Con permiso señora, vengo a ver a su marido
Un ligero cambio de planes al inicio de este encuentro le puso más morbo al asunto.
Cómo en muchas ocasiones comenté, no siempre en la primera mirada o encuentro se puede lograr algo, a veces se tiene que picar piedra para poder llegar a ser picado.
En una ocasión en fiesta de unos conocidos un 15 de septiembre, llegaron varios otros amigos que se trajeron a otros amigos, ya saben, bien entonados y todo. Uno de estos «colados» era un señor de unos 40… y tantos años, yo para esa época tenía 26 o 25 años, no estoy muy seguro.
La fiesta normal «noche mexicana», tipo 3 de la mañana se acabó el alcohol, todos decidíamos quien iba a ir a conseguir más, porque estábamos bastante alejados de lugares que vendieran… de todo rastro de civilización en general…
-Les falta cheve?
Me preguntó este señor que no me había hablado en todo el tiempo que estuvo ahí.
-Si, pero ahorita conseguimos
-Si me acompañas por más yo se las pago…
En ese momento y a pesar del alcohol, no me animé, en realidad me dio mucha pena su propuesta y ni sabía que contestar, pero, uno de los de la casa salió muy airoso con una enorme botella de whisky, así que no hubo necesidad de ir a comprar más (no se de cuantos litros era esa cosa).
Así quedó el asunto, me aleje un poco del señor y terminó el festejo.
Días después me agregó en FB y obvio lo reconocí, y ahora lo describo, era de mi estatura (1.77), blanco, cabello cano pero que algún día fue castaño, ojos color verde claro, gordito como buen mariachi que es y le pondremos Jorge.
Me invitaba a salir y me decía que a donde quisiera ir, que el pagaba, que le había caído muy bien y yo así de «wey, cruzamos 10 palabras…», sus intenciones eran obvias, pero, bueno, hasta que me mandó una nude, obvio era un señor como cualquier otro, pero su pene… uuuffff me encantó, blanco, huevos grandes que colgaban hermosamente, depiladito, un glande rosa y con forma de casco que invitaba a ser degustado, ahí fue donde le acepté la invitación, me invitó a un restaurante en otra ciudad, algo caro el lugar, por los dos terminó pagando 2000 pesos mx, para mi en esa época era aun una cuenta bastante grande porque no ganaba tanto, pero él por su trabajo tenía ingresos muy buenos. En esa primera ocasión no pasó a mayores, unos besos, caricias y listo, para la siguiente semana me dijo que su mujer se iba a ir a la capital CDMX y que podía ir a verlo y quedarme con él, porque teníamos todo el fin de semana para nosotros, me dijo que llegara tipo 5 de la tarde del viernes, yo siempre soy muy puntual, eso no lo sabía y quizás pensó que llegaría un poco después toqué a la puerta y me abre una mujer, no era la mujer más guapa, pero se veía que en su juventud si lo fue.
-Buenas tardes, dígame.
-Hola señora, disculpe, es la casa de Jorge?
Estaba mi cabeza a mil intentando inventar algo
-Si dígame, para qué lo necesita?
-Es que… voy a ver lo de un contrato para que toquen en un evento que tendré.
-Aaaah si, déjeme y le hablo
Salió y me vio, me saludó normalmente y yo inventándome un evento mientras su esposa e hijos se despedían y se iban.
-No mames!! me tuve que inventar eso
-Jajajajaja, no hay pedo, si se la creyó, vente mami, ahora si te quiero conmigo.
Así empezó el primer día, me llevó a su habitación y me desnudó, solo me dejó la tanga color rojo que llevaba, me decía que me veía divino, que le encantaba, que me iba a hacer de todo y besaba mi cuerpo completo, al besarme los pies se hincaba y eso era muy excitante, tener a ese hombre a mis pies.
Me llevó a la cama, levantó mis piernas, corrió a un lado mi tanga y empezó a darme un beso negro delicioso, muy baboso que duró como 15 minutos al cabo de los cuales se quitó la ropa, ahí estaba su pene, hermoso pene… quise lamerlo, pero me dijo que primero quería estar en mi interior, que se moría por sentir su pene dentro de mi y así lo hizo, su pene entró en mi 17 cm de pene hermoso penetrándome, primero piernas al hombro, luego de lado, luego en 4, luego el arriba con todo su peso sobre mi, terminamos nuevamente en piernas al hombro y así de frente lo vi cambiar su cara a una de placer total mientras se venía en mi interior, nos acostamos y me abrazó de cucharita, por su edad iba a tardar un rato en recuperar firmeza o eso me dijo, porque cuando volví del baño me estaba esperando junto a la puerta, no había pasado ni media hora, me recargó contra la pared, me besó y levanto para de esa manera volver a mi interior, su anterior semen depositado lubricaba mi interior y escurría hacia su escroto de dónde goteaba al piso, fueron otros 15 minutos intensos de penetración que concluyeron con una mordida de su parte en mi hombro que me excito muchísimo.
