Carlo el comienzo
Mi primera experiencia sexual en un parque acuático..
Saludos a todos, finalmente me he animado a redactar mi primera experiencia sexual que marcó mi vida, ojala me logre expresar correctamente.
Actualmente tengo 30 años y para adentrarnos a mi historia debo retroceder el tiempo 18 años y todo comienza de la siguiente manera:
Por aquel entonces era un niño de 12 años recién cumplidos, juguetón, cuerpo atlético porque me gustaba practicar deporte, ojos café oscuros y estudiaba en un colegio particular, mi familia siempre ha estado muy bien posicionada económicamente por lo que me trataban de dar lo mejor en cuestión de la educación, pero yo a esa edad tenía un gran defecto, era muy tímido y era muy fácil que alguien me controlara o que me bloqueara ante situaciones complicadas o que me rebasaban.
Ya se imaginarán la manera de trabajar del colegio, lo usual, materias extras o clubs, instalaciones modernas para la época, tecnología al último grito de la moda, clases de modales, etc. Y recurrentemente las maestras o maestros hacían excursiones de recreación, para complementar según ellos la formación académica.
Y precisamente mi historia se centra en una de las excursiones, se acercaban vacaciones de semana santa y la maestra propuso ir a un parque acuático o balneario como le conocemos comúnmente, para nadar, jugar y convivir todos en grupo. Obviamente a esa edad tu estás emocionado por salir con los amigos y divertirte, por lo que solicité el formal permiso a mis padres y entregué la solicitud que envió dirección para que firmaran el acuerdo, ellos no me negaban nada, además de que no era la primera excursión.
En fin, llegó el día de la salida al balneario, tomamos un camión con todas las comodidades para trasladarnos, el viaje de la ciudad al balneario duró una hora aproximadamente, por mi cabeza no pasaba otra cosa más que divertirme con mis amigos e íbamos platicando de todo lo que haríamos al llegar.
Arribamos al lugar al rededor de las 11 a.m.. La maestra nos registró como grupo escolar eramos 12 niños y 8 niñas, además de la maestra y su esposo que la acompañó, cuando el trámite quedó listo entramos y lo primero que hicimos fue buscar un área donde establecernos.
Encontramos una palapa con mesas y sillas en muy buena posición, no habia tanta gente era un lunes, el parque no era muy grande pero si completo, tenía 5 piscinas, áreas verdes, juegos infantiles, toboganes, canchas deportivas y tienda con una gran variedad de artículos.
Los niños queríamos ir a jugar fútbol pero las niñas querían ir a los jardines, cuando la maestra entró en conflicto su esposo la ubicó, él se iría a cuidarnos y ella con las niñas.
Estuvimos jugando como por una hora, todos corríamos, reíamos; hasta el esposo de la maestra participó y se estaba divirtiendo, fue cuando me di cuenta que un hombre estaba en las gradas observándonos y no se porque tenía una sensación que me seguía con la vista más a mi, me incomodaba un poco pero no se me hizo raro al contrario pensé que le gustaban todas las tonterías que hacíamos.
Paso media hora más y la verdad ya estábamos cansados así que el esposo de la maestra propuso ir a re hidratarnos y descansar, nos fuimos a la palapa y cuando llegamos la maestra nos regañó un poco porque nos vió muy sudados y sucios, nos mandó a tomar agua y nos dijo que aún era muy temprano para comer así que nos mandó a los vestidores a ponernos el traje de baño y meternos a la piscina, todos corrimos por nuestras cosas y nos fuimos al área de cambiadores, eran privados, tenían un pequeño locker, una banca metálica, regadera y la puerta que podías poner con seguro, estabas completamente a salvo y cómodo ahí dentro, me desnudé completamente, me puse ropa interior limpia y mi short de baño color naranja.
Sali del vestidor y muy cerca vi a un hombre, cuando lo vi más a detalle vi que era el mismo que nos observaba, tuve que pasar a su lado para poder llegar a la palapa y justo cuando iba pasado me sonrió y me dijo:
Hombre: que lindo short, me gusta como se te ve.
