Con mi grande amigo, será que él está confundido?
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Cuando Alex arribó al salón de clase (que para decir verdad era el laboratorio de la materia de Física General, cosa que me hace recordar a Fer y David) lo hizo por la puerta principal, y el pizarrón al igual que el Profesor estaban en el fondo del recinto, de tal manera que las primeras mesas y sillas presentes en el lugar, más bien eran las últimas desde la vista del Profesor. Yo estaba sentado solo, en la segunda fila al entrar, cosa que originó que Alex se sentara en esa misma fila, y poder así entablar conversación de lo que el Profesor había platicado en los primeros 20 minutos de clase.
En fin, como la clase sólo fue introductoria, terminó a los escasos 15 minutos que él llegó al aula, saliendo de ahí nos pusimos a platicar de lo agradable que estaba el día a pesar de estar haciendo un calor de los mil demonios, plática que sólo duró unos 20 minutos y Alex optó por marcharse a dar el recorrido por la Universidad, ya que me comentó que iba a visitar a unos amigos del Departamento contiguo al que estábamos; pasado esto Yo me fui a la biblioteca a esperar a que diera inicio la próxima clase, mientras tanto, mataba el tiempo leyendo un libro de David Leavitt titulado "Mientras Inglaterra Duerme", se los recomiendo.
Mientras tanto, los días de clase seguían su marcha, y la relación de amistad se hacía más grande entre Alex y Yo, tanto así que solíamos pasar momentos juntos echando la plática, hablar de las materias escolares, hablar de los trabajos por hacer, hasta hacíamos competencias entre ambos para ver quien salía mejor en los exámenes. Lo más importante de todo, era que Alex pareciera tenerme sólo a mí como único y gran amigo, porque era conmigo con quien daba su confianza para desenvolverse y platicar, y tal daba creer que era muy reservado, pero conmigo solía ser muy diferente, tenía esa calidez de amistad que se requería; salíamos juntos a dar el rol por la Ciudad sacando curas, echábamos juntos la pisteada y uno que otro juego esporádico para liberar el estrés.
Pero de repente surgió algo en mí, Yo llegué a sentir algo más que una simple amistad o señal carnal por él, sin temor a la duda, puedo decir que me enamoré de él, ya que no hacía otra cosa más que pensarlo, soñarlo y extrañarlo, pero Yo sabía que lo que estaba pasando por mi mente sólo era una fantasía, fantasía que sólo en un mundo alterno podría hacerse realidad, ya que era sabido que Alex era un chico tal cual heterosexual se podía pensar, porque él solía picarear con las chavas de la escuela, incluso se rumoraba de romances con alguna que otra morrita, y de novias que había tenido en el pasado.
Alex era un gran tipo de persona, con un cuerpo atlético que enamoraba con verlo, un peinado y color de cabello sensacional, un estilo de hablar que pareciera que te abrazaba con sus palabras, y una risa tan minuciosa que hacía que las cosas tomaran más sentido cómico y picaresco (según la razón). Alex conmigo se comportaba muy a toda madre, pasaba por mí a mi casa y nos íbamos a echarnos unas "caguamas" con sus amigos, en la escuela solíamos entablar conversaciones sanas y amenas, íbamos a juntadas familiares, en fin, llegamos a compartir entre ambos, toda una vida.
Cuando todas las cosas estaban tomando un sentido íntimamente amistoso, fue ahí que se generó el siguiente paso, el paso que nos llevó a cumplir mi fantasía, y en la que logré que mi amigo, el machote y varonil, perdiera esa característica para mi persona, y lograrlo hacer totalmente mío. La aventura se originó en la noche de la tradicional posada que se hace al término del curso del semestre non (finales de Diciembre, posada Decembrina), la cual fue año y medio después de conocerlo, un Diciembre de 2012. Les dejo lo sucedido:
Era un día de Diciembre de 2012, para esas fechas la Ciudad de Hermosillo se pone muy fría por las tarde-noches, haciendo que lo más agradable sea una cálida compañía. La posada del salón se había organizado en casa de Alex, ya que él era quien en esos momentos disponía de una casa sola, la cual habían adquirido sus padres y sólo era usada para fiestas y eventos que requerían de ese espacio.
