CONDUCTOR DE TAXI CALIENTE

Después del trabajo encontró otro artista que le dibujo el futuro sexual.
En mi trabajo mi jefe llamo a dos trabajadores para regalarles dos entradas al teatro por su buen desempeño, uno de ellos fui yo. Soy Sergio y tengo 21 años, peso 51 kg. Soy my delgado, y tengo un culo paradito y redondito, se ve durito y, si me gusta ver las vergas de los hombres desde niño pero nunca me anime ni siquiera a tocarlos.  Jefe: Los he llamado para darles a cada uno una entrada al teatro de modo personal. Por su buen comportamiento y dedicación, disfruten de ese arte.   Yo: Gracias señor. Salí de la oficina y, como ya era salida fui a mi casa, me aliste para ir a ver el teatro, me puse mi ropa más bonita y el pantalón mas apretadito, que notaba mi culito con mayor claridad, mis padres no decían nada, lo veían todo normal a mi edad.

Ya en el teatro me encontré con mi compañero y en asientos contiguos nos pusimos cómodos y, a disfrutar de la obra. Después de dos horas de duración, a la salida y en la puerta del teatro  Juan: Voy en dirección contraria que tu, si no nos hubieramos ido juntos.  Yo: Si, pero no te preocupes, vivo más cerca que tu.   Juan: Chao.  Yo: Adiós.   Al irse mi amigo levante la mano y casi al tiempo aparco un taxi, cuyo chofer era un hombre mayor y maduro; lo que medio confianza y le pregunte si podía acercarme a mi casa, le di la dirección  Chofer: Claro con mucho gusto, suba usted. Yo; gracias.  Abrí la puerta trasera para subir y el él me dijo. Chofer: Venga siente adelante y así vamos conversando y calentamos la noche.  El chofer era un hombre para ser mayor se le veía muy fuerte y tenia cierto atractivo su madurez, sus brazos a pesa que tenía una casaca se le notaban fuertes, era de piel un poco oscurita, debería ser por su trabajo, imagine yo. Chofer: Dígame fue buena la obra   Yo: Si muy movida y entretenida.  Al empezar una conversación sobre la obra, note que sus piernas también eran fuertes, cada vez que hacia los cambios las abría dejando notar un paquete de verga muy abultado, me puse nervioso por tener cerca a un macho como él y no poder tocarlo…por primera vez.

Chofer: Usted parece una persona muy delicada.  Yo: le parece?  Chofer: Si.  La conversación se hizo personal y entramos a un plano más intimo de mi.  Yo: Porque le parece.  Chofer: No se molesta si le digo la verdad?  Yo: No. Note que el carro iba my lento y se había ido por una ruta distinta a la que usualmente iba yo.  Chofer: Porque no nos detenemos un ratito para hablar mejor, y también porque quiero orinar.   Paro el carro y se bajo, no muy lejos de allí había un matorral, se bajo la bragueta del pantalón casi como para que le viera su arma mortal…y si que se veía mortal, era fuerte y larga. Chofer: ahora si estoy tranquil; no quiere ir a miccionar  usted?   Yo: No.  Chofer: Sabe cuando lo recogí en el teatro usted estaba parado y de lejos tenía una figura de una chica, con una cintura muy exquisita y un culito atrayente, que me entusiasmo para llevarla a donde quisiera.  Yo: Ja, ja, ja le parezco una chica. Y todavía conquistable…ja, ja, ja.   Chofer: Y también cuando iba manejando me miraba la verga de reojo, por eso se me puso al palo y para bajarla tuve que mear.  Me estaba poniendo nervioso y, el miedo y el placer aparecían juntos, no sabía cómo actuar en ese momento, si decirle que si, me gustaba su verga o salir del carro e irme a casa aunque sea caminando.  Chofer. Te gustan los hombres?   Yo: No, soy hombre como tú.   Yo decía eso pero mis ojos se dirigían a su verga, mi culo se puso caliente y sensible.

Chofer: Mira como la tengo, déjame ver tu culo y te dejo ir   Yo no sabía que contestar, no vaya a ser que se ponga violento.    Yo: Pero solo lo vez eh.  Chofer si.    El se saco la verga para mostrármela y me quede con la boca abierta, era de un color medio marrón que en la noche parecía negra, me quede quieto sin moverme, solo mis ojos miraban ese armamento, que dentro de cualquier culo daría un placer inmenso.  Chofer: si quieres tócala, haz lo que quiera con ella, pero déjame ver tu culito desnudo.  Yo: Primero yo toco tu verga.   El se entusiasmo, se quito el pantalón, me dijo vamos allá en el jardín, que no hay nadie., bajamos, el se quedo desnudo de la parte de abajo, y OH Dios su pinga parecía un brazo mas.  Chofer: cumple lo que dijiste.   Me acerque y tome la primera verga de mi vida…una verga enorme, fuerte y muy caliente….Chofer: Te gusta?   Yo: Si   Chofer: chúpala y te gustara mas.    Abrí la boca y ese instrumento entro como un cuchillo en mantequilla, succione, absorbí, pase la lengua y la jalaba para adentro de mi. Estuve buen rato y el chofer mayor aguantaba, sabia porque, su premio era mi culo.  Chofer: ahora quítate el pantalón y enséñame  el culo. Yo: No te has corrido.   Chofer: Ahorita vas a ver la corrida mas espectacular de tu vida.  Me quite el pantalón con mucha tensión, no se por lo que iba a pasar por el miedo mismo. Iba a ser el primer hombre en ver mi culo de cerca.

