Bobby me inicia en el mundo del sexo a mis 7 años (02)

Cuando tenía 7 años mis papás adoptan un perrito que además de ser mi mejor amigo fue mi iniciador sexual.
Después de ese día, mi relación con bobby había cambiado, ahora no sólo era mi compañero de juegos, si no también mi compañero sexual. Por eso después ese día aprovechaba cada vez que tenía una oportunidad para que me chupara el pito.

Esa mañana me desperté más tarde de lo común ya que la noche anterior habíamos estado en un cumpleaños.
Con mucha modorra salí de la cama, pase por el baño y fui a desayunar.

Yo. Ma? Pa?

No había nadie y sobre la mesa había una nota que decía.
-amor, te deje el desayuno en la heladera, si me necesitas estoy en la pelu. Te ama Mami
Pd. Pone a lavar las sábanas y la ropa de anoche-

Volví a mi cuarto, saque las sábanas, junté la ropa, me saqué el calzoncillo y metí todo a lavar, después me fui a desayunar mientras miraba la tele.
Cuando termine, me puse a ordenar. Desde la ventana veo a Bobby como se lamía el pito, algo que me produjo un cosquilleo en los huevitos.

Yo. Bobby ..

Bobby se para en dos patas en el marco de la ventana y empieza a mover la cola.

Bobby. Woow Woow

Yo. Sshhh ya voy…

Antes de salir al patio me asomé a la puerta de la peluquería de manera sigilosa para ver qué hacía mami. Por suerte estaba muy entretenida charlando con Marcela, mientras le ponía tintura en la cabeza, dándome el pie que al menos tenía para una hora o más, entonces salí al patio. Cuando Bobby me ve, se me viene encima y empiece a olfatear previo a lamerme el pito

Yo. Hola amiguito … mira lo que tengo…

Bobby no dejaba de mover la cola de felicidad, cada vez que Bobby pasaba su lengua hacía que mi pito se ponga más y más duro, generando también ese hormigueo que me ponía cada vez más caliente.
Cada tanto miro por la ventana para estar seguro que mami no entre y nos descubra. Pues caliente pero precavido, algo que a Bobby no le interesa mucho.

No tardé mucho en llegar a las contracciones y luego al orgasmo seco haciendo que se me aflojen las piernas. Me senté en el piso con las piernas abiertas para que siga lamiendo, pero Bobby tenía otros planes e intenta montarse en una de mis piernas

Yo. No bobby, me vas a mear otra vez

En el primer intento lo pude sacar e intenté pararme, pero fue ahí cuando él saltó sobre mí y me abrazó de la cintura.

Yo. Para bobby, salí…

Él no respondió a mi orden, a pesar de eso me pude zafar, lo cual duró poco ya que otra vez se me tiró encima, solo que está vez me hizo perder el equilibrio y me caí de costado

Yo. No bobby, jajaja..

Nuevamente se me va encima, me rodea con sus patas delanteras y vuelve a mover su cadera mientras me lame la cara. Entre risas y pedidos quise salir, pero me terminé regalando ya que en ese momento quedé en cuatro patas y él ni lerdo ni perezoso, me abraza de la cintura con sus patas delanteras mientras que con las traseras buscaba no perder el equilibrio

Yo. Salí bobby jaja

Hasta ese momento solo me producía cosquillas, pero no por mucho tiempo ya que fue ahí cuando sentí como su verga pega contra mis huevitos, lo que me puso nervioso

Yo. Bajate bobby…

Cuando su verga se calzó en mi rayita y rozó mi hoyito, sentí rico, entonces me quedé quieto. Bobby estaba cada vez más acelerado y el roce de su verga en mi culito hizo que mi pito se volviera a despertar, así que como pude me empecé a masturbar

Yo. Mmm … aahh

En una de sus embestidas, hace un primer acierto y siento un fuerte pinchazo en mi culito, cosa que me hizo doler bastante

Yo. Aaayy … nooo

Quise salir pero me tenía muy bien agarrado, además soltó un gruñido que me dió un pequeño escalofrío mientras seguía bombeando.

Yo. Bajate q me haces mal…

El seguro pinchazo no tardó en llegar, hasta que en el tercero logró meter parte de su verga. El dolor fue tal que tuve que apretar los dientes con fuerza para no gritar.
Ya con parte de su verga en mi hoyito, era cuestión de aguantar sus embestidas, que de por sí no eran nada suaves. Por el dolor empecé a llorar mientras le rogaba que me suelte.

Yo. Aaayy.. salí.. mmmm

Su verga era interminable, hasta que llegó a tope. Sus embestidas no aflojaban y poco a poco el dolor empieza a transformarse en placer y los quejidos en gemidos.
No estoy seguro de cuánto tiempo pasó pero bobby no dejaba de cogerme hasta que en un momento da el último zarpazo pegando sus huevos inflados contra mi culito y se queda duro mientras empieza a vaciarse, cada chorro de leche caliente llenaba mis tripas hasta que se detuvo

Yo. Mmmmm nooo ..aahh

Nos quedamos un rato en esa posición hasta que ya sin fuerzas se desprende y se baja dejándome expuesto con el ardor en mi hoyito mientras algo chorrea entre mis piernas. Cuando pude me pare, me pase la mano y noto que es el mismo líquido viscoso que la otra vez y sin pensarlo dos veces, me tiré a la pileta donde me quedé hasta que mi mamá me llama para almorzar

Espero que les haya gustado, pronto subiré más contenido.
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