Aaron y Andre

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Fue hace tiempo, a finales de 1999 y a principios del 2000, donde en tan poco tiempo pudieron suceder tantas cosas, ahora les relatare una experiencia que tuve con un gran amigo y amor, que llegamos a conocernos tan bien en un periodo de tiempo muy pequeño. Yo tenia 10 u 11 años y todo paso en Playa del Carmen, Quintana Roo, mi hermana que tiene ahora 29 años en las vacaciones de verano me invito a pasar un tiempo con ella y su novio, yo acepte rápidamente y prepare mis cosas para hacer ese viaje, a los pocos días pasaron por mi a Puebla (porque yo vivo ahí) y nos fuimos a la ciudad de México donde vive mi hermana y su novio, para tomar un vuelo hacia Cancún y de ahí llegar con unos amigos de ella a Playa Car.

Cuando llegamos a Cancún no hicimos mucho, nos pasaron a recoger sus amigos luego luego y nos fuimos hacia esa pequeña ciudad. Mi hermana ya había vivido ahí y conocía muy bien esa ciudad así es que en el camino en el auto me fue enseñando las calles, avenidas, donde quedaba la playa, en que hotel nos hospedaríamos y ustedes saben… las “reglas” ella no me imponía muchas cosas, al contrario lo que me gustaba del viajar con mi hermana es que me dejaba ser libre!!!! Podía vivir mi vida como yo quisiera, cosa que con mis padres o con mis otros hermanos no podría, en fin, me dijo que me daría libertad, no abusando y avisándole siempre donde iba a estar yo (cosa que no se cumplió en muchas ocasiones). Cuando llegamos al hotel lo primero que hice fue cambiarme de ropa porque el calor era insoportable y necesitaba refrescarme urgentemente, claro la primera opción fue ir a nadar al mar como un niño desesperado por nadar. Me cambie, use unos shorts o traje de baño que es lo que al principio para quitarme la pena usaba, deje mis cosas en la habitación (el numero del cuarto era 206, nunca lo olvidare), le avise a mi hermana que iba a bajar a nadar un rato y me dio permiso con la condición que no me tardara mucho porque me quería enseñar bien la ciudad y quería ir a ver a sus viejos amigos. Al llegar a la playa mi primera impresión fue de Wow!!! Había tantas caritas lindas de chavitos que no podía creerlo me sentía en el paraíso jejeje, tenia la esperanza de que todos ellos se hospedaran en el mismo hotel que yo y los llegara a conocer, en fin nade un rato, lo único que me importaba en ese momento era conocer el ambiente que había en esos momentos en la playa… 360° y todo era perfecto, el mar con una temperatura espectacular, la arena blanca, chavitos brincando y saltando en el mar, haciendo castillos de arena, un sol muy caliente y todo en general era perfecto en esos momentos. Al poco rato decidí subirme a cambiar con algo fresco, desempaque y salimos a conocer la ciudad y los amigos de mi hermana. Reacuerdo que el día que llegamos a Playa del Carmen fue el 26 de diciembre de 1999, y se aproximaba lo que daría vida a esas vacaciones… conocerlo a el.

Pasaron los días y todo era normal, es tan pequeña esa ciudad que ya sabia vivir por mi cuenta en ella, visitaba mucho la llamada “5ta avenida” donde hay muchos restorants, discos, tiendas de ropa, había una variedad impresionante de todo, todo lo que había en esa avenida me encantaba, excepto los policías que ya anteriormente me habían regañado por una tonta razón… llevar una bicicleta en esa avenida (cosa que nunca me había avisado nadie que no se permitía, ni siquiera un tonto letrero diciendo “no se permiten bicicletas”).
Conocí la ciudad, el hotel, las playas, los amigos, la comida todo!!! Pero sentía que algo me faltaba… y ese algo era tener un amigo.
La magia empezó un día, donde me encontraba en una camilla tomando el sol, cerca de unas canchas de fútbol del hotel, donde se encontraban jugando mi hermana, amigos de mi hermana y su novio (que por cierto es muy lindo, es gracioso, tiene un buen aspecto, es buena onda…. Y es argentino).

A los pocos momentos cuando yo disfrutaba viendo el partido se acercaron unas personas a ellos y se quisieron unir al juego de fútbol, eran dos chavos que no parecían extranjeros y un “alguien” que mi primera impresión al ver ese “alguien” fue de una niña. Ese Alguien tenía cabello rubio, demasiado rubio diría yo, su lindo cabello rubio tenia unos lindos caireles, y era largo que llegaba al cuello. Tenía unos ojos claros que no apreciaba de lejos si eran azules o verdes, era alta y venia vestida con unos shorts y una playera. Al poco tiempo los amigos de mi hermana me invitaron a que me uniera al juego para que se emparejara el partido (no es por presumir pero nací para jugar fútbol). Cuando llegue a la cancha no le di mucha importancia a ese “Alguien”… pero la cosa iba cambiando de rumbo, ese alguien me miraba demasiado, no se cual fue su impresión al verme, si decir que le parecía raro ver a una persona rubia (jajaja perdón pero no me presente físicamente, soy rubio, ojos azules o verdes, es una incógnita que yo y muchos de mis amigos tratamos de definir pero nunca podemos, soy delgado, siempre lo eh sido, algo alto, no un enano pero tan poco una jirafa, mmmm y no se que mas les puedo decir de mi, pero eso esta algo fuera de tema), como decía no sabia la razón de que me veía tanto, si por ver a una persona rubia, una persona que jugaba bien el fútbol… o alguna otra cosa, que era imposible de saber a menos me pudiera meterme en su mente, cosa que era imposible.

A los momentos que empezó el partido me di cuenta que jugaba muy pero muy bien, no éramos nosotros los de los goles, pero si éramos los que dábamos buenos pases y nos peleábamos por el balón pues era del equipo contrario, a los pocos momentos que me decidí a observarlo u observarla me di cuenta que no era ella, era un el, era un chavito, que de lejos por sus rasgos finos, su cabello largo y su tierna cara parecía niña, cosa que no me dio mucha importancia de ver hasta que el me empezó a observar, en el momento que me di cuenta que era un chavito, quede completamente en shock, como si todos mis movimientos no coordinaran, como si hubiera perdido la razón y sea un tonto principiante tratando de enviar buenos pases, cosa que se vio cuando nos metían mas goles y yo no reaccionaba, lo único que hacia era correr a lo entupido, pelearme con el por el balón y observar sus movimientos, sus expresiones, sus miradas y tratando de quitarle el balón y dárselo algunas veces a propósito para ver que pasaba.

A los pocos momentos que acabo el partido y que nuestro equipo gano, el y sus dos amigos se sentaron en las camillas donde estuve antes tomando el sol y tomaron agua, yo lo que hice fue jugar yo solo con el balón, cruzando miradas con el.
A los pocos momentos el se acerco a mi, yo trataba de aparentar que no me daba cuenta de que venia hacia mi, pero no aparente nada bien, se acerco y me di cuenta de que era extranjero, todavía no sabia de donde, pero me hablo en ingles, era difícil para mi entender en esa época el ingles, pero creo que no hubo tan mala comunicación, se acerco y en esos momentos no podía traducir exactamente lo que me decía, con las palabras exactas, cosa que para mi ahora ya no es tan difícil, pero la idea siempre la entendía, y empezamos a echarnos el balón el uno al otro, surgió una pequeña conversación porque sus amigos se alejaban y el tenia que seguirlos, lo que recuerdo que supimos de nosotros es que el se hospedaba en el mismo hotel que yo, en la habitación 238 y que se tenia que ir, pero nos podríamos ver en estos días. Cosa que yo me iba a encargar de realizar.

