Con el papá de mi amigo (Ernesto) parte III
Continuo contando mi historia con Ernesto el papá de mi mejor amigo Alex, en este relato me enfoco más en Alex. .
Hola de nuevo, continuo después de un largo tiempo con mi historia.
Llegamos a casa, seguíamos con un silencio sepulcral entre Alex y yo, bajó del auto y le dio las gracias a mi papá, mi papá le respondió que había sido un gusto, a mí solo me dijo que nos veíamos mañana y le contesté que si.
Al entrar a la casa mi madre me recibió con abrazos y besos como era su costumbre y recuerdo que le dije, mamá hasta cuándo vas a dejar de tratarme así, ella sonrió y dijo que hasta que ella quisiera, me preguntó también por el chequeo y le dije que el señor Ernesto había dicho que estaba todo bien, mi papá se unió a la conversación y le dijo a mi mamá que le haría una llamada más tarde e informarse, a lo que mi mamá estuvo de acuerdo.
Subí a mi habitación quería estar un momento a solas para poder pensar y asimilar lo vívido en la escuela, recordaba cada momento, sobre todo las partes en las que Ernesto me había tocado, recordaba la sensación en mis genitales como si lo estuviera haciendo justo en ese momento de nueva cuenta, no soporté más y me preparé para masturbarme, me quité los calcetines, baje mi pantalón y retire mi bóxer, ya tenía marcada una gran erección, inicié a masajear mi pene de arriba hacia abajo como es la costumbre, mantenía mis ojos completamente cerrados para poder visualizar e imaginarme a Ernesto tocándome, mi pene palpitaba, mi respiración era agitada, estaba disfrutando cada momento hasta que mi cerebro me hizo desviar mis pensamientos hacia mi amigo Alex, por más que yo quería seguir concentrándome en Ernesto, aparecía el cuerpo desnudo de mi amigo, jamás había pensado ni tenido ninguna fantasía con él, era una amistad pura entre dos adolescentes, al final como no pude quitarme de la cabeza esos pensamientos decidí desistir y terminar con mi masturbación, me rendí y trae de terminar mi día lo más normal posible.
Pasaron los días y yo notaba algo raro entre Alex y yo, sentía como que él no era el mismo, a pesar de que estábamos juntos como siempre, trataba de estar sutilmente alejado y en compañía con los otros amigos del grupo y yo hacia lo mismo, quería preguntarle que pasaba pero no me atrevía, más que nada por miedo a poner las cosas peor de como estaban, incluso ya las personas al rededor lo notaban y hacían comentarios de que si estábamos peleados, a lo que respondíamos que no.
Yo por otro lado seguía clavado con la situación de Ernesto, imaginando que tocaba mis genitales o el estar a solas con él, dedicaba masturbaciones prolongadas con solo pensar en el, casi cada noche cuando ya estaban mis padres en su habitación, me desnudaba por completo y empezaba a masajear mi pene, siempre me ha gustado estar desnudo al momento de masturbarme o lo más desnudo posible, cuando me masturbaba en el día me dejaba la playera y me desnudaba solo de abajo, pero en las noches lo hacía completo ya en mi intimidad, hasta saciar mis deseos y eyacular en honor a Ernesto, aunque últimamente también en Alex que no me lo podía sacar de la mente.
Así estuvieron las cosas por más días hasta que se llegó el fin de semana del viaje, que estaban planeando mi papá y Ernesto, resulta que tenían ganas de salir a vacacionar en plan de adultos sin responsabilidades, solamente irían mis padres y los padres de Alex, pero nosotros los hijos no estábamos invitados. Mis padres me explicaron que Aranza (mi hermana) vendría a cuidarnos ese fin de semana tanto a Alex como a mí y que a la pequeña hermana de Alex la llevarían a casa de sus abuelos.
Así pues llegó el viernes por la tarde, Aranza había llegado al rededor de las 3 de la tarde, mis padres se irían a las 7 para alcanzar a llegar al aeropuerto y tomar su vuelo más tarde, me dieron los sermones recurrentes, te portas bien Cristian no vayas a desquiciar a tu hermana, obedece en lo que te diga y yo con el entusiasmo de un adolescente con pocas pulgas, si mamá ya lo sé, aunque no entiendo porque no puedo quedarme solo, ya no soy un niño, si lo que digas me respondió mi madre.
Tocaron a la puerta mi padre fue a abrir, se escucharon los saludos y entraron la señora Lucía y Ernesto junto con Alex y una mochila de viaje con sus cosas, me saludaron y les regresé el saludo. Será mejor que nos demos prisa Gustavo hay que prevenir cualquier complicación del camino, le dijo Ernesto a mi padre, así es vamos de una vez respondió papá, nos despedimos y tanto Alex como yo recibimos un tremendo beso de nuestras respectivas madres antes de irse.
