A los 14 con mi mi mejor amigo
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola, me llamo Carlos y ahora tengo 18 años.
Todo sucedió un día al salir de clase hace 4 años.
Había quedado con un compañero para ir a mi casa a hacer los deberes y estudiar.
Salimos del colegio a las 4:30 y nos dirigimos directos.
Yo tengo pelo moreno, ojos claros, soy alto y muy delgadito.
En ese entonces muy aniñado y me gustaba mucho ver a mis compañeros de clase desnudos en el vestuario.
Mi amigo Ruben, era rubio, pelo rizadillo, ojos azules, tenía el cuerpo fifrado de jugar al futbol y me volvía loco.
Sabia que era hetero porque tenia novis.
El no sabía nada, en realidad nadie sabía nada de lo mio.
Cuando llegamos a mi casa, mi padre no estaba (vivía sólo con mi padre porque mi madre trabajaba en otra ciudad y venía una vez por semana) asique prepare dos bocadillos y fui a la sala para darle uno a ruben.
Me senté en frente suyo.
El llevaba bisera, un pantalón corto y una camiseta de tirantes, y al sentarse en el sofá y abrirse de piernas, se le veía en calzoncillo por debajo del pantalón.
Me quedé como tonto mirando y el se dio cuenta.
Parecia que no le habia molestado porque se subió un poco mas el pantalon para que pudiese ver mejor.
Yo me quedé mudo y rápidamente aparté mi mirada.
Ruben: Carlos, te gusta lo q ves?
Yo no podía ni decir una palabra.
Ruben: Sabes? Te e visto más de una vez mirándonos en el vestuario y se que te gustan nuestros rabos jajaja.
(Se rió)
Yo: Perdona Ruben, es que no puedo evitarlo, perdonarme por favor.
Ruben: No te preocupes Carlos, por mi puedes mirar todo lo que quieras.
Eres mi mejor amigo y siempre lo serás.
Seas hay o lo que seas.
Yo: Nunca se lo e dicho a nadie.
Ruben: Yo no diré nada.
Es tu vida y te ayudaré en todo lo que pueda y te protejere de cualquiera.
Lo único que no quiero que te hagan daño.
En ese momento sentí un alivio tremendo al confesarme y empecé a llorar de la emoción.
Entonces Ruben se sentó a mi lado y me dió un enorme abrazo.
Sentia sus fuertes brazos rodeando mi cintura y el me decía que me calmase y me dio un besito en el cuello.
Sentí una excitación que no puede controlar y se me puso la polla como una piedra, tocando su estomago.
Me avergoncé mucho y el lo notó.
Ruben: Porque te averguenzas.
Escuchame, conmigo quiero que vivas tu sexualidad con naturalidad y si te empalmas conmigo eso querrá decir que te gustó y eso me sube el autoestima.
De verdad crees q soy guapo?
Yo: Estas buenisimo, eres el más guapo del colegio.
Ruben: Gracias nene.
Nunca una chica me había dicho eso.
Y me abrazó nuevamente.
Esta vez me abrazó más fuerte y una de sus manos bajó hasta mi culo.
Empezó a acariciarmelo y me preguntó si no me molestaba, y yo le dije que me encantaba, a lo que el siguió.
Yo estaba loco por el y el lo sabía.
Ruben: Carlos, nunca e estado tan agusto con un tío.
Te prometo que en este momento estoy muy agusto contigo.
Te puedo preguntar algo?
Yo: Si claro?
Ruben: Alguna vez as hecho algo con un chico?
Yo: No, nunca.
Ruben: Ni siquiera as tocado un rabo?
Yo: No
Cogió mi mano y la puso sobre su bulto.
Tenía la polla durísima.
Ruben: Me as puesto muy cachondo y me gustaría darte mi rabo para qua aprendas.
Mi corazón se aceleró y con mi mano empecé a acariciarsela con mucho cariño.
Ruben: Lo haces muy bien nene.
Espero que te guste.
Entonces empecé a bajarle el pantaloncito y pude ver unos bóxer negros sudados, con olor a macho.
Un olor que me puso a mil.
