Con Adrian, el hermano de mi mejor amigo.
Javi siempre me había parecido muy atractivo, tiene 13 años, es de tes blanca, pelo negro, más o menos de mi estatura, cómo 1.70 m. Pero había una parte de su cuerpo que sobresalía mucho, que eran sus enormes, redondas y perfectas nalgas..
Primeramente me presento, soy Joel tengo 17 años, mido 1.75 metros, soy de complexión delgada, un poco marcado y de piel morena (y una vida aparentemente heterosexual con mi familia y la mayoría de amigos). Este relato ocurrió hace dos años, cuando tenía 15, unos días después del día de muertos en México. Dónde vivo no hace mucho frío ni en invierno. En mi ciudad hicieron un maratón para incentivar al deporte, creo que también era por la lucha contra el cáncer de mama, pues el maratón tenía temática de moños rosa. Ese día, que era domingo, yo y mi mamá fuimos al centro a hacer la despensa como todos los días, pero resulta que el tianguis no se iba a poner ese día pues el maratón pasaría por la calle donde se solía ubicar, y había mucho tráfico en la zona porque habían muchas calles cerradas. Al ver la situación, mi mamá me dijo que viéramos pasar el maratón y después la llevara a casa de mi abuela. Estuvimos un rato en el carro y luego bajamos a la banqueta para ver más de cerca. Después de unos minutos pasó una patrulla de la policía que marcaba el inicio del maratón, y detrás de ella venían los competidores que ocupaban los primeros puestos, fué ahí cuando ví a Javi, el hermano de uno de mis amigos de la escuela. Javi siempre me había parecido muy atractivo, tiene 13 años, es de tes blanca, pelo negro, más o menos de mi estatura, cómo 1.70 m. Pero había una parte de su cuerpo que sobresalía mucho, que eran sus enormes, redondas y perfectas nalgas, y como iba corriendo con un pequeño short ajustado, se le notaban más. En ese momento me interesó el maratón, y me dije a mi mamá que me había aburrido, así que le propuse llevarla de una vez a casa de mi abuela y yo quedarme un rato en el centro para ver si después del maratón se ponía el tianguis. Así fué, la llevé y rápidamente me volví al centro, al llegar le pregunté a un policía que estaba vigilando que no pasaran carros por la zona del maratón que donde sería la meta, me dijo que sería en el la plaza principal (ya saben, dónde está la presidencia, la iglesia y eso), entonces me dispuse a ir para allá. Al llegar esperé un poco hasta que llegaron los primeros competidores que serían los ganadores. Javi venía en los primeros lugares pero no quedó entre los tres primeros, y al cruzar la meta se fué sin detenerse a descansar, yo permanecía viendo desde cerca y lo seguí. Saqué mi celular y disimuladamente me fui atrás de él grabando sus nalgas mientras caminaba. En ese momento no imaginaba que tendría mejores vistas de él, y esas tomas de sus nalgas caminando me parecía oro. Después de unos segundos le grité:
Yo: Javi! Espera!
Javi volteó hacia mí y me dijo:
J: Que pasa?
Lo noté un poco molesto, y supuse que sería porque no ganó, así que omití ese tema.
Yo: andas solo? No vienes con Adrián (su hermano y mi amigo).
J: No, ando solo. Y tú?
Yo: Igual, pero voy por un licuado, quieres venir? Yo te invito
J: Bueno, gracias.
En este momento cabe aclarar que si nos saludábamos de vez en cuando pero mi amistad era un su hermano y no con él.
Fuimos por un licuado, pagué uno para mí y uno para él y comenzamos a platicar en las mesitas mientras bebíamos nuestro licuado.
Yo: De aquí a dónde vas a ir?
J: No sé, voy a andar por ahí.
Yo: No vas a ir a tu casa? Dónde está Adrián?
J: No quiero ir ahorita a mi casa porque ahí está mi mamá y me dijo que me fuera a trabajar con mi papá pero no fuí y me vine al maratón. El premio era dinero en efectivo pero no gané, y si llego me van a regañar. Adrián si se fué a trabajar con mi papá.
Yo: Si quieres puedes venir a mi casa, ahí te puedes bañar, porque andas muy sudado, al cabo que no hay nadie en mi casa.
J: En serio? Muchas gracias! (Se le notaba muy contento y me dió un abrazo)
Pude sentir su espalda sudada, se sentía muy fuerte y al soltarlo bajé un poco mi mano para rosar sus nalgas.
