Con mi mejor amigo de la universidad.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Este es mi primer relato, si veo algo de éxito seguiré con más. Prometo contar sólo experiencias propias y completamente reales.
Mi vida en la universidad fue siempre muy placentera, no soy un gay de los que se considera afeminados, de hecho las personas que me conocen y no son muy cercanas, nunca lo imaginarían. En fin les decía, en la universidad pertenecía al grupo de los considerados "populares", nos molestaban un poco, pero en realidad creo que era envidia, ya que aparte eramos buenos en clase y teníamos buenas calificaciones. Este grupo de amigos salíamos a tomar, a bailar y casi 2 veces por semana teníamos fiesta en mi departamento, en el cual vivía solo (Yo soy de provincia y estudié en Ciudad de México). Total que era pura fiesta y diversión. Los principales eramos 3 mujeres y 4 hombres, todos straights hasta que les confesé mi orientación. Fue ahí cuando empezó todo…
Después de confesar, nadie pareció molesto o indignado, incuso creo que algunos lo habían sospechado ya que no había tenido novia ja!. Pero mis amigos empezaron a jugar conmigo, del estilo machista, me tocaban las nalgas, me jalaban las manos para que les tocará el bulto y cosas así, la verdad nunca me importó y les seguía el juego, aunque la verdad si me ponía un poco nervioso, ya se imaginarán a mis amigos, los 3 blancos, altos y de buen cuerpo; no por nada eramos el grupo asediado por las niñas de la uni jajaja.
Fue hasta que un día, ya en la fiesta y con unos alcoholes encima, que empezaron a subir de tono sus jueguitos, siempre iniciados por mi amigo que ocasiona este relato, empezaban con comentarios como "si te vas a dejar coger por cualquiera, porque no dejas que nosotros te estrenemos" (en ese entonces nadie me había penetrado y ellos lo sabían), o "mira si quieres probar algo rico, prueba las de nosotros" (mientras dos de ellos sacaban sus penes flácidos y me los acercaban a la cara, fue ahí donde vi sus penes por primera vez), incluso llegaron a someterme y restregar sus penes en mis nalgas haciendo movimientos como si me estuvieran violando (obvio con la ropa puesta), cabe mencionar que mi tercer amigo siempre me respetó y a la fecha seguimos en contacto y hasta hemos vivido juntos (pero esa es otra historia).
Las cosas transcurrieron así varios meses, todo esto lo hacían jugando y con mis amigas enfrente, aunque la escena parece extraña, todo lo hacíamos jugando (al menos, eso pensaba yo) y es que compartíamos mucho, íbamos al estadio a apoyar al equipo de la uni, nos emborrachábamos hasta perder la consciencia, incluso alguna vez hasta probamos cosas ilegales aunque después nos arrepentimos. En una de tantas salidas en grupo, ya con la boca caliente queriendo seguir tomando, nos fuimos al depa de mi amigo, él, una de las chicas y yo; los demás se fueron a sus casas. Él compartía cuarto pero ese día no estaba su roomie, se había ido a su pueblo al parecer, así que los 3 nos quedamos solos a tomar, como a las 2 de la mañana mi amiga decidió irse, armamos una revolución porque ¿Cómo la dejaríamos irse sola así?, total que nos convenció (o me convencieron) y se fue.
La despedimos y nos quedamos viendo, yo pensando si irme o seguir en la fiesta, fue cuando me dijo "se acabo el alcohol, ¿Vamos por más o ya nos dormimos?", me quedé pensando y le dije, vamos por algo y si regresando nos da sueño, me voy; abrió lo ojos como si hubiera dicho algo horrible y me dijo "No, como crees, te quedas a dormir acá, hay una cama libre y ya estás muy mal para que te vayas así" en ese momento no le di importancia al asunto y acepté, siempre nos quedábamos a dormir en casa de todos. Fuimos a comprar cerveza porque creímos que una botella ya sería demasiado y regresamos a su depa.
Llegamos y nos fuimos a la recámara, puso música y abrió 2 latas, se sentó en la cama y apoyó sus codos, por mi parte, jalé una silla y me senté frente a él, pero a una buena distancia. Nadie decía nada más que "salud" antes de darle sorbos a las latas, se sentía un ambiente raro. De pronto me dijo "oye y ya tienes pareja?" le contesté que no, a pesar de haberlo hecho oficial, no me gustaba hablar de esos temas tan abiertamente con ellos; entonces empezó la charla:
A: Y ¿Cómo le haces para aguantar tanto tiempo sin sexo? ¿Te la jalas diario o qué haces?
Yo: Pues la verdad si, si no diario, por lo menos lo hago muy seguido.
