Adrian (12) masturba a su padrastro mientras duerme Parte 2

Adrián no estaba enojado, estaba confuso. Para un adulto lógico es dificil transitar por un suceso asi, querer decirle que eso no estuvo bien y a su vez no querer dañar al niño.
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Pero ¿como abordarlo? Ningun libro te prepara para eso y no puedes hablar con nadie tampoco sobre como tu hijastro te mamó la verga sin tu permiso.

Por su puesto, desde aquí ya nada iba a ser igual. ¿Debi haberme hecho el dormido? No, no. Creo que si seguía dormido, Susana nos iba a encontrar en situación. En fin, supongo que ahora deberia brindarle seguridad y no ser tan duro con Claudio. Si, eso es lo que haré.

Así qué preparé su desayuno, lo puse en una bandeja y se lo subi a su habitación. Creí que no iba a bajar por si mismo, asi que, si estaba en su habitación, se iba a sentir mas seguro.  Le indiqué que estaba todo bien, que no se preocupe mucho por lo que pasó, y que se prepare para ir a la escuela. *Responsabilidades son responsabilidades»

Asi que, a pesar de que el día empezó normal, yo empecé a maquinar otros planes en mi cabeza. Planes benévolos obvio. Ya saliendo para la escuela, conduje por el camino rutinario y un par de cuadras antes giré para cambiar de dirección.

Adrián me miró esperando una explicación.

-sabes? Pienso que hoy deberíamos salirnos de la rutina. Quizas hacer algo diferente -(pensé que quizás asi, podía ganarme mas su confianza para hablar profundo del tema)- podríamos pasear y comprar algunas cositas, algun juego de Playstation nuevo. Compartir mas tiempo juntos, sin preocupaciones.

Adrian me mira con un poco de desconcierto, pero hace la seña de «ni idea» (con los hombros levantados y los brazos abiertos). Dándome a entender que ahora todo corre por mi cuenta, al fin y al cabo, yo soy el adulto.

En realidad, lo que estaba pasando es que yo no dejaba de postergar y postergar la charla inevitable e incomoda que como adulto debía dar. No sabia como abordarlo. No dije muchas palabras de camino, pero le hice sentir que entre hombres debemos apoyarnos mutuamente, uno al otro. Asi q paseamos, compré un juego, y otro juego para mi, y una gorra, y una tarjeta con un código de otra cosa. Y así pasó harto rato y él se empezó a abrir y me empezó a abrazar y cada vez a tener más contacto. Y yo lo vi todo bueno a eso. Me estaba ganando la «confianza» que estaba necesitando. Y luego dije que íbamos a ir al Mc Donalds a almorzar y él sonrió fuerte dándome su aprobación. Le dije que era mejor no contarle ésto a mamá y mantener el secreto entre nosotros. (Dios, estoy siendo un genio, ahora si debo tener su confianza). Y cuando estábamos en la fila del auto mac, esperando las cosas para llevarnosla a casa, ahi el la misma fila, él se abalanza sobre mi. Me abraza otra vez, me agradece que sea lo mejor que le pasó en su vida. Que soy el mejor padre de todos y me besa en boca… que tenía mucho miedo (me vuelve a besar en la boca)… Y que no podria superar mi rechazo.

A éste punto me desarmé completamente. Pensé que estaba manejando bien la situación y ahora estoy en un compromiso de no romperle su autoestima.

¿Acaso fui manipulado por un niño de 12 años? ¿Hice todo mal desde el principio?

Claaaro, todo mal, no mejor dicho él me mal interpretó

»mantener el secreto*

«‘Apoyarnos entre hombres»

«‘salir juntos, salir de la rutina, hacer cosas diferentes.» «DIFERENTES»

Creo que utilicé mal cada palabra y ahora tengo todo su equilibrio mental en mis manos y si no lo manejo mejor le podria generar traumas para toda su vida.

El me besaba y yo tímidamente le respondía tambien, porque en realidad no sabia que hacer. La bocina del auto de atrás me quitó del trance y aceleré hacia la ventanilla. Claudio se acomodó para que no nos vieran asi y empezamos a volver a casa. Yo no hablaba pero cuando lo miraba a él, me sonreía fuertemente.