Yo: (sonrojado) ehh gracias.
El volvió sonreír y me fui sin decir más, todavía yo en mi inocencia no encontraba tanta rareza en lo sucedido, rápido le di vuelta al asunto y llegué con algunos de mis compañeros, cuando todo el grupo estuvo reunido nos metimos a disfrutar del agua, nadando, riendo, jugando, etc. Pasó un rato cuando se volvió a acercar el mismo hombre ya con un traje de baño un poco ajustado de color azul y se metió al agua pero al otro extremo de la piscina y pude notar que muy sutilmente nos observaba ahora me imagino que para no levantar sospechas.
El grupo seguía sumergido en la diversión, y me desentendí por completo de aquel hombre, hasta que sentí que me agarraron las nalgas por debajo del agua y como que alguien chocó conmigo, para mi sorpresa fue el mismo hombre saliendo del agua con unos goggles de buceo, se disculpó, la maestra le dijo que no se preocupara, nadie se dio cuenta de que me agarró el trasero y al mismo tiempo yo también me convencí que había sido por accidente, incluso las personas agenas a nuestro grupo siguieron en sus actividades como si nada pasara.
Eran las 2 de la tarde más o menos y la maestra dijo que era hora de ir a comer, salimos del agua nos fuimos a nuestras mesas con las toallas y empezamos a comer, sándwiches, atún, ensalada de sopa fría y fruta. Acabando de comer la maestra muy estricta nos dijo que debíamos reposar una hora antes de volver a la piscina o ir a jugar.
Al finalizar el reposo obligado, fuimos a los juegos infantiles jugando todos juntos, la pasamos bastante bien a decir verdad estaba siendo una reunión divertida y normal.
Pasaba un poco de las 4 de la tarde cuando la maestra nos propuso ir de nuevo a las piscinas, pero ahora a las de toboganes, los no tan peligrosos según ella y se reanudó la diversión además de que nos caía bastante bien el agua para refrescarnos por el calor que hacía.
Pero como en esta vida no todo es color de rosa aún faltaba algo más por vivir ese día, a las 5 de la tarde más o menos, la maestra nos dijo que era hora de ir a bañarnos y cambiarnos porque ya se acercaba la hora de regresar a casa, todos empezamos a reprochar porque no queríamos irnos pero no nos quedó elección.
Junto con mi mejor amigo tomamos nuestras mochilas nos demoramos un poco porque mi amigo no encontraba su toalla hasta que la maestra la encontró, ella se quedó de guardia en lo que su esposo también se fue a bañar. Por fin nos fuimos a los vestidores por desgracia los más cercanos estaban ya ocupados, así que debimos darle la vuelta al edificio donde había más, solo había uno libre, mi amigo corrió y me dijo lástima perdiste vas a tener que esperar y cerró la puerta, cuando ya estaba resignado a esperar con frío, pasó un hombre trabajador del balneario y me indicó que pasando la alberca de tobogán grande había otro edificio de vestidores.
Me animé a ir, llegué a los vestidores y vi que estaban libres, el edificio y esa parte del balneario estaba completamente solo, elegí el vestidor del fondo, entré observé la banca metálica y me dispuse a dejar mi mochila, cuando de repente oí que cerraron la puerta con el seguro, giré la cabeza y dije:
Yo: está ocupado..(Gran sorpresa que estaba aquel hombre que todo el día nos había vigilado).
Hombre: hay disculpa pero como la puerta estaba abierta creí que estaba libre y no te había visto.
Yo: (temeroso) no se preocupe es que primero entre a dejar mis cosas por eso no cerré.
Hombre: ahh ya veo, que lástima me había ilucionado porque cada que vengo a este lugar mi vestidor favorito es éste, sale más agua.
Yo: si quiere esperar afuera no tardaré.
Hombre: te agradezco la consideración, pero oye se me ocurre algo no te gustaría compartirlo?
Yo: compartirlo, como?
Hombre: jaja si que los usemos los dos, de igual manera ya estamos adentro.
