Apenas 14 años (Parte II)
Esta es la continuación entre mi primera vez con mi vecino Junior..
Para quienes no han leído el primer relato, acá les dejo en enlace https://sexosintabues30.com/relatos-eroticos/gays/apenas-14-anos-parte-i/
Antes de continuar con el relato, quiero contarles un poco más sobre mi padrastro. En el relato anterior les comenté que en algunas ocaciones siendo niño mi madre me pedía que me bañara con mi padrastro, sin embargo, al cumplir 8 años esto dejó de pasar, pero mis ganas y deseos por seguir viendo su verga crecían, así que en algunas ocaciones intentaba verlo ducharse u orinar desde la ventana del baño, me excitaba muchísimo verlo pasar el jabón por su verga, sus huevos y su culo, recuerdo que una vez logré verlo masturbarse, me sentía súper excitado, no pude verlo eyacular pero por la forma en la que lo hacía (una mano contra la pared, piernas abiertas y la otra en su verga de unos 18 cm y bien gruesa) sabía que sería mucha leche.
En fin, continuemos con la historia de mi vecino Junior de 15 años y este servidor a sus 14 (ahora tengo 30).
Después de haber perdido nuestra apuesta y tener que mamarnos la verga el uno al otro, necesitaba generar el ambiente para que esa historia se repitiera, no sabía como insinuarme, tan siquiera sabía como volver a ver a Junior a la cara después de lo que había pasado, pero en lo más profundo estaba dispuesto a esforzarme porque volviera a suceder, pasaron 3 o 4 días en que día y noche me tocaba el pene y el culo pensando en lo que había pasado.
Al llegar el fin de semana, Junior me llama por teléfono a la casa y me pregunta si quiero ir a jugar PlayStation a lo que con muchos nervios respondo que sí. Pido permiso a mí mamá y salgo directo a su casa, toco el timbre y sale Junior en un short deportivo y sin camiseta, me dice que está así por el calor (en mis adentros pensaba: puede hacer todo el puto calor que quiera todo el año si con eso consigo verlo así).
Para ese entonces con 15 años, Junior era delgado, el típico adolescente que quiere tener un cuerpo de gimnasio, así que a pesar de ser bastante delgado, se empezaba a marcar su abdomen y algunos otros músculos en su cuerpo.
Junior abre la puerta de su casa y yo ingenuamente me dirijo a la sala de estar, donde siempre habíamos jugado, para mi sorpresa me dice que ha pasado la consola de lugar y que ahora está en su cuarto, no pude aguantar la emoción y respondí con un ¡Genial!, Junior sonrió un poco y me guiñó el ojo.
Entramos a su cuarto, empezamos a jugar Power Stone y en eso me dice que me quite la camisa, que hace mucho calor, que así estaría más cómodo, obvio sin dudarlo obedezco y decido ser un poco más lanzado, me bajo el short y me quedo en boxer y digo, estaríamos más frescos sin en realidad nos quitamos todo y bajé mi boxer también, estaba tan nervioso por no saber su reacción, pero para mi sorpresa Junior me da la razón, se baja el short y el boxer y para mi sorpresa estaba completamente erecto, casi creía verlo más duro y grande que la primer vez.
Mi cara de asombró me delató a lo que respondió que lo disculpara pero que hace días tenía ganas de que siguiéramos jugando y que cuando decidió llamar era porque se estaba tocando pensando en mí, pero que dudaba si yo quería volverlo a ver. Mi respuesta fue que en las noches me había estado tocando también e incluso tocando mi ano como él lo había hecho.
Terminando de contar mis juegos nocturnos con mi culo, Junior me dice que genial, que había pensado que tal vez en esta oportunidad podríamos jugar un poco más y saca una caja de condones marca Baron (súper antiguos) que para mi sorpresa era la que compraba mi padrastro en el supermercado, Junior me indica que la tomó de la pulpería (super pequeño en Costa Rica) del papá y los dos nos reímos.
