Con Mi Vecino Pedro, Y yo cuando tenía 11años (parte 1).

*INTRODUCCIÓN
HISTORIA REAL*

Mi nombre: Ariel.
Edad: 19 ( actualmente)
Mi físico: mido 1,79 ( ni tan grande, no tan pequeño) color de piel soy canela, soy muy obsesionado en cuidarme la piel de todo mi cuerpo. hoy en dia me sigo cuidando. Hago mis rutinas en el gym, y lo que más entreno son nalgas y piernas, y cadera.
Estudio: enfermería.

Pero no vengo a contar de mis cosas actuales, sino de mi niñez de mi infancia de cómo era muy adicto a masturbarme con tan sólo viendo mi culo(sea por un espejo o foto), y cómo me cogió mi vecino Juan al que me enamoré perdidamente de él.

A los 11 años de edad, tenía unas piernas bien fornidas y un culo paradito y muy grande ( se debió por que también jugaba fútbol, eso contribuyó que mi cuerpo quedé más espectacular con tan pequeña edad), en mi barrio me decía mis amigos: culo de pato-, por la forma de cómo caminaba y cómo movia mi culo grande.

*ES UN PECADO DE TENER UN CULAZO*.

Siempre que caminaba por la calle sentía cómo me quedaban viendo mi culo, los hombres y los chicos mayores, o también cuando viajaba en bus siempre me arrimaban los señores sus pene en mi nalgas, esa situación me ponía algo nervios inclusive me avergonzaba, por qué creía que algunos pasajero había visto esas cosas que me hacía esos señores en los buses que he viajado, por eso no decia nada y solamente baja la mirada, y dejaba que ellos hagan eso, no decía nada, sólo por vergüenza.

Recibí algunos «piropos» de algunos hombres y de chicos, que me decían -«wow niño que culo tienes» O también, » ven bb para acá, mira que tengo para ese culazo» – (se agarraban la verga por encima de sus pantalón. No le importaba que era apenas un niño)-, en verdad eso no me importaba no le prestaba atención, ya era una costumbre eso, recibía «piropos» a diario, si me sentía raro por que si me gustaba, me gustaba ser el centro de atención, y más aún cuando volvía a la casa me recordaba todo eso que me decía en la calle y me desquitaba masturbandome, todo por culpa de mi culo.
Todo eso era el pan de cada día; tanto en la calle, en el barrio o en la escuela. Actuaba normal, como si fuera eso para mi muy naturalmente, en cierto punto, ya estaba familiarizado a todo esos «tratos» que me mencionaba «cariñosamente».

GAY MUCHO ORGULLO.

Primero que nada soy gay, desde que tengo memoria, siempre me ha gustado andar con cosas de niña; faldas, maquillajes, jugando con muñecas etc (salvo el futbol que si me encanta). Desdé la edad de los 9 o 10 años me besaba con mis amigos del cole y también del barrio, y si, era cómo una putita para ellos (que esa es otra historia) y no me avergüenzo de nada.

ERA UN NIÑO MUY PREZCOS.

Esas edades desdé temprano, ya vivía con las hormonas locadamente, yo cuándo me mastubaba, desdé muy pequeño( gracias, también que tuve amigos muchos más grande que yo, que me enseñarón más cosas en el mundo del porno y de la masturbación), siempre agarraba las revistas que mi mamá guardaba, dónde salía hombres musculoso con poca ropa, y también en ése tiempo había canales que pasan porno a la media noche, «NO existía Internet» cómo ahora.

Así era cuando uno quería masturbarse en esos tiempos, lo hacía con revistas o un canal a la hora exacta. Y así lo hacía yo, o también(lo que más me centraba hacer) me ponía en mi cama boca abajo y hacía cómo si estuviera estimulando mi penesito contra la cama ( por cierto tengo el pene muy pequeño que parece que tuviera un clítoris: jejeje) y así llegaba al orgamos.

