Cuando inicio la pubertad de mi hijo.
Cuando mi hijo empezó con sus primeras erecciones tuve que enseñarle cómo masturbarse y las cosas se descontrolaron..
Me llamo José y tengo 50 años, soy ya un señor algo barrigón, y me estoy quedando calvo y con el pelo bastante canoso,y junto a mi esposa, hace unos 11 años tuvimos a nuestro primer hijo, Leo de 11 años, que por cuestiones de la vida, ya que mi esposa es enfermera de hospital, me ocupo de cuidar a nuestro hijo la mayoría del tiempo.
Leo es un niño de 11 años, no muy alto para su edad, una cara muy redondita, y algo gordito, tiene un poco de barriguita y pechito, pero muy sano. Desde este año ya sólo puedo ocuparme yo, así que cada día lo recojo del colegio y estamos todo el día solos hasta que llega mi esposa y como Leo no le apetece hacer ninguna actividad extraescolar está todo el día en casa jugando videojuegos.
Todo empezó hace unos meses, cuando Leo llegó del colegio y tras ducharse entró a mi despacho donde estaba trabajando, lo deje y puse atención a Leo -¿Papá podemos hablar?-dijo Leo muy serio, estaba con su pijama algo ajustado, había crecido un poco y estaba quizas algo mas gordito así que se le notaba bien su figura.
-¿Qué pasa Leo?-dije revolviendole el pelo, mientras lo hacía se ponía aun mas rojo y empezaba a balbucear, mientras sujetaba su móvil en sus manos como si me quisiera enseñar algo pero no se atrevía.-¿Quieres enseñarme algo? Vamos no tengas miedo, si paso algo en el colegio me lo puedes contar- intente ser algo tranquilizador.
-Pa… Papi, podemos hablar… ¿de penes?-me quedé algo sorprendido, suponía que quería tener la charla, aunque como siempre había sido tan bajito pensé que aún quedaba para la pubertad y esas cosas- Claro bebe, dile a papi que quieres saber – es algo que ya había hablado con su madre como debía ser esa charla, así que me tranquilice e intente tener la charla.
-Papi, mi pene es muy pequeño…-dijo enojadisimo como nunca lo había visto, trago saliva e intentó continuar- mi pene no es como el de mis compañeros, ellos dicen que ya les miden 20 centímetros y yo apenas… bueno.. es pequeña- yo me reí un poco y le agarre de la mano para que no se avergonzara más.
-Tranquilo Leo, a tu edad es normal aunque sea pequeña, según crezcas se hará más grande- dije convencido y con un risa suave- seguramente tus amigos no les mida tanto, a tu edad lo normal es que sea pequeña y más hasta que no tengas erecciones- mi hijo me quedó pensativo y me miró- !pero papa! ya se me pone dura y aun así es pequeña.
Se notaba que se estaba comiendo la cabeza con el tema y sin saber como reaccionar correctamente, simpmente me baje los pantalones para que viese mi pene- como puedes ver este es un pene normal- me agarre bien la polla, una polla normal de entre unos 8 centimetros dormida- cuando esta dormida es asi, y cuando te emocionas lo normal es unos 15 centimetros- dije sin pena, al final pensaba que hablar de sexo con mi hijo debia ser lo mas natural.
-no puede ser- dijo mi hijo sacando su movil y buscando algo- mira papa- dijo poniendo una pelicula porno donde se veia un chico con un pene especialmente grande follandose a una chica- mira papa, los videos que me pasan mis compañeros, son con chicos con pollas enormes- se notaba que habia perdido el control al decir pollas, pensaba que mi hijo y sus amigos aun no estaban en esa etapa, pero ya estaban hablando de sexo y viendo porno.
-Leonardo, tranquilo, tener un pene de 8-15 centímetros es lo normal, los actores porno son excepciones, y se usan muchos trucos para que parezcan más grandes sus pollas- dije riendome- A ver déjame ver tu pollita- dije intentando ver si quizás si era demasiado pequeña- ¡Pero papá!- dijo leo tragando su saliva- no sea necio, solo siéntate y bajate los pantalones- dije serio parandome de mi silla e invitando a sentarse, yo aún andaba con los pantalones bajados sin pensarlo demasiado, intente que todo fuese natural para el.
Se bajó los pantalones de espaldas a mí, pude ver su culito, estaba algo grande, quizás mi hijo era bastante caderón para su edad pensé, así como era su madre, pero ese pensamiento corto cuando se dio la vuelta, estaba con su polla algo morcillona, se notaba, no era muy grande, pero para su edad creo que estaba bien, quizás unos 8 centímetros, sin pensarlo la agarre con los dedo – cariño, estaba bastante bien, para tu edad es un tamaño estupendo- dije sin pensarlo mucho, llamaba a Leo por su nombre pero me salio cariño, mientras se me ponía dura, y notaba que a mi hijo también.
En mi mano su pollla estaba creciendo, quizás unos 12 centímetros bien erecta, mi hijo estaba rojo y sudando mientras se la sujetaba- Cariño este es un buen tamaño para tu edad y según crezcas se hará más grande- dije muy convencido, mientras toquetea bien su pene, la verdad me nubla un poco la mente, llevaba ya años sin follar apropiadamente con mi esposa, y últimamente estaba follando algunas veces con tipos haciendo cruising, así que ya estaba acostumbrándome a tocar pollas.
