Cielo rosa
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Teníamos mucha confianza en toparnos nuestros penes a manera de jueguitos con los dedos y de roces en nuestros culos que se había hecho costumbre viéndoles hacer a los chicos mayores lo hacíamos a solas de los adultos, aquella media tarde me despertaron los ruidos de la pulidora del taller del vecino escuché la voz de Kevin que estaba como siempre de visita en mi casa con su mamá, mi presión arterial aumentó, cerré los ojos por un ratico para imaginarme haciéndonos el amor desnudos en mi cama, recordando la {ultima vez en que nos metimos las manos por dentro de la ropa sobándonos los penes nos bajamos las trusas para dejar descubierto los miramos detenidamente nos reímos nos acercamos para que los penes pudieran culiarse entre si, lo tomé de los hombros para arrimarlo a la pared con la idea de culiarnos parados nuestros brazos rodearon los cuerpos nos sujetamos de las caderas para hacer un movimiento rítmico de culeo haciendo mover rápidamente nuestros penes después me bajaba a mamarle el pene que tanto le gustaba después trate que me mame un poquito mi pene tomándolo de la cabeza para que medio pene lo saboree en su cavidad bucal, nos dimos un besito le arrime de pecho a la pared para sobarle mi pene por la espalda y por el culo después dejé que me haga lo mismo sentía su aliento recorrer mi espalda. Mi pene se puso tieso lo sobé con la mano, mi dedo pulgar hacia delicia masajeándome el glande rodeando mi prepucio y estirándolo en mi mente me salía la frase: Kevin dame tu culo.
Estaba a punto de venirme la voz de Kevin era más próxima me acerqué a la ventana, tenía mi pene bien largo con liquido pre seminal, mi trusa a media altura de mis nalgas a lo que me apego a la ventana mi pene queda pegado debajo de la pared desde allí lo vi jugando lanzando mi pelota al aro de básquet que había hecho en mi patio, me masturbe el pene en contacto con la pared viéndolo saltar con el calentador y remera deportiva ajustada a su cuerpo, le hice un shittt, shiittt regresó a verme con la mano le dije que subiera me hizo un gesto que yo bajara a jugar pero yo insistí con gestos que subiera, alzó el brazo abriendo los cinco dedos de la mano indicándome que ya iba, lo esperé acostado en mi cama miraba al techo con mi pene bien grueso toda mi mano pasaba por ese tronco, los segundos se me hacían largos, de pronto la puerta se abre lentamente Kevin entra con su sonrisa alegre me ve acostado en mi cama totalmente desnudo, se ríe más, me doy vuelta contra el colchón boca abajo, le dije: culéame Kevin, ven… culéame Kevin, a lo que me sobaba el culo con las manos abriéndome de piernas y meneando mi cadera para arriba y para abajo a manera que culiaba el colchón, yo estaba bien excitado, segundos después siento su cuerpo sobre mi espalda, el pene de Kevin pasaba mis nalgas haciéndome cosquillas por mi cadera, sent{ia todo el calor de la piel de mi amado, deseaba estar así siempre porque la piel suave de Kevin me transportaba al éxtasis sexual.