Tambien unos de mi favoritos, tomaba un espejo largo que mi mami tenía en la sala, lo ponía de pie apoyado con el ropero, y me ponia en 4 desnudo para así poder ver mi culo ( abría mis nalgas para tratar de ver mi ano, pero erá casi imposible de hacerlo, por que tengo nalgas muy grande, y más con lo complicado que estaba en 4 intentado de abrir mis nalgas). Sólo me imaginaba que alguien me estuviese culiando en ésa posición. Todo eso se me cruzaba por mi cabeza, erá muy rico todo, siempre tenía que masturbarme. Ya era un reverendo adicto a eso.

Era normal para mi masturbarme todos los días. Cuándo me quedaba sólo en casa, y mi mamá se iba, juntos con mis hermanas, a la ciudad, yo aprovechaba ese día solito.

Vivíamos en un campo; a unos cuantos minutos lejos de la ciudad. Somos tres, yo soy el único hombresita
-jejeje-, mi hermana Gabriela que es la mayor, y ella sabía que me gustaba cosas de niñas y que también me gustaba los chicos: pero ella en ese tiempo nunca le dijo a mis padres sobre eso, y Diana que era la última.

Cuando me quedaba sólo, yo aprovechaba ésos momentos, y me ponía la ropa de mi mamá, los bikinis, unas bombacha, litermente me vestía de mujer, y a verme así vestida me generaba mucha excitación que terminaba tocandome mi penesito.

Siempre intenté introducirme cosas en mi ano, ya sea un desodorante, un pepino( de los pequeños) pero no podía, por que eso me dolía mucho, aún era virgen y cerradito lo tenía, y eso me hacía arder mi ano, que sólo opté por acariciar en la entra de mi ano con mis dedos, más nunca introducirlo.
Pero siempre fantasíaba que llegué ése día que alguien me coja, y que me coma mi culo y me lo terminé abriendo.

Si tenía amigos que querían tener sexo conmigo, pero no lo sé, no sentía que era de los tipos que debía dar ése privilegio, pero si me tocaban muchos mis nalgas, se masturbaban tocadome o viendo mi culo, pero nunca hicieron intruducirme sus vergas ni sus dedos. No los dejaba.
Cómo verán, era un niño que ya tenía noción del mundo del sexo, que obviamente por mi corta edad quería experimentar más cosas, de ir lejos en el sexo.

*EL RELATÓ*
Pd: perdonarán por la falta ortografícas.

Mi historia comienza así.
A la edad de 11 años.

Bueno, cómo le mencioné anteriormente, Vivíamos fuera de la ciudad, en un campo, sólo vivíamos (4) personas; mi mama, y mis 2 hermanas y por supuesto, yo. Mi papa no vivía con nosotros, por qué él tenía otro hogar con otra mujer.

Cómo todas las mañana mi mamá nos llevaba a la escuela, como ya era de costumbre a cada rato teníamos que viajar en bus tanto de ida y de venida, y eso significaba que todos los días era una gastadera de plata.

Por esa razón mi mamá hablaba con mi papá para ver si ya era hora de cambiarnos e irnos ha vivir a la ciudad, a veces no teníamos plata para viajar y perdíamos clases.

Todo eso le mencionaba a cada rato a mi papa, tanto fue el hostigamiento de mi mamá, que ya no sacará de ahí, hasta que mi papá por fin(con el poco amor que nos tenía) dijo -que iba a comenzar a buscar una departamento por la ciudad-, ( claro, él si le convenía, por qué así no gastaba mucha plata con nosotros)

Pasaron unos días, yo seguía con lo mío, me encerraba en mi cuarto y cómo de acostumbré me empezaba a masturbarme, llevaba el espejo de la sala, y encerrado en mi cuarto, me comenzaba a quitarme la ropa y me quedaba desnudo, y siempre ponía el espejo detrás mio para ver mi nalgas y trataba de ver también mi ano, y con eso me mastubaba.

Acariciaba mi ano dando círculos, y me los olía los dedos(ése sabor que tenía mi ano… ricooo) me lo llevaba a la boca, también el semen(que era agua de arroz) que salía de mi penesito lo tomaba con mis dedos y me lo llevaba a la boca, no tenía un sabor era raro, pero olía muy rico y eso me bastaba para limpiar mi dedos con mi boca.