A: Woow yo no puedo estar todo el tiempo sólo masturbándome, siempre se necesita alguien más para hacerlo más placentero. (la verdad es que tenía chavas diferentes, por lo menos una al mes)
Yo: jajaja tú lo dices como si fuera tan fácil, bueno tal vez para ti, pero yo no la tengo tan fácil, no soy un romántico empedernido, pero me gustaría hacerlo así bien, si no con amor, por lo menos con alguien que me guste mucho jajajaja (siempre me he reído cuando me pongo nervioso)
A: ¿Y nadie de nosotros te gusta? ¿No fantaseas? Yo a veces me la jalo pensando en Ana (una de nuestras amigas).
Yo: jajajajaja
A: Entonces si ¿Verdad? ¿Con quién? Dime y te prometo no decirle.
Yo estaba súper nervioso, la verdad es que nunca lo había hecho pero también estaba calentándome viendo como ya se le notaba un bulto más grande y se lo sobaba o acomodaba continuamente, así que le mentí,
Yo: Bueno, pero no te enojes, a veces me la jalo pensando en ti y más desde que me la enseñaste aquel día.
A: (con cara de triunfo) jajajaja entonces se te antoja esta.
Se desabrocha el pantalón, se baja el cierre y después el bóxer, quedando a mi vista su verga durísima ya con un poco de precum en la punta. Se la menea y la azota contra su vientre, tiene bastante vello púbico al parecer estaba "al natural", era un pene glorioso, de buen tamaño, le llegaba al ombligo cuando la ponía en su vientre, blanca como él, de cabeza rosada, circuncidada, venas de tonos verdes y azules le sobresaltaban, se veía que estaba excitadísimo. Me quedé asombrado, jamás esperé que hiciera algo así, me comencé a reír y él dentro de su mismo juego me la acercaba a mi boca y me decía "anda dale una chupadita".
Yo estaba caliente a más no poder, me daban ganas de hincarme y echármela a la boca y saborear esa babita que se veía en la punta, pero no estaba lo suficientemente alcoholizado para no darme cuenta que sería un error. Él, parado frente a mi, sólo reía y se la seguía meneando, se sentó en la cama otra vez y siguió tocándose, con su dedo índice hacía círculos en su glande y estiraba el precum que salía, mientras me decía "tú te lo pierdes" y me sostenía la vista. Empecé a darme cuenta que él realmente quería algo, que ya no era sólo un juego y mi corazón empezó a latir a mil por hora, ver a mi amigo ahí en su cama con la verga de fuera, su abdomen marcado, excitado e invitándome a probarla me puso más nervioso de lo que estaba.
Tomé aire y le dije "Está bien, si quieres te doy unas mamadas un ratito, pero sólo como cuates" jajaja no sé porque dije eso ni de dónde salió, pero a él le brillaron sus ojos, ahí en la cama sólo atinó a bajarse bien boxer y pantalón y se acomodó para ver el show, con un poco de nervios me acerqué y empecé a lamer la puntita, a saborear ese hilo de precum que desde hace rato ya se me antojaba; la agarré con una mano mientras con la otra le empecé a sobar los huevos y con la lengua dibujaba círculos en su glande. Me tomó con una mano del cabello y me empujó para que me la metiera más y me dijo "ándale, ya pruébala toda, vas a ver que te encantará. Siempre me han dicho que sabe riquísima mi verga". Empece a mamársela, de hecho siempre ha sido mi gusto hacer sexo oral y antes ya lo había hecho y al parecer le gustaba mucho, decía cosas como "De haber sabido como la mamas, te la hubiera dado antes, anda sigue que lo haces delicioso". Eso me prendía más y me esmeraba en hacerlo retorcer del placer, me la metía toda y sentía como me tocaba hasta la campanita y a pesar de las arcadas, seguía mamando; alternaba un poco con lamidas en las bolas y el perineo.
Me di cuenta que hacía sonidos cuando mis lamidas bajan más, así que le quité la ropa y con las piernas en mis hombros, mientras estaba hincado, empecé a llegar hasta su ano. Todavía recuerdo su olor y textura, lampiño y rosadito, ¡Me encantaba! fue el primer beso negro que hice en mi vida, para ese entonces ni siquiera sabía que eso tenía nombre. A él le encantaba gemía y me decía "Wau nunca me habían hecho eso y se siente delicioso" Le metía la punta de la lengua y con las piernas al aire, él casi gritaba, me jalaba incluso con sus manos como queriendo que le metiera más mi lengua en su hoyito virginal.
Para este punto yo estaba perdido, mi calentura me había vencido y estaba decidido a llegar hasta donde él quisiera, seguí chupando su verga que para entonces la había catalogado como la más hermosa que había visto y me encantaba su olor y sabor, lo mamaba como si no fuera a hacerlo jamás, como si de eso dependiera mi vida. Estaba yo llevando un ritmo rápido y sentí que empezaban las contracciones eminentes de un orgasmo cuando de pronto me detuvo y me dijo "Oye, siempre he querido cogerte, me dejas que te la meta", la verdad no le tomé importancia al comentario, estaba tan caliente que le dije "Si, contigo si me dejo" (sería la primera vez que alguien me penetraría). Fue a su armario y sacó un condón, se lo puso y me dijo "quiero ver tu cara cuando te la meta" Así que me puso boca arriba y puso mis piernas en sus hombros, puso su verga en mi ano y empujaba pero no entraba, se resbalaba o empujaba en otro lado hasta que le atino, no creo que haya entrado ni la mitad de la punta de su glande cuando sentí que moriría de dolor, grité y me paré de la cama, me dolió, lo empujé y le dije que no podría que ese dolor era insoportable.
