Como comencé con el sexo (part. 2)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Fernando1944.
Como comencé con el sexo (part. 2)

El sexo con Roberto fue placentero en todo momento, el hecho que me hiciera cogerlo a el antes de ir por mi ano, eso me dio confianza, muy necesaria para un niño de menos de 10, y mas cuando me aseguro que no habría dolor, efectivamente, no hubo dolor, talvez el hecho de el ser el solo 14, su verga no estaba totalmente desarrollada haciendo sus penetraciones muy tolerables, y muy pronto gozándolas.
Lo que Roberto no logro convencerme fue el tener sexo oral, me demostró en la practica yo aceptaba que me chupara, pero nunca lo hice yo, me daba asco

Nuestras relaciones continuaron durante el resto del año escolar, el cogernos, entre nosotros fue una experiencia diaria, este paraíso sexual duro sin cambios hasta el final de las vacaciones de verano.

Regrese a casa dos días antes del inicio de las clases después de estar por mas de dos meses en la granja de un tío, llegando al anochecer, tomando un baño de regadera para limpiar el polvo del camino, de ahí a la cama donde me dormí al instante.

No se cuanto rato mas tarde fui despertado por Roberto entrando en mi cama, donde se puso a trabajar con su boca y manos, después de tan largo tiempo sin sexo, reaccioné rápidamente mi penecito llegando a ser una barrita de hierro el se esmero en el tratamiento de mi ano dándome un beso negro sensacional, dejándome listo para una muy deseada cogida.

Durante la separación veraniega Roberto había crecido, y también le creció la verga casi a un tamaño adulto esto hizo que la cogida fuera algo especial, primera vez que sentí estar lleno, y cuando Roberto se corrió sentí la verga hincharse y deshincharse profundamente en mi culo dando tal sensación que me corrí sin siquiera tocar mi pene

Los cambios fueron mayores, dos hermanos de Roberto, Mario (13) y Ernesto (12) vinieron a vivir con nosotros, compartiendo nuestra habitación.
Yo creí que esto iba a inhibir nuestra vida sexual, muy pronto salí de mi error, cuando fue evidente que ellos se cogian unos a otros talvez por años.

La presencia de los otros dos hermanos cambio la reglas de el juego, muy pronto las sesiones nocturnas se convirtieron en bacanales juveniles, los dos mayores eran muy adeptos al sexo oral, no conocían la palabra asco.
por un tiempo fue uno para todos, todos para uno.
de mas esta decir, que todos nosotros éramos Activos y Pasivos

Con el tiempo sin discutirlo, llegamos a formar parejas, estas se formaron, mas que nada basadas en los gustos sexuales, Ernesto, el mas joven y mas cercano a mi edad fue mi compañero, teníamos gustos similares, en lo sexual a Ernesto le gustaba mas el ser pasivo.

Ernesto era alto, rubio, muy blanco y prácticamente lampiño, , pequeña mata de pelos pubicos y axilas.
sin pelos cerca de su ano, esto era perfecto para cuando el sexo anal era practicado