-¿Cariño ya te has masturbado antes?-le pregunte tranquilo, el asintio sin poder decir palabra, yo me rei y dije- tranquilo, es normal esto entre hombres, papi te va a enseñar a tocarte como es debido- dije sin miedo-pero papa…- dijo Leo avergonzado, pero tenia la polla muy dura y estaba soltando algo de presemente, yo me relami los dedos del presemen y acercandome a mi equipo puse una pelicula porno hetero que me gustaba, de un chico que decia ser el padrastro follandose a su hijastra, era muy morboso como el padre se follaba a la chica. Mientras reproduce la película, masturbaba a mi hijo y me masturbaba a mi, pero me emocione tanto que empecé a chuparle la polla, el se ponia muy rojo, hasta que con sus manos empujó mi cara a su pene y se corrio en mi boca, apenas un poco de chorro, pero yo lo trague sin problema.
-estuvo delicioso Leo, a Papi le encanta estos momentos-dije, y mientras eso me masturbaba y me corrí en el suelo, jadee un momento y al parar mire a mi hijo avergonzado y le di un beso en la mejilla- que esto quede entre nosotros, son cosas de hombres – me rei y le di otro beso- a papi le gusta pasar tiempo contigo.
tras acabar fuimos a ducharnos primero el y luego yo, durante ese rato el no dijo mucho, estuvo muy callado, pero estaba contento, se notaba, así que le avisé que iría a hacer la cena, me puse un boxer holgado y una camiseta ancha y estuve cocinando, antes de acabar mi Leo se acerco, y empezo a tocarme el culo, metiendo la mano por la pierna del pantalón, agarro bien una nalga y mientras cocinaba estaba metiendo un dedo suavemente en mis nalgas, para sus manitos mi culo era enorme, casi como su cabeza, admito ser bastante culón, así que se notaba que combatía con la idea de meterme mano y tocarme bien, yo lo disfrutaba así que lo deje hacerlo sin más, al acabar de cocinar y servirlo, el siguio todo el rato tocándome, pero no dije nada, lo permite sin problemas.
Tras comer, ya estaba muy cachondo,me quite mis pantalones y me acerque a mi hijo que estaba viendo la tele en el sofá, yo me agache delante de él como si fuera a recoger algo, y moví mi culo delante de su cara, no tardó nada en picar y Leo comenzó a tocarlo, yo solo pegue pequeños gemidos, mientras lo movía suavemente, Leo metió su cara, se nota que había visto mucho porno ya esta alturas y cual película empezó a chuparme el ano, se notaba que no entendía muy bien que hacer pero le encantaba.
Luego sin decir nada, lo senté en el suelo, él me miró y mientras me quitaba la camiseta- ¿Papa, que va a hacer?- yo solo lo silencie, cogí un bote de lubricante que ya me habia traido que usaba cuando estaba solo para masturbarme, comencé a meterme los dedos bien lubricados, Leo me miraba con ojos como platos, le pedí que se acerca- vamos hazlo como has visto- le dije suavemente y comenzó a meterme sus dedos, yo me acomode bien a cuatro paras y ahora con lubricante y yo abriendo mis nalgas con mis manos, pudo meter bien sus deditos, Leo estaba extasiado y gemía como yo, aunque solo estuviera metiendo casi toda su mano, sabía que dilata bien pero estaba tan cachondo que lo hice mejor que de costumbre.
-¿Mi Leo quiere follarse este culo?-dije moviendo el culo delante de mi hijo, para sugerirle que me la metiera ya -¿seguro papá?- yo solo asentí y vi como intentaba meterme su pequeña polla, que estaba más dura que nunca, lo notaba- vamos follate bien a esta enorme puta- dije intentado afeminar mi voz, estaba tan salido que no podia aguantarme, queria sentir la polla de mi hijo, y cuando al fin la sentí no podía dejar de gemir- si follame, dame duro-
En el espejo del salón veía como mi leo me follaba, era tan pequeñito en comparación a mi, que soy enorme, tan gordo y culon y ver a mi pequeño intentando meterla cada vez más fuerte, no paraba de jadear y de sudar- vamos dame duro, esta puta necesita rabo- dije y se notaba que eso me ponia aun mas cachondo, no podia dejar de jadear – así que jade más fuerte como una puta, ya veía a mi hijo apañarse con mi culo y empecé a jugar con mi pecho como si fueran tetas, peludas pero tetas, no podía dejar de tocarme mientras me follaba.
Me di la vuelta para intentar ver como Leo me follaba pero como estoy tan gorod apenas lo veía, pero sentía como con su bracitos sujetaba mis piernas, y ahora entraba aun mejor su polla en mi culo, en ese momento me sentía mejor que nunca follando, toda una puta y me daba ya igual que fuera mi hijo- Dame leche cabron, preñame bien, preña a tu puta- le gritaba mientras él no paraba de moverse y al rato sentí una corrida, mi niño me había llenado de leche, y yo sin tocarme me corrí, el morbo del momento me pudo creo que fue la primera vez que me había pasado. Estábamos llenos de sudor y yo de leche, tras eso fuimos al baño a ducharnos juntos y mientras mi bebe siguió jugando con mi culo.
Tras esta primera vez, siempre que se puede mi bebe no deja de volver a su padre su puta, estoy a la espera de la próxima vez y ver que reaccion tendra al verme usando tanguitas para mi hombre.
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