Cuando se fue alejando, fue como que amor a primera vista, amor de verano, fue como un vicio que me dejo totalmente dependiente y que ya no podía dejarlo, solo pasaba por mi mente su rostro, su voz (describiré su voz, era algo tierna, era como de niña, pero de niño a la vez, era muy suave y linda que acompañaba perfectamente con su linda sonrisa), todo lo de el pasaba por mi mente, y no podía quitármelo de encima, así es que me decidí a seguirlo, el iba a muchos metros de distancia, se acerco a la playa y estaba jugando y a la vez caminando con la arena y con el mar siguiendo a sus dos amigos que parecían mexicanos, mis ojos no hacían otra cosa mas que seguirlo con la mirada, el se dirigió hacia unas camillas en la playa donde empezó a platicar con una mujer una mujer muy linda, y al poco rato sus amigos se separaron de ellos dos y el y ella se acercaban hacia donde yo estaba, cosa que yo me regrese para evitar que me viera, y me di cuenta que se dirigía al hotel, entro y ya le perdí la pista… al menos por ese día.

Todo lo que hice en ese día es pensar en el, no pasaba otra cosa por mi cabeza mas que el… ese alguien que ni su nombre sabia.
No recuerdo muy bien el día en que lo conocí, quizás fue el 28 o 29, pero al siguiente día fue cuando lo conocí por completo. Lo primero que hice al levantarme fue vestirme y salir apurado de la habitación. Mi hermana dormía con su novio en una habitación junto a la mía y yo tenia mi propia habitación, pasaba por mi mente irlo a visitar a su habitación pero me dio mucha pena y decidí ir al restaurante que se encontraba en ese mismo piso con la esperanza de encontrarlo ahí, pedí algo de tomar, y teniendo la esperanza de verlo pronto, el restorant se encontraba vació, quizás me levante demasiado temprano por la ansiedad de conocerlo, pero como uno es niño no acostumbra dormir mucho tiempo y suele suceder que la mayoría de los niños (al menos eso pienso, eso me pasaba a mi) era levantarse temprano. Media hora de espera y mi sueño se hacia realidad, el entro al restorant, y se dio cuenta que estaba yo ahí y se acerco hacia a mi, no les puedo decir exactamente las palabras que me decía o que yo le decía, pues usamos el ingles o el poco ingles que sabíamos para comunicarnos. Se llamaba Aarón era de Francia Cote D’ Dor tenia 9 años, y estaba de vacaciones con su mama que se llamaba Ariel, pero la presentación fue después, todo empezó con una sonrisa picara que me lanzaba y empezó a actuar como un chavo coqueto, empezó a jugar con el salero, con las cosas que había en la mesa, con la música, empezó a bailar, yo solo me reía, y me reía con el, y me hizo todo un espectáculo para llamar mi atención que lo logro. Nos presentamos, le dije mi nombre, con quien venia, y todas esas cosas, a los pocos momentos ya éramos mas que amigos, después llego su mama, su mama hablaba muy bien el español y nos presentamos, se sentó en mi mesa con el y pidió de desayunar, yo no tenia mucha hambre lo único que quería en esos momentos era conocerlo bien y jugar claro. Así es que ninguno de los dos pidió algo de desayunar y le pedimos permiso a su mama de salir a nadar, ella acepto y le dije a el si me acompañaba a mi habitación a ponerme el traje de baño para salir a nadar el acepto y fuimos, en el pasillo me encontré a mi hermana que parecía que se dirigía al restorant con su novio, le presente a mi nuevo amigo y le pedí permiso de ir a nadar.

Cuando entramos a mi habitación, empecé a abrir cajones para encontrar donde había guardado mi ropa mi hermana y pensar en que me iba a poner, si usar el traje de baño o usar el speedo negro que cuando no había mucha pena lo usaba… me decidí por la opción dos, lo saque y me metí al baño a cambiarme, el me espero en mi cama, cuando salí le pregunte que si el no tenia traje de baño, me dijo que no, que iba a usar el short que tenia en esos momentos, yo le ofrecí mi traje de baño pero el dijo que su short estaba bien. Entonces nos dirigimos hacia la alberca, era una alberca que se encontraba en la parte de atrás del hotel, donde había una cancha de bolley ball sin arena y había un tipo de selva, cuando llegamos no había nadie entonces empezamos a nadar y a jugar en nuestra piscina.

Recuerdo que los juegos que hacíamos eran bolley ball, carreritas, toro, buscar cosas en el fondo de la alberca y cosas así.
Aquí fue cuando todo empezó a surgir, cuando el cansancio nos llego y fuimos al chapoteadero para sentarnos y descansar y a la vez platicar. Aquí todo cambio, fue como algo espontáneo que no se veía nada lujurioso pero tampoco infantil. Me empezó a decir que se me veía muy bien ese speedo que llevaba y que el siempre había querido tener uno de esos. Yo le dije que no tenia otro, si lo tuviera se lo pudiera prestar, y el me dijo que después el me podría prestar su short y yo el speedo para que comprobara la comodidad y facilidad de usarlo y pudiéramos nadar. Y surgió la platica, fueron demasiados temas de los que hablamos, cosas de niños, como decir nuestras caricaturas, las cosas que había en su país, en este país, cosas así, pero aquí empezó todo lo raro, cuando empezó a hacer rosee su pierna con la mía, nos encontrábamos sentados, pero muy pegados, y se le hacia muy fácil juntar su pierna a la mía, y a veces subir su pierna en la mía, cosa que no se me hizo nada rara ya que era una platica fluida, y no nos concentrábamos en los movimientos que hacían nuestras piernas y lo deje pasar como si nada, pero a los pocos momentos, cuando el movía su pierna me provocaba una sensación extraña, un rosee que me gustaba demasiado y me provocaba sensaciones que nunca había sentido. A los pocos momentos empezamos a jugar con nuestras piernas, tratábamos de tirarnos al agua usando nuestras piernas, pero eso no era una lucha era algo mas, era un rose de piernas, me acariciaba el pecho y la espalda tratando de tirarme, y a veces su mano rozaba mi speedo cosa que me provocaba mas sensaciones y mi pija no bajaba de tamaño, al contrario. Fue entonces cuando mi pito se empezó a levantar, yo no me había dado cuenta, pero el parecía muy desconcentrado mirando hacia abajo y volteándome a ver, cosa que no sabia en esos momentos a que se debía, cuando voltee discretamente hacia abajo y me di cuenta que mi amigo era el causante de esa distracción.

Yo de broma le dije que estaba de travieso mi amigo, cosa que a el le causo gracia y ganas de tocárselo y jugar con su amigo también, algo que nos hizo despertar la curiosidad de nuestros cuerpos y en forma de juego enseñarlo rápido, esconderlo y reírnos como unos niños. Como ya les dije en esos momentos de la mañana en esa alberca algo alejada de la playa, en la parte trasera del hotel donde no se encontraba nadie más que nosotros. Obviamente muchos pudieron ver el espectáculo y juego de niños por las ventanas del hotel pero son cosas que no les dimos importancia y que seguimos jugando.