Yo: ( muy sonrojado) pero es que me voy a bañar.
Hombre: si lo se, yo también, nos podemos turnar en la regadera.
Yo: ( completamente rojo y saliendo a flote mi gran defecto) me refiero a que me debo quitar la ropa y me vería, además no lo conozco.
Hombre: jaja pero eso no es problema por mi puedes desnudarte somos hombres, y ya nos conocemos no recuerdas, soy el que te dijo que me gustaba tu short y en la piscina choque contigo no me recuerdas?
Yo: ( al borde del colapso sentía algo raro en el estómago) ahh si lo recuerdo.
Hombre: (tomando el control de la situación por completo con una mirada pícara) mira en lugar de que sigamos perdiendo el tiempo, mejor lo compartimos, me llamo Salvador y tu ?
En cuanto me hizo la pregunta el hombre se puso las manos en el elástico del traje de baño y lo bajó por completo, quedando desnudo ante mis ojos, quedé completamente inmóvil y sin saber que hacer, creo que un niño normal habría gritado pero yo solo me paralicé como siempre.
Puedo recordar que tenía el pene de mediano a grande y no tan grueso, completamente blanco y limpio, muy poco bello púbico, obviamente ahora que soy adulto entiendo que se lo afeitaba, unos testículos prominentes y rosados, por lo que se veían muy colgados, se le marcaba el abdomen, nunca supe su edad pero calculo que estaba en los 35 o 40 años.
Hombre: que te pasa no me digas que un lindo bebé como tú nunca había visto a un hombre desnudo, anda dime cómo te llamas, no tengas miedo no pasa nada.
Yo: (nervioso) me me llamooo Carlos y no nunca he visto a nadie.
Hombre: hay bebé no te preocupes es normal y no me digas que tampoco has estado tu desnudo delante de alguien más?
Yo: no con nadie.
Hombre: eso se puede arreglar bebé.
Se acercó a mi, yo no podía dejar de verlo desnudo y además no tenía a donde escapar, me tomó por los brazos se arrodilló y me dijo.
Hombre: no tengas miedo no te voy a lastimar, solo quiero pasar un rato agradable contigo, eres muy lindo yo lo observé a los ojos.
Y cuando terminó de decir esas palabras me bajo el short y mis calzones hasta los tobillos, sentí como cosquillas en el estómago y me dijo:
Hombre: ya ves bebé, no es tan malo.
Con sus manos retiró mi ropa que estaba en mis tobillos la dejó en el piso y me llevó hacia la regadera, arrimó la banca metálica, levantó mi ropa la puso sobre la banca y me sentó.
Hombre: bebé eres muy lindo lo sabías, desde que te vi en la mañana no pude dejar de verte, me gustaste mucho y deseaba tener un momento a solas contigo.
Fue cuando lo vi con detenimiento, era bastante atractivo, sus ojos eran color miel intensos, su barba en partes tenía tintes canosos, su piel muy cuidada y blanca era musculoso, me sonrió y me dijo.
Hombre: vamos a bañarnos quieres?.
Abrió la llave de la regadera y la preparó a una temperatura agradable, yo seguía paralizado no podía dejar de observar al hombre, me dio la espalda y me dejó observar su espalda ancha y unas nalgas firmes y voluminosas.
Fue hacia mí mochila saco mi jabón y mi shampoo y se dirigió a mi.
Hombre: listo bebé, vamos a comenzar, que lindo cuerpo tienes, así te imaginaba.
Me metió a la regadera empecé a mojarme completamente, tomo el jabón y me lo frotó en la cabeza, inició a masajearme la cabeza, yo cerré los ojos para que no me entrara, tenía un sentimiento de emoción y relajación, me inclinó hacia el agua y me limpió el jabón por completo.
Volvió a tomar el jabón, ahora comenzó a pasarlo por los brazos, y por mi pecho, se notaba que él lo estaba disfrutando, y ese sentimiento de emoción se hizo más notorio baje la vista y observé que su pene comenzó a crecer y se le asomaba la cabeza rosada.