Cuando se designó la casa de Alex para la posada, no pude imaginar otra cosa que el estar con él, embriagarnos y que las cosas tomaran su rumbo y sentido, a tal grado de que se diera lo que tenía que dar, ya que Yo no iba a perder la oportunidad.
La fiesta estaba contemplada para dar inicio a las 10 de la noche, para lo cual la casa de los Papás de Alex, estaba cerca de la mía, y Alex pasó por mí a mi casa a las 9, cosa que generó que fuéramos los primeros en llegar a su casa donde se iba a hacer la fiesta, y fuimos acomodando las cosas para que cuando llegaran los demás ya estuviera acomodado. Regamos el patio, juntamos la poca basura que había, sacamos las mesas, las sillas, colocamos el asador para poder encender el carbón y hacer una carne asada para la cena de la noche, al final de todo, fuimos al OXXO a comprar seis "caguamas", un 12-pack de Tecate Titanium y una cajetilla de cigarros Marlboro rojos para dar inicio a la borrachera; al momento pensé, -con esto Alex y Yo nos vamos a poner bien pedos, y vamos a tomar rumbos intensos y cachondos-.
Cuando llegaron nuestros compañeros de clase, ya estaba todo listo, solo hacía falta que algunas de las chicas se dispusiera a picar la salsa bandera (chile, cilantro, cebolla y tomate, llamada así por tener los colores de la bandera de México) y preparar un delicioso guacamole (aguacate molido), y que los chavos asáramos la carne para poder prepararnos unos tacos de carne asada en sus ricas tortillas de harina (http://ronnieborr.com/blog/wp-content/uploads/2012/06/10.8.jpg). Fue tanto el ajetreo de Alex y Yo, las cervezas que ya teníamos en la panza y la pérdida del apetito, que no cenamos ningún taco de carne asada, a pesar de que se miraban deliciosos, lo que ocasionó que nos pusieron muy borrachos en tan corto tiempo.
Al llegar las 11:30 de la noche, Alex y Yo fuimos al OXXO por un poco más de alcohol (ya que acá se deja de vender bebidas embriagantes a las 12:00 de la noche), pues para eso compramos otro 12-pack de Tecate Titanium, un 24 de medias de cerveza Indio y una cajetilla de cigarros. Al ir camino a casa de Alex, recuerdo que iba pensando en cómo hacerle para lograr algo entre él y Yo, a la par que pensaba que era un "chingo" de cerveza lo que llevábamos y que nos íbamos a poner bien pendejos.
Pues como eran predichas mis ideas, para eso de las 2:00 de la mañana estábamos la gran mayoría ebrios, y algunos se habían retirado de la fiesta, quizá quedábamos unos 15 en la casa de Alex, y fue cuando dimos inicio a los juegos de borrachos; jugamos al ponte pedo, al verdad o castigo, beer pong, entre otros; a tal grado de lograr empedarnos y alcanzar el sueño; y dimos inicio al juego del dompe (pero quien perdiera, debería de quitarse una prenda, hasta quedar "bichi" -desnudo-), en ese momento mucho optaron por irse de la fiesta, quedándonos solo 5 amigos, y para mi buena suerte, todo éramos hombres.
El juego dio inicio y Yo ya traía muy mala racha en el juego, bien dice el dicho -Desafortunado en el juego, afortunado en el amor-, tan mala racha que comencé a perder todas las partidas, y al paso de varias jugadas, Yo ya estaba en calcetines y boxer, y mi amado Alex estaba en calcetines, boxer y camiseta; pero fue aquí que logré ganar dos partidas, haciendo que Alex quedara en sólo boxer al igual que los otros tres compañeros(pude apreciar el cuerpo de Alex, parecía que estaba tallado a mano, tenía un cuerpo blanco, tenues vellos en sus abdomen, piernas bien marcadas por jugar futbol, y un paquete que me volvió loco, y me sentía conformado con solo tocarlo), aquí fue cuando Alex dijo que ya no quería continuar con el juego, y que tenía suficiente sueño, (lo cual a mí no me pareció del todo favorable, ya que quería ver como Alex quedaba bichi y con su miembro al aire, y me hizo pensar que Alex había percibido que Yo me volvía loco por él y que le echaba unas miradas de reojo, así que terminé aceptando su petición para evadir sospechas).