De ahí no paso nada mas, solo fueron juegos de presentar a nuestro amigo, reírnos, tocárnoslos (cada quien el suyo), y tomarlo solo como juego.
Ese mismo día su mama me invito a un restorant algo alejado de la pequeña ciudad, cosa que tenía que pedir permiso a mi hermana. Entonces le dije a Ariel que si le podía decir a mi hermana, ella acepto y nos dirigimos a la habitación de mi hermana, le presente a Ariel y se empezaron a conocer ellas dos, hubo química creo, porque en lo que ellas platicaron un ratito nosotros cambiábamos de canal a la televisión buscando por caricaturas y después nos pusimos a molestar al novio de mi hermana que molesta mucho, y yo lo molesto también a el, parece que se cayeron bien Aarón y el, y Aarón me ayudo a echarme unas luchitas de almohadas con el en lo que Ariel y mi hermana hablaban. Parece que se llevaron bien mi hermana y Ariel y me dio permiso de salir con ellos.

Entonces partimos, donde nos dirigíamos era un lugar donde teníamos que llegar por lancha, entonces nos subimos, conocí a un lanchero demasiado gracioso mexicano y nos llevo hacia la otra playa.
Cuando llegamos lo único que hicimos fue llegar al restorant, pedir de comer, comer y al terminar en lo que su mama y los amigos de su mama comían (que eran los mexicanos que al poco tiempo conocí mejor y que fueron los que se integraron al partido el día anterior) Aarón y yo nos dirigimos a la playa. El me dijo que le tenia miedo al mar, así es que me dijo que si quería yo nadara y el se quedaba en la orilla. Yo empecé a jugar con las olas y con mi imaginación, en lo que el solo jugaba con los pies, las pequeñas olas que le llegaban a la playa y los caracoles que había encontrado. Había muchos niños que el ya conocía, pero parecía que les caía mal, porque solo se reían de el y el se enojaba con ellos, y se aventaban conchas y cosas así, al poco tiempo me dijo que se enojaba de que le digieran niña, por su cabello, cosa que yo nunca hice.
A los pocos momentos trate de hacer las pases entre ellos y jugamos todos en el la orilla del mar. Después su mama, sus amigos Aarón y yo fuimos a un Faro donde nos tomamos muchas fotos y seguíamos jugando el y yo.

Cuando nos quisimos ir, buscamos al lanchero, pero no lo encontramos, entonces buscamos a otro lanchero, pero nos dijo que no nos podía dejar en nuestro hotel, entonces nos dejo a muchos kilómetros de el y tuvimos que caminar, con la imaginación empezamos a jugar el y yo, correr, buscar cosas en el camino, platicar con los amigos de Ariel, y cosas así.
Cuando llegamos al hotel vimos al lanchero en su cabaña totalmente borracho y nos dimos cuenta que se le olvido pasar por nosotros.
No recuerdo muy bien si fue ese día, o al día siguiente, pero cuando su mama y sus amigos nos dejaron en la playa, empezamos a jugar Aarón y yo a rellenar botellas y llevarlas a un hoyo que estaba en la playa, un juego poco inteligente pero divertido, que acabo en desastre, terminamos rompiendo todas las botellas en unos arbustos y llenándonos de arena el uno al otro.
La cosa es que el 31 de diciembre, donde empezaba el gran movimiento en la ciudad, porque estaban todos los restorants, antros, y gente preparando la celebración del 2000 en todos lados, en la 5ta avenida, en el hotel, en el mar, un gran reventón. Había llegado más gente, las albercas estaban llenas, el mar atascado, todo estaba rodeado de multitud, y era imposible nadar, entonces nos salimos de la alberca y nos fuimos a mi habitación a ver la tele. Nos dirigimos primero al restorant para decirles a su mama y a mi hermana que estaban platicando que íbamos a estar viendo la tele y que en un rato íbamos abajo a comer.

Cuando llegamos a mi habitación nos acostamos en mi cama y nos pusimos a ver caricaturas, recuerdo que fue Daría la caricatura de MTV no se si la conozcan pero bueno, nos aburrimos y jugamos todo lo que pudimos jugar, toro por los pasillos, me encantaba verlo sonreír, era una sonrisa picara y tierna a la vez, jugamos también a los espías de la habitación y después escondidillas donde para contarme se fue corriendo a la base y se pego en la rodilla, parece que le dolió mucho y decidimos no jugar mas, entonces se me ocurrió un juego maravilloso, que no era peligroso jejeje el menos eso creí en ese momento. Le pregunte si quería jugar al doctor, y que el fuera el doctor y yo el paciente y después yo el doctor y después el, el paciente, el dijo que si y empezamos a jugar, mi primera lastimada ficticia fue que me habían disparado en el pecho y el tenia que sacar la bala, entonces me quite la camisa y quede con el speedo solamente, entonces el lo que hizo fue primero darme un masaje y después me puso crema que según era la medicina, yo solo le sonreía, disfrutaba de los masajes que recorrían su mano, pasando por mi pecho, mi cuello, bajando… mi estomago… bajando…mi ombligo, pasando su mano encima del speedo, cosa que me provoco demasiada excitación y me provoco que el amigo se levantara. El se dio cuenta, no se si lo hizo apropósito, pero si lo hizo apropósito, logro su objetivo, yo no le decía nada, me encantaba lo que me hacia, solo lo veía con una mirada picara, sonreía, y lo veía recorrer su mano en mi pija.

Yo en esos momentos me sentía un poco nervioso de que llegara mi hermana y tocara mi puerta, estaba imposible que entrara, pero si tenia un poco de nervios, entonces el quería hacer varias cosas, pero yo no lo dejaba entonces lo interrumpí diciéndole que me tocaba ser el doctor, el me dijo que se había lastimado la pierna y que debía de curársela, entonces yo lo que hice fue untarle crema y con el cepillo de dientes pegarle suavemente en la rodilla (como hacen los doctores con una cosa para ver los reflejos), y de ahí no paso nada mas, entonces le volvió a tocar ser el doctor, y esta vez me iba a sacar otra bala del estomago, entonces empezó con el mismo mecanismo, pero empezó a meter sus dedos dentro del speedo sin tocar al amigo, cosa que yo hacia que sacara sus manos y me reía picadamente y penosamente.

Pero el lo seguía haciendo, mi pija estaba parada y no me podía resistir mas a su amor, así es que me deje… entonces le dije que hiciera lo que hiciera, pero que me curara, entonces me unto mas crema, empezó a recorrer su mano mi cuello… mi pecho… bajando recorriendo mis costillas… bajando hasta acariciar mi ombligo, bajar su mano y meter dos dedos dentro del speedo tratando de encontrar algo, algo que encontró demasiado rápido, y que lentamente fue metiendo un dedo, otro, hasta tener toda su mano dentro del speedo. A mi me gusto mucho y solo lo veía hacer su labor de doctor, que esto ya no era un juego, esto ya había pasado a otros limites, entonces empezó a bajar lentamente mi speedo hasta quedar totalmente desnudo y poder acariciarme bien, recuerdo que me sentía en el paraíso, recorriendo sus manos con crema mi cuerpo y yo deleitándome con su sonrisa picara y lujuriosa.