Hombre: que lindo bebé, que guapo estás que suave tienes la piel, no te asustes lo que me estás viendo no te hará daño.
Bajó el jabón hacia mí abdomen y siguió enjabonando, hasta que bajó aún más y llegó a mi pene, que por el nerviosismo o o la emoción lo tenía algo duro obvio a esa edad no era grande, lo tomó, lo enjabonó y lo acariciaba suavemente, pasaba sus dedos por todo mi pene, por mis testículos, por mi pubis, realmente me gustaba y me relaje y él lo notó.
Hombre: (con el pene completamente erecto) así bebé disfrútalo no tengas miedo, que lindo pene tienes, cuando seas grande lo tendrás de seguro como yo.
Me hizo sentar en la silla y me enjabonó las piernas y pies hasta que me dejó de enjabonar y me puso en el agua para quitarme el jabón.
Hombre: ven bebé date la vuelta déjame verte esas nalguitas.
Me dio pena pero seguía paralizado y sumiso, esta vez fue diferente, él se sentó en la silla, me atrajo hasta él, y me puso boca abajo en sus piernas, tenía a su disposición mi trasero.
Hombre: que rico, que nalgas tan bonitas, he soñado con ellas todo el día.
Tomó el jabón, era el turno de que mi trasero fuera enjabonado y acariciado, lo hacía en toda la superficie de mis nalgas, me las apretaba, me las golpeaba pero muy levemente, hasta que sentí que me tocó mi ano, inmediatamente apreté.
Hombre: no bebé no aprietes ponte flojito no pasa nada.
Lo obedecí, me masajeaba la entrada del ano, se sentía raro, me daban cosquillas y podía sentir que su pene erecto se movía en mi abdomen. Esta vez me dejó enjabonado.
Hombre: ( después de un rato) ven bebé vamos a jugar a otra cosa. Toma el jabón y enjabona mi pene como lo hice contigo, si bebé.
Yo: quiere que le agarre su pene.
Hombre: si anda no tengas miedo, ya te agarré el tuyo, anda que se hace tarde.
Con un nudo en el estómago le tomé el pene, no se porque así de fácil accedía a las peticiones, sin duda no era un niño normal o la situación me estaba gustando.
Comencé a sobarlo con nervios, subía y bajaba mis manos enjabonando el pene duro de aquel el hombre, él lo disfrutaba y hacía gemidos con la boca. Me pidió acariciar la cabeza con mis dedos y lo hice su satisfacción era mayor, tomé por instinto esas bolas colgantes y las enjaboné.
En un rato más sentí que algo raro pasaba, el hombre temblaba y su respiración aumentaba, de repente me detuvo.
Hombre: espera ven acuéstate en la silla bebé, me tomó de la mano y me puso boca abajo yo seguía obedeciendo todo, tomo mi short, mi ropa interior y su traje de baño lo hizo bola y la puso en mi abdomen, luego se colocó detrás de mi y yo sin saber que pasaba, cuando sentí el contacto de su dedo, me di la vuelta algo asustado, pero él me calmó y me lo impidió.
Hombre: no pasa nada relajate.
Comenzó a sobarme una vez más el ano, me puso más jabón y siguió su masaje yo sentía que me corría un escalofrío raro de lo cabeza a los pies, un minuto más tarde sentí que hizo presión y pudo meter parte de su dedo yo apreté pero el comenzó a hacer círculos y empecé a aflojar conforme daba los círculos hundía su dedo y lo sacaba, era una sensación muy rara me daban cosquillas y se me aflojaban las piernas.
Llegó el momento que el dedo entraba y salía con facilidad no llegué a sentir dolor todo lo hacía con gentileza, en poco rato fueron dos dedos los que podía sentir dando círculos, entrar y salir mi emoción aumentaba, y ahora puedo entender que era placer después fueron tres dedos, se detuvo y me dijo.
Hombre: ahhhhh bebé que rico, ahhh que lindo ahora te haré el amor.