Inclusive, siempre intente chupar mi propio pene, pero no pedía meterlo todo en mi boca, sólo llegaba un poquito a tocar la cabeza de mi penesito con mi lengua, ¡¡tengo un pene muy chico!!.

*Me coloqué boca arriba, elevando mis piernas al techo, y poniéndolas hasta mi cabeza para que así quede mi penesito frente a mí cara y así me masturbaba*

Ésa tardé me masturbe bien rico, hasta que me tiré mi propia leche en mi cara, quedé empapado, trataba de tragar lo más posible de mi leche que quedaba en mi rostro…

En eso llegan a tocar la puerta de mi cuarto, yo actúe tan rápido que escondí la sabana mancha, y me limpie mi rostro rápido, abrí la puerta y era mi hermana Diana, que me decía que mi papá estaba a fuera y que quería hablar con nosotros.

Le dije, que un ratito salgo, me comencé a vestirme muy rápido y a limpiar mi penesito de lo mojado que estaba, me fui al baño lavé mi cara y la boca con pasta de dientes, y salí a para la sala.

En eso veo a mi papá en la sala hablando con mi mamá.
Le estaba diciendo que ya había encontrado la casa, que quedaba por el centró de la ciudad. Yo y mis hermanas estábamos muy feliz de saber que ya nos íbamos a cambiar.

Papá: – bueno, ahora ya no tiene excusa de no ir a visitarla a su abuelita ( me abue que vivía a unos poco minutos donde íbamos a vivir nosotros)-.

Gabriela: -claro papi, así vamos ir a verla todo el rato-.

Mama: -dime, ¿dónde queda la casa? Y ¿cómo es?-

Papá: -queda por la avenida celeste flores, en toda la esquina de la avenida principal, no es muy grande, es planta alta.
Por cierto, a ahí vive la señora Carmen(la dueña De la casa) en la planta de abajo, y arriba vive él hijo en la terraza-, (erá Pedro, hijo de la vecina, que vive en la terraza y él estaba construyendo su mini-departamento ahí).

Esa idea no me gustó para nada, entre mi dije:» ¡¿cómo vamos a vivir ahí?!… o sea, no podemos hacer nada, por que si hacemos algo que no le guste la dueña nos va a joder, y de yapa vive su hijo arriba de nosotros». Así que no podía hacer nada malo.

Se me iba poco a poco la emoción, ibamos estar vigilado por la dueña y su hijo ¡¡eso no puede ser!!.

«Más que sea en el campo teníamos libertad», eso pensaba yo.

(Mi papá terminó de decirle toda esa cosas, y dijo que él iba atraer algunos chicos que conocía para que ayudará a cargar las cosas de la casa; trastos, muebles etc. )

Mama: -y cuándo nos cambiamos? Para ya tener todo arreglado.

Papá: no se si el viernes o el domingo, mañana recién voy a pagar a la señora Carmen, ella me dira para cuando y les avisaré.

*Mi papá se despidió*.

Y pasaron unos días hasta que mi papá nos dio la noticias. llamó a mi mamá que le decía que el domingo era el día para cambiarnos departamento…

Era un jueves, teníamos poco días para preparar las cosas para cuándo llegué el momento de cambiarnos. Así nos pusimos manos a la obra ese día, botamos las cosas que ya no servía, e hicimos una limpieza total.

Pasaron esos días, jueves, viernes y sábados ( todos esos días preparando para cambiarnos).
Llegó el domingo estábamos en la sala, mi mamá y mis hermanas(ya todo estaba empacado, listo para irnos) y estábamos recordando todo lo que habíamos pasado en ésa casa, haciendo un rebember de todo las cosas, en verdad si me puse un poquito triste, por que íbamos a dejar ésa casa, dónde se vivió de todo, pero ya era hora un nuevo comienzo, y se iba a dar.

* un domingo en la noche*.

Estaba en mi cuarto apuntó de masturbarme cómo de costumbre, viendo revista, en éso de la nada mi hermana pega un grito… -¡¡Ariel mi papá ya llegó!!-

Salgo rápidamente de mi cuarto, voy a la sala, y me asomó, y si, era mi papá que había llegado con un camión y con los chicos que nos iba ayudar con el cambió de casa.

