Caballero de otros reyes – 3

Pequeño encuentro en casa..

DAVID

Al haberse quedado en la villa de su amigo pudo disfrutar de una cogida sin igual incluso al despertar.

David se encontraba en una cama lujosa, estaba desnudo y cubierto de sudor, saliva y semen, miro hacia su entrepierna que estaba dura como un tronco, ignoro los brazos que los abrazaban y volteo hacia atrás.

Mike lo estaba abrazando, su verga de 12 pulgadas lo tenía atravesado, él también estaba despierto, con una sonrisa en boca, como si estuviera esperando pacientemente a que despertara.

– Buen día bebé – Dijo con voz cariñosa.

David quiso responder de la misma manera, pero de repente pensó en su cariñoso esposo que no se merecía nada de lo que le estaba haciendo. Recordó los mensajes que le mando a su teléfono que no fueron respondidos, conociéndolo; probablemente lo estaba esperando sentado en su sofá favorito, mirando con tristeza su teléfono.

El solo pensarlo hizo que su erección matutina se ablandara.

– Buenos días – Dijo David con voz calmada.

Mike no noto su tono o tal vez lo hizo, pero no le importo, giró su cuerpo y con rabia volvió a embestir su culo con su miembro.

Su verga volvió a ponerse dura, liquido transparente chorreaba de ella como si de un grifo se tratase.

Posiblemente porque ayer fue un día animado para ambos, Mike termino solo después de 20 minutos, su carga también se sentía más ligera.

Luego de levantarse se dirigieron al baño, se limpiaron la suciedad y el sudor y terminaron de cambiarse, durante este proceso se besaron muchas veces, alargando la ducha.

Al no saber cocinar, Mike y David terminaron por pedir pizza. David sintió que Julio lo cuidaba demasiado, el desayuno siempre estaría listo cuando el despertaba y tendría un sabor incomparable, sintió que al estar comparando a su esposo con su amante era  muy hipócrita.

Mike no notaba el cambio de humor en su tono y expresión, claramente la “confesión” del día anterior se vio afectada por la lujuria y el placer del momento, Mike no lo amaba, solo quería el placer que su cuerpo le daba y la satisfacción de tener un aventura.

David se entristeció bastante, con un tono seco se termino por despedir de su amigo, quería regresar rápidamente a casa y abrazar a su esposo, besarlo con cariño y hacer el amor de nuevo con él, darle atención y mirar la gentileza de sus ojos.

Mike claramente no tenia en cuenta sus sentimientos, también se subió a su auto, diciendo que quería ir a saludar al “angelito” después de mucho tiempo.

David lo dejo ir porque tenía miedo de que le dijera a Julio sobre su aventura, de repente se sintió muy incomodo con su amigo, lo que hizo fue un error total, su amigo podía reunir pruebas e ir con Julio y su matrimonio terminaría en cualquier momento.

Con el corazón pesado, rápidamente llegaron a su casa, mirando a Julio limpiar su jardín delantero con la ropa que usaba cuando limpiaba, guantes y un overol grueso, parecía un personaje sacado de una pintura, no importaba la ropa que usara, siempre se vería hermoso.

Probablemente eso pensaban todas las personas madrugadoras que se quedaban mirando embobados a su marido, igual que el joven universitario que se encontraba hablando con Julio fuera de su cerca, haciéndolo reír con sus comentarios de vez en cuando.

David se sintió bastante celoso e irritado.

¡¿Quién se creía este tipo, coqueteando con su esposo?!

Al estacionar su coche, Julio los recibió con una sonrisa de oreja a oreja.

– Bienvenido cariño – Dijo con gentileza y alegría.

– Hola querido, perdón por no ver tus mensajes – Respondió David con culpa.

Julio negó con la cabeza y lo beso en los labios con ternura, el toque de sus labios y su sabor dulce casi le hacen llorar, ese cariño y amor sin límites se lo pagaba teniendo aventuras a sus espaldas, se sintió como una basura…

– ¿Y no hay beso para mí? – Pregunto Mike con diversión y cara triste.

