Con el guerrillero de mis sueños
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esto ocurrió en un zona rural de Colombia donde estuve trabajando en una escuela de una vereda como maestro, la zona era de dominio de la guerrilla y siempre rondaban cerca de la escuela los guerrilleros, amenazaban a los miembros de la comunidad para que hicieran lo que ellos decían y en ocasiones pedían posada en las casas una noche llegaron a la escuela cuatro guerrilleros armados y me pidieron que les diera comida y que esa noche se quedarían hay yo no tenía sino una cama y un colchón y unas pequeñas cosas en un cuartico al lado de la escuela y esa noche sentí miedo a lo que acepte que se quedaran hay aunque fuera incómodo, los guerrilleros me dijeron que eso no importaba que ellos estaban acostumbrados.
Esa noche me toco compartir la cama con uno de ellos y los otros 3 se acostaron en el piso colocaron el colchón horizontal junto con unos costales para compartirlo mientras el que mandaba dormiría con migo en la cama de los cuatro avían dos guerrilleros que se veían bien se les notaba que tenían cuerpos musculosos y el que durmió con migo le decían palo de agua era un hombre como de unos 28 años era alto como de 1,90 era el más alto de los cuatro, flaco pero musculoso por las largas caminatas que realizan y el ejercicio que hacen dentro de la guerrilla el pelo lo tenía corto y era de ojos negros muy varonil en todos sus movimientos y serio al halar cuando nos íbamos acostar este le dijo a sus hombres vamos a dormir en pantalón y con la franelilla quítense la chaqueta y las botas y a mí me dijo lo mismo usted va dormir con ese pantalón y en camisa porque vamos a compartir la cama.
Ya en el cuarto con los guerrilleros los vi quitarse la camisas y se les notaba bonitos cuerpos musculosos pero cuando se quitaron las botas el olor a pecueca en el cuarto fue un poco incómodo se quitaron las botas y las medias y los pies se les veían bastante sudados las medias las colocaron sobre las mismas botas y palo de agua me dijo usted disculpara que las botas las dejemos aquí en el la pieza pero es por seguridad y la pecueca que tenemos es por las condiciones y todo lo que hoy hemos caminado entonces las patas sudan.
Yo me quede callado y el además me dijo pero la pecueca es de machos o no muchachos a lo que los otros guerrilleros respondieron que sí, ya al rato cuando estábamos durmiendo yo sentía ganas de manosear al hombre con el que compartía la cama esa noche pero por miedo no fui capaz de hacer nada.
Aunque este guerrillero me gustaba mucho y era como la tercera vez que lo veía siempre con su uniforme en botas y con su fusil al hombro pero me daba miedo decirle algo porque era guerrillero.
Al otro día ya como a las cinco y media se levantaron los guerrilleros se vistieron y se fueron al irse palo de agua me dijo gracias por la moche y disculpe por haberlo molestado con nuestras botas pero como le dije la pecueca es de machos
Al tercer día de haberle dado posada a los guerrilleros como a las seis y media de la tarde estando yo en el tanque lavando un pantalón llego un hombre y me agarro por detrás y cuando voltíe era palo de agua ahí estaba el guerrillero con su uniforme y me dijo aquí estoy para que ágamos lo que no hicimos la otra noche hoy estoy solo, no hay pájaros en la cuerda, solo usted y yo.
El guerrillero me dijo entremos a la pieza yo sentí más miedo que nunca pese que me iba a violar y a matar el guerrillero regreso y me volvió abrasar y me dijo no va pasar nada que usted no quiera deje el miedo que yo sé que usted se muere por estar con este pechito y horita estamos solos para gozar esta noche yo accedí y ya los dos en el cuarto el me pidió que le quitara la camisa cuando le quite la camisa y su franelilla las axilas le olían a sobaquera a lo que él me dijo estoy hediendo si quieres voy a quitarme las botas afuera y nos echamos un baño y regresamos a disfrutar en la cama ya bien limpiecitos los dos yo ya estaba bien calenturiento y le dije no importa siéntate que te quiero quitar las botas a lo que él me respondió usted ya sabe que yo tengo pecueca ha así que no te quejes yo le dije tranquilo no pasa nada le tome sus botas una por una y se las quite las medias y pies los tenia sudados y con fuerte olor las medias las puse encima de sus botas y le dije quiero quitarte el pantalón a lo que el accedió cuando tenía a mi hombre en bóxer se le notaba un buen paquete el me tomo me quito mi pantalón y comenzamos a besarnos yo besaba su pecho y el a mí hasta que el guerrillero me acariciaba mi pene me quito los bóxer y comenzó a chupármelo rico yo gemía de placer cuando él se levantó me pidió que le mamara a el yo accedí le termine de quitar sus bóxer los cuales ya tenía en las rodillas y se recostó en la cama en su posición para que se lo chupara cuando se lo tome con mi boca tenía cerca sus pies y se sentía el olor de la pecueca que desprendían sus pies su pene también lo tenía sudado y con olorcito al ratito el guerrillero se corrió en mi boca y salió una buena cantidad de leche calientita el me volvió a tomar y me dijo quiero que usted también se corra y me volvió a mamar mi pene hasta que me corrí después de eso en el segundo raund él me dijo que quería metérmelo por detrás pero que a él no le gustaba que se lo metieran que yo no tenía chance yo le dije bueno a mí tampoco me gusta nunca me han cogido por detrás y no quiero y el muy cariñoso me dijo tranquilo no te voy hacer nada que usted no quiera y me pidió que se lo volviera a mamar que eso era lo que el mas disfrutaba.
Ya cuando terminamos de chuparnos y masturbarnos hay en la cama abrazados me dijo gracias por aceptarme tal como soy eres la única persona que me aceptaste sudado y con pecueca en la cama porque con las hembritas siempre me toca bañarme antes de follar a las mujeres como que no le gusta que uno huela a pecueca por eso te dije que la pecueca es de machos y esa noche me dijo quiero dormir contigo así desnudito y no tengo ganas de bañarme espero que no me lo pidas aparte está haciendo mucho frio yo le dije que estaba bien, esa noche hablamos y me conto que su apodo de palo de agua era por mujeriego pero que se hace cuando uno tiene suerte hay a lo que yo le pregunte que porque me avía buscado y me dijo que a él le gustaban tanto mujeres como hombres y para los maricones tenía suerte y me dijo el día que te coja por detrás te va gustar más a lo que yo le pregunte que si en la guerrilla avían muchos gays y me dijo no preguntes lo que no te importa confórmate con saber que hay uno que otro y para muestra yo soy bisexual pero dentro de la organización no se sabe así que si abres la boca date por muerto usted y yo somos amigos o conocidos nada más
Desde ahí en adelante nos volvimos amantes en secreto de vez en cuando el me visitaba y lo hacíamos rico el siempre andaba con su uniforme y las infaltables botas de caucho con su respectivo olor siempre hacíamos el amor estando el sudado y con su pecueca aprendí a olerle sus pies y acariciarlos el disfrutaba cuando le quitaba sus botas y que le mamaba su pene después nos bañábamos juntos, en ocasiones llegaba con algunos de sus compañeros guerrilleros a los cuales mandábamos a dormir al salón de la escuela para nosotros poder disfrutar en el cuartico, yo disfrute de mi guerrillero como por año y medio hasta que me fui de la vereda a trabajar a otro pueblo.
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