Cómo se goza a un Mister Gritón

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por marianoking.
Hace 6 años cuando todavía se usaba comúnmente el BBM, digamos que estaba pasando por una etapa libertina de los 19-20, donde no me interesaba estar con una pareja seria ni tener compromisos, prefería salir a la disco, tomar hasta al manecer, tener chaces (ligues), y sólo darle rienda a mis necesidades sin ningún apego en especial.

Era normal los grupos de chats donde te comunicabas con personas que presentaban intereses en común contigo, grupos gays, bixesuales, lésbicos, en fin.
Yo siempre aparecía metido en alguno, la verdad era bastante popular y tenía mucho público, quizá porque me daba a respetar y no caía en tantas bajezas que cometían los otros chicos de la ciudad, la mayoría de fama dudosa, de esos que sólo decías el nombre y ya todo el mundo le conoce la vida y sus historias; cabe mencionar que vivo en una pequeña ciudad de Venezuela.

En esos grupos de chat dejabas tu BB-Pim para que la gente te agregara y hablara contigo en privado.
Fue así, que un tal "Tony" me pide una invitación para hablar en privado; casi nunca le pasaba mi User a nadie de esos grupos, pero éste chico en especial tenía un avatar muy interesante, un cuerpo formado y muy definido pero con el rostro oculto.

Todo transcurrió normal, pero con los días noté que no era su avatar, sino que ese cuerpo le pertenecía.
Waoo muy buen culo, formado, se ve redondito y rico en esa foto donde alzaba pesas, tenía buenos brazos y espalda, un "Mister" como decimos en mi país, y no precisamente por lo de hombre sino que aquí etiquetamos a la belleza masculina con el estándar de Mister y a la femenina como una Miss, como en los concursos de belleza.

Aunque no era perfectamente atractivo de rostro, Tony el Mister estaba muy bueno de cuerpo, alto, atlético, y seguro no necesitaba más; de tes blanca, como de 1,78, ojos y cabello oscuro, piel depilada por completo, afff.
Podría estar sin duda representando al país en el Mister Univers.

Un día subió una foto bastante sexy a su estado, dónde se le veía con un short de licra ajustado el cual sólo cubría parte de sus grandes piernas, que se reflejaban en un grande espejo del gym; con un perfil de ladito, podía observar perfectamente sus nalgas paraditas.
Tenía ese culo de ensueño que provocaba rompérselo a huevo, seguro lo tenía cerradito, podía imaginarme nalguearlo duro.

El cabrón me excitó mucho, el sabía lo que tenía y quería justo eso, atraer la mirada de los demás tipos.

Le escribo un <Hola>, y eso dió inicio a casi dos horas de chat, donde supe que tenía 25, vivía en mi ciudad, trabajaba e iba al gym, y casi en eso se resumía su vida (aburrido).
Yo por el contrario le conté más de mí y mis intereses, a él le agradó saber de mi vida, y me lo hace saber, al igual que le atrajeron mis fotos, que aunque no contaba con un cuerpo tan tonificado, éste "catire" como me decía, le parecía sumamente atractivo y provocativo, se moría por saber lo que escondía entre las piernas, hehehe.

Los días pasaban y nos poníamos más cachondos, entre cada foto subidita de tono dejabamos algo a la imaginación, pero en muchas de las suyas podía apreciar por lo general parte de sus nalgas en diferentes ángulos; eso me calentaba en esceso, pero debía hacerme el duro, para que no supiera que me moría por cogerlo.
Aunque ya yo deducía que era toda una perrita y que pronto me daría a probar.

Pasamos como un mes en esa paja, de soló fotos y obscenidades, hasta que un día Tony me dice: Quiero que vengas esta noche a dormir conmigo.
Yo de una le dije que sí sin pensarlo mucho.
Por dentro morí de alegría, al fin iba a poder estar con ese Mister para mí solito, mi sueño se hacía realidad.

Ya tipo 7pm llegué hasta una vereda cerca de su casa, él fué por mí y así a oscuras, soló con la luz de la luna pude ver su hermoso cuerpo; llevaba franelilla, short cortos y sandalias Cross.
Una dulce sonrisa me recibió complacido con un delicado pero masculino apretón de mano; era un poco más alto que yo y se veía mayor, de más de 25, era fuerte y atlético mi Mister Venezuela.