Chofer: ponte de a cuatro para ver mejor.  Le hice caso, estaba como una perrita esperando una verga.   Chofer: Tienes el culo más bonito, te han cachado alguna vez?   Yo: No   Chofer: De razón, mira me has puesto más duro.   Y sin decir nada empezó a besarme el culo, metía su lengua con tanta ansiedad, que parecía que quería rompérmelo con su lengua, mi verguita se paro, ya mi cuerpo se descontrolo, y si él decide allí mismo meterla, lo aceptaba, pero él siguió besándome el culo, baje mi mano hasta su verga y la tenia más caliente. La noche era su cómplice, nadie podía vernos en ese jardín, yo me desnude completo, el empezó a presionar mis pezones y ello me arrecho mas y Chofer:  Quieres debutar conmigo?  Yo: Métela ya que quiero tu verga, quiero tu pinga dura y mucho..  Puso su cabeza en la entrada, yo estaba echado boca abajo, desnudo caliente, el fuerte mayor mucho más caliente, su verga inmensa era un carbón encendido y lo quería dentro, muy adentro, quería llenar mi culo de carne…mucha carne. Una vez en la puerta, lo empujo, menos mal que no era tan gorda si allí mismo me rompería todo…. Ahhhhh que ricoooo se siente adentro….muévela muévela…  Chofer: Tenias una puta dentro de ti…  Yo: No se pero tu pinga es rica….la primera…sigue cachándome…cacha….  Sus movimientos era muy sincronizados con sus besos en mi nuca, en mi cara y sus manos no se quedaba quietas, mis pezones se hincharon de tanto ser ordeñados por este viejo chofer.  Cuando de ponto siento un liquido caliente dentro de mi….me corrrooo  me dice…yo: Sigue sigue sigue lléname de tu leche. Ah… que rico polvo me he dado en este culito virgen. Ya eres mío.  Yo: Si.   Me aleje un trecho para botar la leche del culo.  Y si que fue bastante.

Cuando llegue al carro, el estaba vestido y en su lugar de chofer, me vestí y me puse en mi asiento de pasajero.  Yo: Fue mi primera vez.   Chofer: Te gusto?  Yo: Si  Chofer: Quieres otro polvo? Yo: No, me duele el culo. Ahora déjame cerca a mi casa.   Chofer: Toma mi tarjeta, si quieres mis servicios llámame.  Yo: está bien.  Me dejo, él se fue, entre a casa todos estaba descansando, me duche, me fije en el espejo como había quedado mi culo, estaba muy rojo, pero no lo rompió. Me dormí y soñé en toda verga que había entrado en mi culo. Toda la semana estuve con culo adoloridos, mis amigos me decían que seguro había debutado, no les hacía caso. Las siguientes noches mi culo quería verga, me metía los dedos, pero no era igual, por ser tímido no me ofrecía a nadie, para que me siga abriendo el culo, cuando llego el viernes mientras hacia limpieza en mi escritorio encontré la tarjeta del chofer y….lo llame.  Yo: Hola necesito servicio de chofer.  Chofer: Hola culito, yo y mi verga te extrañamos, quieres salir conmigo?   Yo: Si, Esta tarde a la salida del trabajo.   Le di la dirección y allí estuvo  Chofer; Hola como estas   Yo:  Bien  Chofer: Quieres verga?    Yo: Si  Chofer: Pero te va a costar  Yo: Que cosa?  Chofer: Quiero que seas mi puta y estés a mi servicio.  Yo: Como es eso   Chofer: Si quieres disfrutar de mi pinga tendrás que comerte las pingas de cuanto amigo te lleve…..   Yo:  Que…  Chofer: Ah si no quieres no hay problema, bájate y no hemos dicho nada.   Como Mi culo sentía que iba a perder esa pinga, mi boca dijo  Si.   Yo: Pero con una condición después que lo haga tu me cachas mas.   Chofer:  Si.

Me di cuenta que había nacido una puta en mi.  Ahora sería su puta.  Todo por su pinga.