Cuando se termino la crema de sus manos, que habían recorrido casi todo mi cuerpo dijo que para que quedara totalmente curado necesitaba una medicina especial, yo le dije que cual era, entonces el con un movimiento rápido acerco su cara a mi pija y le dio un besito rápido y se quito y se empezó a morir de la riza, yo me moría de la riza también, y picaramente le dije que necesitaba mas medicina, porque me había encantado eso. Yo ya sabia muy bien lo que era eso, ya había pasado por eso, ya sabia lo que se sentía, con mi primera experiencia que fue con Leo, que se las relatare después, y quería probar eso de nuevo. Entonces yo lo incitaba a que le diera besitos y lo empezara a chupar… cuando lo empezó a hacer me sentí muy bien, y lo único que hacia era relajar mis brazos en su suave cabello y disfrutar del espectáculo.

Después me decidí decirle que era mi turno de ser el doctor, obviamente seguir los pasos de mi maestro, entonces se recostó, y sin saber cual era su dolor, le baje sus shorts y sorpresa! No tenia ropa interior, me ahorro el trabajo, entonces yo hice lo mismo, pero ya estaba casi todo hecho, su pito ya lo tenia a 1000 y solo pude acariciarlo, tocarlo, suavemente, bajando mis dos dedos, hasta tocar sus pelotas, metiendo el dedo debajo de ellas, sacándolo y acariciándolas de nuevo, subir hasta llegar a la puntita de su pija, acariciar esa carnesita que me parecía tan apetitosa y moría de ganas por probarla ya, pero necesitaba hacerlo poco a poco para que disfrute de principio a fin, entonces subí mi mano y acaricie su ombliguito salido como el mió, subiendo su mano y acariciando sus costillas, su estomago, su pecho… su cuello, y bajando de nuevo hasta llegar detrás de sus pelotas, fue entonces cuando me decidí a probarlo, entonces acerque mi cara y le di un besito primero, lo voltee a ver y el solo me veía con una sonrisa lujuriosa pero a la vez con pena, después lo volví a hacer, y empecé a saborearlo bien, chupando cada cavidad, primero empezando por la puntita, dándole un masaje con mi lengua, después metiendo toda mi boca hasta llegar a sus pelotas, después sacarlo de mi boca y después volverlo a meter, acariciando mi lengua su pellejito, su penesito parado, sus pelotas, debajo de las pelotas, lamiéndolo desde abajo hasta arriba, toda una limpieza total que le parecía estar gustando.

Tenia un buen tamaño su pija, puedo decir que era de mi tamaño mas o menos, quizás era porque teníamos mas o menos la misma edad, le media mas o menos 13 cm. era tan pero tan suave que se deslizaba por mi boca, era blanquito, era demasiado duro, se le veían algunas venitas que salían, todavía no salía su glandecito, tenia todavía el pellejito, creo que a mi tampoco se me salía, solo una puntita, pero el de el era de wow, tan suave, tan durito, tan apetitoso que me tarde mucho tiempo disfrutando de su sabor y un olor exquisito.
Sus pelotitas eran muy suaves también, demasiado suaves, mas suaves que su pija, eran rositas y estaban un poco colgando, no eran muy grandes ni muy pequeños pero si estaban colgando.
Yo ya lo conocía anteriormente a su amigo, porque en muchas ocasiones me decía que lo acompañara, e iba a hacer pipi, entonces con toda la tranquilidad del mundo orinaba enfrente de mi para que lo viera, y yo hacia lo mismo, cuando el hacia, a mi me daban ganas también y se lo enseñaba, y en vez de ocuparnos de cada uno el suyo, solo veíamos el del otro, riéndonos y volviendo a mirarlo, fue después cuando ya lo conocimos paradito en la alberca y después jugando al doctor cuando por fin lo pudimos probar y tocar.

Siguió la rutina, fue el doctor, fui yo el doctor, y así sucesivamente, hasta que empecé a sentir cerca el orgasmo, muchos se preguntaran que onda con el orgasmo, pero si se dan cuenta tenemos orgasmos desde pequeños, donde no sale ningún tipo de liquido, pero sentimos ese cosquilleo gracioso, que te hace apretar tus manos, cerrar tus ojos, detener por un momento la respiración, y sentir algo muy lindo dentro de ti cuando después pasa el encanto y no te dan ganas ni de tocártelo de nuevo. Pues me empezaba a pasar lo mismo en esos momentos, trataba de controlarme, no quería que se asustara pues me asustaba a mi mismo al sentir eso, pero tenia que pasar, entonces cuando el me lo estaba chupando y su ritmo de lamidas y chupadas era demasiado acelerado, y su mano derecho recorría mi pierna y su mano siquiera recorría mi pecho en lo que el estaba con las piernas abiertas desnudo…como en esta foto:

Empecé a sentir ese cosquilleo, ese apretón de manos, ese momento donde cierras los ojos, aprietas las sabanas de la cama, se te erizan los bellos de tu cuerpo, detienes tu respiración por unos segundos y sientes una gran explosión dentro de ti… paso y parece que se dio cuenta, yo no sabia que decirle en esos momentos, si decirle que si ya pasaba el por esas cosas… si era algo normal o no… si sabia mas acerca de ese tema… si le había gustado, tenia ganas de preguntarle muchas cosas, pero como un tonto niño que acaba la excitación, acaba el orgasmo y pierdes la sensibilidad y con ella las ganas de continuar lo único que salio de mi boca fue decirle “me acompañas a comer con mi hermana”, el dijo que si, parecía en la mirada que el pasaba por esto también pero no se atrevía tampoco a hablar de ese tema.

Entonces nos levantamos de la cama, teníamos los pitos un poco parados todavía, el se puso su short y yo me puse el speedo y una playera y trate de esperar un momento para que cuando saliera de la habitación no vieran la pequeña erección que pasaba en esos momentos.
Transcurrió el día normal, no volvimos a hablar del tema, comimos en la mesa donde estaba su mama y mi hermana y los amigos de las dos, acabamos de comer, paseamos por los pasillos, no volvimos a nadar y empezamos a ver la organización que hacia la gente para la gran celebración.
Quiero decirles que nunca había conocido un mejor reventón que el de ese día en playa del carmen, llego la noche, la música que se escuchaba en los antros, donde era muy fácil entrar pues muchos conectaban con la playa y no había gente que cuidara la entrada, digamos que no había un cover, mi hermana entro con sus amigos yo la seguí, en esos momentos no me encontraba con Aarón, nos habíamos perdido la pista por unos instantes, ella estuvo platicando con unos amigos cuando yo estaba pensando en lo que había pasado y estaba un poco aburrido, después volvimos a salir a la playa y había muchisisisisma gente en la playa, era como una gran metrópoli donde era imposible pasar donde todo el mundo, la mayoría extranjeros gritaban, saltaban y decían feliz año nuevo en diferentes idiomas me imagino cuando todavía no lo era.