– No te he visto en años Mike – Le saludo Julio con un abrazo – Mis besos son solo para una persona.

Julio lo dijo mirando a Mike, pero también se lo dijo indirectamente al joven universitario que aun estaba allí, este último dándose cuenta de la indirecta se despidió de él con una sonrisa, sin importarle que lo rechazaran, lo volvería a intentar de nuevo otro día.

Julio termino con el jardín y los tres entraron, la casa estaba tan limpia que pensó que Julio no tenía muchas cosas que hacer, salvo limpiar, cocinar y escribir.

Julio fue a la cocina de buen humor, listo para hacer el desayuno, Mike y David no lo detuvieron, el primero quería volver a probar la comida del angelito y el otro quería limpiar en sabor a semen en su estomago y boca con la comida de su esposo.

Su cocina estaba conectada a la sala por un largo pasillo, el diseño permitía que al entrar a la sala se viera de inmediato la cocina, por supuesto también tapaba la visibilidad de la cocina a la sala.

En resumen, alguien en la sala podría ver a los de la cocina, pero alguien en la cocina no necesariamente puede ver a alguien en la sala.

Ese pensamiento hizo que Mike sacara una sonrisa traviesa, se acerco a David que estaba viendo a su esposo sacar ingredientes cerca del muro que divide la cocina y la sala.

David sintió que su amigo se acercaba, pero no dijo nada, cuando sintió que una mano se adentraba en su pantalón se giró para mirarlo.

– Quédate quieto – Le ordeno en voz baja y severa.

David entonces se quedó quieto, las imágenes del día anterior pasaron por su cabeza, haciendo que su ano se estremeciera con anticipación.

Olvido momentáneamente que ya no quería engañar a su marido.

Mike disfrutaba de la situación, metió su mano dominante en el pantalón de su amigo y con sus dedos tocaron su agujero usado. Su ano estaba tenso, pero permitía la entrada a cualquier cosa.

Julio estaba pelando patatas, sin darse cuenta que a solo un par de metros, su marido estaba siendo penetrado por los dedos de su amigo.

Tal vez por haber sido usado por horas, el ano de David aun conservaba la viscosidad del semen, los dedos de Mike entraron y salieron a gran velocidad, con experiencia los movió de tal manera que ningún sonido saliera y tocaba la próstata de su amigo con cada movimiento.

David estaba duro de nuevo, su pene empezaba a dolerle de tan duro que estaba y por estar presionando contra su pantalón. Mike movió su otra mano, desabrochando su pantalón y bajándolo junto a su ropa interior.

La parte inferior de su cuerpo ahora estaba desnuda, si Julio saliera por cualquier motivo, no tendría tiempo para cubrirse y finalmente su matrimonio terminaría.

A Mike no le importó, el estar haciendo ese acto de espaldas a Julio le excitaba de sobremanera, rápidamente de deshizo de sus partes inferiores y con su polla dura y expulsando liquido transparente, la metió de golpe en el ano hambriento de su amigo, le beso con rabia en silencio para evitar que gimiera.

La situación le parecía surreal a David, no quería engañar a su marido, pero ahora estaba recibiendo la verga más grande que ha tenido en su vida a espaldas de él.

Pero dejo de importarle al sentir el placer de tener su ano taladrado y su próstata siendo golpeada, con cada movimiento podía sentir que sus bolas se movían para producir esperma y liberarlo.

Su acto duro varios minutos, con Mike finalmente expulsando su carga en sus entrañas nuevamente. Mike le había cubierto la cabeza de su verga con la mano, evitando que cubriera el muro de semen, acerco esa mano a su boca y obedientemente la sorbio con cuidado.

Se pusieron la ropa con naturalidad y miraron como Julio cocinaba con alegría sin darse cuenta de su pequeña aventura.

Él estaba feliz en su propio mundo.