Curioso Placer

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
La adolescencia es una época de curiosidad y fue eso lo que nos llevó a conocer placeres intensos y nuevos.
Me llamo Marcelo y tengo 29 años, los hechos del siguiente relato se dieron cuando tenía 14 años y vivía en una zona rural de mi ciudad.
Siempre he sido flaco y de piel muy blanca y pálida, mi pene en aquel entonces medía 13 cm y un poco gordo.
Adrián era mi mejor amigo de toda la vida, nos conocimos cuando teníamos 9 y nos volvimos inseparables, él tenía la misma edad que yo y la misma estatura, ni gordo ni flaco y de piel morena, muy simpático de rostro.

Con Adrián pasábamos muchos ratos divertidos y con el llegar de la pubertad empezamos a sentir curiosidad por ciertas cosas, hablábamos de masturbaciones y de cuánto semen nos salía y cosas así.
Un día caminábamos por un sendero y nos encontramos con una pareja, sin hacer ruido nos escondimos para mirar como la chica le chupaba la verga al chico, me empecé a sentir excitado y con muchas ganas de masturbarme.
Adrián también se había excitado y se notaba su pene duro a través del pantalón, nos quedamos ahí hasta que el chico eyaculó en la boca de la chica, ella se tragó todo y luego se besaron, y cuando se vestían el chico le dijo "la próxima te doy por el culo", rieron y se fueron.

Nos miramos con Adrián y reímos, seguimos caminando y entonces él dijo.

Ad: viste como la chica se tragó todo
Yo: le debió gustar la leche del chico jaja
Ad: qué sabor crees que tenga
Yo: no se, pero puedes probar mi leche jaja
Ad: mejor prueba tu la mía jaja
Yo: tu primero jaja
Ad: a ver saca la verga pa chuparte jaja
Yo estaba algo excitado por la escena que vimos pero no me sentía tan convencido de lo que Adrián dijo.

Yo: no como crees jaja
Ad: entonces tu chúpame a mi
Yo: a ver sácala tu si te atreves
Terminé de decir eso y Adrián se bajó el pantalón dejándome ver su pene de también 13 cm muy erecto, no tenía muchos vellos y su piel era más oscura que el resto de su cuerpo.

Yo: estás loco
Ad: ven y chúpame la verga jaja
Yo: no jodas, chúpame tu la verga jaja
Ad: pero sácala no seas cobarde jaja
Me sentía algo intimidado pero me decidí y me bajé el pantalón dejando mi pene erecto salir.
Adrián me quedó mirando y se acercó poniéndose de rodillas frente a mi, agarró con su mano mi pene y se lo metió a la boca, empezó a chuparlo como una paleta y sentía su lengua en mi glande.
Estuvo unos minutos mamando mi pene hasta que sentí que eyacularía, puse mis manos en los hombros de Adrián y terminé llenando de mi leche la boca de mi amigo.
Adrián se tragó todo mi semen y luego se sonrió y me dijo que era mi turno de mamársela.

Me arrodillé delante de él y agarré su pene, olía a sudor y paja, pero me la metí a la boca, era como tener un bolo duro y caliente, no tenía sabor y sentía sus venas con mi lengua.
Adrián tenía los ojos cerrados y de pronto sentí algo espeso y caliente en mi boca, su sabor era algo desagradable pero no tuve opción y me lo tragué todo, el sabor de su semen por poco me hizo vomitar pero me aguanté.

Nos miramos y reímos mucho mientras subíamos los pantalones, volvimos al camino y seguimos hablando.

Yo: te gustó el sabor jaja
Ad: para nada, estuvo horrible jaja
Yo: a mi tampoco, tu leche es asquerosa jaja
Ad: recuérdame escupir toda tu leche la próxima jaja
Adrián estaba dispuesto a repetir lo que hicimos y me pareció genial.
Luego de un rato fui yo quien quiso llegar más lejos con Adrián.

Yo: qué se sentirá por el culo
Ad: pues no sé, no he probado jaja
Yo: quieres probar
Adrián se quedó en silencio sin responder, creí que había hechado todo a perder hasta que me contestó.

Ad: pero no aquí, ven a mi casa mañana tarde y vemos que pasa
Yo: dale te veo mañana
Esa noche casi no dormí, pensaba en lo que había pasado y en lo que pasaría el día siguiente.
Llegó la tarde y fui a casa de Adrián, me abrió la puerta y me dijo que estaba solo, fuimos a su cuarto y dijo.

Ad: primero tu me la metes y luego yo a ti, que dices
Yo: me parece bien
Adrián sacó un bote de lubricante y me dijo que un primo suyo mayor se lo había dado comprando, ya que él le había mentido diciendo que lo haría con una chica.