La gente estaba un poco alborotada creo yo, estaba un poco tomada, saltando y nadando en el mar frió, incluso una chava grande de cómo 25 años mas o menos se acerco a mi y me dio un beso en la boca y me dijo Happy New Year, y se la paso besando a medio mundo entre ellos los perros de los amigos de mi hermana, que al poco rato la conocieron y salieron después con ella, se llamaba Franchesca (no se como se escribe, pero asi se pronuncia), y era de Canadá. Recuerdo que sus labios sabían a agua de mar, al poco rato la vi metida en el agua fría nadando con los amigos de mi hermana.

Fue cuando empezó la cuenta regresiva en un reloj enorme que se encontraba en la playa, donde todos contábamos los segundos para entrar a un año nuevo… el 2000.
Todo mundo empezó a saltar, a brincar, a gritar, era como un terremoto en esos momentos, al saber que ya era un nuevo año… 1 de enero del 2000 fue entonces cuando me encontré a Aarón con su mama y sus amigos y me dirigí hacia ellos, mi hermana fue con su mama y la invito a una mesa que se encontraba fuera del antro, que la había reservado para platicar con sus amigos, con Ariel y los amigos de Ariel que eran mas bien como sus guías. Fue en un antro que se llama El Capitán Tutix que conectaba a la 5ta avenida y la playa, por eso se darán cuenta, que mi comunidad esta llamada asi, y esta hecha por mí y por mi amigo Aarón, que seguimos en contacto.
No nos dieron mucho permiso de separarnos mucho Aarón y yo de mi hermana y su mama pero solo nos reíamos de las locuras que hacia la gente y como era tan distinto ese día de todos los demás…

Fue una gran fiesta, donde había variedad en todos los aspectos, había tambores, música, alegría, agua, fogatas, donde te hacías amigo de cualquier persona, sin haberlos visto siquiera antes. Todos nos preguntaban a Aarón y a mi que si éramos hermanos, cosa que decíamos que si por lo bien que nos llevábamos, éramos unos buenos amigos traviesos creo yo jejeje.
Pero el espíritu de un niño no es como el de un adulto… llego el momento en que el sueño nos invadía y lo único que hacíamos era entre cerrar los ojos sentados en la fogata viendo a la gente bailar, gritar y saltando como locos, cosa que ya ni teníamos ganas de reírnos.
Entonces decidimos subirnos a nuestras habitaciones, fuimos con mi hermana y su mama, les dijimos que subiríamos a ver caricaturas, y ellas nos dijeron que en un momento subían.
Cuando llegamos al pasillo, decidimos ir a mi habitación a ver caricaturas, cosa que no había, entonces fuimos al balcón a ver a la gente como seguía en el reventón, Aarón se regreso a la cama a buscar algo en la televisión en lo que yo seguía viendo a las personas tratando de encontrar la razón por la cual seguían bailando y seguían tan felices, pasando mas de tres o dos horas, de el primer día del 2000.

Cuando fui a mi cama me di cuenta que Aarón ya estaba totalmente dormido con la televisión prendida pasando un programa de anuncios. Sin despertarlo salí de la habitación y toque la habitación de mi hermana, pero no abría nadie, también fui a la habitación de Ariel pero no estaba tampoco, me di cuenta que estaban abajo sin acordarse de nosotros, entonces me regrese a la habitación, estaba algo preocupado, pero termine cerrando los ojos dormido en la orilla de la cama mientras Aarón ya se encontraba debajo de las cobijas totalmente dormido.
Poco tiempo mas tarde tocaron la puerta, me pare entre dormido y era Ariel y mi hermana, Ariel me pregunto por Aarón y le dije que se había quedado dormido, entonces mi hermana me dijo que se iban a quedar otro rato platicando que estaban en el bar, entonces Ariel dijo que se llevaba a Aarón de una vez a la habitación para que se durmiera halla y le dijo mi hermana que para que lo despertaba, que ya estaba dormido, que mejor se quedara ahí la noche y ya en lo que mi hermana, Ariel y los amigos seguían platicando en el Bar, Ariel dijo que si, que ok no había problema, pero que cualquier cosa que necesitáramos o que si se despertaba Aarón y la buscaba que fuera al bar que ahí iban a estar, yo le dije que si, que ya me iba a dormir, entonces me despedí de ellas dos y cerré la puerta. En esos momentos pasaron tantas cosas por mi cabeza… al pensar que Aarón, el amor de mi vida se iba a quedar conmigo a dormir, cosa que necesitaba gritarlo y saltar de alegría pero no lo hice por miedo a despertarlo, como en esos momentos no tenia sueño ya, volví a prender la tele y estuve viendo Cartoon Network, caricaturas malas, pero que entretenían. Entonces se despertó Aarón y le dije que había venido su mama y que le había dado permiso de quedarse aquí conmigo, que si quería, o si no que vaya con su mama y que ya le abriera su cuarto y ya se durmiera halla, pero decidió quedarse conmigo a ver caricaturas, porque le daba miedo ir hasta el bar y quedarse solo en su cuarto, entonces hicimos un trato, desvelarnos como los grandes y el primero que se quedara dormido el otro le echaría agua en la cara para despertarse.

Cosa que termine perdiendo, entre los sonidos y música de las caricaturas termine cerrando los ojos, pero no perdí la apuesta con los términos indicados, el se desquito de otra manera jejeje.
Cuando me di cuenta, sentí algo húmedo en mi cuerpo, abrí los ojos y me di cuenta que estaba desnudo, bueno semidesnudo, porque tenia la playera, pero me había bajado el speedo y los shorts, y el estaba abajo disfrutando de mi cuerpo de nuevo, al principio me saque de onda y le dije ¿Qué haces?, pero después con una mirada picara me dijo “tu eres enfermo, yo te curo” trataba de hablar bien el español, no le salía muy bien como a su mama, pero entendía las ideas, yo hacia lo mismo, le hablaba en español, la mayoría de las veces no me entendía, me desesperaba y trataba de hacérselo saber con señas o actuaciones al igual que el o con pocas cosas de ingles pero bueno la cosa es que me deje hacer lo que el quería.

Y asi siguió el juego, le quite la ropa a el y empezaron las caricias, abrazos, cariños, y por primera vez me detuve a observar su cuerpo, bajándome desde la punta de su dedo del pie, dando besos desde abajo, subiendo, tomando con una mano su pie y dándole caricias y besos en su pierna… subiendo hasta llegar a su entrepierna subiendo mas hasta llegar a sus pelotitas colgantes y rosas, las empecé a besar, a chupar en lo que con la otra mano acariciaba su pija que estaba en su punto, durita, paradita, rosadita… subiendo hasta empezar a lamer desde sus pelotas hasta llegar a su pellejito, estirándolo con mis labios, saboreando ese sabor tan delicioso, masajeándolo con mi lengua en lo que el empezó a acariciar mi cabello, seguí subiendo, metiendo mi lengua en su ombliguito, subiendo y lamiendo su estomago, su pecho… de lado derecho y después de lado izquierdo, subiendo mas hasta su cuello, dándole besos y chupadas, hasta que me acosté en el y me detuve a observarlo de cara a cara, me di cuenta que sus ojos eran hermosos unos tiernos ojos azules, entonces nos quedamos viendo con una sonrisa diferente a las demás, esa sonrisa demostraba cariño y amor que nos teníamos en esos momentos y por primera vez me decidí a besarlo, acerque mi boca a la suya y le di un besito después lo volví a ver, el sonrió, acaricio mi espalda, mi traserito, y lo volví a besar, metí la puntita de mi lengua en sus labios, mordí sus labios suavemente y volví a besarlo apasionadamente, después subió mi lengua hasta su nariz, sus cachetes, su nariz, cosa que a el le gusto mucho y me apretó el trasero suavemente, después volví a sus ojos y le di un beso en su ceja, su frente y fue cuando le dije “te quiero” fue demasiado tierno para saber si lo comprendió, pero el me contesto con una palabra en francés, que hasta hace poco me di cuenta de que significaba, una palabra que guarde en mi mente, y que nunca pude descifrar hasta ahora que empecé con clases de ingles, la palabra que significa te amo… “Je Taime”.