Empezamos a tocarnos, yo tomé con mi mano su verga y en efecto estaba más dura que la vez anterior, palpitaba mucho y estaba mojada de precum, pude notar que Junior había recortado sus vellos, lo que me excitó aún más, porque eso solo indicaba que lo había planeado todo, empecé a masturbarlo y a mamarlo con desenfreno, era adicto a su verga con apenas una vez de haberla probado.
Minutos después Junior me dice que paré, que es su turno, pero para mi sorpresa él no empieza a mamar mi verga, me voltea, abre mis nalgas y empieza a mamar mi culo, me quedé perplejo, no sabía que estaba pasando, solo sabía que me encantaba lo que estaba sintiendo, eran calambres recorriendo todo mi cuerpo, me temblaban las piernas de placer, en un instante se detiene y me dice, voy a meter un dedo para ver si está limpio ¿está bien? en mi desenfreno le respondí que los que quisiera, él se chupó el dedo y empezó a introducirlo, me dolía un poco pero lo disfrutaba.
Cuando lo sacó me dijo que era momento de ponerse el condón que él estaba listo y así lo hizo. Empezó a apoyar su verga contra mi ano, me dolía demasiado y no había entrado la cabeza tan siquiera, no podía dejar de quejarme, por lo que Junior me hizo morder la almohada y empezó a empujar más fuerte, para ese entonces la verga de Junior podría medir unos 15 cm.
Logra entrar la cabeza y le pido que se detenga, pero él ya estaba decidido a romperme el culo a como diera lugar, la metió en 3 movimientos, yo me quejé con el alma, se quedó quiero y empezó a decirme al oído que tranquilo que la primera vez era así pero que en un ratito solo iba a sentir rico, se espero un momento y empezó a bombear.
No puedo describir lo que sentía, si la chupada del ano me había encantado, con la penetración estaba tocando el cielo, sus movimientos eran firmes, extrañamente él sabía muy bien lo que hacía, sus grandes huevos chocaban contra los míos y en un momento paré de gemir y lo escuché gimiento, diciendo en voz baja toma que rico culo papi. Escucharlo decir esas cosas me prendía pero seguía preguntándome de donde sabía Junior tanto sobre lo que hacíamos.
Al pasar unos 5 o 10 min me dice que quiere terminar, que me levante, me hinco en el piso, se quita el condón y me da su leche en la boca, me hace limpiar toda la verga con mi lengua y me pide que me levante, que le toca a él tomar lechita, me levanto, me mama la verga mientras me metía uno y luego dos dedos, me sentía en el cielo, cuando sentía que me venía me mete un tercer dedo y me dice: que rico ese culo bien abierto y le solté la leche caliente en la cara, nunca en mi corta edad había eyaculado tantísimo, Junior quedó con la cara empapada en mi leche.
Se levanta, me da un beso en el cachete y me dice que debemos limpiarnos que sus padres deben estar por llegar, pero que la siguiente vez quién se va a comer la verga con el culo es él, que necesitaba hacerlo el primero para que yo aprendiera.
Le pregunto de dónde sabe tanto sobre esas cosas y me respondió que era un secreto, que si me portaba bien después me contaba. Nos vestimos y empezamos a jugar con la consola. Yo no podía creer lo que había pasado, me sentía feliz y con ganas de volver a hacerlo.
Si quieren saber más sobre mis historias escriban en los comentarios y por favor cuéntenme qué les ha parecido está segunda parte del relato y desde donde nos leen.
Saludos desde Costa Rica. ¡Pura Vida!
Me sigue gustando tus relatos, me recuerda mucho cuando yo lo hacía con mi primo de mi misma edad, el fue mi primera vez durante mucho tiempo, también lo hice con varios amigos y algunos mayores
Mae que ricooooo
Me encantó este segundo relato, mas partes por favor
sigue por favorrrrrrrrrr
Muy rico lo que te pasó, quiero seguir leyendo.