Con mi sobrinito Gabo, de 8 añitos Parte 1

Cómo inició la amistad entre mi sobrinito de 8 años y mi pene..
Haré un alto en mis recuerdos para brindar a ustedes una serie de capítulos qué narran las aventuras entre un conocido de Telegram y yo. ¡Espero sean de su agrado!

A mi sobrino de 8 años, de nombre Fernando (Gabo)lo caché mamándole la verga a mi otro sobrino, Antonio, de 11, de momento pensé en chantajear a ambos pero mejor me hice pendejo y comencé a espiarlos para ver qué más hacían. Ellos, por supuesto no se dieron cuenta que los caché haciendo sus cositas

Después supe que el más grande veía porno en el celular de su papá y como el otro estaba más chico pues lo acostumbró a mamar.

Un día sí que me sorprendieron por que me fui a comprar despensa, yo en ese entonces ya tenía 38 años, el chiste es que al regresar a la casa, en vez de pasar por la puerta de enfrente de la casa pasé por la puerta del patio que daba directo a la cocina y al pasar por la ventana del cuarto de mi sobrinito, los vi cogiendo, bien pendejitos e inexpertos, pero eso sí, Antonio lo tenía ensartadito, su verguita ni pelitos tenía pero ya se le ponía lo suficientemente dura y de tamaño adecuado para penetrar a Fernando. Desde donde me encontraba, veía como que le echaba salivita en su huequito y lo picaba con la cabecita bien peladita, pues el otro se quejaba en ocasiones y le decía que se lo sacara.

Me preocupé un poco pensando en que alguien más los podría sorprender cogiendo por que eran bien pendejos y no se cuidaban lo suficiente. Días después regañé al más grande y le dije que no lo quería ver cerca de mi sobrino el más chiquito y a Fernando no le dije nada. Pasaron los días y ya no volvió a verlos jugar así.

En cierta ocasión, sin embargo, me bañe por la tarde y me salí para irme a cambiar con la toalla en la cintura y en eso veo que se mete con su toallita mi sobrino el chiquito, Fernando. Normal, pensé yo…

Pero al llegar a mi cuarto me doy cuenta que dejé mi cartera en el lavabo y me regresé y al asomarme al baño,encuentro a este cabroncito oliendo mi trusa. Él no me vió. Y entonces fingí que tosía y él rapidito metió la trusa de vuelta al canasto.

Grité:
–Sobrino, ¿no dejé mi cartera en el lavabo?

–Si tío ahorita te la doy—y me pasó la cartera.

Yo pensé: “Verga, pobrecito de Fernandito, anda curioseando por que ya no tiene con quien jugar a escondidas e inconscientemente ha de andar calientillo pues debe haberse acostumbrado al pito de Toñito. Ya se me ocurrirá algo para calmarlo y ver cómo reacciona.»

Al otro día sábado me lo lleve al campo a jugar fútbol, y regresamos a la casa más o menos por la tarde noche. Sus padres andaban en Jalapa, Veracruz por que la suegra de mi primo estaba enferma y me dejaron una temporada a mi sobrinito.

Me senté en el sillón a refrescarme porque andaba algo sudado y escuché que se metió al baño, me asomé y lo veo quitándose su ropita para bañarse. Ver su pequeño cuerpo esbelto, sus nalguitas firmes y redonditas, su piel totalmente lampiña, suavecita y recordar lo que lo había visto hacer provocó qué mi pene se pusiera como piedra.
Me quité el uniforme de futbol afuera del baño y quedó solo en trusa con la toalla en el hombro y entré al baño como si no lo hubiera visto y fingí sorpresa al verlo.

–Gabo ,no me fijé que estabas en el baño, y ya es tardechaparróín si nos esperamos van a cerrar el súper…¿nos bañamos juntos ?

Y me dice el cabroncito:

–Si tío.

Yo colgué mi toalla en el perchero y me puse frente a él y me empecé a quitar la truza. Él se me quedaba viendo bien atento, me quito por completo la truza y me paro derecho rascándome los huevos

Y me dice:

–¡¡¡Tiooo !! ¡¡¡A su mecha tienes un pitote tío, y tienes pelitos !!!

— Jajajaja –yo me reí–pues si por que ya estoy grande.