Y siguió la noche con tiernos besos, caricias, caricias con nuestras lenguas, disfrutando del sabor de nuestros cuerpos, sus olores a niño, y tiernas y picaras sonrisas que nos lanzábamos en todo momento. La temperatura era perfecta en esos momentos, fluía el calor en nuestros cuerpos, hacia tanto calor, que terminamos desnudos despreocupándonos de lo que pasara en esos momentos, fue cuando por primera vez disfrute de un orgasmo que tuvo, cuando le daba besos y con mi mano sacudía su pijita fuertemente, de arriba hacia abajo causándole mucho placer, cuando el solo cerraba los ojos, tomaba respiración y nos volvíamos a besar, cuando empezó a apretarme fuertemente de las piernas y su brazo apretando fuertemente mi espalda y enterrándome sus uñas cuando sentí la palpitación de su pito, y dio un pequeño suspiro, fue maravilloso sentir esa sensación en mis manos, fue algo único que nunca olvidare, yo también tuve un orgasmo antes, que resistí y seguí apasionadamente besándolo y tocándolo y el segundo fue después de el suyo, cuando lo termine de besar, me recosté encima de el y empezamos a frotar nuestros cuerpos calientes y sudorosos por tal calor, donde cualquier parte de nuestro cuerpo resbalaba, en especial sentía maravilloso el rose de nuestros penes, era una sensación de frescura y a la vez una excitación enorme, como si te untaras crema y disfrutaras de un orgasmo maravilloso, fue espectacular… fue hasta la mañana de ese día, que el sol nos despertó y nos dimos cuenta que estábamos abrazados, su pierna enzima de la mía, yo abrazándolo y su cabeza en mi pecho. Fue un gran amor, que nunca queríamos que se terminara.

A los pocos momentos nos metimos a bañar juntos, pero antes nos vestimos y fuimos a ver donde estaba su mama y mi hermana, pero no estaban ni en su cuarto ni en el bar, parece que salieron y no habían dormido aquí. Entonces nos metimos a bañar para salir a nadar un rato, yo limpie su cuerpo suavemente, su cabello mojado y rubio y el hacia lo mismo. Fue demasiado excitante también, porque nos tardamos muchísimo bañándonos, cuando el jabón pasaba por su cuerpo, empezando por su cuello, bajando a su pecho, masajeándolo, bajando a su estomago, y hasta llegar a su pija donde me detuve mucho tiempo a limpiársela, su pija empezó a tener tamaño, llego a su punto exacto, cuando el me quito el jabón y empezó a hacerme lo mismo a mi, cuando después juntamos nuestros cuerpos y con la suavidad de nuestros cuerpos, el jabón y el agua resbalaban nuestros cuerpos fácilmente y sentíamos esa experiencia única, después nos enjuagamos, y empecé a chupárselo, sabia tan bien en esos momentos, estaba muy húmedo, lo sentí mas parado que nunca, en lo que el acariciaba mi cabello con el agua, y yo empecé a jugar con sus pompitas, fue cuando empecé a jugar con mi dedo, paseándolo por las ranuras de su culito tierno, suave, blanquito, acariciándolo y metiendo mi dedo en la raya… bajando hasta llegar a su hoyito, fue cuando empezó a mover el mi cabeza en lo que yo se lo chupaba con un movimiento acelerado, el empujaba mi cara hasta el fondo hasta que su pene llegaba al final de mi boca y sacándolo de nuevo, cuando empecé a meter un poquito el dedito pequeño de la mano, y sacándolo de nuevo, hasta que separo mi cara de su pija se agacho y me lo empezó a chupar también, éramos maestros mutuos, el me enseñaba cosas y yo le enseñaba cosas también, por fin me di cuenta de lo que el había sentido cuando le metí la puntita de mi dedo, que por cierto entro con mucha facilidad, no puso resistencia, entonces empezó a chupármelo, acariciar mi trasero y meter el dedo pequeño en mi anito, wow sentí de pelos!!! Lo fue metiendo poco a poco, en lo que yo abría la boca, dejaba el agua entrar, cerraba los ojos y sentía un gran placer al sentir como entraba su dedo, poco a poco, hasta que llego hasta el fondo, después me lo volvía a sacar y me lo volvía a meter, lo hacia tan rápido y con tanta delicadeza que estábamos extasiados los dos, entonces se levanto y me volteo, y acerco su pija en mi trasero, su pija estaba a mil y yo solo esperaba que tratara de meterme su pija hasta el fondo de mi y me hiciera gritar de pasión, entonces empezó a meter su pellejito en mi hoyito, y empujando poco a poco para que entrara pero era algo inútil, solo entraba la puntita y no quería entrar mas, porque como que se le doblaba la pija entonces saco la puntita de su pija y la puso entre mi raya y empezó a hacer un movimiento que me dejo encantado, metiendo y sacando su pija en la rayita sin penetrarme hasta que mi pene tomo el tamaño que nunca antes había podido llegar. Me voltee y nos volvimos a abrazar, acariciar nuestros traseros, besándonos, y confundiendo el agua con nuestras salivas mojándonos todo nuestro cuerpo, hasta llegar a un orgasmo, que fue casi al mismo tiempo, no se quien fue primero, quizás el uno espero al otro, quizás el lo tuvo primero o el después, pero cerramos nuestros ojos, recargamos nuestras cabezas en nuestros hombros, hacíamos movimientos con la cadera, haciendo resbalar nuestras pijas y sintiendo esa sensación deliciosa, apretando nuestros cuerpos, abriendo la boca, dejando salir nuestra saliva, cerrando los ojos y dando pequeños suspiros. Al terminar esa experiencia maravillosa, mi primera experiencia de mi vida en un jacuzzi con agua tibia nos secamos nuestros cuerpos el uno al otro y nos vestimos.

Y asi pasaron los días, creo que fue el mejor día de mi vida, nunca olvidare ese día, a veces me arrepiento de haber tenido tanto sueño y desperdiciar esa maravillosa noche, el reventón y las caricias de Aarón, pero cuando se es niño no se piensa mucho en esas cosas.
Cuando salimos del hotel, la ciudad era un caos, parecía que estaba parada, no había muchas personas fuera, al menos despiertas, porque vimos a muchas personas dormidas en la playa y en las calles, parece que pasaron una linda y larga noche.
Pero como en cualquier cuento o historia debe de llegar el momento triste… y asi fue en esta ocasión, siguieron pasando los días, hasta el día, que llego el momento mas triste de mi vida, el se tenia que ir, y teníamos que despedirnos.