El al verme cojio mi cara, me besó en los labios suavemente, metiéndome su lengua y me acercó la cara hasta su bultamen.
Tenía todo el calzón lleno de preseminal y se podía ver la pedazo de polla de 18 centimetros palpitando.
Empecé a pasar mi lengua por encima.
El repetía mi nombre una y otra vez en voz baja, Carlos, Carlos.
Bajó sus manos hasta mi culo.
Yo saqué su polla de la tela y abrí mi boca introduciéndome todo lo que pude.
Dios mio, había soñado con eso desde hacía mucho tiempo.
Yo chupaba como en las películas, de arriba a abajo.
Deteniéndose en el glande y saboreandolo bien.
Ruben: Mmmm.
Es la mejor mamada que me han echo.
Sigue así cariño.
Mmmm.
Chupaba cada vez con más ansias.
El empezó a meterme un dedo por mi oyito.
Que rico se sentía.
Al de unos minutos de estar así, me puso a cuatro patas, se puso detrás de mí y me echo un buen escupitajo en la entrada de mi hueco.
ruben: Esto te va a gustar mucho cariño mío.
Yo: Me dolerá?
Ruben: Lo haré con mucho cariño para que no te duela.
Tienes un rajote de escándalo Carlitos.
Puso su glande en mi culo.
Yo no podía ni creermelo.
Mi cariño hacia ruben crecía por momentos.
Primero metió la cabeza y eso me hizo estremecerme de dolor.
Ruben al verme follar se paró, me abrazó y me empezó a dar besos por toda la espalda diciéndome que me tranquilizara,qué me relajase y que le aguante un poquito por que después vendría el placer.
Al oír eso me tranquilicé y me relaje.
El comenzó a metermela poco a poco.
Ya no me dolía tanto y el continuó.
Yo me jiraba y lo veía sonriente, lanzándome besos de cariño y dulzura.
Ruben: Gracias nene por dejarme penetearte, ya falta poco para que entre entera.
Espero q no te duela.
Quiero que sientas un buen pollote en tu interior.
Yo: Gracias a ti Ruben por darme el mejor día de mi vida.
Te quiero muchísimo.
Ruben: Y yo a ti.
Hay te va lo que falta.
Zassss.
Me metió toda de un empujón.
Mmmm.
Me moría pero me encantaba.
Sentia sus latidos del corazón en el interior de mi culo.
Era genial, mi mejor amigo estaba en lo más profundo de mi.
Comenzó a empotrarme, primero muy lento, y después cuando me acostumbré más rápido.
El gemía de placer, yo gritaba cn cada embestida, se veía que el se había follado a muchas chicas.
Sentirme en el lugar de su novia me ponía a mil.
Yo cada vez sacaba más mi culo para facilitarle el trabajo.
Sus huevos chocaban contra mi.
Era la sensación más cañera de mi vida.
En un rato, empezó a gemir con más fuerza mmm.
Ruben: Mmm.
Carlitos.
Mmmm.
Te voy a preñar.
Mmm.
Mi nene.
Quieres mi semen dentro de ti?
Yo: Si Ruben si.
Mmmm.
Damelo todo.
Me agarró fuerte de los hombros.
Ruben: Aaaaaahhh.
Me corro pequeñin!!!! Tomaaaa.
! Tomaaaa.
!
Yo: Siiiii.
Empecé a sentir trallazos de semen en mi interior.
Uno tras otro.
No terminaba nunca.
Estaba siendo preñado por me mejor amigo.
Yo sin tocarme empecé a soltar semen por mi capullo.
Los dos nos caímos sobre la cama.
Yo boca abajo y el sobre mi.
Su polla seguía enterrada en mi oyito y el me besaba.
Yo le di las gracias y el me dijo que gracias a mi, que había sido la mejor follada de su vida.
Nos quedamos así largo rato, con su polla dentro.
Besándonos.
Alfinal Ruben dejó a su novia y me pidió a mí para salir.
Llevamos 4 años ya y nuestro amor cada vez es mayor, igual que sus embestidas, que cada día me folla mejor.
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