Y se me quedaba viendo directo, sin disimular nada. Al bañarnos, yo notaba que él se quedaba viendo como me lavaba la verga. Nos terminamos de bañar y salimos del baño, nos cambiamos juntos y nos fuimos al súper.

Regresamos y ya en la noche me toca la puerta del cuarto como a las 12 de la noche y me dice:

–Tío, es que me da miedo estar en mi cuarto.

–¿Te quieres dormir conmigo?

–Sí, tiíto, por favor…
–Bueno, está bien, pasa, cierra la puerta y súbete a la cama.
–Gracias, tío..
Y bueno, como en mi pueblo hace mucho calor, yo acostumbró dormir en truza. Me hice el dormido y la tele estaba prendida y me rasqué los huevos metiendo la mano en mi trusa y dejando ver un poco los pelos.

Fingí roncar y como a los 5 minutos siento su manita tocando el bulto, yo me hice pendejo y pues lo normal, mi verga se empezó a parar y se notaba el tronco y la punta de la cabeza de bajo la trusa.

Y en eso el dijo:
–Se le paró!!!

Yo no supe como contuve la risa, y él, confiando en que yo estaba dormido la empezó a palpar como explorando el bulto que se formó. Cuando él la estaba tocando hice que mi verga diera un brinquito y el se asustó. Quitó la mano y la volvió a poner, y yo volví hacer que mi verga brincara.

Y dijo él wey:
–Woo, se me mueve su pito

En eso, abro los ojos el no se dio cuenta porque estaba bien entretenido tocando y sintiendo el brinquito de mi verga

Y le digo…¿Qué pasa, chaparrito ?

Y que pega el brinco

–Ayyy tio!!

–¿Que hacías ?

–Nada, tío, ¿Por qué?
— Mmmm… siento como raro– y me agarre la verga sobre la trusa y le digo–¿Quién me la paró?

Y el se quedaba callado

–Mmmm, ¿La estabas acariciando, verdad ?

–Nnnno, tío, cómo cree…

–Pues qué raro por que está bien paradita como cuando la juguetean.
–Tío, perdóneme…es que si se la toqué…
–Ah bueno, andas de curioso, no pasa nada, tranquilo, tú date gusto, tócala, si quieres, anda…

Y de volada le cambio la carita, pues de estar asustado, ruborizado y apenado, sonrió.
–De veras, tiíto? Y puso una de sus manos sobre mí bulto– está bien dura, tío…
–Pues sí…¿La quieres ver ?

–¿Puedo? ¿De veras? Siiii

Agarró valor y me la sacó y de volada abrió los ojos como pelototas.
–A su mecha tioo!! Esta bien grandota !!

Yo la neta me reí poquito y le digo. –Es que ya cuando estas grande te crece de a madres, tócala, anda, sin miedo.

Y la empezó a tocar, pero como que el elástico de la trusa no dejaba que la berga se pudiera bien derecha como que me la empujaba hacia la panza y le digo:

–Deja mejor me la quito.

Y me la quite, me cuerdo de su carita de asombro y ya en eso como que se animó más a tocarla.
–Está calientita, tío.
–Sí, es normal que se caliente cuando se para, chaparrito.

Agarra mi verga y me dice:
–Tío, ¿tú tienes cabecita en tu pitote?
–Claro, ¿quieres que me la pele ?

Y bajé mi mano y que me la pelo frente a él, así, bien peladita…

–A su tío tienes tienes una cabezotota!

Y la dejé peladita para el y que me la vuelve agarrar y me dice
-A su mecha, tío, se te pela toda la cabeza de tu pitote!!!

En eso me subió el cuerito y me preguntó si lo podía bajar y le dije que sí .

Y ahí empezó el jueguito de bajarle la capuchita a mi pene y subirla, ese jueguito qué tanto les gusta a los niños y a nosotros ni se diga.

— Woo, mira tío como se baja el cuerito…
Y me subía y bajaba el prepucio con mucho cuidado y lentamente, prestando atención cuando se bajaba el cuerito y quedaba al descubierto mi cabeza.

Lo jugó así un ratito y me dice:
–Tío,los pelitos por que salen ?

