APOSTANDO EL CULO II. (EL HERMANO DE RICARDO).
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por sean_codo0.
Muchos meses pasaron, desde la última vez que vi a Ricardo, durante ese tiempo trate de evitarlo, no me sentía cómodo recordando lo que habíamos hecho, me sentía demasiado culpable por lo sucedido. La culpa crecía al pensar en lo mucho que me había gustado y las ganas que tenía de repetirlo, pero preferí ocultar mis deseos por unos meses.
Una tarde, saliendo del catecismo, me dirigía rumbo a mi casa, por el camino me encontré con Ricardo, obviamente me hablo y me dijo que porque ya no me juntaba con él, yo le dije que me tenían castigado y que no me dejaban juntarme con nadie.
Seguimos platicando y salió el tema de los videojuegos, me dijo que fuéramos a su casa a jugar, que solo estaba el con su hermano Antoni; que en ese tiempo tenía 17 años, yo entre a mi casa, pedí permiso y nos dirigimos a la casa de Ricardo a jugar videojuegos.
Al llegar a su casa entramos a su cuartos, cuarto que compartía con su hermano mayor, cuando entramos, Antoni estaba jugando con el videojuego, nos vio entrar y nos dijo muy grosero que nadie jugaría, solo él, y que no perdiéramos el tiempo, Ricardo le decía que él ya había jugado mucho tiempo que ya le tocaba jugar, pero Antoni por ser mayor, hacia lo que quería y bueno nos quedamos a verlo jugar.
Después de una media hora, por fin nos prestó el control del videojuego, y comenzamos a jugar. Mientras jugamos Antoni saco una caja de abajo de su cama y vacío su contenido en la cama, al ver lo que era me sorprendí mucho pues había muchas revistas porno con mujeres encueradas, yo lo vi sorprendido y Ricardo me pregunto que si ya había visto alguna de esas revistas antes, yo le dije que no, dejamos el video juego y comenzamos a ver las revistas.
La verdad me daba mucho morbo ver esas revistas, de mujeres desnudad o mujeres siendo penetradas por hombres, era algo que iba más allá de mi imaginación.
Antoni, comenzó a sobarse el pene mientras veía las revistas, yo lo veía de reojo, evitando prestarle mucha atención a lo que hacía, después de un rato empezó a bromear con su pene erecto, nos decía que traía un palo adentro, y se tocaba el pene a través de su ropa, marcándolo. Lo que yo veía era enorme, si el pene de Ricardo se me hacía grande, el de Antoni era mucho mas largo y grueso.
Antoni se puso de pie, y comenzó a brincar, mientras lo hacia su gran pene brincaba junto con él, era un espectáculo que nunca olvidare, a mí me tenía hipnotizado, no podía dejar de ver ese gran pene saltando frente a mí.
– Que puta es tu amigo Ricardo, ve como me mira la verga, se ve que le gusta ¿te gusta jotita? Dijo Antoni, mientras me acercaba su pene a mi cuerpo, a mí me dio mucha pena, lo que me había dicho y solo agache la mirada, Ricardo solo me miraba, pero no decía nada, simplemente se quedó callado.
Cuando se sacó completamente el pene, del short que traía, me dejo con la boca abierta y muy sorprendido y unas palabras salieron de mi boca.
-que pito tan grande tienes-. Terminando de decirlo me eche a reír, ver ese pene colgando me daba mucha gracia, poco a poco me comerse apretarme el pene con mi mano, pues no les voy a negar que lo tenía ya erecto. Antoni, ya con el pene afuera, se abalanzo a nosotros según el tratando de jugar luchitas, nos agarraba y nos tiraba en la cama y se acostaba sobre nosotros, frotando su pene en nuestro culo.
– los dos vas hacer mis putitas, me las voy a coger a los dos-. Decía mientras nos seguía acomodando, en diferentes posiciones sexuales, siempre tratando de frotar su pene en nosotros cuerpos.
Después comenzó tratar de desnudarnos, primero desnudo completamente a Ricardo. Ricardo se negaba a ser desnudado y al mismo tiempo trataba de desnudar a Antoni, cuando vio que no podía me dijo que le ayudara y me lance sobre Antoni y le baje todo el short dejando al descubierto su bóxer y la mitad de su culo.
Al hacer eso, se dejó ir sobre de mí, me acostó boca abajo y comenzó a jalarme el short, junto con el bóxer, yo pataleaba para golpearlo y evitar que me lo quitara, pero era mucho más fuerte que yo. Ricardo se le colgó en el cuello, pero ya era demasiado tarde, él ya me había quitado todo el short junto con el bóxer, a mí me dio pena al verme desnudo así que me pegue a la pared más cercana y con mis manos me tapaba la polla, mientras veía como Antoni desnudaba a Ricardo, dejando al descubierto su culo y su pene.
Tanto Ricardo y yo estábamos completamente desnudos, los dos cubríamos con nuestras manos nuestros penes y Antoni nos dijo.
-como ustedes perdieron, ahora yo les voy hacer todo lo que yo quiera, y ustedes no vas a decir nada, ok!-.
Ricardo no dijo nada, y yo tampoco, así que Antoni le dijo a Ricardo que abriera la boca y que le chupara el pito, y así fue Ricardo comenzó a chuparle la polla a su hermano, mientras yo los veía desde donde estaba, Antoni me dijo que me acercara, y así lo hice. Al estar junto a ellos, me pidió que le sobara el culo a Ricardo, y comerse a sobárselo, ya para ese momento no me disgustaba mucho hacer lo que hacía, de echo me estaba gustando.