Aquellas manos recorrían mis brazos hasta llegar a mis manos, me hacia mover las nalgas y mi cadera a los lados con fuertes movimientos, nuestros dedos se entrelazaron le decía: sigue, sigue, así, así, rico, rico posteriormente las manos de Kevin masajeaban mis nalgas sentí la saliva que me dejaban sus labios al besármelas sentía el pene que lo hacia mover por mi raja de nalgas me tuvo así dando pene a mis nalgas por corto rato hasta que con delicadeza lo hice a un lado de mi cuerpo poniéndonos de perfil mirándonos nuestras caras sonrientes nos pusimos a sobar nuestras piernas con los pies lo atraje a mi de la cintura haciendo que nuestros penes se froten tomados de las caderas nos movíamos como serpientes nuestra respiración chocaba en nuestros cuerpos, esa postura nos gustaba mucho, me arrodille sobre el colchón lo puse en cuatro delante de mí, por segundos disfrute mirar el cuerpo de Kevin totalmente desnudo de piel sedosa la blancura de su piel contrastaba con lo rosado de su ano era un cielo por donde iba a cruzar mi saeta de glande en contados segundos, le dije a Kevin que íbamos a culiar más rico, mi dedos pulgares abrieron su ano cerré mis ojos, acerqué mi nariz oliendo ese característico olor a culo, me enamoré de ese culito rico, cerré mis ojos al tiempo que le pasaba mi lengua, Kevin sintió algo que lo hizo mover a los lados le dije que se quedara quieto que era rico me decía que sentía cosquillas en cada pase de lengua Kevin respondía moviéndose bruscamente escuchaba sus risas fuertes le pedía que hiciera silencio, tenia cerca de mi ese culito por el que siempre me masturbaba a en su nombre, ese culito tan carnoso deseoso de culeo, no lo pensé más, le puse mis almohadas debajo del pecho de Kevin que seguía en cuatro pero su cara sobre el colchón viendo ladeado que acercaba mi pene a su culo, tomé las caderas de Kevin acercándolo más a mi; ahora mi pene, le frotaba la raya del ano mi liquido pre seminal estaba algo seco pero lo pasaba en sus nalgas, era el momento, ese culo tenía que ser mío, la habitación estaba en silencio que fue cortado por los gemidos de mi chico en el momento en que mi glande entraba en su ano, cerré mis ojos, sentí la tibieza de su ano en mi glande que me daba un gusto al penetrar, aparté mi pene le escupí saliva al ano, mi dedo índice frotaba la saliva se lo metí hasta el primer nudillo luego le metí el dedo corazón sus gemidos eran cortos en cada penetrada dudé un poco en meterle mi glande pero la saliva chorreada por su anito me estimuló así que despacito se lo iba metiendo los gemidos eran más largos y sonoros le tapé la boca con la mano, creo que mi glande estaba casi adentro todo, las paredes de su ano latían al contacto con mi glande Kevin se ladeó haciendo a un lado las almohadas mi glande se soltó del ano, nos viramos de perfil, me miró con algo de cansancio y pesadez, sabía que ese culo era virgen por eso estaba enamorado locamente de él, Kevin seguía con su cuerpo de perfil frotándose su dedo por el ano llevándoselo a la nariz oliendo el liquido que estaba ensalivado, lo tomé sutilmente de la cintura llevándolo al filo de la cama, pese a todo, Kevin quería seguir con lo nuestro mis dedos se encargaron de frotarle el pene le escupí saliva para que sintiera más delicioso el masaje, saqué mi lengua para que jugueteara con su prepucio que cubría su glande delicioso abrí lo más que pude mi boca para mamar ese pene con pelitos cortos recién brotados en los testículos, me sabia a gloria el sabor de su pene mi boca con pericia lo hacía excitar, tenía los ojos cerrados del placer que sentía, se acercó a mi oído a decirme que le culiara el pene lo doblé del tronco haciendo que su espalda se posara sobre el colchón arqueado como estaba con sus piernas abiertas acerque mi pene a frotarle sus testículos y el tronco de pene que estaba bien tieso hice o posible para que nuestras frentes se unieran nuestros penes se frotaban acelerando el movimiento, los ojos de Kevin se cerraron vi era deliciosa esa postura con nuestros brazos estirados y manos nuevamente entrelazadas la cama se movía más se escuchaba e traqueteo de los resortes que se movían más cuando sentía el venirme chorreando mi semen entre nuestros estómagos nos quedamos así por unos segundos sintiendo nuestras respiraciones al moverse nuestras costillas y nuestros pechos fui el primero en levantarme, buscar papel higiénico y limpiarme el semen, Kevin seguía con sus piernas abiertas, su cuerpo arqueado, sus pies tocando el piso su espalda sobre el colchón con la mirada al techo seguramente pensando en lo que habíamos hecho tal vez con un ligero sentimiento de culpa…
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