Con mi vecino de 60 años II

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Al siguiente amaneci, con dolor en la quijada y una moletia en el culo, sentía que todavía no regresaba mi ano a su tamaño normal y cuando apretaba el culo sentía un poco de dolor, y me puse a pensar si regresaría la proxima semana con don Paco. En los siguientes días se me quito la molestía, y decidí ir otra vez con don Paco, haber que le invento a mi mamá para poder ír.
Oye vi a don Paco, y me pregunto que si ibas a ir a cenar otra vez, que se la había pasado bien contigo y que te enseñaría otras fotos.
Me puse un poco nervioso.
Entonces vas a ír a cenar con él.
Si a ti no te molesta.
Lo pense esos días un poco, por que el malestar en mí culo si tardo como dos días en que se me quitara, pero a la vez me excitaba meterme y gozar más esa verga tan ancha, llego el día esperado.
Mamá, ahora vengo voy con don Paco, llegó un poco tarde.
Bueno no des mucha lata.

Todavía en el camino lo iba pensando, pero me gano la calentura, llegue a su casa y salio abrirme.
Hola como estas, bienes preparado para otra sesión de masajes, y se empezó a reir.
No se, es que tuve molestias como por dos días y no se si quiero repetirlo.
No te preocupes, compre unos juguetes para tí.
De que se trata, digame por favor, me gano la curiosidad.
Si pasas para que te de otro masaje, te los enseño.
Lo pensé un momento y dije que puedo perder, bueno entremos.
Don Paco cerro la puerta, vamos al cuarto me dijo.

Al entrar al cuarto me fije que había abierto las ventanas y no olia tanto a humedad, y estaba más fresco y había mucho más luz y aparte prendió la luz, en la cómoda había acomodado un rollo de papel de baño, varias toallas pequeñas y había aceite de bebé, crema para las manos, también había un estuche de madera como de 50 cm. x 70 cm.
Que es todo esto don Paco señalando la cómoda.
Es una pequeña sorpresa, ya veras de que se trata.
Me quito el pantalón y la ropa interior, le pregunte.
Si por favor.

En ese momento me dio un poco de temor, de lo que podría ocurrir, pero ni modo ya estaba ahí, y me dijo mira lo que conseguí, agarro el estuche y lo puso en la cama, yo agarre y me senté en la cama.
Que es don Paco.
Pues ábrelo para que veas su contenido, y me dio una llave pequeña.
La agarre y abrí el estuche, me sorprendió el contenido, tenía varios dildos de diferentes tamaños, yo le dije que es esto.
Unos juguetitos para tu culito.
No eran como los de ahorra, más bien parecían barras de silicón, había desde muy delgados como de 3 cm. hasta como de 10 cm., y tenía unos largos y otros más cortos.
Son de usted don Paco.

No me los presto un amigo, el de la peluquería del mercado, pero si te gustan le encargo unos para que solo juguemos tu y yo.
Pero no le dijo al de la peluquería, con quien iba a utilizarlos verdad, me dio un poco de temor, de que alguien se enterara.
No como crees, no te preocupes esto solo queda entre nosotros.
Seguía con un poco de miedo, pero si me excitó ver la variedad de tamaños.
Entonces, ¿empezamos a jugar o qué?.
Pero con cuidado don Paco, no quiero quedar como la otra vez Ok.
No te preocupes bebé, vamos a ir poco a poco, acuéstate boca abajo.

Me tire de panza, él se levanto y recogía la caja para ponerla en la cómoda, se hinco al final de la cama y me jalo de los pies para acomodarme en la orilla de la cama y que él quedara de frente a mi culo, me dio dos lengüetazos y con dos de sus dedos, me empezó a dar masaje en círculos en mí ano, me lengüeteaba y trato de meter su dedo de en medio, yo soló me calme y deje que don Paco me llevara al placer.

Al intentar meter su tercer dedo en mí, necesito el aceite de bebé, se paro y lo agarro de la cómoda y se sentó a un lado mío, se echo una buena porción en toda la mano y en mi culo, y trato de meterme los tres dedos, yo seguía todavía sin poderme concentrar en sentir placer, seguía pensando en los tamaños de los juguetes.
Relájate no te va a pasar nada, cuando tú ya no quieras me dices y paramos.

Esta bien, él agarro otra vez el aceite y me hecho en las nalgas y me empezó a dar un masaje por mi culo y mis piernas, esto ayudo a que me relajara, intento meterme 3 dedos y logro meterlos hasta la mitad, yo sentía como cedía poco a poco mi esfínter, pero no había dolor, dejo de meterme sus dedos y fue por un dildo que tenía como 5 cm. de diámetro y 13 cm. de largo, lo lleno de aceite y lo puso en la entrada de mi culo y empezó a empujarlo, al principio apreté mi esfínter, para no dejarlo pasar, sentía rico como me picaba mi ano con la cabeza del dildo, después de un rato lo deje pasar y cuando entro en mi gemí hummm, y empezó el mete y saca, después de como 5 min. en lo cual me lo metía todo y casi lo sacaba todo, me la pase gimiendo.