-ahora tú, le dijo a Ricardo, chúpame las bolas, y tú me vas a chupar el pene, me dijo a mí-. Ricardo se agacho y comenzó a chuparle las bolas mientras que yo me metía su polla en mi boca, no me la podía meter toda, así que solo le chupaba el glande, una y otra vez. Antoni lo estaba disfrutando mucho, él estaba de pie diciéndonos lo rico que se la estábamos chupando, después de un momento, nos dijo que nos acotáramos boca arriba en la cama. Antoni comenzó a chuparnos nuestras pollas, que eran más pequeñas que la de él, pero se notaba que lo disfrutaba. A mí me encantaba que me chuparan el pitito, se sentía muy rico, y recordé cuando Ricardo me lo chupo y ahora era su hermano el que me lo estaba chupando.
Así continuo por un tiempo, después nos dijo que nos pusieras de perrito, entonces Ricardo tomo la delantera yo me quede acostado tocándome el pene, mientras Ricardo se acomodaba de perrito, parando las nalguitas, siempre fue nalgón y Antoni también lo estaba yo creo que es de familia.
Ya Ricardo estaba en posición de perrito, yo lo miraba mientras continuaba tocándome el pene, y Antoni al ver que no reaccionaba, me golpeo en la pierna, para que adoptara la postura de Ricardo. Ya los dos estábamos a gastas, con el culo parado, mientras Antoni nos miraba y nos tocaba las nalgas, metía su dedo en nuestras rajadita, yo recuerdo que todo eso me daba mucho placer, jadeaba cada vez que Antoni me tocaba el hoyito y veía como Ricardo también lo disfrutaba, después de un momento, Antoni se metió los dedos a la boca y empezó a lubricar a Ricardo, le pasaba sus dos dedos por el culito, y Ricardo le pedía que se lo metiera despacio para que no le doliera, mientras veía la escena, recordé lo que me había dicho Ricardo la última vez que estuvimos juntos, que su hermano le ponía saliva para que no le doliera cuando se la metía. Después hundió unos de los dedos en el culo de Ricardo, el dejo salir un grito, que me puso los pelos de punta, y Antoni le decía que se aguantar como los machos, y así lo hiso soporto que su hermano le metiera unos de sus dedos, después se lo saco y le dio un beso en su rajadita, al ver eso yo volteé la cabeza pues esa imagen me dio un poco de asco.
Con su otra mano comenzó a tocarme el culo, me dio unas dos nalgaditas, suaves y me comenzó a besarme las nalgas primero la derecha después la izquierda, yo no dije nada, solo esperaba para ver qué era lo próximo que aria, comenzó a meter la lengua en mi rajadita, yo sentí como un escalofríos recorrió todo mi cuerpo, me asustaba la forma en que me tomaba de la cadera y me enterraba toda su lengua llena de saliva en mi hoyito, el placer o los nervios hicieron que comenzara a jadear, Antonia me preguntaba si me gustaba, pero yo no respondía. Después de unos minutos de meterme su lengua, se ensalivó, uno de sus dedos y sin decir nada, me lo metió en el culo, puff sentí un dolor muy fuerte, y me tire de panza en la cama, cerré los ojos y apreté los dientes ahogando un grito, pues el dolor que me había causado era mucho, Antoni se echó a reír y me dijo que como era la primera vez que era normal que me doliera, pero desde ese momento yo me negué hacer todo lo que él me pedía, no podía salir corriendo de ahí porque él había subido nuestra ropa en lo alto del closet y desnudo no pensaba hacerlo. Dejo de insistirme, y se dirigió con Ricardo, agarro el bote de crema, se lo puso en su polla y le poso un poco en el culo de Ricardo, después acercó su pene a su rajadita, y comenzó a metérsela, Ricardo cerraba los ojos y apretaba los dientes mientras su hermano, introducía su polla en su culito, yo no podía creer que Ricardo soportara semejante pene en su culo y más porque a mí un dedo me había causado mucho dolor.
Antoni continuo metiendo su pene en el culo de su hermano, -ahhh que rico, no hay mejor puta que mi hermano, por eso lo quiero mucho.- decía mientras metía y a sacaba su pene del culo de mi amigo. Ricardo tenía la cabeza apoyada en la cama, los ojos cerrados y no paraba de gemir. comenzó a tocarse el pene y a masturbarse, me daba la impresión de que lo estaba disfrutando aunque la idea de que le gustaba para mí era casi imposible, así duraron un rato, hasta que Antoni, empezó a gritar que ya se venía, le pidió a Ricardo que apretara el culo y un gran grito de placer recorrió la garganta de Antoni, llenando el culo de Ricardo con su leche, después de que Antoni se corrió, Ricardo comenzó a masturbarse, y se vino en su mano, unas gotas cayeron en su cama, después todavía en posición de perrito, llevó su mano a su culo y le comenzó a salir toda la leche y sangre que Antoni le había dejado en su recto, yo me asuste y le dije, pero él me dijo que era normal, para ese momento Antoni estaba en el baño, después llego nos dio la ropa y me dijo que no dijera nada de lo que había visto y que si quería después el me podía hacer lo mismo que le hiso a Ricardo para que viera lo rico que se sentía.
Al terminar todo, yo salí lo más rápido posible de su casa, nunca hable del tema ni de lo que había visto, jamás le hable a Ricardo y cuando veía a Antoni trataba de evitarlo. Actualmente, Ricardo tiene 21 años tiene novia lleva unos 4 años con ella y trabaja en una empresa de construcción, Antoni al cumplir 18 se fue a estudiar fuera de la ciudad, lo último que supe fue que se casó y que tiene un hijo, actualmente tiene unos 25 años.
les dejo mis otros relatos
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