–Mira chaparrito, cuando uno crece comienzan a salir pelitos

—Jijijiji se sienten como cosquillas los pelitos, tío…

Y yo bien clavado viendo como exploraba mi verga y en eso se acercó y me di cuenta que la quería como que olfatear, y yo pues lo dejé oler y como que hizo la carita rara, seguramente por el olor diferente a la del primo Toñito.

Ya en eso se me hizo raro y le digo:
–Qué pasó? Y esas caritas ?

-Mmmmm, es que huele chistoso jijiji

–Ah, pues si por que la cabecita como que huele rarillo

Pero el seguía ahí huele y huele.

Y en eso me dice:

–Tío, te cuento algo?

–Qué e cosa, chaparrín ? Dime…

— Es que mi primo Toño la tiene como la tuya pero más chiquita Y delgadita, y sin pelitos, jijijiji…

–Ah, si?

–Sí, tío…
–Bueno, y tú cómo sabes que la tiene así ?
–Es que yo se la he visto tío…
Y yo haciendome pendejo le dije:
— Bueno, pero pélala como hace ratos es que como que se siente bonito
Y no ocupe ni decírselo de nuevo y de nuevo lo vi ahí pelando suavecito la cabecita, bien rico.
–Mmmmh! qué bonito se siente, sigue…
–Tío, ¿te enseño un truco?
–Qué truco chaparro?
–Pero no le digas a nadie…
–Prometo que no le digo a nadie.
–¿Quieres sentir como
cosquillitas?
–¿Cosquillitas ?
–Sí tío, cosquillitas aquí, en la cabeza de tu pitote…
–Ah, caray, ¿y eso cómo ?
–Es que Toño dice que si lo pones en la boca se siente rico, como cosquillitas, tío…¿Te lo hago?
–¿Cómo que Toñito dice, a ver?
— Sí tio, pero no le digas…
Y yo como enojado le digo:
–Mmmm… pinches chamacos traviesos, a ver… ¿cómo es eso?
–Mmmm es que el tuyo está gordo, tio, así, mira –y que abre la boquita como pudo y se mete la cabeza
Yo feliz, a toda madre, y el ahí chupando suavecito, en eso se la saca de la boca y como que se saboreaba
–Mmmm, si pude, tío, ¿le gustó tío?
Y yo con cara de pendejo le digo:
–Siiiii! que rico truquito!
— verdad que sí, tío?

Y lo vuelve hacer y en eso se la saco de la boca y andaba como que lamiéndose los labios y me dice:
–Mmmm, está salada
–Salada? Por que será ?
–Si mmmmh, como saladita
–No creo…
–A ver, espera, espera…–y en eso se la mete de nuevo a la boca.
–Mmmmh, si tío, está como saladita

La neta me estaba calentando y le digo:
–Bueno, ahora sí a dormir, chaparro, ya es muy tarde…

Y que me pongo la trusa de nuevo, pues yo sólo quería ver hasta donde llegaba él.
Nos dormimos y en la mañana siento su manita como a las 9 de la mañana, siento que me la saca por un ladito de la trusa y me la vuelve a pelar y con su lengüita la probaba.
Pasaron como 10 minutos y tocaron la puerta de mi casa

Como que el se asustó y soltó mi verga. Me levante ví que mi verga la tenía salida por un lado de la pierna y le digo:
–Ay, Gabo…¿Estabas jugando con ella, verdad ?

Pero él lo negaba y me miraba asustado creyendo que me había enojado. Me puse un short y fui a la puerta. Era mi compa que me estaba invitando a jugar un partido a las 11 del día, cuando máscalor hace. Me convenció y me llevé al sobrinito, terminamos cerca de la una de la tarde de jugar y fuimos por unas cervezas que nos pusimos a beber en mi casa. Cerca de las 4 llegó su esposa por él y yo me recosté un rato en el sillón, me quité el uniforme y me quedé en truza para refrescarme un poco.
–Tio…¿se va a bañar? Me puedo bañar con usted? Me preguntó mi sobrino.
–Sí, chaparrito, vamos…
Y al llegar al baño me quité la truza.
–A su mecha, tío! sí tienes colgados tus huevotes!
— Pues sí, porque hace calor…¿ la quieres tocar ?