Cerca de las 8 de la noche me dijo que tenía hambre, que le preparara algo para cenar y como buen pasivo me levanté, me iba a vestir, pero me dijo que así, que igual no había nadie y ahí voy, con mi tanga roja bien mojada por el semen que aun salía de mi interior, le preparé su cena y comimos, ahí en la mesa donde comen sus hijos y su mujer me volvió a meter su pene, empinado contra la madera y cristal sus embestidas no bajaban la intensidad, salía totalmente de mi y volvía a entrar con fuerza, solo gemía y le pedía más.
A media noche, después de fuertes cojidas nos quedamos dormidos viendo la tele, como si fuera realmente su mujer, por la mañana desperté sintiéndolo de nuevo en mi interior y recibiendo una cuarta cojida. Yo quería quitarme la tanga que empezaba a oler raro, pero no me dejó, quería que me la dejara más tiempo, incluso cuando fui al baño para darme una ducha me dijo que me la quitara y después de bañarme me la pusiera de nuevo, quería que apestara a sus mecos, obvio le dije que ook, pero que si tenía que hacerme un lavado si no quería un accidente oloroso y pues tampoco me dejó, me dijo que el sabía bien donde la estaba metiendo y que eso era normal.
Entre la hora que despertamos y medio día de ese sábado me dio dos cojidas más, afortunadamente no lo manche pues fui muy bien en la mañana al baño.
A las 2 le marca su mujer, estábamos en la sala viendo la tele, abrazados, esto es lo que yo escuché, no pondré lo de ella porque sería solo imaginar lo que le decía.
-Bueno, si vieja, que bueno que llegaron bien, pero me hubieras marcado cuando llegaron, ahorita ya un día después ey, si, estoy comiendo bien… encargué una chuletas que estaban muy sabrosas (mientras me ponía en cuatro en su sillón y empezaba a penetrarme), no, las encargué de una fondita del centro, ora después te digo quienes son los que venden que no me acuerdo, si ahorita ya almorcé, unos huevitos con salchicha y un vasito de leche con mi café (se refería a las cojidas que me había dado y lo del café porque yo soy morenito).
Yo me cubría la boca para no gemir con sus metidas, la verdad el culo me empezaba a arder, pero ese pene… cielos!!
-Ey, pues me avisas cuando vayan ya de regreso, orale vieja, me saludas a mis suegros.
Colgó y ahora si solté mis gemidos a todo.
-Mira perrita, me haces engañar a mi señora con ese pinche culito
-Perdón papi
-Cuál perdón, tu nomás aguántala.
Mi culito recibió el tercer lechazo del día y de nuevo a hacerle la comida, sentía que apestaba a mecos secos, mi tanga empezaba a picarme, pero no quería defraudar a mi hombre de turno.
En el patio de su casa fue de nuevo, ya estaba oscureciendo y me tenía empinado en un camastro, cuando tocaron a la puerta, yo me asusté, pero él muy natural se puso una playera, boxer y salió a abrir, escuchaba voces y no me atreví a moverme de ahí hasta que las voces se notaba se acercaban…
-Ey, si, pásale, sin pedos
-Seguro?
Me asomé y vi a un chavito, no más de 18 años venir caminando con él en mi dirección. Me asusté porque por un momentó pensé que se le había olvidado que estaba yo ahí.
-Mira, te presento, esta es mi nueva nalguita, mi vieja cumplidora.
-Mucho gusto Emmanuel.
Yo todo rojo sentado en el camastro le di la mano y me presenté.
-Orale, aprovecha que lo trae bien guango, desde ayer le ando empujando las tripas.
Voltee a verlo y pues entendía de que iban sus palabras, no me negué, ahí bajó mi temor y de nuevo me puse cachondo.
-Pero quítale la tanga, porque no he dejado que se la quité la a de traer bien hedionda con mis mecos.
-A ver… (me voltee y abrí mis nalgas) no mames, ya hasta dura esta wey, jajajaja.
Me bajó la tanga y me puso de nuevo en cuatro en el camastro, se desnudó y empezó a meterlo.
-No mames!! anda ya bien guango, que rico, aparte le dejaste un chingo de mecos.
Un chavito me estaba cojiendo delante de mi hombre de turno con su consentimiento. Al ser más joven duró un poco menos, la inexperiencia, jajaja, pero sentí que me escurrían un chingo de mecos por las piernas, así me volvió a poner la tanga.
-Listo wey, mañana a ver si vengo antes de que llegue tu vieja para darle otros empujones.
-Si wey, sin pedo, con confianza.
-Quien era?
Le pregunté
-Es mi sobrino, también es mariachi
-Juras que me acabas de prestar con tu sobrino.