Yo me dispuse a acostarme en la sala de su casa, en uno de los sillones, y ya así se acostaban dos en cada recámara de la casa, dando cabida a que alguien podría acostarse con Alex y deleitar lo que Yo toda la noche había saboreado, pero mi plan era el eliminar todo mal pensamiento de la mente de Alex, porque me invadía el subconsciente de que Alex se había dado cuenta que Yo le veía a cada rato con ojos de cariño, afecto y enamoramiento.
Pero cuál fue mi sorpresa del siguiente diálogo, nunca lo olvidaré:
Alex -Ernesto!
Yo -Qué pasa Alex?
Alex -Qué haces en la sala? Al caso piensas dormir en esos incómodos sillones?
Yo -Si Alex, igual ya va amanecer, y no son tan incómodos como parecen.
Alex -Pues NO! Tú no vas a dormir acá, quiero que duermas en la recámara, Yo comparto cama sólo con mi gran amigo.
Yo -Está bien Alex, ahí voy. (Por mi mente pasaba el que Alex quería que Yo fuera a su recámara y hablar a solas conmigo, cosa que me puso muy nervioso y fui a parar al baño a vomitar).
Duré como 5-10 minutos en el baño, vomitaba y me ponía a pensar en que Alex me dijera algo y me volvía de nuevo el vómito; en eso Alex llamó a la puerta del baño y me pregunta -Qué pasa Ernesto?- y le contesto -Nada, quizá se me subió la cheve, y por eso estoy guacareando-. En eso siento que alguien me toma por detrás y me dice que ya deje de vomitar, que me pondré más mal si sigo haciendo la lucha y que me enjuague la boca y me vaya acostar (era él quien me había dicho eso, Alex). Hice caso a lo que me dijo, y cuando me fui a acostar, él me estaba esperando con un Electrolit y una pastilla de dolor de cabeza, según esto para evitar la resaca, me lo tomé y me acosté.
Cuando puse la cabeza en la almohada, sentí que mi cuerpo temblaba, quizá era de frío, de nervios, o de ansiedad por estar cerca de Alex; en eso Alex me sujeta a él y me dice -Ya, no temas, aliviánate, ya se te quitará el malestar, ahora tienes que contemplar lo que sigue-, ese comentario hizo que me quedara congelado y situara mi mirada en sus ojos que apenas se distinguían con la luz de la luna que entraba por la ventana, a lo que le contesté -Alex, tú ya sabes lo que mío…?- En eso el me contestó -Ernesto, claro que sí, a poco crees que no me di cuenta como me escaneabas?- En eso me quedé en silencio, silencio que ocasionó que Yo me abalanzara hacia Alex y le diera un beso.
Después de eso Alex se convirtió en un loco, como si le hubiera dado un arranque de pasión, tanto así que me tomó de la nuca y generó que nos diéramos un beso profundo e intenso, después me tomó de los hombros y me bajó hacia su abdómen, donde me exigió que lo besara y lo acariciara (cosa que a mí me ponía a mil por hora), seguido de eso me pidió que le mordiera su pene, eso me hizo palpitar de la emoción, ya que era apreciable por encima del boxer que Alex tenía una erección, cuál fue mi sorpresa que al sacar tremendo pene éste se impactó en mi cara (le medía como 23 cm), y me dejó los restos de líquido preseminal en mi rostro, esa rica aroma a hombre, esa composición pegajosa en mis mejillas; y tomé su pene con mi mano izquierda y con la mano derecha le frotaba sus choros y colgados huevos, eso me tenía sumamente emocionado, y fue cuando lo metí en mi boca y lo mordí con mis labios para no lastimarlo.