En frente a su casa había muchas personas, y en pedir permiso y mi cara de pena pasé entre ellas; Tony me aseguró que no había problemas, ellos eran parte de su familia y sabían lo suyo y a lo que iríamos también.
Pasamos a su cuarto y nos acostamos en su cama, él puso una película de terror en estreno que ya en una oportunidad yo le había comentado que la quería ver.
Me pregunta si había cenado y va a la calle por comida chatarra, regresa con hambuerguesas y refrescos para ambos, comimos mientras veíamos la peli.
Pasado casi media hora de la peli, ya habiendo digerido la comida, comenzamos a charlar, la película me empezó a parecer fastidiosísima ahí junto a él.
Creo que prefería una porno, pero en vivo con el Mister.

Se acerca y me besa, yo respondo a esos labios cubiertos con pelos de 2 días, se sentía tan exquisito, su cara estaba roja de lujuria, yo seguramente igual, tanto tiempo charlando e imaginando algo entre nosotros y ahí estabamos.
Los minutos pasaban y yo me iba desprendiendo de su diminuta franela, mordí su pecho, su cuello, sus tetillas, la pelliscaba con mis dientes, rozaba su espalda suave pero apasionado con mis manos, lo tomé de la cintura y empiezo a quitarle el short, en pocos segundos lo tenía todo desnudito para mí que aprovechaba para tomarle con fuerzas esas rígidas nalgas, su piernas gruesas y muy blancas apenas mostraban unos cortos vellos que empezaban a salirle, esa sensación era delicia en mis manos.

Sus gemidos iban en aumento con cada mordida a su cuello, por fortuna su cuarto era cerrado y apartado y yo suponía que nadie de su familia lo oía gritar con tanta exaltación, aunque me daba morbo que nos escucharan, lo que me dió pié a apretarle más su culo y a lubricarselo con saliva y suaves movimientos circulares al rededor de su huequito.
Ver su cara retorserse hacia atrás con cada chupón en su cuello me motivaba a taladrarle más el culo con mi dedo.
Tenía al Mister tal y como quería, se babeaba, desnudito, sediendo como perra ante su hombrecito, un machito mucho más joven que él pero con la experiencia para llevarlo al cielo.

Si dependiera sólo de su decisión, aún me tuviese haciéndolo gozar de esa posición, pero ya 20 minutos eran suficiente para ir avanzando.
Aparté mis manos y empecé a quitar mi camisa, el me ayudó con con una mano, mientras con la otra limpiaba los restos de baba que seguían saliéndose de su boca.
Me dejó concluir, para hacerme saber que él se desharía de mi jeans.
Quedé completamente boca arriba con mis manos tras la cabeza, como dejándolo hacer su trabajo sin inconveniente.
afff.
Quita mi cierre y desabotona a la vez que me desnudaba; veía su hermoso cuerpo sobre mí y observé su pipe que era bastante proporcional a su cuerpo y con una cabeza rojita, depiladito, carnoso, estaba sabroso debo admitir.
Su cara mientras quitaba mi pantalón no era normal, me miraba con morbo y su vista se iba a mi entre pierna, sus ojos quedron clavados en mi verga una vez liberada, sólo subía un poco el rostro por segundos para verme fijamente a la cara y mordía su labio inferior, dejándolo escapar poco a poco de su línea de dientes de izquierda a derecha; si alguien pudiera leer su mente en ese momento.

Se lanzó sobre mí y me besó con locura para excitarme, rozaba su dura verga con la mía que estaba a explotar, introducía su verga entre mis piernas y sentí su pre-cum, quería cogerme el muy perro; intento así por mucho rato lubricar mi culo que ya empezaba a aflojar, mientras con mis manos le golpeaba las nalgas una y otra vez.
Mordí nuevamente su cuello y empezó a gemir fuerte una vez más, la película terminaba y como era de dvd, se apagaba y el cuarto quedaba en silencio, él molesto tomaba el control y la iniciaba.
Mientras buscaba el control en la mesita de noche, me acerqué a su espalda y ahí de rodillas, con su culo paradito lo abracé fuerte entre la cintuta y estómago.
Cubierto con mis brazos se arqueba perfectamente con el culo paradito hacia mi verga que ya le taladraba entre la raja; así estábamos casi del mismo tamaño, yo ahora con una de mis manos pajeándolo y la otra entre la parte delantera de su cuello como ahorcándolo y haciéndo presión de su cara hacia atrás para que esté mejor arqueado.
De vez en cuando fusionábamos un vaivén que me llevaba a meter varios dedos en su boca y a hacer que se los tragara como si fuese un pene, metía y sacaba 4 dedos, mientras con su cara de ruego no podía hacer más que morder sus ahora moreteados cuello y orejas.

