violentamente en mi interior, el paro sus embestidas y la verga siguio
lanzando chorros de lefa en mi con cada contraccion que daba, senti una
sensacion de calor dentro y supe que lo habia logrado, por fin tenia la lefa
de mi mulato en el culo, saboree la sensacion y acaricie las espaldas de
mi tembloroso atleta.
Dirigi mi mirada hacia Teo que tenso terminaba por despedir su orgasmo,
con su cabeza erguida y por encima de la mia por varios centimetros, el
orgasmo finalizo y el cariñosamente se acurruco encima de mi, quite mis
talones de la parte trasera de sus pantorillas a las que me habia fijado
para evitar que se alejara demasiado de mi, solte el nudo en el que se
habian convertido mis manos detras de su cintura con el mismo objetivo y
ya relajados nos abrazamos de nuevo, su cuerpo encima del mi, su verga
poco a poco perdiendo la dureza dentro de mi culo, si ese era mi lugar, y
estaba feliz de saberlo con tanta certeza.
El Teo amoroso habia vuelto, me lleno el rostro y los labios de besos, me
dijo que le habia encantado y cohibido me pregunto si me habia lastimado.
-No te preocupes, aunque a veces me sacas de onda, el dia que me hagas
daño creeme que no me quedare callado, todo lo que me hiciste me gusto
y no me molesto.
El rostro de Teo estaba bañado en sudor al igual que su cuerpo, se
acurruco encima de mi y volvi a poner mis piernas en alto para abrazarlo
con ellas por la cintura, mis brazos hicieron lo mismo con sus hombros y el
solo acomodo su cabeza a lado de la mia, tal como aquella primera vez
dentro de su consultorio, nos quedamos asi por varios minutos, los latidos
de su pecho retumbaban en mi piel y viceversa, con mi mano derecha
empece a acariciar su cabello y sus orejas.
-Que haces?
Me lo pregunto curioso
-De que?
-Con mis orejas
Su voz era somnolienta y amable
-No lo sientes? te las acaricio
-Eso lo se, pero porque las orejas?
-Mmm no se, son bonitas. son tan bonitas como su dueño
Un leve estremecimiento retumbo en nuestros pechos, Teo se reia
-Eres muy raro, sabes?
-No lo sabia, pero gracias por el insulto,
Se lo dije fingiendo molestia y le solte las orejas, mis manos bajaron hasta
alcanzar sus nalgas, esas nalgas poderosas y fornidas que se tensaban
cada vez que embestia con su pelvis mi culo, abri las palmas de mis
manos sobre ellas y las sobe en circulos y de arriba a abajo.
-Ouch! Y ahora que haces?
Me lo dijo muy risueño despues de que le di un leve pellizquito en la nalga
derecha y le jale los pelitos de la izquierda
-Lo mismo que hace un rato con tu orejas, acariciandolas
-Son bonitas?
Me pregunto cansado
-Mucho!
Teo se enderezo sobre la cama solo para que nuestros rostros quedaran
de frente y me beso, asi permanecimos por varios minutos, su verga a
medio palo aun enterrada en mi culo, mis manos jugueteando por
momentos su espalda, sus nalgas, su cabello o sus orejas y el besandome
y por momentos dandome leves chupetones en el cuello, lo hacia de una
manera sutil y suave lo suficientemente fuerte para sentirlo pero tambien
suave para no dejarme marcas.
Mis manos pasaron ambas a acariciar con las palmas abiertas el abundate
vello rizado de su pecho y abdomen.
-Tambien te gusta eso?
-No se cuantas veces tendre que decirtelo, todo tu me encantas
Se lo dije con un fingido hartazgo y lo bese de nuevo atrayendolo a mi
cara, los ojos de Teo pasaron aun reloj digital sobre uno de los buros de la
cama y apartandome de sus labios me dijo
-Ya llevamos dos horas aqui, hay que irnos!
Su verga ahora colgaba flacida contra mi perineo pero yo me sentia aun
mas pleno que al tener el orgasmo potente de hace apenas unos minutos
-Y si nos quedamos aqui asi como estamos?
-Jaja estas loco, hay que ir a «Lago Matis», tienes que volver a la casa de
tu tia igual que siempre no?
-Por eso mismo, prefiero quedarme aqui desnudo contigo abrazados y
viendo TV que ir a ese parque.
Se lo dije con toda la sinceridad pues era lo que de verdad queria y sentia,
por un momento en su mirar vi que mis palabras lo enternecieron y
dejandose caer detras de mi me tomo por detras en un abrazo, su verga
caia pesada y flacida contra mis nalgas al igual que sus testiculos, sus
manos se unieron en torno a mi estomago y por unos minutos nos
quedamos asi, sin sonido, sin prisa y solo existiendo nosotros dos.
Cuando por fin nos levantamos fuimos directo a el baño, solo habia una
pequeña regadera y juntos tomamos un baño con agua templada, el lavo
mi cuerpo y yo el suyo, su pene comenzo a erectarse de nuevo y yo me
asegure de que estuviera listo para follarme en ese mismo momento,
ahora en la ducha, se lo lave con agua y jabon en espuma, me incline y se
lo mame mientras con mis manos acariciaba sus nalgas, cuando estuvo
completamente erecto, me coloque agarrado de las llaves del agua ya
cerradas y abri las piernas frente a el, dandole la espalda, el no perdio el
tiempo, escupio en abundancia mi culo y me dedeo para que la saliva
lubricara lo mejor posible mi canal anal,
Se rio cuando con los dedos salio algo de su lefaque me mostro poniendo
su mano frente a mi cara y de una me enterro su tronco hasta la base, me
la metio de una sola estocada rapida y dura, el sonido de sus huevos
extrellandose con violencia contra mi piel dentro de ese baño con eco se
quedo grabado en mi memoria para la posteridad y despues de unos
minutos nos venimos juntos de nuevo, volvimos a lavar nuestros cuerpos y
despues de secarnos nos cambiamos de ropa, salimos de la cabaña
montados en el auto y tomamos de nuevo el camino a «Lago Matis»
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!