Todo marchaba muy bien, llegué a pensar que Alex estaba enamorado de mí, y que esa amistad que nos unía nos iba a mantener unidos como nunca antes, pero cuál fue mi sorpresa que en ese momento me dijo el nombre de una de las chicas de la escuela, aclamó -Marthaaa- con un grito profundo. Fue cuando yo aproveché para decirle, -Qué quieres Alex? Aquí estoy contigo! Y quiero que me hagas tuya, y sólo tuya!- En eso Alex me contestó, -Claro que sí, ésta noche serás mía, te quiero tanto como a Ernesto!- Cual fue mi sorpresa, me sentía tan confundido y ensordecido, que no sabía cómo reaccionar, en realidad Alex estaba enamorado de mí? O sólo lo decía por el efecto del alcohol?, en fín, no le tom´pe importancia y me dediqué a vivir y disfrutar el momento.
Después tomé a Alex por la espalda y pude sentir sus nalgas, tan ricas y redonditas, duras y frescas por el frío de la noche, fue tanta mi emoción que le azoté una nalgada, y Alex reaccionó pidiendo que lo follara. No he de negar que tenía un cuerpo antojable, y que en mis pensamientos siempre había estado la imagen donde Yo lo follaba y satisfacía mi placer, pero en ese momento me embargaba la idea de que él me follara a mí; en eso me dice -Ernesto, Neto, por favor, hazlo!- Y con una sencillez y pasivo movimiento, introduje poco a poco mi pene en su ano (de tamaño estándar, 19 cm), el cual entró con facilidad por el abundante líquido preseminal que había arrojado, pero podía sentir como su ano virgen oponía resistencia a mi pene que intentaba follarlo, fue una sensación tan placentera y candente, que hizo que casi al instante me viniera dentro de él, sólo alcancé a darle unos cuantos empujones (quizá 2 minutos), cuando sentí como mi pene se asfixiaba en su interior y pude percatarme de mis venas saltadas por el aumento del torrente sanguíneo, y fue cuando le tiré dos chorros grandes de semen y otros dos con poquita intensidad.
En cuanto me retiré del interior de su ano, corrí a ver la cara que había puesto Alex, era una cara llena de gozo, de picardía, de emoción y sentimientos encontrados, y mis emociones estaban al mil por hora, ya que Yo estaba a la espera de que Alex me follara, y fue cuando le dije -Alex, ahora me toca a mí que me metas te pedazo de carne-, y Alex sin decir palabra alguna me tomó por la espalda y colocó su pene en la entrada de mi ano, pude percatar su respirar en mi nuca, se palpitar de su corazón en mi espalda, se frágil forma de tomarme de la cintura y su delicada forma de ir llevando la situación con delicadeza, como si Yo fuese una de esas chicas a las que ya había tomado y que lo hacía con gran lentitud para prevenir un dolor, fue lo más sensacional que sentí en ese momento, cuando fue entrando poco a poco su pene, y una vez que estaba todo adentro, comenzó el va y ven de su pelvis, era un movimiento vigoroso que me hacía sentir que me iba a partir en dos en cualquier momento y en escasos 5 minutos sentí sus intensidad a mil y como su respirar se agitó, fue cuando me puso su firma, dejando dentro de mí toda su lecha, esa cantidad de fluido y parte de él que se quedó ahí dentro de mí, que Yo me sentí agradecido por lo sucedido y caí en la cama.
Cuando pegué mi cuerpo al suyo, sentí su calor fusionarse con el mío, y debido a que estaba fría la noche, ambos fuimos quedando dormidos y arrullados por las emociones que aún se respiraban en la recámara, quizá en ese momento fue cuando el alcohol hizo de las suyas y nos hizo perder la noción del tiempo, quedando totalmente dormidos y olvidando que debíamos vestirnos.
