aventura con el negro turista 2.
todo resulto como deseaba, justo hubo entrenamiento en la playa, eso era un fin de semana, así que habría sexo..
Hola como están de nuevo para terminar, la aventura con el negro turista.
Pasaban los días, sin novedad, pero estaba súper interesado en pasar el fin de semana con el turista, justo esa semana se presentaba un paseo para reforzar el estado físico de nuestro equipo cada vez que se venía el campeonato nos concentrábamos apara ir a la playa a reforzar con ejercicio y poder enfrentar la temporada que era agotador, en la arena como que nuestro físico se reforzaba, así que fuero apara pedir permiso para ir, todo estaba como quería, seria de viernes en la tarde después del cole.
Ese día Salí con mi mochila y uniforme de deporte, cuando estuvimos en el paradero en la carretera, porque era más barato, el pasaje, me acerque a el ayudante del entrenador, el entrenador no iba, solo su preparador, se llamaba Jaime, era de unos 30 años a mas, con el también tuve sexo, pero es otro relato……., me acerque y le dije que no podía ir, que tenía que hacer el sábado en la noche, le dije que tenía una reunión, que me perdonara por esta vez, que le debería una, además sabes que siempre rindo, Jaime me dijo bueno me debes una sabré cuan do te la cobrare, todos tenemos secreto me dijo, así que llego el bus y se fueron, tome un carro para que me llevara al parque, llegue y espere como media hora o más, cuando llego el carro, abrió la luna y me llamo, subí y nos fuimos, al hotel, subimos, al entrar el negro puso una cara de alegría, de felicidad, le pago, al chofer, y apenas se cerró la puerta del ascensor, me cargo llevándome al mueble de la sala, busco mis labios y empezó a devorarlo sin dejar de tocar mi trasero, empezó a desvestirme, yo estaba poniéndome súper excitado, él estaba con su bata y nada abajo, se sacó la bata, ya tenía la verga parada como el fierro, me despojo de mi ropa quedándome desnudo también, me dijo entre su castellano masticado que tomaría una pastilla para que su verga este dura y no se muera, me dijo a ti te pondré esto en tu culito, era una crema que decía prolongación sexual para vaginas, me dijo que quería tomar, él se preparó un trago, era wisky, yo me pare fui y me prepare gaseosa con ron algo cargado, y me la tome de un solo bocado, y me serví otro, ya me sentía excitado, el licor dio efectos casi inmediato, me voltio para que empezará a lamerme el culito, que rico era, su lengua empezaba a chupar, besar mi culito, era rico, sentía que me latía, el arito, él decía rico uy rico, mi cuerpo se retorcía de placer, al ritmo de su lengua, su mano como manoseaba mi cuerpo, fue que vi que tomo la crema y la unto en mi culito, la sentía algo fría, pero al pasar los segundo sentía como mi culito, sentía que me daba ganas muchas ganas de que me metiera, su vergota, era desesperante la ganas que sentía por tener dentro es verga, así que le dije vamos métela, rápido, rómpeme el culo, destrózalo, tenemos toda la noche, espero que tu pastilla resulte, porque las ganas de que este dentro es otros, así que se paró puso su verga en la entrada me tomo de la cintura, y empujo con toda su fuerza, a pesar que tenía lubricado mi interior por la excitación y el gel excitador, me dolió enormemente, que solté un quejido de dolor y placer, aguante todo, me salió lágrimas de dolor, que rico era sentir dentro todo esa barra, dura y gordota, caliente, empezó a darme duro, lo sacaba y lo metía con fuerza y lo sacaba, mi ano, empezó a dilatarse a la mala, ya le dolor seria mi cuerpo se moví al ritmo de su embestidas, cuantos minutos, no se, pero fue eternos, cuando soltó su victoria llevaba y yo también llegaba al clima, empecé a botar de mi pene, por la excitación y el me llenaba dentro con su leche caliente y espesa, que rico era, él se sentó aun con su verga parada, apuntaba al techo estaba llena de leche, yo me pare en el sillón, y me senté mirándolo