Criado como la putita por mis tíos: Tío Manuel, mi protector
Tío manuel me protege.
Primero discúlparme por no haber escrito antes. Ya saben, ante tanta cosa que hoy está pasando, a uno esto se le va un poco.
A la mañana siguiente desperté con fuertes gritos que venían de la cocina.
T M: QUE EL MUCHACHO TE VIO ANOCHE!!
T E: NO SABÍA QUE ESTABA, PENSE QUE ANDABA CON USTEDES. NO HABIA NADIE CUANDO LLEGUE, POR LO QUE SUPUSE QUE LA CASA ESTABA SOLA.
T M: AHORA TENDRAS QUE TENER CUIDADO, ES UN NIÑO Y NO TIENE PORQUE VER COMO TE DAN POR EL CULO!!.
T E: BUENO.
Sentí a tío Manuel ir hasta mi habitación, entra y me ordena que baje a desayunar, que luego instalaremos las cosas que habíamos comprado en el pueblo y que, por los acontecimientos de la noche anterior, no habíamos podido hacer. Al bajar tío Ezequiel iba saliendo, solo hizo un gesto para despedirse. Tío Alberto que iba saliendo de la ducha, entro a la cocina desnudo, tomó un jarro y lo llenó con café y se fue. En eso llega tío Manuel y le reclama, que ya no es para que ellos anden en bolas, que yo estoy viviendo con ellos y que eso los obligaba a tener nuevas reglas. Que a mi papá no le gustaría que me críara entre hombres paseándose en bolas y teniendo sexo sin cuidados. Tío Alberto lo miró y le dijo:
T A: Lo haré, pero por el muchacho y no por tu hermanito.
Después de desayunar volvimos a mi habitación. Tío me había comprado una cama nueva que instaló y yo ordené las cosas en el nuevo clóset que habíamos traído. Guarde mi ropa nueva y tío ordeno un escritorio para que yo pudiese estudiar. Me dijo que pronto iba a ir al colegio del pueblo y que el se iba a hacer cargo de mi educación.
Tío Manuel pronto asumió una condición muy paternal hacia mí. Era él el que se estaba haciendo cargo de mis cosas. El que se preocupaba de que comiera y que me sintiese grato en la casa. El que me estaba enseñando a trabajar en el campo. Sentía una admiración hacía él, pero era muy diferente a lo que me pasaba con papá. Tío me generaba unos sentimientos que no sabía que eran, me daban gana se besarle y acariciar y que el me hiciese lo mismo.
Cuando terminamos tío se acostó encima de mi cama. Yo me acomode al lado de él. Me abrazo y yo me aferre a su cuerpo. Note su olor, que me embriaga de gusto, olor producto a la transpiración, pero que no era para nada malo. Yo le extiendo mi mano sobre su torso y el me mira:
T M: Que sucede muchachote?
S: Nada tío, solo que me agrada mucho estar contigo.
T M: A mí también me agrada compartir contigo. Siempre pensé que no tendría hijo y ya ves, ahora te estoy cuidando como si fueses mi propio hijo.
S: Si. Tu has sido muy bueno conmigo.
T M: Ya es mucho, a la ducha. Debes bañarte porque hueles a hombre después de trabajar en el campo y yo para que decir, huelo pésimo.
Tío entra a la ducha, detrás entro yo. Puedo ver como se baña completamente desnudo, el aún no se da cuenta que yo estoy en el baño con el. En un momento empieza a masturbarse y yo le pregunto que esta haciendo, asustado me pide que salga del baño, que espere en la sala hasta que termine para yo entrar.
La noche ya había caído. Nos habíamos demorado casi todo el día en ordenar mi habitación y la habíamos dejado bastante diferente a como era. Mientras esperaba a que tío Manuel saliera de la ducha, entra tío Ezequiel nuevamente borracho, me mira y me dice:
T E: Y muchacho te gusto o no lo que viste anoche?
Yo lo mire si saber que responder.
T E: Que no te han enseñado que hay que responder cuando te hacen preguntas? Que te enseño mi hermano cuando vivías con él? Que te está enseñando el cabron del Manuel?
Yo lo miré despavorido. Me asustaba el tono con el que me estaba hablando. Lo miraba con cara de susto.
S: Iré a ver si tío Manuel termino de ducharse, para ver si lo puedo hacer yo.
Pero sin darme cuenta tío Ezequiel me toma de un brazo y me pega a la pared. Aprieta su cuerpo dpbre el mío, puedo notar el olor a licor que expele su cuerpo, siento su boca cerca de la orejas y escucho.
T E: No vas a responder … te gusto o no lo que viste anoche?
No espera a que le responda. Comienza a tocar mi cuerpo y al ver que no he puesto ninguna oposición a ello, me mira y me dice:
T E: Con que también eres putito. Bueno esta familia está lleno de putitos. Llegaste a la casa perfecta.