Por la mañana, un fuerte dolor de cabeza me despertó, al abrir los ojos lo primero de lo que me percaté fue de mi erección al descubierto, tenía mi "bichola parada", y estaba totalmente bichi y solo en una habitación, intenté hacer memoria y no lograba recordar que había pasado, solo tenía vagos recuerdos de la borrachera, los juegos de mesa que jugamos en la noche y de cuando me introduje al baño a vomitar, eso era todo lo que recordaba. De pronto sentí como una ansiedad invadía mi persona, y busqué mi ropa para vestirme, sólo encontré mi camiseta, y mi boxer; luego busqué mi celular y no lo encontré, al salir de la habitación me percaté que ya era muy tarde, como eso de las 12:00 de medio día, fui a la otra habitación y ahí estaba uno de mis compañeros aún dormido, pasé a la sala y no había nadie, Alex y los otros dos ya se habían ido, ahí fue donde encontré mi pantalón y mis zapatos, me vestí y busqué mi celular, el cual estaba a un costado del refrigerador y conectado a la corriente (cargándose).
En la puerta de la sala estaba colocada una nota que decía:
Ernesto y compañía, el despertar e irse de la casa, les pido de favor cierren bien las puertas de la casa, en la tarde paso para asegurarme. Saludos Alex
Eso me hizo llegar una lluvia de ideas a mi cabeza, ideas que crearon una película en mi mente, película en la cual Alex y Yo éramos los protagonistas, me puse feliz y sonreí, tomé mi celular y me fui a mi casa en transporte urbano.
Al llegar a mi casa, no quise tomar una ducha solo por conservar esa aroma a Alex en mi cuerpo, y me recosté en mi cama, me percaté que por dentro de la mica de silicona que cubría mi celular, estaba una nota, por el momento pensé que era un ticket de las cervezas, pero al sacarlo pude ver que era una hoja como en la que estaba la nota en casa de Alex, y pensé -"de seguro Alex me dejó una carta dándome las gracias por lo sucedido, ya que me dijo al oído que me quería mucho y era su mejor amigo"-, cuál fue mi sorpresa al leerla -"no continúes, sólo has un poco de cabeza y crea tu propia idea"-, la nota decía:
= Hola Ernesto, en ésta carta sólo te digo adiós, ya no me busques. Atte: Alex=
En ese momento sentí como mi mundo colapsaba y me dolió mucho el leer lo que me decía, pensando que me pondría otra cosa, pero fui consciente y "tomé el toro por los cuernos", le llamé a su celular y no contestó mi llamada, le llamé quizá como 7-8 veces, y nunca respondió mi llamada; acudí a su casa y mi sorpresa fue que él estaba ahí afuera, sentado y bebiendo con unos amigos, me miró y me dijo que subiera a su carro, avanzó algunas cuadras de su casa y sin mencionar ninguna palabra; después detuvo su marcha, apagó el carro, y me dijo lo siguiente: -Ernesto, te pido de favor que no me busques nunca más, no me dirijas la palabra, y no te acerques a mí, temo por mi sexualidad y mi integridad, así que las cosas quedarán así (y bolas), que me receta tremendo puñetazo en mi mejilla, generando que mi nariz sangrara, eso lo asustó mucho y me pidió perdón, cosa que accedí y lo perdoné, y dijo que le regresara el golpe que él me había dado, algo a lo cual me negué, y le dije que ante las adversidades él era mi amigo, pero que si esa era su última palabra, que las cosas así quedaran, solté una lágrima y me bajé de su carro, él no hizo el intento de detenerme, y sé que se quedó muy dolido por lo sucedido.
Pasado el tiempo, nos veíamos en la escuela y el me volteaba la cara, cosa que a mí me dolía mucho. Y el final ésta historia tiene un final triste, ya que estoy cerca de quien sé que es una gran persona, pero me rechaza, y por esa persona Yo estoy dispuesto a dar todo lo que esté a mi alcance, pero prefiero verlo sin tenerlo, a tenerlo y perderlo.
Te quiero mucho!
Estimados lectores, espero y haya sido de su total agrado; éste relato es 100% real y les pido su ayuda para superar mi incógnita, será que mi amigo es Heterosexual, pero cometió el error de dejarse llevar por mis impulsos, o será que es Homosexual pero no quiere aceptarse?
Saludos y muchas gracias por sus comentarios.
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