colocándolo su vergota en mi culito, y me senté de un sola caída, introduciéndolo hasta que choco con sus huevos, el soltó un suspiro, yo solté un quejido, pero estaba tan excitado que no me intereso el tamaño de su verga solo me sentí hasta el fondo, empecé a moverme en círculos y me paraba y me sentaba de golpes, y de nuevo en círculos, que rico como apretaba esa verga, como se sentía en mis paredes cuando salía y entraba, que grueso era, esto duro varios minutos o más, hasta que de nuevo solté mi lechecita y el empezó a lléname dentro, a rebalsarse su leche, así paso toda la noche teniendo sexo por todos el departamento del hotel, en el baño, la cocina, el comedor, la terraza balcón que estaba en el piso 18, yacusi, la recamara, no había sitio que no lo hiciéramos, yo le deba unas mamadas que le sacaba toda esa leche, esa pastilla sí que era fuerte, tenía es verga dura como el fierro, dormíamos y nos despertábamos y el primero que despertaba lo hacía, si el despertaba me reventaba el culo para despertar, si yo lo hacía le daba una mamada, hasta sacarle su leche y tomármela, ni una gota se desperdiciaba, así duro todo el sábado, solo parábamos para comer algo rico claro, el pedía de todo la cuarto y seguíamos con el sexo, el domingo también fue, pero hasta las 2 de la tarde y ya tenía listo sus equipaje, llego el señor del taxi y se lo llevo, se despido diciéndome hasta pronto, volveremos a ver, yo me quede en el cuarto durmiendo, ya que tenía que llegar a casa como a las 6 de la tarde, el taxistas lo dejo en el aeropuerto, y regreso por mí, para llevarme pero era tempano y yo estaba durmiendo exhausto, el taxista entro al cuerpo a buscarme me encontró durmiendo desnudo boca abajo, y me desperté cuando sentí su manos tocando mi trasero, metiendo su dedo en mi ano, que un tenía su leche del negro turista, volteé y vi su cara de arrecho, su verga lo tenía afuera sobándose, era tamaño regular, pero si con un cabeza roja enorme, más que su tronco, eso me éxito mucho, mi ano estaba dilatado por la vergota del negro, así que me dije bueno que más dad, así que me arrodille en la cama dándole mi culito, con mi cabeza en la cama, abriendo mis nalgas, invitándolo a meter, el entendió se bajó el pantalón, y coloco su cabezota en la entra de mi ano, era muy grande su cabeza roja, me tomo de la cintura diciendo que rico culito tienes, que suave tú piel, con razón este turista pagaba sin decir nada, lo conozco mucho tiempo y eres el único que lo volvió loco, presiono con mucha fuerza, entrando su cabeza que me hiso soltar un quejido de dolor a pesar que lo tenía delatado, como penetraba esa cabezota, mis paredes sentía que se deslizaba, sin darme un respiro empezó a bombearme con fuerza esa cabeza salía y entraba, mi ano ya empezó a acostumbrarse y el placer la excitación empezaba a llegar a mi cuerpo, que rico se sentía es cabeza en mi culito, al punto que llegue a botar mi agua de coco, mientras él también me llenaba de su leche caliente, duro como 15 minutos el sexo, con el taxistas después le di una mamada que le saque de nuevo su leche y me la tome, que rica cabeza no llenaba mi boca por su tamaño, dejándolo en la cama exhausto, me fui a bañar y cambiarme, recogí el dinero, aun me sentía adolorido por todo el sexo de fin de semana, bajamos, llevándome al parque, me dijo que rico culito tienes, cuando nos vemos, quiero más, claro que le dije que sí, el otro viernes, pero nunca más lo vi, legue a mi casa.
Todo estaba bien, no hubo nada, Salí en la noche un rato, los chicos querían jugar a las escondidas, estaba Ronald, se me acerco para decirme disimuladamente que quería cacharme, que la tenía dura, que nos encontraríamos en el mismo escondite, mi ano estaba dilatado aun, sabía que querría ocultarse conmigo, para tener sexo, bueno que más un poco más de verga, y leche caliente para tomar, para dormí relajado, así que jugamos.
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