Conociendo a mi papá

Un niño de 8 años conoce a su papá, sin esperar todo lo que le sucedería. .
Hola, mi nombre es José, tengo 13 años pero lo que contaré me paso desde los 8 años.
Yo vivía con mi mamá en casa de mis abuelos (sus papás) en México, no conocí a mi papá pues cuando nací el se fue a su país, pues mis abuelos no le permitían a mi mamá casarse con alguien de escasos recursos y por ese motivo se separaron.

Presentándome soy un niño llenito de estatura promedio, algo blanco y con unas pompis grandes.

Tiempo después  mi mamá conoció a un hombre el cual se volvió mi padrastro y con el cual mi mamá tuvo un hijo, el era bueno conmigo y siempre me trato como un hijo, sin embargo, yo sabia que no era su hijo y eso me hacía sentir mal. A esta etapa entendía que no me llamaba la atención las mismas cosas que al resto de mis compañeros, y que veía a mis compañeros o maestros de forma no tan normal.

Al ir creciendo mi hermanito comencé a sentir que desencajaba en esa familia, pues ya eran una familia los 3 en la cual era el raro yo. Le hice saber a mi madre este sentimiento y me dijo que entendía que necesitara de una figura paterna, le platico a mi padrastro y ambos decidieron que seria bueno mandarme un tiempo con mi papá real. Esta noticia me dejo perplejo pues no esperaba tal acción pero no me disgustaba en lo absoluto pues seria bueno ver a mi progenitor. Acordaron que me llevaría mi mamá y seria algo rápido por el bebé.

Llegó el día, tomamos el avión a Ecuador y ahí supe que mi papá era ecuatoriano. Mi mamá me vistió con un short corto ajustado y una pequeña camiseta de tirantes pues dijo que al llegar haría bastante calor y que razón tuvo pues al bajar sentí el abrumante calor, me gusto Ecuador, en cuanto salimos del aeropuerto me sorprendió ver a los hombres altos, morenos y blancos pero ambos muy guapos. Quede atónito ante tanto hombre que igual vestía solo bermudas y pequeñas camisetas o incluso unos llevaban el torso descubierto.

Tomamos un taxi el cual nos llevo a un barrio donde se veía de bajos recursos tanto la gente como las viviendas. Ella iba buscando algo o a alguien, hasta que nos bajamos en una tienda donde había un señor calvo, panzón y ya mayor el cuál mi mamá saludo preguntándole por Felipe y ahí supe era el nombre de mi papá, el le dijo que le llevaría un encargo en un rato, mi madre no podía esperar mucho, así que le explico era su hijo y le pidió de  favor me entregara con el, el le dijo que no se preocupara y así lo haría.

Mi mamá se fue y estuve esperando un buen tiempo. Cuando vi entrar a un hombre alto, con un short corto y sin playera mostrando así un abdomen hermoso y unos pectorales de los cuales me quise pegar a chuparlos. Se dirigió al señor diciéndole si estaba listo para su encargo mientras se apretaba su entrepierna, que hasta ese punto no sabía a lo que se refería ni el significado que tenia, yo estornude, lo cual hizo que dirigiera su mirada hacía mi y me volteé a estornudar, cuando me regrese me di cuenta que miro mis nalgas y le dijo al señor si era su nieto, que había sacado buenas nalgas y que si salía igual de gay que el (el señor calvo) le diera la oportunidad de ser quien me estrenara.

El le dijo lo que había pasado, entregándome con aquel hombre y dandole una carta que mi mamá le había dejado donde le explicaba todo, no podía creer que el era mi papá. Me tomo de la mano y me llevo con el, no sin antes decirle al señor que vendría a darle su encargo pronto pues tenía ganas.

Me llevo a una casa vieja y de mal aspecto, me dijo que ahí vivía y que ahora yo también lo haría. Como casi anochecía me dijo que ambos dormiríamos en la única cama que había, le dije que no había problema y no se preocupara. Hacía bastante calor que el estaba sudando y este sudor caía por sus pectorales que yo observaba atónito. Aunque de igual forma yo tenia mucha calor y se lo hice saber a lo cual me dijo podía quitarme la pequeña camiseta que vestía, pero le dije me daba pena a lo cual me dijo que era mi papá y que el igual no traía camiseta, estaba en confianza y me quite la camiseta mostrándole mis pezones duros y mi estomago gordito que el miro durante 30 segundos.

Cuando llego la hora de dormir me dijo que el dormía desnudo pero esta vez lo haría con su bermuda por respeto a mí, le dije que no se preocupara y que podía dormir como gustase pues estábamos en confianza y no quería arruinar su vida diaria, el me dijo que no era problema y que dormiría con bermuda, pasaron 10 minutos después de habernos acostado cuando me confeso no podía dormir por el calor y la incomodidad de la bermuda, le dije que tuviera la confianza para quitárselo e incluso le dije yo también me quitaría mi short pues de igual forma tenía calor y acepto levantándonos así para desvestirnos.

El algo apenado se despojo de su short y yo estaba atento a ese espectáculo, sin esperar que a partir de ese momento cambiaria mi vida y vería por primera vez un órgano masculino adulto.