Fue un día triste, porque en la mañana me fue a ver y me dijo que ya se iba, no salimos a hacer nada, solo nos quedamos en nuestra habitación platicando y disfrutando de nuestros cuerpos por última vez y en verdad fue la ultima vez, cuando me grabe en mi memoria el olor, sabor y estructura de su bello cuerpo rubio. Los días pasados fueron casi los mismos, travesuras en los jacuzzis, en las albercas, en nuestra habitación a escondidas, cuando nos perdíamos de su mama y de mi hermana sin pedir permiso, pero esta vez fue amor, fue todo el amor que nos teníamos guardados y tenia que salir ese día, el 4 de enero del 2000. Empacaron sus cosas, me despedí de Ariel, de los amigos de Ariel, mi hermana y su novio hicieron lo mismo, parece que terminaron siendo buenos amigos, y me despedí de Aarón, algo que me costo mucho trabajo entender y creerlo, prensar que esa podría ser la ultima vez que lo vería, tenia tantas lagrimas guardadas dentro de mi, que rogaba porque no salieran, hasta que se despidió de mi y salio de su habitación y se fueron en un taxi hacia la Terminal de autobuses para irse a San Cristóbal en Chiapas.
Yo me fui dos días después que el, no lo podía creer todavía, lo extrañaba tanto, pasaba tiempo en mi habitación solo recordándolo, llorando, tratando de regresar el tiempo en que estábamos abrazados en mi cama, recordando todo lo que habíamos pasado en esos momentos, tratando de recordar su rostro, pero tanta tristeza me lo impedía, me sentía solo en esas vacaciones, y perdió el sentido salir con mi hermana, la playa no era lo mismo para mi, ni la alberca, a veces ni quería ir al jacuzzi porque lo recordaría y me deprimiría mas, a veces tocaba la habitación 238 con la esperanza de que el abriera la puerta y me sonriera, con una cara a veces dormida, pero era inútil, esa puerta nunca se abría, por mas que la tocaba, y que trataba de abrirla para respirar el olor que había dejado en ella, era totalmente inútil.

El día 6 de enero empaque mis cosas y tenia una gran melancolía guardada que mi hermana y su novio se dieron cuenta, y solo me decían no te preocupes donde vamos a ir ahora vas a tener de nuevo amigos, a veces quería irme ya de Playa Car, porque tenia tantos recuerdos guardados esa ciudad que me era imposible quedarme mas ahí, pero por otra parte no quería irme, quería seguir recordando, respirando y torturándome a mi mismo recordando cada lugar, cada esquina del hotel, cada esquina de la alberca, la arena donde nuestros cuerpos jugaron, todo y cualquier lugar me lo recordaba quería seguir recordándolo pero solo me hacia la herida mas y mas grande, pero no había opción, teníamos que irnos de Playa Car, el paraíso donde mi vida tuvo sentido.
Nosotros salimos hacia Palenque en Chiapas, la melancolía desaparecía poco a poco con la esperanza de volverlo a ver, y esa esperanza se cumplió! Aunque no lo puedan creer llego a cumplirse, me lo encontré en Palenque que es un lugar turístico de Pirámides, yo lo vi de lejos y lo fui a saludar, nos emocionamos tanto de vernos que queríamos irnos juntos, salude a su mama, mi hermana y su novio los saludaron de nuevo y Ariel le dijo el nombre del hotel en donde se estaban quedando en Palenque, mi hermana le dijo que donde nosotros nos hospedaríamos esta cerca de ese hotel, cosa que a nosotros nos dio gusto.

Entonces ese día, nos divertimos al máximo, el primer juego que jugamos fue toro, esperando a unos amigos de mi hermana que venían de la ciudad de México para visitar las pirámides y todos juntos ir, cuando llegaron nos fuimos todos, los amigos de mi hermana, mi hermana, su novio, Ariel, sus amigos, Aarón y yo, entramos a las pirámides y decidimos perdernos los dos juntos, nos separamos de su mama y de mi hermana y visitamos las pirámides por nuestra parte, porque nos parecía muy aburrido ir al paso en el que iban los grandes, y asi siguió el día, hasta llegar el atardecer cuando nos juntamos con los grandes y nos despedimos de nuevo, teniendo la esperanza de que nos volveríamos a ver, pero no nos dimos cuenta que esa vez si seria la ultima que nos veríamos, me hubiera gustado verlo venir, pensar en que esa pudiera ser la ultima vez que lo vería, y perdernos juntos, abrazarlo, besarlo, decirle todo lo que lo amo, todo lo que eh sufrido por el, y que no quería sufrir mas, pero no me di cuenta, teníamos una gran esperanza de que al día siguiente nos veríamos, el me iría a ver con Ariel, pero todo cambio, nos despedimos, normal, como dos personas que se ven todos los días y saben que al día siguiente se volverán a ver, pero ese día no fue asi, al día siguiente me desperté temprano y me arregle, y lo espere, esa espera se hacia cada vez mas eterna, era una espera que parecía que nunca iba a terminar, parecían años, cuando mis ojos volteaban hacia la puerta del hotel que en realidad no era un hotel, era un gran terreno de pasto verde, donde había muchas casas de campaña donde se encontraba la mía y la de mi hermana juntas y solo había un restorant, un bar, y dos albercas.

Esperándolo, las horas pasaban las personas que entraban no eran ni el ni Ariel, no hice nada mas ese día mas que ir a la puerta muchas veces a esperarlo, regresar a mi casa de campaña y seguir viendo hacia la entrada al Camping, pero nunca llego, al día siguiente me decidí irlo a ver, a escondidas sin el permiso de mi hermana cosa que me costo un regaño después, pero no me importaba, porque lo único que deseaba en esos momentos era volverlo a ver, a abrazarlo, a tocarlo, asi es que salí del Camping y afuera no había nada, mas que selva, pura selva y una carretera que se veía interminable, mi hermana me dijo que el hotel donde se hospedaba Ariel que tampoco era un hotel en realidad, era un camping, se encontraba a la derecha del nuestro a unos metros quizás, entonces me decidí a salir e irme por la derecha de la carretera, caminar, a veces correr para encontrar ese Camping, pudo ser que nunca hubiera encontrado ese camping, pudo ser que Ariel halla dicho una mentira de que en realidad no acampaban ahí, pudo ser que Ariel se equivoco de la ubicación o del nombre del Camping, pudo ser que me hubiera perdido o me hubieran hecho algo con la esperanza de encontrar ese hotel, pero como eran tanto mi amor hacia el no pensé en todas esas cosas, hasta ahora lo hago, en esos momentos solo quería encontrar todos los campings de esa carretera hasta saber de el, era tan grande mi amor hacia el que me no me importaba lo que pasara en esos momentos y asi pasaron una o dos horas caminando y corriendo por la carretera y la selva tratando de encontrarlo, hasta que por fin llegue, a un camping llamado como Ariel nos había dicho, cosa que no recuerdo ahora como se llamaba ese camping pero se encontraba en Palenque, había muchas casas de campaña también, y mucha gente, se me hacia imposible encontrarlo, entonces pregunte a algunos encargados del camping, preguntando por una mujer rubia alta, de ojos azules llamada Ariel y su hijo rubio de ojos azules, de cabello largo y rizos llamado Aarón, pero la mala noticia llego, no quería que ese encargado me digiera esas palabras, pero las dijo “ellos ya se fueron” “ya no están aquí” mi cuerpo quería destrozarse en esos momentos, estaba tan cansado, quería tirarme al piso y llorar y gritar su nombre y decirle al encargado que no es cierto, que ellos seguían ahí y buscar por mi propia cuenta, pero no lo hice, lo único que hice fue decirle al encargado “esta seguro” “esta seguro de que ellos no están aquí” y me dijo que si estaba seguro que habían salido el día de ayer en la mañana, solo se quedaron dos días. Yo solo le di unas gracias, y me dirigí hacia la entrada del Camping, mi cuerpo y mi alma estaban destrozados, quería morir en esos momentos, tenia tanta tristura dentro de mi, una melancolía enorme y mis sueños se habían derrumbado rápidamente, en esos momentos sentí que este viaje y mi existencia no habían valido la pena, no sabia muy bien lo que sentía en esos momentos, si tristeza, melancolía, rabia al saber que Ariel no fue a mi Camping o que me avisara que se irían el día anterior, pero todo eso se junto y fue como una gran bomba que estaba por explotar dentro de mi.