El camión se paró frente de la casa, al instante los chicos se bajaron(erá 4, no me puedo acordar de sus nombres, así que le diré A,B,C,D) y unos de ellos entro a la casa y comenzó a sacar las cosas; muebles, comedor etc, a dirigirlo al camión de embarque.

Comenzaban atrepar las cosas de a poco, mi papa estaba en un lado ayudando también y hablando con el señor que era el dueño del camión, mi mamá estaba en lo suyo, trepando las cosas leves, y mis hermanas por igual.

Yo estaba en mi cuarto sacando mis ropas y llevandolo hacia la sala, para que no se le haga difícil la tarea a los chicos, de ir a mi cuarto hacer todo ese recorrido hacia el camión, así que mejor era poner mis pertenencias en sala, y así ahorraríamos tiempo para terminar rápido.

Estaba ayudando a mi mamá con unas lámparas que estaban en su cuarto para llevarlo a la sala.

Chico A: -¿le puedo ayudar en algo seño?-.

Mamá: -no mijito,  por ahora no, pero yo le avisó-.

Me  quedé observando al chico A, es alto y él es el más guapo de los otros tres. No dude en mencionarle que si me podía ayudar a sacar una maleta que tenía en mi cuarto, el amablemente accedió.
Nos dirigíamos a mi cuarto, y el se quedó detrás mío, despejando el camino (había mucha basura en el pasillo) mientras que yo entraba a mi cuarto, buscando la maleta ya que ahí iba a poner mis cuadernos y unas cuantas ropas más.  busca que busca, hasta que la encontré la maleta; estaba metido por de bajó de la cama.

Cómo todo normal y sin malicia alguna, me arrodille y me coloqué en posicion de perrito pero sin ninguna mala intención lo hacía, y ahí  estaba yo, tranquilamente  guardando  mi ropa en la maleta, en eso me percató de reojo veo al chico A, que entraba lentamente a mi cuarto, él se detuvo a lado de mi cama, no me dijo nada, yo estaba haciendo mis cosas, cuándo lo veo… y él estaba viendo mi culo, me sentía algo nervioso pero también me comenzaba excitar, por que era algo que él sólo podía ver, más no tocarme, y eso me generó cierta morbosidad de la situación.
Yo no decía nada, sólo lo veía de reojo, pero tampoco podia creer lo que estaba viendo… ¡¡se estaba sobado su verga por encima del pantalón!!,

-ayy que ricoo-. Mi mente cochina.

Esa situación me puso algo incómodo( soy una persona muy tímida cuando estoy con personas nuevas o extrañas, y no soy de agarrar confianza rápido) pero también me daba mucho morbo, por que era alguien nuevo, y no era un conocido que estaba ahí conmigo y peor aún con unos deseos que se le cruzaba por la mente a ése chico.

Fue mucha la tención que tenía en ese rato. Yo aún seguía guardado las últimas ropa en la maleta, pero el chico A seguía en lo suyo, me estaba viendo mi culo, y no desimulaba para nada,  lo hacía sin importarle si lo miraba o no. Yo no sabía que hacer en ese momento pero me daba mucha excitación lo que estaba pasando en ese ratito,  así que por mi mente se me pasó una idea tan morbosa, consistía: tenía que bajar todo mi pecho hasta el piso, y meter las manos por de bajó de la cama(cómo si estuviera buscando algo) y en esa rato tenía que empinar hasta dónde podía mi culo para que el me viera toda mis nalga, y así tenga una vista completa de mi culazo.

Y, así lo hice; me puse de perrito y empinaba mucho mi culo para que él pudiera ver  lo suficiente.

-de está manera le pagaba por su ayuda jajaja-.

Terminaba de excibirme mi culo a él, me paré con mi maleta, me di la vuelta y le dije: «ah, haz estado aquí, no me di cuenta. Mira ya termine de guarda mis cosa» (aún que yo sabía que él estaba ahí hace rato, sólo me hacia la loca para que no piense mal de mi).