¡Y que lo hace! Al sentir sus manitas, mi verga reaccionó, se me paro y él me la peló con sus manitas para ver mi cabezota. La olió un poco y me dijo que ahora sí me olía fuerte mi cabezota.

–Oye chaparro vamos a bañarnos porque siento que me pica la cabecilla.
Nos bañamos y salimos envueltos en una toalla cada uno, me recosté en la cama y me abrí de piernas.

–Tio, ¿Te sigue picando tu cabeza?
–Mmmmh… si chaparrito quién sabe que tengo…¿Oye y si le haces como ayer en la noche para ver si se me quita?
–¿El truco? Sí, tío..
Y que comienza a mamarme la pura cabecita…
–Ándale, así, que me pica…Chaparrín, fíjate que me la he rascado con los dedos y no se me quita la comezón pero con ese truquito tan rico que haces como que me da alivio.
–¿Quieres que te rasque más con mi boquita ?
–Sí mijo por favor sigue…

Y él más se aplicó a mamarme la cabecita. Y como a los dos minutos me dijo que sabíasaladita otra vez.
—Mmmmh, ¿pues qué será ?
–No sé, tío…
Y se la saca de la boca y se le queda viendo…Y en eso me sale una gota de transparente presemen.
–Tío , tío, mira!!
–Qué cosa ?
–Mira!!!
–Sobrino ¿que es eso?
Y que lo agarra con los deditos y me dice:
–No sé, tío, parece como babita…
–A ver ? Mmmmh…qué raro!
¿No será que eso es lo que sabe salado?
–Yo creo que sí, tío…
–A ver, ráscalo a ver si es eso
Agarré y me la pelé mi verga y al hacerlo…¡salió un gota bien cargada!
–Wooo, tío!!!
–Ya sé que pasa, mi pito te está dado como tipo caramelito, es su forma de agradecerte por la rascada tan rica qué le estás dando.
–¿Verdad que son regalitos para mi sobrino, pitote ?
Le hablé, según yo, a mi pene.Y moví mi verga solita como tipo haciendo sí…
–Wooo, tío!!!

Me tendí en la cama y le dije:

–Sobrino, creo ya es tu amigo este cabrón pitote, a ver ráscalo de nuevo con tu boquita.

Y ya más confiado lo hizo y me dice:
–Mmmmh sabe a palomitas, tío.
–Mira te este recompensando, síguele…
Y siguió mamándomelo bien tranquilito, Yo la verdad me dejé llevar y lo disfruté. Era en verdad increíble ver cómo se metía lo que podía de mi verga en su boquita para chuparla. Se aferró bien rico mamado mi cabecita, estaba hasta rojito de sus cachetes.
Tenía como diez minutos haciéndolo cuando le dije:
— ¡¡!Chaparrito que bonita amistad entre tú y mi pitote!!!
Con esas palabras él se motivaba y más se esforzaba por mamarme mi pene. En eso, sentí que mi eyaculación estaba muy próxima ya. Dudé entre correrme o no en su boquita, pues siempre son abundantes mis deslechadas.

–Chaparrito creo mi pito te quiere dar un gran premio…
–¿Cómo tío?…
–Sí, yo creo que te dará más de ese caramelito por que siento que algo va salir.
–¿Y qué será, tío?
–No sé, esto es nuevo, nunca lo había sentido… ¡¡¡Chaparrito, me pica mucho, no pares, por favor!!!
Y él siguió mamando mi cabecita…
–¡Ay, ayyyy…siento que ya no me pica! Y de lo rico que sentía, gruñí yo como oso.

Empezó a salir la leche y pues los dos primeros borbotones sí se los tragó, el tercero y los otros ya no porque se quitó y curioso y asustado vió como salía la leche de la punta de mi verga. De pronto, empezó a toser y vomitar.
Y yo le pregunté…¿Qué es eso ?
–No sé, tío, pero sabe bien feo, no me gustó.
Y lo llevé al baño, para que se lavara la boca y yo lavarme muy bien mi verga.
Vimos tv un rato, desnudos ambos cenamos algo ligero y nos acostamos a dormir. No fue fácil, pero como a la sexta vez que me lo mamó ya pudo pasarse todo mi semen y disfrutarlo. Se volvió adicto a él, hasta que lo ayudé a descubrir un nuevo juego…
C O N T I N U A R Á…