Yo por las clases sabía de sexualidad y cómo era hacer el amor pero entre hombre y mujer, por lo que no comprendía a que se había referido, de pronto sentí el contacto del pene caliente y duro de aquel hombre en mi ano, presionó y entró la cabeza sentí un leve ardor que ocasionó tratar de moverme y le dije:
Yo: por favor me quiero ir no quiero.
Hombre: no bebé resiste en un momento vas a disfrutar como yo. ( y empujo más entrando otra parte de su pene).
Yo: nooo me va a doler.
Hombre: no te dolerá estas muy dilatado fácil te entró ya tienes la mitad de mi pene adentro.
Me tapo la boca, me aprisionó y empujó de nuevo, sentí un dolor pero soportable (creo que en realidad como dijo si me supo trabajar o dilatar porque a diferencia de otros que narran sentir un dolor inmenso yo sinceramente no lo sentí o también se debe a que no tenía un pene descomuna).
Hombre: Ahhhh bebé que rico estás ya entró todo.
Yo: mmmm mmm (por mi boca tapada).
Así estuvimos por un rato el ardor desapareció, comenzó a moverse , dejó de taparme la boca el hacia ruidos de satisfacción yo podía sentir salir y entrar su pene de mí, regresó la emoción que me recorría el cuerpo, sentía cosquillas en el interior y mis piernas se aflojaban, cerré los ojos y me dejé llevar completamente a la situación.
Hombre: así bebé, que lindo, que rico, disfrútalo como yo, te lo dije que ibas a disfrutar, que ricas nalguitas me diste.
Yo no decía nada estaba simplemente perdido para ese momento, él incrementó el ritmo, lo saca más y lo hundía todo, no tenía sentido del tiempo, el comenzó a jadear.
Hombre: ahhh ahhhhh bebé ahhh que ricooo.
Sacó su pene lo posó en mis nalgas y pude sentir un líquido caliente que caía sobre ellas.
Hombre: ohhh mi amor, mi bebé que lindo momento.
Regresé a la realidad no entendía que pasó, el se incorporó, y me incorporó a mi sin decir palabra alguna, me llevó a la regadera y me limpió con el agua acariciando aún mi cuerpo, pude ver su pene rojo y flácido, cuando terminó de limpiarme me llevó a la parte seca del vestidor, me secó con la toalla, empezó a sacar mi ropa limpia, y me vistió.
Hombre: gracias bebé por este maravilloso momento, jamás lo olvidaré ni te olvidaré Carlitos, pude notar que no sangraste no habrá problema con tu ano rápido regresará a su normalidad.
Yo lo observé a los ojos sin decir nada, me tomó por los hombros me dio un beso en la mejilla se dio la vuelta dejándome ver de nuevo sus nalgas, tomó mi ropa mojada la exprimió y la puso dentro de mi maleta en el compartimento donde no mojaría las otras cosas.
Hombre: anda vete antes de que te vayan a buscar, tomé mis cosas y giré la cabeza para verlo, me sonrió me dijo adiós con la mano le di un último vistazo a su pene que estaba ya flácido y me fui.
Iba en un trance, no sabía analizar lo que pasó, cuando llegué a la palapa era el último en aparecer, la maestra me dijo que porque había tardado tanto eran las 6:30 más o menos yo solo le dije que estaba lleno el edificio de vestuarios y que fui a los más lejanos que me quedé atorado hasta que un trabajador me abrió no supe que más mentir, me regañó por no avisar pero no pasó a más.
Subimos al camión y en el camino a casa pensaba en lo sucedido, sentía el ano raro, desde ahí fui otro algo cambió en mi y marcó mi vida. Duré mucho tiempo en dejar de pensar en esa situación, nunca lo conté hasta ahora y al hombre jamás lo volví a ver.
Pero lo que sí puedo decir es que ese día marcó mi vida y muy seguramente nació mi bisexualidad.
Fin.
Uffff que delicia, y que bueno que haya sido una experiencia agradable y no traumatica! Ya hubiera querido yo una experiencia asi de linda!
Buen relato, cuenta como llego tu próximo hombre👍