Así, dejándo a Tony de rodillas y en pompas, decliné de su espalda y me paré en la cama para ponerle la verga en la boca, la cual tragó y me dejó sin aire, respiré profundo mientras se llevaba cada pedacito de ella a su garganta, con mis manos lo obligaba a tragar, le cogía la boca duro y la baba le corría, tenía que sacárselo de ratico para respirar y limpiar su baba con su camiseta, por momento sentia como me mordía con sus dientes y se lo metía suave, eso me raspaba rico la pinga, era más bien como si la rascara, y la mordía cada vez para dejármela palpitando y rojísima.

Ya parecía un pedazo de caña roja, pero no descansaba, con sus manos me pajeaba a la vez que tragaba hasta la mitad, me deboraba muy gustoso la cabeza, y lo detengo, para lanzarlo a la cama boca arriba.
Ahora yo sobre el sentía que me metía mano en las nalgas y culo, por mi parte le uní mi verga a la suya y empezamos a coger así, se nos escapaban, se deslizaban, pero seguíamos en nuestra fricción de pipes.
Bajo a su pecho y sin morderlo mucho me dirijo con mi nariz hasta su verga, la cuál trague gustoso, realmente era más gruesa de lo que pensé, bastante carnosa y poderosa, con un rico olor a cremita de bebé; también empecé a babear ante el sabroso pedazo de carne de Mister Tony; a él generaba excesivo placer, aunque no se comparaba con el que me presentó cuando pasando mi boca por sus huevos me abrió sus piernas de par en par.

Encontré un oloroso culito blanquito que ya palpitaba entre sus nalgas como pidiendo verga.
Lo saboree de lo mejor, podía comerlo, lo taladraba con la lengua y él ya gritaba literalmente.
Tenía al mejor culo de la ciudad a mi merced, sabía que no se me escaparía.
Con sus brazos sujetaba aún sus piernas y dejaba que le embistiera con la boca y por momentos le chocara la verga como una mandarria en aquel cerradito hoyo.

Poco a poco cada vez se ponía más de ladito y obviamente observaba mejor su culote lampiño, que se estremecía cuando chocaba mis bolas a su raja, parecían unos redondos tomates rojos de tanto palo que le dí en ese culo, seguro le ardían de tantas nalgadas pero él no ponía queja.

Los gritos de la tipa de la película no opacaban los suyos; ya lo tenía completamente boca abajo con sus brazos y manos sujetas al espaldar de la cama.
Justo así te quería ver, le decía, mientras dejaba que escaparan sus affd,afff.
Me apoderé de aquel culo, que comí como loco, lo lubriqué a más no poder y hacía presión con mi nariz intentando indroducirla también, con mis manos habría sus nalgas y las dejaba chocar en mi cara ya toda mojada de su baboso fruto.
Mi cara olía rico, a un buen culo mezclado con verga.
No aguanto más bebé, le dije mientas de una se la meti sin compasión.

Apretaba sus manos con las sabanas, y yo con las mías las entrelazaba por encima de las suyas para tener mejor agarre y así no se me safara.
Mi verga entraba y salía con fuerza de aquel culote, mis bolas chocaban fuerte de las suyas, pero sin duda lo mejor era el placer que me generaba ver chocar sus nalgas de mi vientre.
Plss, plss, plsss.
Y sus gemidos.

Cada que podía le daba con mayor fuerza y él me pedía que me calmara, que lo reventaba, y así lo hacía pero por sólo unos segundos porque luego le daba aún más duro que la vez anterior.
Podía tomar su culo, me sujetaba de su cintura y lo prensaba con más velocidad, subí mis piernas y me puse en posición fecal y lo bombeé sin descanso tomándolo de los hombros y luego del cabello.
Poco tardó para ceder con mayor facilidad, ya estaba mas deshinivido y me paraba más sus tomaticos.