Nos desnudamos ya sin vergüenza y Adrián se puso en la cama en cuatro, yo no podía creer que tenía el trasero de mi amigo a mi disposición, sus nalgas separadas por la posición en la que estaba, dejaban ver un ano oscuro con pliegues perfectos, obvio de un culito virgen.

Puse un poco de lubricante en mi verga y también en el ano de Adrián, acerqué la cabeza y empecé a empujar.
El culo adolescente virgen de Adrián comenzó a abrirse y dejar entrar mi verga.

Ad: ooohh cabrón ooohh
Yo: ya entró ya entró
Ad: despacito maricón, se siente raro
Yo: siente mi verga cabrón siente como te entra
Logré meter toda mi verga en el culo de Adrián y me quedé quieto, sentía como su ano me apretaba y se sentía delicioso.
Muy despacio empecé a moverme y mi verga parecía aprisionada por el culo de mi amigo, luego mi vaivén fue ganando ritmo y podía culear más fácil a Adrián.

Yo: que rico cabrón que rico
Ad: ya me rompiste el culo maricón
Yo: mmm sii mmm que rico culo
Ad: ooohh ooohh, dale ya acaba rápido cabrón
Me sentía poseído por el momento de lujuria que pasábamos y no pude aguantar más, eyaculé sintiendo el placer más intenso que había tenido y dejé mi leche en el culo de Adrián.
Saqué mi verga aún semidura y toda mi leche escurrió del ano abierto de Adrián mojando sus testículos y ensuciando su cama.

Limpié mi verga flácida con una de mis medias y me acosté junto a Adrián, él me miraba sonriendo y le dije.

Yo: te gustó cabrón
Ad: se sintió raro pero estuvo bien jaja
Yo: mejor que una paja jaja
Ad: ahora me toca culearte
Yo: dale, pero suave jaja
Me coloqué en cuatro y asenté mi cabeza en la almohada, quedando con mi trasero bien levantado.
Adrián se puso de rodillas y acercó su pene a mi raja y comenzó a pasarla de arriba a abajo, yo sentía un cosquilleo que me gustaba, entonces él dijo.

Ad: tienes el ano rosado como de hembra jaja
Yo: cabrón no veas tanto y mete de una vez jaja
Ad: también te voy a romper el culo jaja
Sentí frío el culo cuando Adrián puso lubricante y luego sentí su verga empujando mi virginal agujero.
Empezó a entrar y yo sentía que mi culo se abría más y más con cada centímetro de verga entrando.

Yo: aaahh cabrón mmm aaahh
Ad: que rico como te entra maricón, si sientes
Yo: despacio cabrón aaahh
Ad: te voy a culear rico
Adrián me había metido toda su verga y comenzó a moverse, sentía dolor pero no mucho, era algo diferente, una sensación de placer desde mi ano hasta mis testículos cuando metía, y la sensación de defecar cuando sacaba.
La combinación de mete y saca le daban a mi culo y a mi cuerpo una sensación de excitación nueva.

Ad: mmm siii que rico culo que tienes maricón
Yo: aaahh mmm, me haces sudar cabrón jaja
Ad: te gusta te gusta mmm
Adrián me estuvo culeando varios minutos y mi ano abierto ya estaba acostumbrado a estar penetrado, sus testículos duros golpeaban los míos y un "chas chas" se escuchaba en la habitación junto con nuestros gemidos.

Yo: ya cabrón dale acaba
Ad: ooohh ooohh que delicia maricón, estás sintiendo rico
Supe que Adrián había terminado por su respiración agitada, se quedó quieto unos instantes y muy despacio me sacó la verga.
Sentí un alivio cuando lo hizo y apreté por instinto el culo dejando toda su leche dentro de mi.

Ad: te gustó
Yo: se sintió bien cabrón jaja
Ad: estuvo rico maricón jaja
Nos quedamos acostados desnudos y reíamos recordando cada momento que pasó.
Me sentía satisfecho, había perdido mi virginidad anal y también de mi pene, y lo había disfrutado.
Luego fui al baño y dejé salir el montón de semen que Adrián me había dejado en el culo.

Juramos que nadie se enteraría de lo que hicimos, y volvimos a tener sexo por mucho tiempo más, y cada vez se volvía mejor y más excitante porque nuestras vergas empezaron a crecer y nuestros culos se iban adaptando a su nuevo tamaño con el pasar de la adolescencia.
Todo duró hasta que un día su padre nos descubrió y se armó el problema más grande de nuestras vidas, pero eso quedará para otra historia.