Accidente en el rio
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por maco37.
Esto es lo que me paso cuando fui a visitar a un matrimonio amigo.
Para comenzar debo describir el lugar.
Mis amigos viven a la orilla de un río bastante grande que queda en las afueras de la ciudad, es un lugar de ensueño, solo tranquilidad, ideal para relajarse, son casas muy lindas, en general de gente adinerada, la única forma de llegar es por medio de lanchas propias o de pasajeros que pasan a ciertas horas, la gente que vive en ese lugar, si bien todos se conocen y son vecinos, para visitarse lo hacen por medio de las lanchas o canoas que usan para cortas distancias, es la única forma de visitarse entre ellos.
El caso es que yo llevaba unos días ahí descansando de unos días terribles en mi trabajo y ellos me habían ofrecido que me pasara mis vacaciones con ellos.
Fue en esos días que comencé a preguntarle por los vecinos que a veces veía desde el muelle de la casa, ellos me explicaban quieren eran y con quienes vivían, un día les pregunte por un hombre que había visto a lo lejos en el mismo lado del río que estaba yo, ellos me dijeron que era un hombre solitario y que poco se sabia de su vida, a pesar que sabían que se llamaba Álvaro y que siempre cuando pasaba en su lancha los saludaba muy cortésmente, a parte de eso nada mas.
Fue un atardecer que yo estaba en el muelle cuando el río estaba en crecida y se había puesto muy torrentoso, yo veía como el agua comenzaba a subir fue en eso cuando escuche un fuerte ruido y caí al río, el agua con la fuerza que venia se había llevado un pilar del muelle, yo cuando estaba en el agua, si bien se nadar es muy difícil nadar contra la corriente, y el río me comenzó a arrastrar, parecieron muchos minutos en los cuales yo estaba agotado y asustado, en eso sentí que lanzaron una cuerda de la cual me aferre muy fuerte y sentí como salía del agua, agotado solo pude ver a un hombre que me ayudaba a salir, el hombre me agarro del brazo y me llevo a su casa, cuando entre pude fijarme en el, creí que me había muerto y estaba frente a un ángel era un hombre de aproximadamente 30 años, con el cabello casi rubio ondulado, unos ojos verde intensos unos labios gruesos con una barba de unos días, cuando fui viendo su cuerpo… era alto 1.80 con unos brazos fuertes y un suave vello que los cubría, sus piernas a pesar del jeans se veían gruesas y bien formadas, cuando recupere el aliento le di las gracias, el me pregunto como había terminado en el río y de donde venia, me miraba con mucha desconfianza, cuando le dije que estaba en la casa de un matrimonio amigo y le explique quienes eran cambio su actitud y se relajo, me dijo tengo que avisarles que estas aquí, llamo por teléfono y les contó lo sucedido, y les dijo que era imposible que me vinieran a buscar o que el me llevara ya que el río se había puesto muy peligroso, y que seria mejor que pasara esa noche ahí y que el me llevaría cuando el río se calmara.
Yo para esto ya temblaba de frío ya que estaba con toda la ropa mojada, el hombre cuando termino de hablar me miro y me dijo: será mejor que te saques esa ropa esta toda con barro y te vas a enfermar, me dijo que mejor que me diera un baño caliente así entraba en calor, me llevo al baño, y me dejo una toalla, cuando termines llévame la ropa así la pongo a lavar, me bañe y salí con la toalla a la cintura, el me vio y mientras ponía la ropa a lavar me ofreció un café, ya mas aliviado nos pusimos a conversar me dijo me llamo Álvaro, era el vecino de mis amigos, el agua me había arrastrado casi 200 metros, me pregunto como había caído y solo supe decirle que estaba en el muelle y del fuerte ruido, y termine en el agua, a todo esto Álvaro me dijo que iba al parque, si quería acompañarlo, la noche estaba muy agradable así que salí solo con la toalla en mi cintura, era un parque enorme y muy bien cuidado, había una pileta de natación, nos acercamos y vi que Álvaro se comenzó a sacar la ropa, yo me puse nervioso por ver su cuerpo, quedo en unos boxer blancos que marcaban su firme trasero y un gran bulto adelante, me dijo llegaste justo a la hora que nado un rato, ¿quieres acompañarme? Yo le dije que estaba sin traje de baño, el comenzó a reírse y me dijo: yo tampoco, me baño desnudo, se saco el boxer y vi un miembro que estaba en reposo pero enorme y muy grueso, me dijo a esta hora nadie ve, así que suelo nadar desnudo, y se zambullo en el agua, yo no podía creer lo que veía, un hombre hermoso, desnudo y nadando delante de mi, me di vuelta y me saque la toalla quedando desnudo dándole la espalda, sentí como me miraba, creo que no me describí, tengo 24 años, mido 1.75 ojos color miel cabello castaño y un cuerpo normal, lampiño y si con un muy buen trasero ya que los novios o amantes que tuve siempre me lo decían. Me zambullí y enseguida estaba nadando a la par de Álvaro, dimos unas vueltas a la pileta y luego nos sentamos a descansar en las escaleras yo me senté un poco mas abajo así que el agua llegaba a mi pecho Álvaro un poco mas arriba el agua apenas le cubría los vellos de su pubis y su miembro, me contó que vivía solo y que se había separado hace unos años y que vivía ahí por que le gustaba la soledad, yo miraba de reojo hacia su miembro y veía como se movía en el agua, estaba nervioso y deseando a ese hombre.