Cuando ya nos quedamos los 3 solos mi hermana nos dice que necesitaba ir a comprar unas cosas del super antes de que fuera más tarde que si queríamos ir o esperábamos en casa ninguno de los dos quiso ir y ella enfadada nos dijo que que lindos caballeros tenía en casa y salió molesta.
Prendí la televisión y me puse a ver una caricatura que veía en ese tiempo, la de Hey Arnold, trataba de hacerle plática a Alex que estaba serio y respondía muy seco, hasta que apagué la televisión y me decidí enfrentarlo, Alex ya deja el drama y dime que te pasa le dije, no me salgas que no es nada porque es obvio que hay algo, ya no eres el mismo, no me hablas como antes, estás serio y francamente me está lastimando tu actitud, él se sorprendió por la manera en que le hablé y me empezó a tirar bronca, así tratas a las visitas hee vaya forma me dijo, déjate de payasadas le respondí; está bien es que no quería quedarme aquí de acuerdo, por eso estoy molesto, prefería irme a casa de mis abuelos, y porque no lo hiciste le respondí, porque mi papá me obligó a quedarme contigo estás feliz, solo olvídalo y déjame poner mi ropa y mis cosas donde vaya a dormir por favor, pues ya lo sabes le respondí, en mi habitación como siempre, se levantó agarro su mochila y subió la escalera.
Me quedé triste y confundido, pensando mil cosas, sabría que su papá y yo habíamos tenido algo, o lo sospechaba, o Ernesto le contaría algo, muchas cosas pasaban por mi mente, me armé de valor y subí, entré a mi habitación y lo encontré acostado dándole la espalda a la puerta, oye le dije, de verdad Alex que te pasa, que te hice para molestarte así lo que sea que haya sido lo lamento y dime que es para no repetirlo, creo que él noto mi tristeza en las palabras y el modo en que se lo dije y volteó a verme, se sentó en la cama respiro hondo y habló.
Tu no hiciste nada Criss, soy yo quién no sabe cómo seguir y no quería venir porque no sabía cómo verte a la cara y hacer como si nada pasara, pero que pasa le dije yo, y me respondió, déjame hablar si, que me cuesta trabajo hacerlo, no me interrumpas, me senté en mi sofá reclinable frente a él y guardé silencio.
No se que me pasa pero siento que algo se modificó en mi con respecto a ti desde el día que papá nos revisó en el consultorio de la escuela, si es eso no te preocupes no pasa nada es normal.. Te dije que no me interrumpas, perdón está bien ya…Como te decía no he podido dejar de pensar en eso, tengo pena que me hayas visto así, siento como si algo se hubiera roto, también me siento apenado porque me quise burlar de ti y fue cuando mi papá me regaño, luego también porque me viste viéndote cuando yo en un principio te dije que no vieras e hice lo mismo, en fin son muchas cosas que no me dejan estar tranquilo.
Cuando por fin hablé le dije, como cuáles otras cosas no te dejan estar tranquilo, no tiene importancia me respondió, es que yo quiero saber, si ya te sinceraste conmigo que más hay, nada solo es una forma de decir me contestó, seguro respondí, y no será que esas otras cosas por casualidad sea que no puedes dejar de verme desnudo en tu mente, y que por más que lo intentas no desaparece, que en ocasiones quisieras que no hubiera pasado, pero en otras te alegra que pasara porque te ríes de la situación y que quizá te gustaría que se volviera a repetir, pero no sabes cómo hacer que eso pase, la cara de Alex estaba tensa y pálida ante lo que le había dicho, después de un rato de no hablar y solo mirarnos me dijo, eso quiere decir que tú, es decir, si Alex lo interrumpí, yo también estoy en la misma situación que tú y estoy pasando por el mismo problema emocional, pero yo no me he portado de manera indiferente y fría como lo has hecho tú.
Discúlpame mi intensión nunca fue hacerte sentir mal solo que no sabía cómo reaccionarias, o qué pensarías de mí, que no es normal puesto que somos amigos y hombres, exacto Alex somos amigos y como tal creo que sabes que hay la confianza entre ambos para arreglar las cosas de otra manera y no solo huir y portarte como te portaste; está bien Criss perdóname si por favor, lo vi a los ojos me sonreí y le di un abrazo.
Así duramos unos momentos, hasta que Alex habló y me dijo, Criss y si lo repetimos, si ambos lo pensamos y lo queremos, podemos intentarlo, yo me quedé helado pero a la vez me entusiasmaba la idea y como acabábamos de reconciliarnos, no quería que volviéramos a estar mal, le dije que si, él sonrió, puede ser ahora que no está tu hermana, si le respondí, pero nos damos prisa o tendremos problemas, está bien Criss, oye te puedo, emm te puedo, quitar yo la ropa, sonreí y le dije, si solo que también te quite la tuya y me respondió con una sonrisa que era lo justo.
