Al calor de las copas…Brrr qué frío…
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Me levanté sin decirle a nadie que iría a buscar la botella, y en mis pasos me alcanzó Tito, entramos a la casa, y sin querer nos quedamos platicando de la posada, de fulanito, perenganita, x cosas, luego Él se puso de pie y se dirigió al baño, y comenzó a hacer pis con la puerta abierta, desdé mi lugar podía ver su verga orinando, se sacudió y regreso al sillón con la bragueta abajo, no pude evitar qué mis ojos se quedaron fijos tratando de seguir viendo su verga.
Desdé luego qué se dio cuenta de mi mirada, y se sonrió socarronamente, se acercó a mí con un gran descaro, y puso su mano sobre mi hombro, jaló mi mano y la llevó a su bragueta abierta, y sin más metí la mano completa, y dije Haber qué trae la piñata, y saqué la verga, acariciando y apretando hasta que comencé a masturbarlo, bajé a chupar y engullirla toda hasta llegar a la base.
tomó mi cabeza con ambas manos y comenzó a bombear hasta que logró venirse soltando una descarga tan abundante y caliente.
se dio cuenta que me trague su leche completa, limpié por completo todo residuo de espermas y le dije que era mejor regresar a la posada.
Había pasado casi una hora, y Carlos, el segundo hijo de Paula, dijo que estaba muy caliente, qué se cogería al primero que se le pusiera en frente.
Me ataque de la risa y le dije que se volteará hacia otro lado, seguimos platicando de las cosas más triviales, y mientras Él volteaba a otro lado indefinido, me quedé viendo el tremendo bulto entre sus piernas, pero no lo tomé como una posible oportunidad, luego le dije que iría a mi casa al baño, y fue conmigo, pasé y al salir, Él observaba mís trabajos de pintura al óleo, le mencioné uno que no lo había colocado en la sala, fui a un mueble y me puse a sacarlo, estaba por completo empinado, Carlos observaba sentado, y nunca supe en qué momento se acercó, hasta que tenía su verga parada sobre mí pierna, me ayudaba a jalar el cuadro, ambos nos movíamos en el intento, sentía la dureza de su verga en francos movimientos queriendo atravesar mi pierna, qué me fui moviendo de manera de acomodarla entré mís nalgas, y así fue.
Qué tan pronto sintió mi línea entre las nalgas haciendo un espacio, terminó empujando su cadera entre medios giros y buscaba llegar al orificio del Culo.
Mi propuesta estaba dada, no había intención, sino continuación, dejó de jalar el cuadro, y se puso a soltar el pantalón, buscando el cinto, me sonrei y le dije; traigo pants, de resorte.
Entonces metió las manos y acarició mis nalgas, bajó los pants y tan sólo hice hacia atrás la cadera.
Abrío mís nalgas y apuntó su verga, que comenzó a deslizarse dentro con dificultad, pues lo hacía en seco.
Ougghhh, entró a la mitad, dolía, pero era delicioso sentirlo correr así secó.
y bombeó cómo un desesperado náufrago en una isla desierta, sujetaba mi cintura y cadera con energía y firmeza, qué sus manos y dedos quedaron marcados en mí piel.
Después, vino ése torrente cargado de espermas tan hirvientes y abundantes.
y al terminar, limpié su verga chupandola.
regresamos a la posada y todo nos pareció normal, y luego llegó la novia de Carlos y " se lo robó ".
La reunión continuó y tuve la oportunidad de bailar y conversar al oído con Paula, quedó en darme una respuesta en breve y mientras siguió atendiendo a los vecinos y familiares, al poco se acercó Leo el más joven de los hijos de Pau chico de 27 años y me pidió el favor de conducir su auto para llevar a sus suegros y novia a casa, y bueno, le hice con gusto.
de ida, el suegro fue mi copiloto, buena compañía, y de regreso, Leo " me acompañó " de copiloto, por la embriaguez qué se cargaba, a medió camino me detuve y procuré hacerlo volver el estómago, si se aliviano hasta el 90% pero no lo dejé conducir.
luego me pidió detenerme para orinar, subió al auto con la sonrisa más pícara y más diabólica que haya visto, se me quedó viendo y me dijo.
Se ve que chupas rico te vi con Tito.
Me encantaría sentirlo.
Y se acomodó haciendo el respaldo hacia atrás, y sacó la verga completamente parada.
Se disculpó porque me había hecho trampa en manejar hasta ése lugar.
y detuve el auto en un lugar solitario y chupe con esmero su verga hasta que se vino aún más qué sus hermanos, y después qué la posada terminó, Pau se acercó a mí y me dio una respuesta favorable, ya que un poco antes, había hablado con sus 3 hijos y le dijeron que sabían que Yo era una buena persona, y muy confiable.
Vaya, hasta ahí, no sabría cómo tendríamos que convivir con los chicos cuando no estuviera Yo con la madre.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!