Esa colita tragaba verga y yo estaba a más no poder, se la tuve que sacar de golpe y voltearlo para clavársela en la boca suavecito.
Un espejo de su cuarto dejaba ver como todo mi cuerpo se iba sobre su boca y entre cada arcada le arrancaba una lágrima.
Constantes Gghh,ghh,ghh, se encerraron en la habitación, fue uno de los pocos minutos en los que mi Mister no gritaba de placer.

Se lo saco bien lubricado de la boca, la película hacía poco rato había terminado nuevamente, pero entre el momento no nos percatamos.
Me llevo sus piernotas hasta mis hombros, pesaban una barbaridad, pero tenía que portarme a la altura; hubico mi verga nuevamente en su hueco y se lo dejo ir, ahora más suave.
Sssshhh afff, que rico! Exclamaba con un tono que parecía de actriz porno.
Después de 5 minutos se la saco y meto de nuevo en esa pose mi boca en su culo; ya más abierto, estaba rojito, mi lengua lo perforaba con facilidad, metía de 3 dedos y otra vez la lengua, y así.
Ahhh, ahhh, ahhh.
Tenía que taparle la boca por gritón.
Mis mordiscos en su culo lo elevaban al máximo.

Le meto de nuevo la verga y con sus piernas él apreta mi cuerpo, ahora yo no tenía escapatoria.
Tenía al Mister suplicando huevo, quién con lujuria me decía al oido que lo bañara en leche.
Eso me subía el morbo y lograba penetrarlo sólo con la cabecita que entraba y salía con agilidad de su culito, por momentos se escapaba pero por su rigidez encontraba su premio rápidamente.
Lo embestía con media verga, luego con toda, luego con la cabeza, y el seguía pudiendo leche.
Le pregunté si quería comérsela, que yo se la echaba todita en su boca; no parecía muy convencido e insistía en que le llenara el culo, quería que mi leche calientica fuese descargada en su interior.
Y ante mayor petición le deje ir uno cuantos chorros de leche espesa.
Afff, afff, affg, aunque yo había evitado no gritar tanto, no pude más y exploté.
El se retorcía y como pudo me despegó un poco de su cuerpo para masturbarse al tiempo que mis chorros y embestidas se hacían más leves.
Hasta su cara chocarron con fuerza aquellos lechazos, el sólo cerraba los ojos, aunque entraron bastante en su boca, que seguía abierta porque respiraba con fuerza del cansancio.

Hasta la última gota la dejé dentro y de a poquito le fuí sacando la pinga, estaba prensada y las venas muy marcadas.
Observo aquel culito rojísimo, más abierto y profundo, desflorado, cual capullo de rosa a medio abrir; y aún con sus piernas al aire deja escapar un poco de mi semen que intenté con mi dedo introducírselo, consiguiéndo que cómo un agujero negro succionara mi dedo índice por completo, y adentro, sentía como estaba todo mojadito y ardiendo, como gelatina a medio coser.
Su culo parecía tener vida, estaba palpitando, se abría y cerraba muy rico.
Aún con mi verga a pocos centímetro del huecote, le permito que la tome y le dé jalones, para exprimir la última gotica transparente que brotó de los labiesitos de la pinguita ya casi flácida, la llevo a su boca y saboreó con gusto.
Y me dice: <Querías que la provara y la probé>.
Elevo con fuerza sus piernas y cuerpo lo más alto posible, quedándo soló su cabeza y parte de su espalda arrecostada en la cama; meto mi boca en su culo de nuevo y le doy apretones con la nariz; le dejo ír mi dedo medio en el enrojecido hoyo, y me traigo una línea de leche, la cual le hago tragar.
Me chupa el dedo bañado en semen tal como si fuese un bebé con chupete, <Ahora si tragáste bien mi leche> le digo.

Esa fué la primera de varias veces que le bañé el culo en leche, y un día hasta la última gota la derramé en su boca.
Luego de varías cogidas le empecé a perder el interés, ya no veía al Mister tan atractivo y fuímos dejándo de vernos.

Gracias por leerme,

Espero haya generado disfrute, mucha excitación y buenas pajas XD

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