Fuimos al carro y de ahí a la casa. Al llegar le dije dónde estaba el baño y rápidamente fue y yo detrás de él. El baño es grande, tiene una regadera a la izquierda, seguido del WC y la tina está del otro lado. Le dije que se bañara en la tina y yo me iba a bañar también en la regadera pues andaba sucio (cosa que no era cierto, pues me había bañado antes de salir). El comenzó a desvestirse sin pudor, se quitó la playera, luego el short y me dejó ver sus grandes nalgas en ese boxer negro que le quedaba hermoso, muy pegado al cuerpo y muy corto. Le dije que si prefería bañarse el y luego yo pero me dijo que así estaba bien. Yo muy contento comencé a desvestirme también, cuando se quitó el bóxer pude ver una verga grande, blanca y con pocos pelos, al voltearse también pude ver sus hermosas y blanquitas nalgas redonditas y muy respingadas. Comenzó a bañarme y yo también, yo terminé primero y salí en toalla a buscar mi ropa, pero dejé la puerta del baño abierta, después regresé con un short y una playera delgados, y no me puse ropa interior. Entré al baño y Javi estaba terminando, entonces le dije que le podía prestar ropa limpia, a lo que accedió. Le traje un bóxer pequeño para que le quedara apretado y un short también pequeño y muy delgado, así como una playera pequeña, en fin, ropa que me quedaba pequeña para poder observar bien su cuerpo. Se la puso y le dije que si quería ver una película, el dijo que sí y fuimos a mi cuarto, nos acostamos y puse una película que tenía descargada; después de unos minutos me hice el dormido y puse una mano sobre la verga de Javi para que pareciera un reflejo, el no la quitó ni hizo nada, pero sentí que se le empezó a parar, estuve así unos minutos y de vez en cuando movía la mano para sentir mejor y hacer que se le parara más. Así pasó el tiempo hasta que se acabó la película, el se levantó y fué a la computadora, que era desde donde proyectaba la película, en ese momento recordé que tenía porno gay en mi compu y mis búsquedas en los navegadores eran sobre porno gay también. El le puso en reproducir el siguiente vídeo y era uno de porno gay. Vió unos vídeos y después apagó la compu y regresó a la cama. Al sentarse abrí los ojos para aparentar que sus movimientos me habían despertado. En ese momento sonreí y le dije:
Yo: ya se acabó la película?
J: Si, ya.
Yo: Apagaste la compu?
J: Si, quería poner otra pero salió un vídeo de porno
Yo comencé a reír y le pregunté si a él le gustaba ver porno.
J: Si, yo y Adrián siempre vemos porno juntos.
Yo: y ven vídeos de mujeres con hombres o de hombres con hombres?
J: de hombres con hombres, son los que Adrián pone, cómo los que tú tienes.
Yo: Quieres ver unos?
J: Va
Puse unos vídeos en la computadora y los proyecté a la televisión, me saqué la verga (18 cm, pocos pelos, no muy gruesa), y me comencé a masturbar. El solo se quedó mirando mi verga y le dije que también podía hacerlo si quería, se sacó su verga de unos 15 cm y se empezó a masturbar también. Después de unos minutos me vine y el también. Fuímos al baño a limpiarnos y regresamos. Le dije que jugara algo en la compu y le mandé un mensaje a mi mamá para saber si quería que fuera por ella. Me dijo que iban a hacer de comer allá por si quería ir, pero le dije que iba a comer en la casa y m iba a acompañar un amigo. Después de eso pedí unas pizzas y refrescos, llegaron, comimos y nos acostamos a descansar. Después de un rato le dije que si jugamos partidas de Paintball (un juego en roblox), yo en la laptop y el en la computadora, y quién perdiera tenía que cumplir retos. Jugamos primero a quitarnos prendas, yo soy experto en el juego y le ganaba pero también me dejaba perder para ir iguales, después de varias partidas quedamos sin nada los dos, así que puse muchas empeño para ganar la partida que seguía y así fué, entonces le dije que tenía que darme un beso en la verga, el no lo creía de primero, pero le dije que lo hiciera, pues había perdido, se acercó lento a mi verga, desde la silla gamer agachándose y rápido me dió un beso, sentí increíble y se me paró de inmediato igual que a él. Después me dejé perder y el me puso el mismo reto, yo me agaché, quedé de rodillas y le dí un beso largo en la verga y lamí un poco su glande, el solo respondió con un brinco que dió su verga poniéndose a full, después gané yo y le puse de reto que me dejara tocarle sus nalgas. Con algo de pena se giró, se hincó y apuntó su culo hacia