Se fue al baño y trajo aceite de bebé y me dijo "ponte tantito de esto" agarré un poco y me puse en mi ano, incluso introduje uno de mis dedos y la verdad ya no dolió tanto, le dije "Bueno, vamos a ver si así aguanto, vente" Me puse otra vez en posición y el empezó a empujar otra vez; debo decir que a pesar de que no fue igual el dolor, si me dolió muchísimo, le pedí que se quedara inmóvil dentro de mi y de pronto no sé ni como yo solito me empecé a mover, clavándome el pedazo que había quedado fuera. El entendió que estaba listo y empezó a moverse lentamente. La verdad le agradezco que se haya portado tan lindo, supongo que fue la amistad de tantos años por lo que me trató con tanto cuidado y me dio mi tiempo para acostumbrarme a tenerlo dentro de mi. Bromeando un poco le dije una de sus frases que él siempre utilizaba "Pues ya ensartado, mejor muévete y no te quejes" ambos reímos. Empezó a bombear y un mete-saca que en determinado momento me empezó a gustar.
Empezamos a cambiar de tono, de intensidad, de velocidad, empezó a decirme cosas más sucias como "Que culito tan rico tienes", "Quiero darte toda la noche", "Se ve que eres bien puto, mira tú solito te la estas metiendo", "Te gusta? dime que quieres mas putita", de pronto se paró y me dijo ponte en 4. Me puse como perrito y de tajo me la metió toda, ahogue un grito y a pesar del dolor le dije "Que rico, la tienes riquísima, síguele que me encanta", ya estaba perdido. Empezó a sacarla completa y me la metía de golpe, me empezó a dar nalgadas durísimas, la verdad si me dolían pero lo escuchaba excitado y eso me excitaba más, me jalaba el cabello y me mordía la espalda, sabía que quedarían marcas pero no me importaba, me calentaba saber que lo calentaba.
Me dijo que ya se iba a venir que si quería probar su lechita, le dije que si, se salió de mi y empezó a masturbarse en mi cara, me pidió que abriera la boca y se vino en toda mi cara, la verdad no cayó nada en mi boca, todo se fue a mi cabello y a la cama. Se dejó caer en la cama y se lo limpié con la boca. La sensación de tener semen no me agrado y escupí. Estaba a punto de acostarme para masturbarme porque estaba que reventaba, cuando de pronto me dice "te animarías a cogerme?" Casi me vengo con lo que me dijo, claro que sí le contesté, comencé a meterle un dedo, se quejaba pero se veía que le gustaba, nos dimos un beso apasionado, el único, pero como que se arrepintió y me dijo voy por un condón y fue al armario. Desafortunadamente no encontramos otro condón así que sólo le dio una pequeña mamada a mi verga y me masturbó hasta que me vine en su pecho y cuello. Nos medio limpiamos y acostamos en la misma cama abrazados y me quedé dormido.
Al siguiente día tocaba clase a las 8 pero despertamos hasta las 10, no sé en que momento pasó todo, pero sus muebles estaban desacomodados, en su recámara estaba una mesa y un mueble de la computadora que estaba en otro cuarto, le pregunté pero él tampoco recordaba, estábamos desnudos los dos, ambos no nos mirábamos a los ojos mientras hablábamos de cosas triviales, como si nada hubiera pasado. Le dije que tomaría un baño, salí me vestí y esperé por él para llevarlo a la uni a las últimas clases; se bañó, dejamos todas las cosas tiradas y nos fuimos a la escuela. En el camino me pidió disculpas y también que no lo contara nunca a nadie. Le comenté que no había nada que disculpar y pues ahora sí sería un macho calado, como él mismo decía, los dos reímos con una carcajada media fingida. No lo comenté hasta unos años después.
Ya por la noche, al llegar a mi depa noté que tenía moretones en mis nalgas, marcas a punto de sangrar en la espalda y aún dolor en el ano. Recordé todo lo que había pasado y sabía que había encontrado un nuevo gusto. Las cosas siguieron como antes, el grupo, los juegos y las fiestas, nunca volvió a pasar nada con él y hasta la fecha seguimos siendo amigos, el está casado y acaba de tener a su primer hija.
Espero les agrade, empecé con algo tranquilo, si quieren que vaya subiendo de tono o de algún tema en particular ustedes pidan, creo que tengo experiencias con un poco de todo jajajaja.
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