Así despertaron mi instinto / Así fue mi despertar III

No se en que momento me convertí en el amante de mi primo y la putita de su hermano..
A estas alturas ya estaba más que listo para ser pasivo. Mi primo me había enseñado a recibir su verga y su leche en mi culito. Amaba esos momentos en los que estaba junto a él.

Tiempo después en una visita a casa de los tíos, mi primo me subió a la azotea y en un tejaban que tenían acondicionado para jugar, me ponía a chuparle la verga, ya era todo un experto.  En eso estábamos cuando mi otro primo, su hermano menor, llega y nos descubre en plena mamada!

-Ya los caché, par de sucios! Le voy a decir a mi mamá.

En eso mi primo le pone el pie y este tropieza y le dice:

-Ni madre! Aquí te quedas. Vas a conocer a nuestro primito-

En eso le baja el cierre y le dice que se la saque, como el otro primo era uno o dos años menor que su hermano era otro puberto calenturiento y se le acabo parando, al principio no me gustaba mucho su verga por que no tenía la circuncisión como la de mi otro primo pero vi que se la peló y pues me puso a mamar, aunque aún era yo muy torpe, ellos lo disfrutaban bastante.

En una de esas Juan, o sea mi primo mayor le dice a Luis, el primo menor que pruebe mi culito, así que me ponen en posición y mi primo me la mete de un jalón, yo grité pero me taparon la boca para que no se oyera abajo, Luis era bastante torpe para coger a diferencia de Juan, me tomaba de la pelvis y me jalaba hacia el como queriéndome  partir en dos, no duró mucho en venirse, y llenarme de leche, creo que es mal de familia por que tambien el aventaba mucha, o al menos eso sentí.

Debo admitir que no me gustó que me cogiera otro pero para saciar un poco de mis calenturas infantiles estaba bien.

Semanas más tarde, nos invitan al cumpleaños de la hija de otra prima, hermana de ellos por que se iría a Estados Unidos, todo transcurrió bien en la fiesta pero además de ser un caliente, era niño y quería divertirme, así que jugué con los primos chiquitos y todo bien.

En cuanto llega la noche Juan estaba ya listo para dejarmela ir en eso llega Edgar, el hermano más grande, creo que el había notado mi homosexualidad desde mucho antes por que me veía con cierto recelo y extrañeza.

Entonces nos ve acostados a Juan a y a mi de cucharita, nos dice: -qué, ya le están dando gas?-  a lo que yo me quedo petrificado y me hice el dormido. Como que el sabía lo que pasaba pero era un secreto a voces.

Pues bien, mis primos Juan y Luis me usaron como quisieron como ellos dormian en el cuarto del fondo, pues no se oía nada. En un momento, al estar ya cansados de tanto cogerme uno de ellos me mete el dedo y me empieza a estimular todo por dentro, sentía muchas ganas de mear pero al mismo tiempo sentía rico, como una presión placentera o no se, de pronto no puede más y explote por dentro, creo que fue mi primer orgasmo anal, quedé muerto, cansado pero ahora estaba listo para cosas más extremas.

Continuará…