Seguimos nadando un rato en eso Álvaro se me perdió de mi vista y salio detrás mío quedando muy pegado a mi podía sentir como crecía su miembro tocándome mis nalgas, me di vuelta y solo sentí un beso en mis labios enseguida estábamos abrazados y tocándonos todo el cuerpo, nos miramos y sonreímos el me volvió a abrazar y me llevo a la orilla me levanto apoyándome sobre mi estomago en el orilla de la pileta dejando mi trasero fuera del agua, comenzó a abrir mis nalgas y metió su lengua buscando mi agujero palpitante por su miembro cuando me penetro con su lengua solo pude gemir de placer siguió metiéndome un dedo luego dos y alternando con su lengua, luego me comenzó a bajar con mis piernas abierta me sostenía de mi trasero, ahí estaba su miembro esperando por mi agujero, cuando su cabeza comenzó a rozar la entrada solo gemí de placer, así comencé a bajar y fue entrando ese enorme miembro en mi, sentí que me abrían en dos, me dolía demasiado, pero era mas mi placer, sentí cuando sus enormes bolas tocaron mis nalgas, me sentía empalado por completo, el me giro la cabeza y me dio un beso al mismo momento que me comenzaba a subir y me dejaba caer sobre su miembro clavándolo hasta el fondo, el agua hacia que todo fuera mas suave, estuvo así un rato hasta que me lo saco, me dio vuelta, me abrazo y me beso mientras alzaba mis piernas hasta su cintura, me colgué de su cuello y lo abrase con mis piernas quedando con mi culo abierto y esperando nuevamente ese miembro que me había dado tanto placer, el con sus manos abría mis nalgas y mientras me besaba me ubicaba sobre su miembro, esta vez entro de un solo golpe, me sentí en la gloria, me sentía feliz, estuvo así un rato hasta que comenzó cada vez mas fuerte, sentí como su enorme miembro crecía mas dentro de mi y comenzaba a llenarme con su leche, y cuando digo llenarme, me lleno literalmente ya que no terminaba nunca de acabar dentro de mi, yo solo lo abrazaba y besaba comencé a tener un orgasmo sin siquiera tocarme, fue tan grande el placer que sentí que creí desmayarme, salimos de la pileta tomados de la mano, estando afuera me abrazo y me beso muy dulcemente, me pregunto si me había sentido bien con el, solo lo bese y le dije: seguimos?.