No termina de decir eso cuando siento como su dedo se introduce sin mayor aviso en mi ano. Me quejo y trato de quitarme. Me tiene atrapado que no me deja moverme, mientras mueve bruscamente su dedo en mi ano. Me duele, siento que me hace mucho daño, pero parece a el no preocuparle. Yo le empiezo a gritar y el me dice que me bautizar como un putito más de la familia. Al terminar de decir eso, me toma violentamente y me deja a la altura de su verga, de un golpe me pide que abra mi boca y se saca un pene ya erecto y de inmediato lo introduce a mi boca, follandola muy fuerte. Yo no podía respirar ni nada, pues tío si bien no tenía la verga de tío Manuel, no dejaba de ser considerablemente grande y yo a esas alturas de la vida aún no acostumbraba a tener pijas dentro de mi boca.
!CABRON, QUE LE ESTAS HACIENDO!! Yn grito que atraveso por toda la casa. Era tío Manuel que venía saliendo de la ducha y se encontró con esa escena. Prácticamente corrió y se abalanzó sobre tío Ezequiel y lo apartó de mi. Lo golpeó fuertemente en la cara y me tomó y me llevo hacia el baño. Al entrar tío Manuel me pregunta:
T M: Samuel, hijo, estás bien?
S: Si. Solo que me duele mi culo. Tío me metió su dedo muy fuerte y parece que me hizo daño.
T M: Haber, déjame ver. Quizás como te dejo ese bruto.
Le muestro mi culo a tío Manuel, el lo abre y comienza a examinar con cuidado. Me dice que tengo un leve desgarro, pero que el me untará una pomada para que me sane. Comienza a tocar mi ano y en un momento siento algo helado, es la pomada que tío aplica con tal delicadeza que llega a ser una sensación placentera. En un momento siento un leve cosquilleo en mi guata y mi cuerpo por cada toque del dedo de mi tío, siento que se estremece entero y sin querer, de un momento a otro emito un gemido.
T M: Que no me digas que te gusta muchacho?
S: Tío que se siente muy rico. Ya no me duele nada, que me has sanado completamente mi culo.
T M: Bueno, que tu culo está bien hecho, es como el de todos nosotros. Es de familia.
Tío sigue aplicándome la pomada. Mi ano, ante ese estímulo, se empieza a dilatar y mi tío en un momento y si querer introduce su dedo. Yo nuevamente emito un gemido y el rie mientras sigue con su dedo dentro de mi ano. De un momento a otro y si aviso comienzo a mover mi culo.
T M: Qué haces?
S: Es que tío se siente muy rico.
T M: En serio?
S: Si tío.
T M: Y esto? Como se siente?
De improvisto siento su lengua en mi ano. El juega a meter su lengua y yo me estremezco de placer. Tío al parecer es un experto en hacer eso, porque lo hace sin ninguna dificultad y de manera muy rápido, generando una sensación de placer que no había sentido nunca antes. En un momento siento un costilleo que recorre todo mi cuerpo y mis jadeos pasaron a ser directamente gemidos. Luego de eso tío saca su lengua, lo miro y bajo la toalla que se había puesto al salir de la ducha, puedo ver una verga enorme.
Tío me pide que duche, lo hago y el me ayuda a hacerlo rápido. Mientras me ducho puedo notar que la verga del tío no se encoge. Termina de ducharme, mintió toma mi toalla y comienza a sacarme mi cuerpo. Le pone especial énfasis en mi ano. Me da la orden de salir del baño.
Afuera tío Ezequiel está descontrolado y al ver que salimos del baño le grita cosas a tío Manuel, este me dice que siga, que no haga caso. Tío me lleva a mi habitación, me dice que me ponga pijama y que el me traerá la cena. Yo entro y muy raudo me pongo la pijama, mientras afuera escucho gritarse a tío Manuel con tío Ezequiel, se escucha que llego tío Alberto, pero yo no pongo atención en lo que se dicen.
Siento golpear la puerta. Es tío manuel que trae la cena en una bandeja. Puedo notar que su verga bajo su toalla sigue bien grande.
T M: Muchacho come la cena luego. Cualquier cosa estaré en el baño.
Sale de mi habitación y yo como mi cena. sinto nuevamente la ducha, es tío que nuevamente se esta bañando, pero si lo había hecho recién me pregunto. Al rato lo siento pasar hacía su cuarto y escucho cerrar su puerta.
T M: He muchacho.
S: Que sucede tío.
T M: Que tu tío Ezequiel anda como un loko.
S: Es verdad eso que me dices.
T M: Si, así que hazme un rincón en tu cama, que no me perdonaría si ese loco te hace algo.
Yo me corro, tío solo trae polera y calzoncillos. Se saca la polera y se acuesta. Yo que intentaba leer un libro que me había comprado mi tío el día que anduvimos en el pueblo, lo dejé de lado. Tío se metió a la cama y dijo que era tarde y debíamos dormir. Ambos nos acurrucados, tío me abrazó y yo me empecé a acomodar hasta que con mi culo di con la verga de mi tío, que a la mañana siguiente despertará de maravillas. Dormimos ambos muy profundamente, con mi tío abranzandome sentí nunca me iba a pasar nada.
Me gusto sigue contando amigo….. 🙂 😉 🙂 😉 🙂 😉
Sigue contando, me quedé picado!
Es uno de los mejores relatos sigue contando
gran relato como siguye
Esta re bueno el relato, me encanta lo que te fue pasando, es hermoso.!! dale segui contando, porfi.!!!