El me ayudó con mi maleta y mis cosas a llevarlo al camión, note que se acomodaba mucho su verga, lo tenía parado por que pude notar su bulto en la pantaloneta..!!lo tenía muy abultado!!, no dejaba de mirar todo eso que se le notaba, el trataba de esconder con la maleta que se la colocaba por delante, pero le era imposible, yo dije entre mi: mira lo que le provoque jejej… Trate de simular esa situación.

Ya habían trepando todo al camión, sólo faltaban estás pequeñas cosas mías.
Me dirigí al auto dónde estaba mis padres y mis hermanas, estaba hablando en darle algo (plata) a los chicos y al señor de camión.
Estaba ahí escuchando a mi papá, de que si falta otras cosas más ect.

Cuándo volteó a ver a los chicos (estaba en un esquina refrescandose) y me di cuenta  que me quedaban viendo, uno se reía y el otro se tomaba su verga se lo sobaba, por supuesto que nadie notaba eso, solo yo, y ellos me miraban con ojos de excitación, entonces me di cuanta que el chico A le estaba contado lo que había pasado en mi cuarto con conmigo.

Eso me puso muy mal, me sentí apenado y me entró una vergüenza muy grande… «ya vali» estaba rojo de la vergüenza que sentía, casi ya ni hablaba, es cómo si alguien me hubiese tirado agua fría, estaba muy nervioso, y también preocupado… me sentía de lo peor en ése instante.

Yo me lamentaba mucho de a ver hecho éso, no quería ni verlos a ellos, sólo quería montarme en el auto y ya salir de ahí rápido. Pero el genio de mi papá me salía diciendo con otra cosa, peor…

Papa; Ariel, escucha, vas a ir en el camión tendrás que vegilar que nadie de esos chicos se pueda llevar algo…

Yo: pero papa!! No quiero ir ahí, Mandala Gabriela

Papa: chucha que no ves que ella es mujer?! Y van a ir puro hombres, así que te vas para allá.

No sabía que hacer, estaba recontra que avergonzado, el temor que no quería pasar, estaba apuntó de ocurrir ¡viajar con ellos!.

Mi papá había puesto en marcha el auto juntó con mi mamá y mis hermanas.

También los chicos empezaron a embarcarse al camión, pero lo que me di cuenta es que… ¡nadie iba con el conductor en la cabina!
Entonces se me pasó por la cabeza irme con conductor, así, para no viajar con ellos.
Pero me acordé lo que mi papá me había dicho; pensaba que si me iba a ir con el conductor ellos podían robar las cosas que estaban en el camión, y después mi papá contra a mi era un problemon, así que mejor decidí irme con los chicos para evitar cualquier cosa, así pasaría la mayor vergüenza de mi vida.
Entonces rechace esa idea.

Ellos me ayudaron a subir al camión, yo estaba muy callado y miraba al suelo, ni siquiera volteaba a verlos, me puse en frente de todo ellos, mirando sólo al suelo, tenía mucha vergüenza.
Arranco el camión y nos fuimos, yo quería llegar rápido, y eso que tenia que esperar unos 38 minutos para llegar a la ciudad.

Íbamos en el camión y la brisa nos pegaba fuerte.
yo estaba en lo mío haciéndome el loco, ignorandolos, mientras que ellos estaban riéndose y haciéndose burla entre ellos.
Entonces una me comenzo hablar…

el chico D: oye, que te ocurre? estás callado, Tranquilo que aquí somos buena personas ( lo decía con un tono de sarcástico).

*y así comenzó la charlas conmigo*.

Chico E: Y cuantos tiempo llevan viviendo por acá, lejos de la ciudad?

Yo (tímido): ya algúnos años.

Chico E: eso suena muchos años

Yo: pues si.

Chico E: dime cuantos años tienes, claro si lo puedo saber?

Yo: si claro, tengo 11años.

Algo sorprendido dijo Chico E: 12 años, con ese cuerpo!! Que comes niño!

Chico B: ya no lo molestes, no ves que no quiere hablarte (todos se rieron).

Chico E: no lo estoy molestando, sólo estoy sorprendido de ver aún niño con cuerpo de una mujer… no quise decirte eso, pero créeme que si es cierto.

chico A: basta, ya no le digas eso, es un pequeño, tranquilizate. No pares Bola!