Nos fuimos corriendo a la casa tomados de la mano, me llevo a su habitación se acostó de espaldas y yo comencé a besarlo, y a acariciar su hermoso cuerpo, comencé a bajar por su cuerpo hasta que llegue a ese miembro que me había echo tan feliz, solo me lo metí a la boca y comencé a lamerlo como si fuera mi ultima vez, enseguida comenzó a crecer y ya estaba a su máximo tamaño era enorme, grueso, no se como había echo para entrar todo en mi, Álvaro me acaricio la cabeza, y me comenzó a penetrar por mi boca yo solo lo recibía con el mayor de los placeres, luego me ubico encima de el quedando en un perfecto 69 se metió todo mi miembro en la boca, sentí una corriente por todo mi cuerpo, el seguía con su lengua por el camino hasta mi agujerito y comenzaba a penetrarme con su lengua, así estuvimos un rato hasta que sentí que su miembro crecía mas y mas dentro de mi boca, Álvaro comenzó a gemir y entrar cada vez mas fuerte en mi boca hasta que sentía como salía su leche con una fuerza increíble y la cantidad que salía cada vez mas, trate de tomar toda, pero me fue imposible saque su miembro de mi boca y seguía lanzando su leche en toda mi cara, enseguida se volvió a meter mi miembro en su boca hasta que con gemidos lance toda mi leche en su boca, no quedo una gota afuera, cuando me beso sentimos nuestras leches en nuestras bocas y en mi cara, con su lengua me limpio todo rastro de su semen, me abrazo y nos quedamos un rato abrazados, me dijo que siempre había tenido la fantasía de estar con un hombre pero nunca se había animado hasta esa noche, yo no lo podía creer, fui su primer amante, lo bese y le sonreí, y me dijo, te haré el amor toda la noche, no creí que fuera cierto, como me equivoque, enseguida me abrazo y me llevo mi mano hacia su miembro, nuevamente estaba duro como una roca yo me sorprendí el solo se rió y me dijo: te lo dije, enseguida estaba de espalda esperando que yo me sentara sobre su mástil, me fui sentando poco a poco hasta que nuevamente pude sentirlo todo dentro mi, me hacia feliz, el se sentó, quedando yo sentado sobre el abrazándolo con mis piernas y mis brazos, nos besábamos y comenzaba nuevamente a entrar y salir de mi cuerpo, yo solo sentía placer y quería que estuviera toda la noche dentro de mi, luego me puso de espaldas con mis piernas en sus hombros y siguió penetrándome suavemente y firme a la vez, estuvo un rato así haciéndome gozar como nunca, me miro a los ojos y me dijo si podía pedirme algo, le dije que lo que quisiera, me comento que había una posición que nunca había echo con nadie y quería hacerla conmigo, solo le dije, que no me pidiera nada, que hiciera lo que quisiera, que yo haría lo que fuera, me beso, era una de sus fantasías que me pusiera de rodillas en la cama de perrito ofreciéndole mi trasero, esa es una de mis poses preferidas y se lo hice saber, se ubico entre mis piernas y de un solo golpe entro hasta el fondo, a pesar que mi agujero ya estaba dilatado, sentí el golpe y el dolor, comenzó a penetrarme cada vez mas fuerte yo volví a tener un orgasmo sin siquiera tocarme, estuvo así bastante rato hasta que volví a sentir su leche que llenaba mi interior, volví a sentirme lleno y feliz. Cumplió su promesa, me hizo el amor toda la noche, a la mañana cuando nos levantamos vi con tristeza que el río había bajado, eso era señal que tenia que volver, Álvaro se dio cuenta y me dijo, te iré a dejar, pero en la tarde te voy a buscar para que me acompañes al puerto.
Cuando me fue a dejar a la casa de mis amigos me dijo te paso a buscar mas tarde y me guiño un ojo sonriéndome.
Esa tarde paso, saludo a mis amigos, me pregunto como estaba y que iría al puerto si necesitábamos algo, mis amigos le dijeron que gracias pero no necesitaban nada, yo le dije que se me habían terminado los cigarrillos y me había olvidado de llevar, el me dijo, por que no me acompañas así me ayudas con unas compras, mire a mis amigos y enseguida me dijeron que fuera que eran mis vacaciones, subí a su lancha y nos fuimos.
El puerto quedaba a una hora en lancha, cuando íbamos me dijo, no voy al puerto quiero que me acompañes a un lugar, enseguida le dije que iría donde el quisiera, nos metimos por unos canales hasta que llegamos a un lugar muy hermoso solo árboles y prados en medio de varias islas, bajamos de la lancha y me dijo esto es mío, voy a construir una casa, lo mire y le pregunte por la de el, me dijo tengo varias, las alquilo, pero acá me gusta mas así que me voy a venir a vivir acá, nos acostamos sobre el césped y ahí volvió a hacerme feliz, nos desnudamos y comenzamos a besarnos y acariciarnos, yo quería aprenderme su cuerpo de memoria, no había lugar que no acariciara y besara, el hacia lo mismo conmigo, esta vez me puso boca abajo y comenzó a penetrarme con mucha dulzura y pasión, estuvo mucho rato dentro de mi hasta que volví a sentir como llenaba mi interior, en esos momentos me hacia el hombre mas feliz del mundo, esta vez se quedo dentro mío un momento y volví a sentir como crecía su hombría en mi interior, yo no lo podía creer, era el perfecto amante, un verdadero semental y cada vez que me llenaba con su dulce néctar era igual o mas abundante cada vez.
