Con mi cuñado 3
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esa noche dormimos abrazados y desnudos, cansados de como habíamos cachado con mi cuñado.
Mi hijita se despertó un par de veces y yo, medio dormida la atendía mientras mi cuñado le hacía un biberón y cuando se calmaba, volvíamos a seguir durmiendo.
El viernes nos levantamos como a la una de la tarde, "buenos días cariño, como haz dormido?", le dije besando los labios de mi cuñado, abrazándolo y pasando una de mis piernas sobre él, "buenos días Marleny", me dijo, pasando su mano por mi espalda y dejándola sobre mis nalgas, "nos duchamos juntos?", le decía sin dejar de besar sus labios, "vale", me dijo Ramiro y nos fuimos a la ducha juntos, nos empezamos a duchar, Ramiro enjabonaba todo mi cuerpo, pasaba la esponja muy suave por mis tetas, por mi cuca, yo acariciaba su verga que estaba dura, "sabes que me cachas muy bien, me haces gozar mucho", le decía, a medida que me iba poniendo de rodillas para mamar la verga de mi cuñado, cosa que él no me dejó, agarrando mis brazos, me hizo darle la espalda, haciendo que me agache y saque mi culo hacia fuera, yo lo miré y me abrí las nalgas, sintiendo como acomodaba su verga contra mi ano, que estaba abierto todavía de la cachada que medio la noche anterior, sintiendo como empieza a hacer fuerza y siento como su verga empieza a entrar en mi culo, haciendo que gima de placer al sentir como me entraba, hasta que mis nalgas quedaron pegadas a su pelvis, con toda su verga metida en mi culo, "que rico le cachas el culo a tu putita", le decía moviendo mi culo, disfrutando de la verga de mi cuñado metida toda dentro mio, "me gusta cachar tu culo Marleny", me decía moviendo su verga y apretando mis tetas, yo gemía, suspiraba, tiraba mi culo hacia mi cuñado, baje una de mis manos y empecé a tocar mi cuca, metía los dedos mientras Ramiro metía y sacaba su verga de mi culo.
Sentía que mis piernas no me soportaban, se me doblaban de placer, sintiendo como mi cuñado me cachaba el culo, como nos caía el agua encima, mis dedos se metían en mi cuca, acariciaban mi clítoris, yo gemía, suspiraba, sentía como mis tetas iban para adelante y para atrás a medida que Ramiro metía y sacaba su verga de mi culo, los dos gemíamos como locos, hasta que siento que me voy a escurrir, le digo que me cache mas fuerte, que me escurro, y me empiezo a escurrir con fuerza, gimiendo, gritando de placer pidiendo que me de toda su leche, hasta que siento como empieza a palpitar su verga dentro de mi culo, yo estaba disfrutando tanto que me empece a orinar mientras me escurría y sentía como mi cuñado me llenaba el culo de leche, sentía como palpitaba su verga dentro de mi culo y como mi orín me mojaba las piernas, los pies.
Nos quedamos quietos, Ramiro no había sacado su verga de mi culo, siento como me abraza por mi barriga, sus manos seguían acariciando mis tetas, "terminemos de bañarnos cariño, que pronto se va a despertar la bebe", le decía moviendo mi culo, sintiendo como su verga seguía dura dentro de mi culo.
Nos terminamos de bañar, tuve que sentarme en el inodoro, ya que era tanta leche la que tenía en mi culo, que sabía que cuando empiece a hacer las cosas se iba a empezar a salir y a manchar toda mi ropa, aparte de sentir la necesidad de hacer de cuerpo, me volví a lavar el culo, estaba feliz de lo abierto que tenía mi ojete siempre quise tenerlo así, abierto, le había pedido a mi esposo que me lo rompa varias veces y nunca quiso, y con Ramiro lo había echo, me había roto el culo y me lo seguía abriendo.
Así pasamos el día, yo estaba con mi maya de baño de dos piezas y Ramiro con la suya, mi hija jugaba tranquila, con mi cuñado nos metíamos mano, nos besábamos, como a las cinco de la tarde mi hija se duerme y nos fuimos a la cama con Ramiro, entre besos y caricias estábamos los dos desnudos de nuevo, las manos de ambos recorrían el cuerpo del otro, los besos eran profundos, las lenguas jugaban entra si, mis pezones estaban muy duros con las chupadas que mi cuñado les daba, siempre abrazados nos fuimos poniendo boca arriba, el encima mio y me fue metiendo su verga en mi cuca, que estaba empapada, abría mis piernas y las levantaba todo lo mas que podía, dejando que mi cuñado meta su verga hasta lo mas hondo de mi cuca, gimiendo de placer al sentir como Ramiro me cachaba la cuca, me sentía cada vez mas mojada, sintiendo la verga de mi cuñado entrar y salir de mi cuca, del placer que me daba como me estaba cachando, "te gusta cacharme?", le decía, envolviendo su cuerpo con mis piernas, sintiendo el peso de su cuerpo sobre el mio, su boca besar y chupar mis tetas, besar mi boca, sin dejar de meter y sacar su verga, cachando mi cuca ahora, "me vuelves loco Marleny, me vuelves loco", me decía, moviendo su verga mas fuerte dentro de mi cuca, haciendo que grite, que disfrute como pocas veces lo había echo, "quiero que seas mi amante", le dije, teniendo un espasmo de placer que le clave las uñas en la espalda a mi cuñado, sin dejar de mover mi cintura, disfrutando de la verga de mi cuñado, "que rico que cachas a tu putita", le decía, apretando mas el cuerpo de mi cuñado contra el mio para sentir su verga bien adentro mio, "así papi, así, dame verga, dale verga a tu putita, cacha mi cuca, cacha la cuca de tu putita", le decía moviendo mis caderas, clavando mis uñas en su espalda
Lo mordía de caliente que estaba, "me voy a escurrir en tu cuca", me dijo, moviéndose mas fuerte, "si, si cariño, llena mi cuca de leche, dale toda tu leche a tu putita en mi cuca", le decía, apretándolo mas contra mi, sintiendo que yo también me estaba escurriendo, sintiendo como Ramiro, mi cuñado, me llenaba la cuca de leche, nos estábamos escurriendo juntos, yo temblaba de placer al sentir su leche dentro mio, como me desbordaba la cuca, como salía su leche y me mojaba el ojete, como temblaba Ramiro, dejando toda su leche, llenando mi cuca, hasta que cae como vencido sobre mi, nos quedamos abrazados sintiendo como palpitaba su verga dentro de mi cuca, lentamente la fue sacando, sentía como me salía la leche, como no solo mojaba mi ojete sino como mojábamos la cama, respirábamos fuerte, nuestros pechos subían y bajaban agitados, la verga de mi cuñado estaba toda mojada de leche, yo le bese los labios y baje mi cuerpo para limpiar la verga de leche con mi boca, escuchando el gemido de placer de mi cuñado cuando se le empecé a mamar para sacar hasta la última gota de leche de su verga.
Nos quedamos abrazados un buen rato, yo quería dormir entre sus brazos, pero me tuve que ir a lavar, ya que no sabía si mi hija estaba despierta.
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