Adrian (12) masturba a su padrastro mientras duerme

A Adrián le asusta las noches tormentosas. Sin querer encuentra en el miembro de su padrastro, la calma que necesitaba para poder dormir bien..

Adrián pasó a formar parte de la familia cuando Susana, la madre de Claudio, se enamoró de él y lo llevó a vivir a su casa pocos días después. Esto ocurrió cuando Claudio tenía doce años, mientras que él tenía alrededor de 40 años.

Al principio, Claudio sintió celos de él, pensando que competía en amor con su verdadero padre. Cosas de niños… Sin embargo, cuando se dio cuenta de que no era así, comenzó a tomar cariño a Adrián, y aunque no compartían lazos de sangre, no tardó en quererlo como a un miembro cercano de la familia.

Por su parte, Adrián siempre se mostró cariñoso con ella. Por la forma en que la cuidaba y protegía, se podía ver que siempre había deseado tener hijos o al menos una hija, pero, por razones de la vida, no se había dado la oportunidad.

A medida que pasaba el tiempo, la relación entre ellos se volvía más tierna y hermosa. Compartían sus pensamientos, se reían juntos, compartían gustos musicales y, a veces, tenían sus desacuerdos. Él correspondía a esta complicidad con discreción y confianza, siempre teniendo la respuesta adecuada para cualquier pregunta que el le hiciera.

Claudio estaba en el pleno auge de su adolescencia y enfrentando los cambios propios de la edad. Por otra parte le aterraba las noches de tormenta. Cuando era pequeño, según sonaba el primer trueno corría a refugiarse en la cama de sus padres.

Sin embargo, aquella noche no pudo evitarlo, siendo que Adrian, no era su verdadero padre. Antes de darse cuenta se encontró abriendo la puerta de la habitación de la madre, que compartía su lecho con Adrián, naturalmente, quien era de sueño ligero y en cuanto sintió que se manipuló el picaporte de la puerta, se despertó. Sintió los pasos de Claudio dirigiéndose a su lado de la cama que estaba libre y notó una ligera brisa cuando levantó la sábana.

Fue consciente de su parcial desnudez, (estaba usando boxer nomas) pero al notar que ni el se acostaba ni la sábana volvía a bajar dedujo que su hijastro estaba mirando su cuerpo… para recién luego y acostarse suave y ligeramente separado de él. Adrián, sin saber que estaba pasando exactamente, se moría de ternura en abrazar aquel cuerpo infantil que yacía a su lado, pero no estaba seguro de si hacerlo en ese momento.

Por otra parte Claudio encontró que al tener el cuerpo de Adrián cerca, su cuerpo pareció olvidarse del miedo por el temporal, aunque mas q eso, estaba necesitando un abrazo contenedor.

Tras un rato los dos pensaron que el otro dormía. Ninguno se movía y el ruido de la tormenta impedía que oyesen sus mutuas respiraciones. Hasta que un trueno ensordecedor rompió su sigilo y se lanzo con su espalda sobre Adrián. El de instinto lo abrazo, pero en el hecho quedo el bulto de Adrián en la justa posición complementaria a la raya del culo del niño. En el momento ninguno lo pensó pero al pasar los segundos y bajar la adrenalina… Entendieron que sus cuerpos se estaban tocando y la vergüenza afloró para uno, para el otro, lo que afloró fueron las hormonas de excitación, y el miembro se escabulló  por el hueco del boxer y se incrustó bien posicionadamente en la raya del culo.  Asi simularon dormir toda la noche. Hasta que a cada uno lo venció el sueño

Al amanecer, Susana se despertó primero. Vio al niño en su cama y dedujo q por la tormenta se metió en la cama, como hizo siempre, y no le dio más importancia al asunto. Pero cuando Adrián se despertó, lo que encontró fue otra situación.

Claudio, niño pillo, se despertó primero y sintió la necesidad de curiosear el miembro de su padrastro. Lo tuvo enterrado mas de 1 hora  y éste no redujo su erectilidad. Claudio,  era niño pero no esra tan inocente, ya

a sus 12 años habia visto algo de porno, y entendía de mamadas y cogidas de mujeres… Pero al ver el aparato de Adrián sintió cosas raras, cosas diferentes. La verga estaba erecta, la tomó con una mano mientras lo miraba a él, a ver si se despertaba. Hasta ahora estaba tranquilo durmiendo, mas no su verga, que rebosaba rigidez y venosidad viril. Era un pito de macho alfa. Le tiró el prepucio hacia atrás y salió su cabezota rojiza con forma de champiñon a la vista. Era arte lo que tenia en sus manos y tambien los huevotes aún por conocer. Claudio estaba maravillado de lo que estaba viendo. Empezó a manosearlo sin saber que en realidad lo estaba masturbando bien rico.

Luego de unos minutos soltó su tronco y empezó a inspeccionarle los huevos, tenia en cada manito un huevo. Subía uno, bajaba el otro. Los estiraba hacia ambos lados. Los palpaba y acariciaba. Jugaba con ellos.

En un momento dado Claudio lo mira a Adrián y este tenia los ojos abiertos ya. (Oh dios mío! Se despertó y él no se dio cuenta) En eso, se escuchan los pasos de Susana  que está por entrar en la habitación.

Por poco, si no fuese por la velocidad de Adrian, la imagen hubiese sido: «Claudio con las pelotas de Adrián en sus manos y Adrián todo pajero viendo al niño como lo masturbaba», Digo hubiera sido porque Adrian tuvo los reflejos de sentarse en la cama y coger al niño de la cabeza y meterlo debajo de las cobijas cubriéndolo. Eso si, sus manos aun estaban en su verga y su carita queda cerca y hasta diria tocándose con la verga de Adrián.

Susana entró en la habitación y Adrián tuvo la mala fortuna (o buena fortuna) de justi haber llenado el taque y le soltó todos los chorros de semen que produjo en la sesion, se los echo todo en la cara del niño. Adrian cerro los ojos mientras esto sucedía. Claudio sin mover un musculo recibió ese semen caliente en su cara, en su frente, en su boca. Estaba empapado y el semen le recorría el rostro, pero nada podia hacer, nada mas que quedarse quieto y sentir como eso se corria.

Susana vio sentado a Adrian y le preguntó.

-¿Y claudito?

-¿Que?

-¿Como que, que?. ¿Que donde esta Claudito? Donde se metió?

– ¿Meterse? No, eeh no no, pues está aqui, dormido… Eh, ¿ya… Ya está listo el desayuno?. -quiso cambiar el tema

– si, despiertalo y bajen. Yo en 15 minutos tengo que salir, asi que metan prisa.

– ehh sisi, claro cariño.

Susana cerró la puerta y bajó a la cocina.

Adrian aprovecho para respirar y bajar pulsaciones.

Habían 2 problemas ahora y la mancha que quedo en sabanas era el problema mas pequeño.

Adrián levantó las cobijas y ahi estaba Claudito, todo muerto de miedo con la cara toda blanca de pánico, y mas totalmente de blanco por la lecheada.

Antes de poder decir algo, claudito salio corriendo disparado a su cuarto.

En 20min Susana se va a su trabajo y van a quedar ellos dos solos.

¿Qué pasará ahora?

¿Se pondrán de acuerdo en algo lujurioso y excitante al estilo Padrastro-hijastro?

¿Le contara Adrian lo sucedido a Susana y se separará la familia?

¿Bajará Claudio y lo contara todo el solito y lo enviaran a la iglesia o a un inter ado para arreglarlo?

Aahhh que preguntas. En el próximo relato veremos lo que pasa en el desayuno y en los dias posteriores.