Aprendimos a jugar y ahora lo hacemos solos.
Un primo mayor nos enseñó a coger y ahora nosotros lo hacemos solos. .
Este relato es la continuación de mi primer relato: Por curiosos aprendimos a tener sexo.
Mi primo Luis y yo siempre fuimos muy unidos. Como éramos de la misma edad siempre nos llevamos muy bien. Fuimos inseparables siempre y cómplices de muchas aventuras. Y conforme fuimos creciendo aprendimos y practicamos todo juntos.
Después de lo que paso con mi primo Beto pasaron varios días sin que tocaramos el tema. Pero una tarde que jugamos en el cuarto de mi primo Luis volvimos a hacerlo.
Recuerdo que estábamos solos en el cuarto de Luis jugando videojuegos cuando se abre la puerta y entra mi tía y nos pregunta si queríamos ir con ella pues tenía que salir al centro a comprar unas cosas y tardaría un par de horas en regresar. Pero Luis contesto que hacía mucho calor y que no queríamos caminar bajo el sol, además nos aburriríamos mucho como siempre que ella no se decidía que comprar. Que mejor nos dejará quedar en casa, jugando videojuegos, así ella podría hacer sus compras sin prisas y nosotros no nos aburriríamos.
Tía : Esta bien niños, si quieren quedarse está bien, sólo les pido que no hagan travesuras y no se vayan a salir. Si se portan bien a mi regreso les traeré algo.
Luis: Si mami te lo prometo.
Yo: Si tía no se preocupe acabamos de poner el juego y dura mucho.
Tía: ok niños regreso rápido.
Escuchamos cuando salió porque azotó la puerta que daba a la calle.
En ese momento Luis me voltea a ver y me dice que si quiero volver a jugar el juego que nos enseñó Beto.
Yo le digo que sí, pero como lo jugaríamos?
Luis: Si quieres tú empiezas detrás de mi y después yo detrás de ti. Ok?
Yo: Si esta bien
Luis pone los controles del videojuego sobre la consola y comienza a desabrocharse el pantalón quitándoselo con todo y calzones, quedando desnudo de la cintura para abajo. Se acerca a mí y me dice empieza pero agarrame el pito mientras lo haces porque eso me gusto mucho (Yo recuerdo lo que sentí cuando él me lo hizo aquella vez y lo rico que sentí y quisiera que el empezara pero ya habíamos acordado que yo iniciaria).
Yo: Si está bien pero ábrete las nalgas para poder ver donde te pongo mi pené.
Dije eso mientras yo también me despojaba de mi pantalón y ropa interior.
Luis se acomoda recargado de cara a la pared y coloca sus manos en cada una de sus nalgas para dejar al descubierto su precioso culito, para que yo pudiera colocar mi pene en la entrada de éste. Lo cual hice rápidamente colocandolo solo en su entrada sin penetrarlo mientras con mis manos acariciaba su espalda para posteriormente pasar mis manos a su pecho y finalmente baja mi mano hasta encontrar su pené que para entonces ya se había puesto super duro. Lo que me permitió comenzar a masturbarlo sin ninguna dificultad mientras mi pene se encontraba entre sus nalgas.
Después de unos pocos minutos de estar así, escucho que su respiración cambia, se vuelve más fuerte.
Yo: Estas bien?
Luis: Sí, es que me esta gustando mucho.
Yo: Qué sientes?
Luis: Así se siente muy rico pero quiero que me la metas como aquella vez.
En eso empiezo a sentir como empuja su cadera hacia atrás y yo trato de empujar la mía hacia delante, sintiendo como me empiezo a adentrar a su interior mientras el se retuerse de placer llevando sus manos para atrás buscando mis nalgas.
Comensamos un vaivén de mete y saca, mientras con una mano lo masturbaba y con la otro recorría su pecho y cara.
Luis: Mmmm… Ah!!!… Así… Así… Se siente rico, sigue así, me gusta, más rápido y hasta el fondo.
Yo: Te gusta?
Luís: Mmmm… Si…no me duele como con Beto. Al contrario me esta gustando.
Después de unos minutos de estar así siento unas palpitaciones en su pene y después un líquido que sale de él, y Luis solo hecha para atrás su cabeza para descansarla en mi hombro.
Nos quedamos quietos unos instantes y poco a poco Luis se fue separando de mí. Cuando reaccionó escucho la voz de Luis diciéndome ahora me toca a mi.
Me voltea y se empieza a pegar a mi por la espalda, sentí el rose de su pene en mis nalgas y sus manos acariciando mi pecho y abdomen. Empecé a recordar lo rico que se sentía su pene dentro de mi sin querer se me escapó un » metemelo ya»
Luís: Ábrete las nalguitas si ya lo quieres adentro.
Obedezco y llevo mis manos a mis nalgas las abro y el coloca su pene en mi entrada ( que sensación tan rica), comienza a empujarlo lentamente y empiezo a sentir como se abre paso a mi enterior despacito, lento, tierno, cauteloso. Y yo aun recuerdo con claridad esa sensación tan dulce de estar siendo penetrado.
No sentí otra cosa más que sólo placer, en un momento siento su vientre caliente chocar con mis nalgas y yo me empujó hacía atrás para lograr que entre un poco más su miembro. Pero ya no hay más todo está adentro. Baja su mano derecha y agarra mi pené, lo aprieta y lo empieza a sacudir para después empezarme a masturbar.
Yo: Ah!!!… Así… Dame más… Hazlo rápido… Se siente magnífico…
Luís: Te gusta? Lo hago bien? No te lastimó?
Yo: No, tú sigue, se siente bien, dame más, házmelo rápido.
Luis entiende perfecto lo que le pido y me masturba con firmeza y rapidez mientras me vete y saca su pito con ternura y suavidad.
Que sensacion tan maravillosa estar en ese momento, no se borra de mi mente nada. Mi cerebro estalla en emociones y de repente termino sin darme cuenta.
Luis me suelta y sin darme cuenta caigo en su cama sin fuerzas. Luis se recuesta conmigo y me abraza.
Luis: Te gustó lo que hicimos
Yo: Claro es algo que disfruto mucho por todo lo que me haces sentir.
Nos seguimos tocando y acariciando por unos minutos más.
Después de un rato nos levantamos y nos pusimos nuestra ropa. Comenzamos de nuevo el videojuego mientras llegaba mi tía. Pero en mi mente aún seguían replicando las sensaciones tan ricas que Luis me había causado.
Ojalá les haya gustado mi relato espero sus comentarios.
Como sigue?
Excelente relato. Como continua?
Que edad tenían ?