Me pidió que me sentará en la cama y empezó, tomó mi pie izquierdo, desató mis cordones de mi zapato, lo aflojó lo suficiente y con delicadeza quitó mi primer zapato, hizo mismo en mi pie derecho, después siguió con mis calcetines, tomó mis pies por los dedos con una mano y con la otra bajo el elástico por la parte de los talones y los quitó dejando mis pies blancos desnudos y los acarició, tenía unas cosquillas inmensas y él lo disfrutaba, se acercó a mí y puso sus manos en mi playera, me dijo que levantara los brazos y subió mi playera hasta que me la quitó, sentía una emoción muy fuerte que no sabía explicar, el veía mi pecho y abdomen maravillado, después me recostó y puso sus manos en el botón de mi pantalón lo desabrochó y bajó mi cremallera dejando ver mi ropa interior con una erección, se rio y comenzó a bajar mi pantalón primero hasta la rodilla y después de que levanté un poco las piernas logró llegar a mis pies y sacarlo, estaba en mi bóxer azul marino frente a él, sentí mucha más emoción, listo ahora te toca a ti es lo justo que me dejes igual.
A diferencia de él yo empecé por su playera se la retiré cuando levantó sus brazos, su piel era muy suave toqué sus hombros sentía pena pero me gustaba y a él también, lo senté y le quité los zapatos con más torpeza y deseo que él, sus calcetines si lo hice con más delicadeza para dejar sus morenos pies a mi vista, subí hasta su pantalón y lo desabroche y lo empecé a quitar, el usaba un bóxer rojo y al igual que yo su pene estaba durísimo, listo le dije estamos igual.
Nuestra respiración era acelerada, dos amigos adolescentes en una habitación, en ropa interior y solos en una casa, estábamos los dos de pie y sin darme tiempo a decir nada Alex puso sus manos en el elástico de mis bóxer y los bajó hasta las rodillas, saltando mi pene blanco y rosado erecto junto con mis testículos blancos, yo hice lo mismo y el pene erecto y las bolas morenas de Alex también saltaron, mi estómago se sentía raro tuve un espasmo al momento que me lo bajó y estoy seguro que él también porque hizo un movimiento involuntario, nuestra ropa interior quedó en nuestros tobillos ambos levantamos los pies para retirarlos por completo, estábamos totalmente desnudos uno frente al otro contemplando nuestros cuerpos, en una excitación total.
Nos masturbamos Alex? le propuse, el sonrió y dijo que si, ambos nos tumbamos en la cama y comenzamos a masturbarnos con mucha energía, nuestras manos bajan y subían en nuestros penes que se sacudían con el movimiento frenético, nuestros testículos se agitaba y golpeaban al movimiento, con la inexperiencia de adolescentes lo hacíamos como si el mundo se fuera a acabar, nuestras respiraciones aumentaban, nuestros cuerpos bañados en sudor, solo nos veíamos la cara, los cuerpos, nuestros penes, nos reíamos de las muecas que hacíamos, hasta que con lo frenético me llegó mi espasmo de eyaculación lanzando 5 descargas de semen semi espeso, al minuto más o menos Alex también descargó todos sus jugos masculinos, terminamos rendidos, luchando por regular nuestra respiración.
A los 10 minutos llegó mi hermana y nos empezó a gritar que bajáramos a ayudar con las bolsas, nos llevamos tremendo susto, como pudimos nos vestimos, por la desesperación tome el bóxer de Alex y me lo puse, mientras él me decía, oye tú ese es el mío, yo le dije que eso no importaba que se callara y se vistiera rápido y Alex se puso el mío y terminamos de vestirnos, aunque sí tardamos un poco en bajar, mi hermana notó nuestro sudor y nos dijo que que estábamos haciendo, luchando Aranza, aposté con tu hermano que le podía ganar y lo hice, yo lo veía sonriendo por ese comentario pero deje que disfrutara el momento, dejamos su cuarto todo desordenado porque fue una pelea frenética, ahh miren que bonitos, ustedes felices y yo como burra de carga con todas las cosas del super porque no quisieron ayudar, apúrenle y metan todo a la cocina y después suben y arreglan el desorden se bañan y bajan a cenar, ambos nos fuimos sonriendo..
Esa noche dormí abrazado con él aunque queríamos repetirlo no lo hicimos por miedo a que Aranza descubriera algo. De esa forma ya no solo tenía encuentros con Ernesto sino ahora también tenia uno con su hijo Alex.
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