Volvimos a la casa de mis amigos, al dejarme en el muelle me pregunto: ¿te espero a cenar?, le dije que si pero que mis amigos sospecharían y no quería ponerlo en evidencia, el solo me dijo, soy feliz y quiero disfrutarlo y si se enteran no tengo problemas, se fue a su casa, yo cuando entre a la casa estaban mis amigos, ellos ya habían sospechado, y yo se los confirme cuando les dije que pasaría la noche con el, ellos me dijeron que estaban felices y total yo estaba de vacaciones, así que lo disfrutara, ese atardecer me fui en la canoa de mis amigos. Álvaro me estaba esperando en el muelle, me recibió con un beso y entramos abrazados a su casa, luego de cenar nos fuimos a ver una película, estuvimos todo el rato abrazados, cuando termino la película me dijo: te tengo una sorpresa, y comenzó a besarme y a desnudarme, en un segundo ya estábamos los dos desnudos, me besaba y me abrazaba, me dijo: no sabes lo contento que estoy, soy el mas feliz de los hombres nunca pensé que podía ser feliz con un hombre, quiero que esta vez me penetres, quiero ser tuyo así como tu fuiste mío, yo me sorprendí, pero a la vez me alegre mucho, sabia que tendría que hacerlo con mucha paciencia y mucho cuidado ya que el tenia su hermoso trasero virgen, lo bese y lo fui sentando en el sillón, fui bajando por su pecho saboreando y disfrutando su piel, el gemía y se retorcía de placer, cuando llegue a sus tetillas sentí como se le erizaba la piel y se ponían duras con el contacto de mi lengua, seguí bajando hasta llegar a su miembro, el cual disfrute por un buen rato el se retorcía cada vez mas, seguí bajando hasta llegar a su agujero virgen, el dio un suspiro, cuando comencé a penetrarlo con mi lengua, el solo gemía yo metía mi lengua y luego la pasaba por los bordes de su agujero, me humedecí un dedo y lo comencé a meter en su agujero, el dio un gemido de dolor y placer, seguí dilatándolo por un buen rato, hasta que el me dijo: por favor hazlo ya, no aguanto mas las ganas de tenerte dentro, puse sus piernas en mis hombros, lo bese y comencé a ponerle mi miembro en la entrada de su agujerito, sentía la resistencia, en un momento logre meter la cabeza, el grito de dolor
Me quede quieto para que su estrecho canal se acostumbrara, a los pocos minutos comenzó a moverse mientras me besaba, cada vez entraba mas y mas el gemía de dolor, hasta que por fin entre completamente en su cuerpo, el solo me miraba y besaba, cuando su cuerpo se aflojo comencé a penetrarlo suavemente, se lo sacaba un poco y volvía a meterlo todo, cada vez se lo sacaba mas y volvía a entrar hasta que comencé a penetrarlo fuertemente, solo gemíamos de placer en un momento sentí como mi miembro se hinchaba y descargue todo mi semen dentro de su agujerito, sentí como su agujero se cerraba apretándome mi miembro, el también estaba acabando, su leche salio con tal fuerza que nos llego a la cara, a nuestras bocas, no me importo que estuviéramos así y nos besamos, el comenzó a llorar, yo me asuste, el me abrazo y me dijo: no puedo creer que sea tan hermoso todo esto, nos besamos, nos fuimos a bañar a la pileta, estuvimos horas abrazados y besándonos, hablando de cómo nos sentíamos, así paso esa noche, y me quede por el resto de las vacaciones con el.
Cuando terminaron mis vacaciones estábamos muy tristes pero sabíamos que nos veríamos los fines de semana, así seguimos un tiempo, yo viajaba los fines de semana y éramos felices amándonos, en la semana hablábamos por teléfono todos los días y esperábamos ansiosos el fin de semana.
Un buen día me llamo por teléfono a mi trabajo y me dijo que teníamos que hablar, note su voz preocupada y le pregunte que pasaba, solo me dijo te espero en la puerta de tu trabajo, me imagine que debía ser algo grave ya que el odiaba ir a la ciudad y alejarse de su isla, cuando salí me abrazo y me beso, al preguntarle que pasaba, me dijo con lagrimas en sus ojos no puedo seguir así, no puedo estar un día sin verte quiero que te vengas a vivir conmigo, te amo, en ese mismo momento abandone todo y me fui a vivir con el, termino nuestra casa y nos fuimos a vivir ahí, nos amamos todos los días a cada momento y soy el hombre mas feliz cuando me hace el amor.
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