Yo: no, no me molesta para nada jejej.

Chico A: en serio? Pues si tienes razón, tienes un cuerpo que no parece de un niño.

Yo (entrando enconfienza con ellos): si lo se, ya  me lo ha dicho, en el barrio me dice culo de pato. No es nuevo para mi eso jajaja.

Chica A: si tiene razón tienes un culo bonito (la situación me estaba entrado mucha calor pero mucho nervio y muchas ganas, no se que me estaba pasando, me latía el corazón muy rápido)
Si podemos verlo? Si niñito?

*Debo admitir que en sorprendió esa pregunta*

Yo: no se, me da un poco de vergüenza…

Chico A: vamos sólo una media vuelta y ya.
(todos lo apoyaban para que yo me de la vuelta)

Yo: vale, lo haré, pero rápido jejeje.

Me coloqué frente a ellos agarrando el fierro de la cama para no caerme.  Medi la vuelta, dando mi espalda a ellos, para que así puedan verme mi culo los chicos.
Así me mantuve dando mis nalgas a la vista para ellos,  por unos segundos y me di la vuelta, ( pero créame esa situación me puso a entrar en mucha confianza con los chicos, si sentía un poco de nervios, pero más era lo que sentía; y era mucho morbo que me generaba, me sentía una mujercita complaciendo a esos chicos y eso me encantaba) y unos de ellos me dijo que tenía un bonito culo. Pero ellos  querían más, entonces…

Chico A: oye no puedes… tan sólo, un poquito bajarte la pantaloneta? Va ser rápido, nadie le va a decir a tus padres, hazlo porfavor

( todos, otra vez apoyando la idea de él)

Chico E: si hazlo nene, sólo va hacer un
ratito de ahí te dejamos en paz.

*Mientras los veía a ellos  y su bultos comenzaba a notarse*

Estaba elevado de morbo me latía el corazón a mil, por qué nunca lo había hecho con a unos chicos que apenas los estaba conociéndo, si lo hacía  con mis amigos, pero no con desconocidos.

Yo: ya, está bien, si lo haré, pero va hacer rápido.

Otra vez me di la vuelta, le di la espalda, preocure que nadie de la cabina del conductor me viera. Incliné mis rodillas hacia delante un poco, y llevando mis manos hacia atras a mi pantaloneta, me comenzaba abajar lentamente(me era difícil por que lo tenía muy ajustado). Con leve dificultad
me lo baje el pantalo hasta la rodilla, dejando ver mi calzoncillo todo sudado y pegado a mi raja de la nalgas.

Mire hacia atrás, y todos me miraban atónitos, inclusive algunos de  ellos se estaban masturbando me decían: «que culo rico bb, mira esa calzoncito cómo se le pega en toda esa rajota de su culo».
Esa situación sencillamente me excito un montón, entre mi -deseaba que me follen todos-, me encontraba perdidamente excitado, y en mi mente me imaginaba: yo, arrodillado frente de ellos chupando a cada uno sus vergas. Me empinaba hasta dónde pude con mi culo y se pareba mis piernas un poco para que ellos lo pueda ver mejor (todito eso lo aprendí en resvistas, porno y canales)

Pasaron unos minutos..

Yo: esta bien, ya me voy a subir la pantaloneta.

Todos dijeron: espera un poco más, no te voltees quédate ahí un ratito más. ( me lo pidieron con tanta ternura que accedí quedarme así por unos minutos más).

Escuchaba unos frenéticos pajasos que se daban, algunos comenzaba a gemir.

Y en eso me di la vuelta y los veo a todos masturbandose, 3, tenía su vergas a fuera y el otro tocándose por encima de su pantaloneta.

Esa imagen se me quedó grabada en mi mente, ya que erá la primera vez que veía penes tan grande y de chicos ya mayores que mi; de ver vergas de algunos de mis amigos y de revistas, a ver unos cuantas vergas de desconocidos en directo, quedé asombrado de todo ese espectáculo.

Chico A: perdón por lo que viste, en serio estas bien rico, y tienes unas ricas nalgas bb, que cuálquiera se queda sorprendido.

