Adolescencia edad de oro: tío de pueblo
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
-necesito que desocupes tu habitación-
esas fueron las palabras que cambiaron mi vida; mi tío se venía a vivir con nosotros pues se había peleado con su esposa, por lo cual dejaría su pueblo y se vendría a la ciudad, yo llevaba una vida tranquila aunque ya había tenido experiencias sexuales antes, yo en ese entonces con 14 años algo gordito, güero y con un cierto atractivo, me vi obligado a dejar mi habitación para que mi tío se hospedara ahí, obviamente molesto pues se me hacía injusto…. hasta que lo ví, he decir que tenía años que no nos visitaba, rondaba los 50 pero vaya cuerpo (chaparrito pero bien músculoso por el trabajo de campo, piel quemada por el sol, manos callosas, todo un macho, sombrero y botas un típico hombre de rancho).
-hola Roberto- me dijo
-hola tío Fernando- respondí
los días fueron pasando y yo no perdía oportunidad de verlo, a veces sin camisa, mostrando ese pecho duro y marcado.
conforme la confianza aumentó hablábamos más, hasta que entramos en términos de sexo, el orgulloso me contaba todas sus experiencias sexuales (esa fue la causa del pleito, constantes infidelidades), como gozaban las mujeres con las que había estado y yo por dentro muriendo de antojo, decidí usar mis trucos ya aprendidos.
-oie tio, y si un hombre te dijera que le gusta la reata y quiere mamartela ¿que dirías?-
-pues si estoy arrecho diría que si-
-ohhh ¿y si fuera uno de mis primos?-
-pues depende si ando urgido-
pasaba el tiempo y yo le seguía preguntando hasta esa noche en que todos los demás dormían y el y yo veíamos una película….
-oie Robert ¿que crees que soñé ayer por tu culpa?-
-¿que?-
-soñé que un puto venía, entraba a mi cuarto y me la mamaba, desperté cómo carpa de circo por tu culpa, tanto que insinuas eso-
– ¿apoco? (*este es mi momento* pensé) oie tío te digo algo?-
-haber-
-yo… yo soy puto-
-¿enserio?-
-sí, pero no digas nada ¿ok?-
-sí no te preocupes, me voy a bañar-
se fue y cuando volvió le dije:
-tío ¿algún día te la puedo mamar?-
-déjame pensarlo-
se metió a su cuarto, yo espere como media hora hasta que no aguante y me metí a su cuarto y le dije:
-no aguanto te la quiero mamar ahora-
le baje el short y sorpresa no tenía ropa interior, esa verga me volvió loco, no era larga como 13cm pero era muy gruesa como 7cm de ancho, y con abundante vello, me la lleve a la boca y la empeze a degustar, era lo máximo, le pasaba la lengua por toda la verga, me sentía en la gloria, y el gemia de placer,
-aghh aghh Roberto- decía en voz baja
chupé sus testículos, grandes y gordos, olía a limpio, el me tomó de la cabeza y la metía más y más, gemia y yo me sentía de lo mejor, subí lamí sus vellos púbicos y el se estremecía del placer, subí a su abdomen, lo lamia llegué a sus tetillas y las chupé, el gozaba, volví a bajar y lentamente, el sólo gemia cuidando no hacer mucho ruido pues mis padres dormían a lado,
-roberto Roberto- decía entre jadeos
yo lamia esa verga que me alucinaba
-me vengo Roberto-
yo mamé con más ímpetu para sacar hasta lo último
-roberto Roberto aghhhhhh, mmmm aghhh- dijo
yo sentí la leche en mi boca, de un sabor agradable, me lo tomé todo, el dijo: Gracias.
yo sólo dije: Gracias a ti, y salí de su habitación feliz y contento a dormir a gusto.
espero les haya gustado, comenten que les pareció, la historia no acaba ahí tengo mucho que contar ahora, muchas experiencias
su amigo
robert0xD
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