mí, yo rápidamente le pase las manos por todo su trasero y le rosaba la rayita con un dedo, también le apretaba las nalgas y se las abría, después acerqué mi cara hacia ellas y le comencé a besar las nalgas, el no decía nada, solo gemía de vez en cuando, después acerqué toda mi cara a su culo y me hundí en el. Era lo mejor del mundo, se sentía tan bien, su sabor, su olor, todo. Yo solo trataba de imitar lo que aprendí del porno, pues era mi primera experiencia con alguien, y se estaba dando de una forma tan natural que parecía irreal. Después comencé a pasar mi lengua por toda su rayita, prestando especial atención en su ano, que era hermoso, algo rosadito, muy cerradito y muy limpio. Le dije que me se volteara y quedó sentado, ahí tomé su verga entre mis manos y la llevé a mi boca, comencé a lamerla desde la punta hasta la base y pasando por sus huevos. Luego me la metí a la boca y comencé a mamarle la verga, estaba riquísima, sabía un poco a semen de la corrida que habíamos tenido antes. Estuve mamando su verga y sus huevos hasta que me cansé, ahí me paré y el instintivamente se arrodilló y comenzó a chuparme la verga también, supongo que quería corresponderme, me senté y el me fué siguiendo sin sacar mi verga de su boca, repetía lo que yo había hecho, pero me mordía en algunas ocasiones. Después de un rato, sentí que ya me venía, lo aparté de mi verga le dije que si me dejaba metérsela en su culito, cómo en los vídeos porno, el solo asintió con la cabeza y se subió de rodillas a la silla, le dije que fuera a la cama y se acostó, lo levanté de la cintura y lo puse en cuatro, le chupé el culo un rato más y luego fuí por un aceite de bebé que tenía mi mamá en su cajón, me puse en mi verga y en la entrada de su ano, le metí un dedo y entró con algo de dificultad, pero entró, ahí le metí un segundo dedo y solo gemía, después se los saqué y comencé a pasar mi verga por su rayita. La imagen que tenía frente a mí era increíble, un culo hermoso entre dos nalgas grandes y carnosas estaban dispuestas ante mi para que lo penetrara. Procedí a poner la punta de mi verga en la entrada de su ano y a presionar con mucha fuerza para que entrara, entró la cabeza de mi verga y un poco más, el gemía y gritaba un poco, pero en ningún momento me pidió que parara. Después de unos segundos se la metí toda y empecé a sacarla y meterla lentamente, el solo gemía y decía <Si> en repetidas ocasiones. Se sentía tan bien dentro de su culo, era la mejor experiencia de mi vida, quería que nunca acabara, pero al mismo tiempo quería sentir ese placer final y llenarle el culo de mi leche. Aceleré mis embestidas y empezó a sonar el golpeteo de mi pelvis con sus nalgas, era muy satisfactorio ver cómo esas hermosas nalgas se tragaban mi verga y sentir como me apretaba dentro. Yo gemía de contener el aire y el también, además decía cosas como <mmm sí, que rico> o <métemela toda, más rápido> lo que me prendía aún más. Después de unos minutos me vine dentro de él y el ya se había corrido en la cama, se desplomó sobre la cama y yo encima de él sin sacar mi verga de su culo. Nos quedamos dormidos y después de un rato sonó mi celular, despertamos, me incorporé, me senté, y el seguía con mi verga adentro de su culo, sentado sobre mi regazo, escuchó que mi mamá me dijo que ya fuera por ella y rápidamente Javi se levantó, dejando semen caer en mis piernas y escurrir por las de el, me dijo que nos bañáramos porque sentía que el semen seco le molestaba. Nos bañamos juntos, el me tallaba a mi y yo a él, teniendo especial atención en sus nalgas y culo. Después de un rato le di un pants y una playera deportiva, así como un bóxer y su ropa en una bolsa. Me cambié igual y llevé las sábanas y ropa sucia a la lavadora, mientras el me ayudaba a tender nuevas sábanas en la cama. Le dije que iría por mi mamá y lo deje en mi casa lavando la ropa y sábanas en la lavadora – secadora. Me pasó su número y estuvimos hablando. Hice tiempo en casa de mi abuela hasta que Javi me dijo que ya estaba seca la ropa, así le dije a mi mamá que nos fuéramos por qué había quedado de hacer una pijamada con un amigo y ya debería estar esperándome. En fin, nos fuimos y llevamos tacos de camino para cenar.
Espero que les halla gustado, es mi primer relato y pienso contar lo de la pijamada en otro relato.
Espero que pronto cuentes que más pasa con Javi
Que rico beybi, seguro que esas nalgas virgenes estaban bien ricas.