( eso me puso rojito)

Yo: no tranquilos, no pasa nada, pero no le diga a mi papá porfavor.

Ellos: no tranquilos, nadie de aquí le va a contar de eso, nene.

Ya estábamos a punto de llegar a la ciudad, ya se veía las luces de las carreteras de la calle principal… En eso me subo mi pantaloneta y me apartado de todos ellos, me fui a una lado del camión, al ratito llegó conmigo el chico A…

Chico A: oye bb, antes de irme, si puedo tocar tus nalguitas?

Yo: si, pero que no, nos vean tus amigos, por q después ellos va a pedir los mismo.

Chico A: lo entiendo. Mira vamos ahí, nadie nos verá, lo hago rápido.

Yo: ok, ahi está bien.

*me llevo al otro extremo del camión, donde estaban los roperos, las cajoneras, los muebles etc, tapa la visibilidad de los demás chicos*.

Entonces el me comenzó a tocar mi culo con mi pantaloneta puesta, con toda esa mano caliente.
Cuándo me tocó aún con la tela sentí mis nalgas con un calor muy rico, sentía esa manos calientes recorriendo… Yo cerré mis ojos, del placer que estaba sintiendo.
Me las apretaba ¡QUE RICOOO!

El me decía: lo sientes? Te gusta mucho, dime bb??? ( me hablaba muy morbosamente)

Yo le dije: si me gusta mucho, es ricoo.

Hasta que el me comenzó a bajar la pantaloneta y mi calzoncillo, y me comenzó a sobar todo mis nalgas a descubierto, tenia mi calzoncillo y pantalon hasta los tobillo, dejando ver todo mi culo al aire…todoooo, lo sentía de maravilla.
Me las apretaba, me las manoseada, me los abría, me las sobaba… ay dios mío que rico sentir eso.

Hasta que empezó a introducir su dedos en mi anito yo le dije..

Yo: oye, oye no, nooo. Eso sí duele, soy virgen, no quiero eso porfavor eso arde horrible.

Chico A: cómo que te arde? Ya lo haz, haz intentado con otros??

Yo: no… bueno una vez hice eso, me metí mi dedo, y de ahí me ardía mucho mi ano, lloré por que me dolía, por eso no quiero que me metas el dedo por favor.

Chico A: bueno está bien, no lo haré, sólo lo voy a ver tu ano y a besarlo.. Si?

Yo: si, eso está bien. ( lo dije en estado de excitación grande)

Entonces yo le di la espalda a el con mis nalgas libres, él puso sus manos caliente, la acariciaba y la apretaba…
Yo, solamente cerraba los ojos y dejaba hacerme lo que el quiera conmigo.
Sentí sus labios en mis cachetes de mi culo comenzo darle besos por todo lados con un desesperó, me la besaba me la chupaba… ufff que rico se sentía mi culo que me lo estaban comiendo. Hasta que abrió mi nalgas así dejando ver todo mi ano a su disposición, yo entre mí decía – ya hazlo de una vez, comeme- ni pasó unos segundo que sentí su lengua en mi ano,  sentía que me trataba de meterlo su lengua hasta el fondo de mi ano, yo gemia en silencio, trataba de no hacer ruido.

Que estado de excitación que me encontraba, que me volteaba a verlo lo que él me hacía, tenía todo su cabeza clavada en mi culo… todo era rico, mi penesito me salía ése líquido pegajoso de lo excitado que estaba, quería que me folle en ese rató,  sentir su lengua jugando en mi ano fue glorioso.

En eso el camión se detuvo de un golpe, ya habíamos llegado a la casa nueva, y el chico rápidamente tuvo que subirme mi pantaloneta y salir tan rápido del lugar dónde nos encontrabamos. Y al instante se me fue la excitación, por que me asusté.

Tuve que ir al frente del camion, para que mi padre me viera que  yo estaba cuidado las cosas, ya que estaba  escondido con aquel chico.
Yo lo veía a él ( chico A) con la verga muy abultada que se le notaba en el pantalón, lo imaginaba, el estaba a punto de darme un orgasmo increíble, pero no se pudo.