-Si, cuál es el pedo? es hijo de mi hermana, siempre a sido bien morbosote el wey, allá en la chamba es el que siempre me hace segunda, nunca se raja a nada, le entra parejo, ese wey si hasta a dejado que se la metan, también lo he visto chupar pitos de weyes.
-En serio?
-Simon, te gustó?
-Si, pero no aguantó tanto como tu.
-Pues si, aun esta pollito, cojelon… pero le falta experiencia.
Esa noche le preparé su cena, me cojió 1 vez más, se notaba ya más cansado.
Tercer día, estaba yo en cuatro en cama cuando le marca de nuevo su mujer.
-Entonces a que hora llegan?… aaaah esta bien, voy a recogerlos?… ey, entonces ahí los veo.
-Qué pasó papi?
-Que mi vieja llega como en una hora, voy a ir por ella
Seguía embistiendo mi culo mientras me explicaba el plan.
-Te quedas aquí, te bañas y te vas, mientras yo voy a ir por ella.
-Si papi
-Ya después te marco para ver que día te voy a ver… aaaaaaaaah, la última
Se vino por ultima vez en mi, fue a lavarse el pene y mientras yo entraba a bañarme él cambió las sabanas que apestaban a sexo y las metió a la lavadora.
-Ya me voy.
-Si papi, espero tu mensaje.
Se fue y yo me quedé arreglándome para irme, abrí la puerta de la calle y justo un coche se paraba afuera, era Emmamuel.
-Ya te vas mami?
-Si, ya viene la socia, ya se fue a recogerla, yo me quedé bañándome, pero ya me voy.
-Vente, súbete y te llevo
-Gracias
Me subí y cual te llevó… me llevó a una presa de la ciudad que en ese día especifico había mucha gente, buscó lugar para estacionar y bajó un 12 de cerveza que compró en el camino. Mi relación con Jorge de un hombre mayor al que le gusta consentir y rellenar a un hombre menor, en esta ocasión era un hombre menor que le gusta rellenar a otro un poco mayor a él… ajajaja, 7-8 años de diferencia.
Nos fuimos a la mesa más apartada y donde estuvimos platicando hasta que fue la hr de comer para la mayoría de las familia, aprovechó esto y me puso a mamarle la verga, después me acostó en una banca y con mis pantalones a media pierna me subió las rodillas hasta el rostro comiéndome el culo que aun palpitaba de todas las cojidas que su tío me había dado.
-ufff te dejó bien abierto mi tío
Se acomodó y así solo sacándose el pene por la abertura del zipper me penetró, no podíamos hacer demasiado ruido porque a pesar de que no nos veía nadie, si podrían escucharnos.
-Listo… aaaaah
-Te viniste dentro amor?
-Simón, la que sigue te la echo en la boca. Mi tío no te los echó en la boca verdad?
-No… cómo sabes?
-Es que casi nunca deja que se la chupen, menos venirse en la boca de alguien, no se por qué vergas le da asco.
-Ahora entiendo…
-Oye… y tu tanga?
-Aquí la traigo, jajajaja, es que ya me picaba un poco de lo dura que estaba
La saqué de mi pantalón en una bolsita plástica
-Jajajajaja, no la lavaste?
-Nel, es recuerdo, trae mecos de 3 días, también trae tuyos.
Seguimos platicando y bebiendo, ya cerca de las 6 no había nadie en el lugar, aun quedaban tiempo de luz porque era verano y oscurece tarde.
-Ahora si, chupamela
Se bajó el pantalón a los tobillos y la introdujo en mi boca, él de pie y yo sentado.
-Aaaah la chupas chingon, aquí te van mami.
Su semen de verdad es en grandes cantidades, me llenó la boca de el y después unos besos bien cerdos, chingo de lengua, baba por todo el rostro de ambos.
Cojimos totalmente desnudos de nuevo antes de irnos, solo veíamos como por la carretera un poco más arriba pasaban los autos con sus luces encendidas, nosotros desnudos ahí con el fresco del ocaso dando una cojida final.
Me llevó a mi casa y como era de suponerse, traía tremendo manchón en el pantalón de los mecos que se me venían saliendo, lo bueno que era de noche y pues vivo solo, sino…
Con Jorge seguimos en contacto, pero me buscaba cada vez menos, como que pasé de moda para él y quizás se consiguió una nueva nalguita. Emmanuel pues ahora tiene 27 o 28, aun lo veo en eventos donde va a tocar, me saluda y a veces me pide irnos a dar una vuelta que termina en peda y cojida, pero tampoco es tan frecuente, pues hace 4 años se casó y la mujer es una celosa… creo que sabe que onda entre él y yo, porque siempre que me la encuentro me ve con una cara de odio que obvio ignoro.
Así de chusca empezó esa relación, jajajaja, saber que al hombre que tienes en cima tuyo tiene mujer y la acabas de saludar… pone rico.
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