De repente me lo saco todo, y me gire para ver que pasaba, puso una toalla en la cama y lo puso ahí, agarro otro dildo más grande como de 6 cm. x 15 cm..
Seguimos con este otro y me lo enseño.
Bueno, pero lento.
Vi como lo llenaba de aceite, y lo colocaba en la entrada de mi culo y me acomode para esas sensaciones, me relaje por que si no me iba a doler, al inicio no me quería entrar, me abrió las piernas para facilitar la entrada del dildo, y empezó a entrar.

Humm, humm, lento, lento, le decía, apreté el cobertor por que, me empezó a dar contracciones en el culo, y se sentía fantástico, llego hasta la mitad y me la saco toda, con las contracciones que tenía, sentía que me andaba de cagar, por lo tanto apretaba para que no me saliera nada, y lo volvio a meter, y empecé a gemir otra vez, hummm, hummm, que rico don Paco hágalo más rápido por favor, hummm, hummm, llego un momento que no entraba ya más el dildo.
Relájate, por que nos faltan mas juguetitos.
Después de como otros 5 min., me lo saco otra vez, al sacarlo me salio como un liquido espeso, como si fuera baba no lo pude evitar, don Paco agarro el rollo del papel, tomo bastante y me limpio, y tomo otro dildo más grande.
Seguimos.
Si por favor, rápido.

Este tenía, como 7 cm. x 20 cm., lo lleno de aceite y me lo empezó a meter, aunque solo era un cm. más ancho, si sentí la diferencia, utilice la misma técnica de pujar y luego entraba un poco, cuando acabo de metérmelo me sentía en las nubes, era una sensación extraña, me sentía lleno y mi culo se contraía, cuando empecé acostumbrarme al tamaño, le dije.
Ya don paco, puede empezar con el movimiento.
Ok, bebé, te ves muy rico así empalado.
Yo no sabía en ese momento que me decía yo solo estaba gozando con esos juguetes, después de como 10 min., me lo empezó a meter más rápido, me calentó pero si sentí un poco de molestia.
Más lento don Paco que me duele.
Discúlpame es que me caliento mucho, al ver como entra este juguete en tí. Me puso en sus piernas, saco el juguete y agarro otro que medía como 9 cm. x 20 cm., lo lleno de aceite y lo intento meter a como diera lugar.
Con calma don Paco, ahí me empecé a poner un poco nervioso.
Relájate más bebé.

Si don Paco, le dije, y me quede hora como salgo de aquí.
Te estas portando mal bebé, necesitas un correctivo, en eso me dio una nalgada, y me despertó de mí trance, sentí como recorría un ardor de mi nalga como una onda en todo mí cuerpo, puso el juguete a un lado y me empezó a meter 4 de sus dedos gordos, yo se los apreté con mi culo, y en eso me dio otra nalgada, sentía como punzaba donde me había pegado y un calor agradable, me levanto el culo con un brazo y me empezó a meter más duros sus 4 dedos, me bajo, a sus piernas otra vez y me dio otra dos nalgadas gemí un poco del dolor y de la sensación que estaba sintiendo, agarro otra vez el juguete, lo lleno de aceite otra vez y me dio otra nalgada y en eso entro el juguete, sentí como me rompió el culo, pero como me seguía nalgueando, era placentero ese dolor, esto hizo que me viniera y eyaculara en sus piernas, me saco el juguete y me hinco en el suelo y me puso a mamarle su verga, me agarro de los cabellos y me empezó a cogerme la boca yo empecé a lloriquear un poco, y por fin se vino, me la dejo toda adentro y me tuve que tragar todo su semen, casi me ahogaba no era tanto como el de la semana pasada, pero si era mucho, me soltó los cabellos y se dejo caer en la cama, yo me quede arrodillado en el suelo, mientras que asimilaba lo que me había pasado.
Me dolía todo, la boca, las nalgas y mi culo, me metí a bañar y note que me salía sangre me espante, pero note que solo era poca sangre, acabe de bañarme y salí a ponerme la ropa.
Don Paco me empezó a decir, perdóname es que me excite mucho y no me pude controlar, perdóname otra vez.

Yo solo lo mire, no sabía cuales eran mis sensaciones, me sentí utilizado, pero también en el fondo había disfrutado un poco con ese salvajismo.
No va a volver a ocurrir, te lo prometo, de verdad discúlpame.
No, no va a volver ocurrir, por que no pienso regresar otra vez.
Bueno entiendo, pero no le vayas a decir a tus papás nada, por favor, te lo suplico.
Acabe de vestirme y me encamine a la puerta, sentía dolor en mi culo y me obligo a ir despacio. Salí de la casa y me fuí a la mia, lo bueno fue que no me encontré a nadie en la calle, entre a mi casa, salude a todos y dije buenas noches, camine como si no me pasara nada, y casi chillaba del dolor, me metí a la cama y me quede dormido.