Cómo mi papá me inició a muy temprana edad
Comparto mi inicio, como liberación y para excitarles.
Actualmente tengo 30 años, soy médico con especialidad, soy alto, 180cm, soy moreno, ojos rasgados, nariz afilada, sonrisa alineada y blanca, mentón cuadrado, labios ideales, cabello y ojos negros, delgado, tonificado, soy bastante agradable para platicar, extrovertido, inteligente, risueño, amable, tranquilo en el trabajo, hogareño pero también me gusta salir de vez en cuando, me considero homosexual para las relaciones emocionales y bisexual para el sexo.
Tengo un buen trabajo, me llevo muy bien con mi familia , mascotas, pareja, amigos de años, un muy buen trabajo que me apasiona, muy buena paga y aún así no me sentía bien, por lo que comencé a ir con una psicóloga, ya sabes, para ventilar estas cosas, pero no tantas como para que me encierren… error por cierto, siempre busca un psicólogo en equipo con psiquiatra, como en mi caso, que te haga hablar todo, aún las experiencias más traumáticas, esas que a veces bloqueamos y que nos vuelven a sentirnos secretamente así tal cual eres, para bien o mal, en mi caso hablo de ser adicto al sexo, la necesidad de incrementar la dosis de sexo, seducción, contacto y haber probado muchas cosas para sentirme satisfecho.
Cosas que te iré platicando con éstos textos, originalmente eran un ejercicio de ventilar mi subconsciente y quitarme algo de la presión interna que sin saberlo me empujaba a continuar con esta satiriasis (ninfomanía en varones) tras escribir algunas de las situaciones en mi tierna infancia me excitaba, espero también logren provocarte un rico orgasmo, sobre todo si eres aficionado a los tabúes.
Los primeros recuerdos que me acercaron al sexo que reviví tras una catarsis con mi psiquiatra fueron a los 5 años, recuerdo que mi papá aun en casa fue quien me acercó al tocamiento, lo recuerdo así, mi madre tenía que trabajar turnos nocturnos en el hospital, ambos son médicos por cierto, y mi padre trabajaba por las mañanas, así que en las noches era común que nos bañáramos juntos, y después a la cama juntos, como haz de suponer, ya desde la regadera me tocaba, me enjabonaba todo a mano, me masajeaba, me pasaba sus grandes manos por todos lados, prestando mucha atención a mis genitales, ano y pezones, yo sentía muy bien, así que sólo me relajaba, como él me pedía, y en una bañera me recostaba encima de su adulto cuerpo, sentía lo mejor cuando su pene se iba poniendo duro, al principio no me dejaba tocarlo, sólo me hacía el masaje conmigo, recostado en el, y también con su dedo meñique bien enjabonado lavaba lo más externo de mi ano, relajándome y a veces introduciendo la yema, que es cuando le pedía que parara, incluso a veces nos besábamos en los labios, cosa que se me hacía lo más normal. Aún así siempre me insistía que todo era un juego secreto que para que siguiéramos tenía que mantenerlo para nosotros.
En cama dormíamos sólo en ropa interior, yo por lo general bikini o briefs con algún personaje, él siempre con sus trusas blancas, me acercaba mucho a su cuerpo, mi espalda de nuevo junto a su pecho, acomodándome para que mis nalgas siempre quedaran frente a su pubis, entonces el besaba mi cabeza, me abrazaba y me hacía cosquillas en la espalda, y poco a poco bajaba a mi pene, donde la sensación era un placer que aún no conocía como excitación, mi pene infantil se ponía duro, aún más que en la tina, y el disfrutaba de masturbarme con delicadeza con su mano derecha mientras que con la izquierda se masturbaba él, así muchas noches me llevaba a estos orgasmos secos, sólo sentía una electricidad que recorría desde mis testículos por todo mi cuerpo, me ponían rígido y posteriormente me relajaba totalmente, que es cuando mi papá llegaba al orgasmo, siempre terminando en mi espalda, mis nalgas o entre ellas, trataba de masturbarlo pero no me lo permitía, sólo eyaculaba, me daba un pequeño beso en los labios y después me limpiaba con kleenex para dormir.
Seguíamos la rutina siempre, cierta ocasión rara, me desperté por la mañana antes que mi papá, recuerdo haberlo visto totalmente dormido, su cuerpo adulto, con vellos en todos lados, noté su erección matutina, no resistí y yo aproveché para jugar con sus pezones, cómo él lo hacía conmigo en la tina, podía escuchar pequeños gemidos, pero no despertaba, incluso me atreví a lamer sus pezones, cosa que ví que le excitó más ya que su trusa blanca comenzaba a dejar ver un líquido que transparentaba su glande,. El pene de mi papá debió medir unos 18cm mas omenos, pero era muy grueso, comenzando delgado en el glande y poco a poco se hacía más grueso a la base, con una pequeña depresión en la parte media, siempre pensé que era como una botella de Coca Cola. Con ese pensamiento, el estímulo de escuchar sus gemidos inconscientes y ver ése líquido húmedo me decidí a bajar por ese cuerpo tonificado, de nadador, bronceado y llegar hasta su pene, donde empecé a lamer sobre la ropa su líquido preseminal, notaba un sabor algo salado, pero casi ausente, saqué su pene por un lado de su trusa y empecé a lamerlo, a tratar de meterlo todo a mi boca, claro que no me era posible, pero así lograba usar mi propia saliva como lubricante y con mis pequeñas manos movías de arriba hacia abajo, así como el usaba sus dedos con el mío, estaba hipnotizado viendo las venas, como crecía y cómo salía líquido transparente y viscoso de la punta, algo que ya sabía que no era orina.
Estaba tan concentrado en mi tarea que no me dí cuenta que mi papá ya estaba despierto, viendo, podía jurar ver la lujuria, alegría y excitación del momento, pero no decía nada, solamente respiraba más rápido, fue hasta que por primera vez lo escuché gemir fuerte mientras su verga palpitaba entre mis manitas que noté que estaba despierto, antes de que me asustara me dijo que eso estaba delicioso, que me comiera su leche y después lo besara con su leche en mis labios, esa fue la primera vez que pude sentir los labios de mi padre explorando mis labios y lengua.
Este fue tan sólo el inicio de mi intensa vida sexual… sean amables de decirme qué piensan por tele grsm: Miankido
muy buen relato
cuando viene la segunda parte ?
Me gustó mucho la introducción y como va evolucionando, espero leer pronto más de esas vivencias y sobre todo cómo las trabajaste con los profesionales, actualmente existen muchos tabúes al respecto de cómo tratar situaciones que en la actualidad nos parecen fuera de control y que quizá con una adecuada guía se puedan canalizar, pero nos cuesta trabajo expresar este tipo de deseos e impulsos sexuales. Quizá esto además de entretener al lector, pueda ser una pauta de cómo manejar estos temas. Gracias por compartir tus experiencias.
La otra parte porfa