Me dirigí triste hacia el camping, estaba muy cansado y con la cabeza abajo, como una persona derrotada, a los pocos minutos paso un auto cerca de mi, se detuvo, en realidad no me preocupe por lo que me pudieran hacer, estaba totalmente ido, con los ojos nublados y pensando que pasara lo que pasara estaría bien, ya no me importaba nada mas, eran unos chavos jóvenes mexicanos que me dijeron que si hablaba español, yo les dije que si, y me preguntaron que si quería un aventó, yo les dije que si, que estaba en el camping a unos metros de ahí, me subí al auto, eran dos chavos y dos chavas de 20 años mas o menos que venían de Querétaro, a los pocos momentos entablaron una conversación conmigo, de donde era, que edad tenia, mi nombre, que hacia en la carretera solo, y muchas cosas asi, cosas que yo solo respondía con un si o con un no, con simples respuestas y con una gran tristeza en la cara les demostraba que no tenia fuerzas de hablar, asi es que me dejaron en la entrada de mi camping, yo les di las gracias y me fui a mi casa de campaña y estaba tan cansado que lo único que quería era acostarme y llorar como un niño, pero llego mi hermana, me pregunto que donde había estado, parecía muy preocupada, me dio un pequeño regaño, yo solo le dije que había salido a la selva a buscar víboras y arañas, y que me había perdido, y que hasta ahora llegue, que estaba muy cansado, no le quise decir la verdad porque si no me pudo haber ido peor, solo le dije un perdón, y que no volverá a pasar cosa que me entendió y no me hizo mas preguntas, solo me dijo que si volvía a salir sin permiso no volvería a invitarme a salir con ella, me dirigí a mi casa de campaña, me acosté, la cerré, y me puse a llorar calladamente para que no me escucharan, quería gritar en esos momentos y gritar desesperadamente su nombre, pero no podía hacerlo, deseaba morir en esos momentos, maldecir el día en que lo conocí, pensar que hubiera sido mejor no haber estado tomando el sol en esos momentos y estar nadando en la playa de Playa del Carmen, y no haberlo conocido ni siquiera de lejos, pero era demasiado tarde y el dolor ya estaba hecho, había una gran herida dentro de mi que no sanaba, y que duro días, meses quizás años, quizás ahora mi cuerpo es adicto a el y lo busca interminablemente en mi imaginación, fue por eso que me anime a escribir esta historia con todo tipo de detalles para tenerlo siempre dentro de mi.
Siguen pasando los días y lo recuerdo como loco, recuerdo el color de su cuerpo, de cada rincón de su cuerpo, sus olores, sus sabores, su sonrisa, su cara, su cuerpo, su cabello, sus rizos, sus ojos, su nariz, como si fuera alguien que eh visto en toda la vida y es casi imposible olvidar esos detalles, pero no es asi.

Cuando nos despedimos en playa del carmen, nos dimos nuestros datos, el me dio su dirección en Francia, yo la mía, nuestros teléfonos y yo le di mi email, el no tenia, pero el se quedo con el mió. Hace dos años quizás, me agrego una persona al Messenger que hablaba francés e ingles y preguntaba por mi, y me di cuenta de que era el, me dio tanto gusto saber de el de nuevo, aunque sea por letras que el escribía con tanto amor hacia mi. Seguimos en contacto varios años mas, a veces nos peleábamos, quizá por celos, o por cosas asi, nos volvíamos a perdonar y ser amigos de nuevo, nos perdíamos la pista, el dejaba de entrar o yo, y asi paso, varios meses, recordando de todo lo que habíamos vivido en playa car y en Chiapas, cosas que no eran lo mismo sin estar el uno junto al otro reviviendo esos momentos.

Ahora estoy comunicándome con el a menudo, incluso el me convenció a que escribiera esta historia, el no entiende muy bien el español, al menos escrito, pero me encargue ya de hacer una traducción para que entendiera mas o menos las ideas de esta historia, y le pareció muy linda, y me dijo que estaba hecha para ser conocida por todo el mundo, asi es que por fin me anime, ya es hora de que todos sepan que este amor fue fuerte, y que lo sigue siendo… espero que les halla gustado, incluso con la comunicación que llevamos ahora, decidimos hacer una comunidad juntos con el nombre de un lugar que nos gusto mucho, quizás ahora me doy cuenta de que es el mejor antro que eh conocido en mi vida… la comunidad lleva el nombre de ese antro, pero en francés… es “Le Capitaine Tutix”, con el nombre de Aarón y el mió, y hacer una comunidad juntos para mezclar talentos y recuerdos.

El ahora esta viviendo en Toulouse, con unos tíos y su mama, se preguntaran… “¿Tenia Papá?” la respuesta es sencilla, desde el principio me dijo que estaban sus papas separados, y que su papa llamado Víctor vivía en Francia.

Hace unos años, después de que nos conocimos, se regreso a playa car y estuvo viviendo un tiempo ahí con su mama y con sus amigos mexicanos, pagando entre todos una casa cerca del mar, después me entere de que se fue a Chiapas en San Cristóbal De Las Casas, estuvo unos meses ahí y de ahí se regreso a su país, a Francia, no en su ciudad natal que es Cote d’ Dor, pero se fue con sus tíos y con su mama a Toulouse y ahora dice que le va muy bien, tiene muchos amigos, es feliz, parece que es todo un galán jejeje. Nos extrañamos mucho mutuamente, esperando volvernos a ver algún día, yo al menos ruego por volverlo a ver algún día de mi vida, y abrazarlo tan fuerte y despertando esa pasión y amor que están dormidas dentro de mi.
Han pasado varios años ya, miles de kilómetros de distancia, miles de kilómetros de mar y de tierra nos separan ahora, mi cuerpo adicto al suyo tiembla dolido por su ausencia, mi ser entero le extraña tanto, sus olores y sabores característicos, su persona es un bellísimo recuerdo que me persigue inalcanzablemente, las lagrimas que a veces acarician mi rostro son señal inconfundible de la nostalgia que me asfixia y me mata día tras día, pero también son la forma húmeda de la felicidad y el fuego que ah prendido en mi corazón su bello recuerdo. Te extraño Aarón…
Fin

Andre 18 de febrero del 2004