Llegamos y ni bien cruzamos la puerta se me cuelga del cuellos y me dice

-gracias gracias gracias por no retarme ni decirme nada malo. Tenia mucho miedo que le cuentes a mama y me castigue por eso.

Tuve que advertirle que de si seguía colgándose de mi de esa forma, se me podía caer la bolsa con la comida. A penas puse las cosas sobre la mesa Claudio volvio a abrazarme con todas su fuerzas, y allí entendi que habia perdido. No podia romper su corazón. Y le acaricié la cabeza en señal de que estaba todo bien. Me siento en una sulla y el se sienta en mis piernas y me empieza a besar… Resistiéndome 0.1 segundo le empecé a devolver con culpa sus besos. ¿En que estoy pensando? Me decia a mi mismo y no tenia respuesta de mi consciencia.

Noto que se aleja un poco de mi. Tomó valor y me pregunta

-me mostras tu verga?

Que totalmente absorto, duro, perplejo, inmensamente incrédulo.

-por favor por favor por favor -me retruca

Sabia que no debía pero no pude negarme a su carita de ruego.

El se paró a mi lado, yo me paré, agarré el elástico del pantalon y del cazoncillo y me bajé la ropa. Aún estaba flacida, obviamente ademas yo estaba nervioso. Me volvi a sentar y el empezó a investigarme la verga.

A medida que iba agarrándola con sus manitas, sin ningun escrúpulo mi pene empieza a erectarse. Me la miraba y me la adoraba. Tenia las manos suaves. Agarraba mi verga, la movia hacia todas las direcciones y estudiaba la flexibilidad, su textura, su gama de colores. Me miraba con la boca abierta de asombro y paradójicamente me daba ternura. Y llego lo peor. Se lo metió a la boca. ¿Pues claro, que pensé que iba a pasar? Si eso mismo pasó anoche. Pero ahora era diferente. Ahora si estoy despierto, y dios mio! Que rico lo hace. Sentía su pequeña boca acomodándose alrededor de mi Verga, engullendola, saboreandola porque tambien usaba su lengua maravillosamente. Mientras me chupaba la verga tambien me masturbaba o jugaba con mis huevos, sabía exactamente que hacer y como hacerlo y wow! Esto era estrictamente increible!

A medida que mi verga se ponía mas dura, mas dura era la chupada. Marcaba el ritmo. Era mejor que su madre y que otras chicas/mujeres de edad. Entendía mi cuerpo y no se como supo que me encantan que me chupen los huevos, y el maldito crio ahi estaba… metiendose los huevos en la boca. Uno a la vez xq ambos no le cabian, y se que no le cabian los dos, pues xq intentó meterse los dos y no entraron. Mi cabeza daba vueltas y mi corazon latía fuerte… Pero mi verga estaba empezando a querer palpitar y Claudio entendió todo, y se pegó como ternero a ubre para recibir la leche en su boca. A medida que salían los chorros, el succionaba y tragaba. (¿niño, Cuantas pijas habrá chupado para saber hacerlo de esta forma? Pensé)

Mi cabeza estaba en blanco, mientras Adrián estaba ahi arrodillado lamiéndome la verga, limpiandomela, dándole pequeños mordisquitos y otras veces dándole besitos. Estaba agotado. Mi hijastro acaba de beber mi semen y fui incapaz de detenerlo e incapaz de detenerme a mí. Realmente disfruté mucho de la mamada misma. Quizás, tampoco deba pero su madre no quiere hacer sexo anal. Tan solo, si él quisiera, podríamos, no sé, tal vez… Cojer! Si, me lo quiero cojer ahora.

Al verlo tan sonriente y agradecido por haberle prestado «atención» estoy planteandolo cono una gran posibilidad…

Fin de ésta 2da parte.

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Espero que haya sido de su agrado. Escribo por y para ustedes y les pido puntuar el relato y dejarme un comentario indicando que parte les gusto mas. Aquí también les dejo mis otros relatos que escribí.
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