De Chicos..ll por Issan.
Continuación de mi relato con Horacio. .
En mi Relato anterior ya conté la Relación que había comenzado con Horacio. Mi Amigo del Barrio. De Cómo él me había vuelto adicto a su Culito, y había conseguido que yo dejase de Masturbarme y estuviese todo el día pensando en él.
Pues bién, si en verdad sólo habíamos tenido un encuentro, fue de esas cosas que no se olvidan fácil. Todo estaba envuelto en Magia. Su actitud Pasiva, Sumisa, Sus Olores, y su Cuerpo delicado.
Después de aquélla vez, Horacio se había distanciado de mí. Ya no me buscaba para esconderse, ni me invitaba a su casa. Tampoco me daba “Celos” con otro chico. Pero su accionar se había vuelto, o pretendía volverse, Más Independiente. Más “Varonil”. Él no era Afeminado, pero ahora era como que sobreactuaba su rol de Varón.
Pasaron así dos semanas. Recuerdo que estábamos en vacaciones de Invierno. Hacía mucho frío y días que no paraba la lluvia.
Una tarde a la hora de la Siesta, Acude a mi casa. Lo veo venir por la ventana, y mi pija latió fuerte.
“Hola. Como estás? Querés venir a casa? Estoy solo” fueron sus palabras.
“Dale. Andá yendo que en un rato voy” le dije en una actuación Fenomenal sin mostrar mucho interés.
Recordé que tenía dos Bombachas sucias de las Hermanas escondidas en mi habitación. Fui por ellas, y casi antes de que él entrase a su casa, ya le estaba tocando la puerta.
“Pasá” me dijo sin Poder contener la ansiedad, y la excitación que develaban el movimiento de sus manos.
“Escuchame. El otro día, cuando te fuiste, me sangraba el culo. Me ardía cuando hacía caca”
Yo estaba ensayando una disculpa y Mil promesas, pero me interrumpió..
“Ésta vez quiero que sea más suave. Que no lo metas todo, Sinó.. Nunca Más”. Amenazó.
El Alma me volvió al cuerpo. Por un Minuto pensé que quería dejar de hacerlo.
“Ok”. Hecho. Respondí.
“Te Traje ésto.”Y saqué las dos Tanguitas de mi bolsillo.
“Las Usaste? Te Sirvieron” Preguntó.
Nó. la verdad, que yo también estuve dolorido. No me hice ninguna.
Paso al baño, le dije. Cuando estaba orinando, entra atrás mío.
“Querés que nos hagamos unas pajas con alguna sucia?” Me preguntó, sabiendo perfectamente mi respuesta afirmativa, porque ya estaba abriendo el cesto de la ropa sucia, que Gracias a la lluvia estaba a tope.
Buscaba torpemente entre sábanas y blusas. Yo de un Golpe, lo tiré al suelo. Desparramé la ropa, y comenzamos la tarea de buscar. Había Muchísimas. Entonces, yo las Olía, y separaba las “Mejores”. Los talles denotaban pertenencia. Su hermana Menor era más rellenita. La Mayor más flaca. Pués eran éstas las que más Fluídos tenían. Como si el ser tan flaca, depositaba más jugos.
Horacio buscaba sólamente entre las más grandes de todas. Eran las de la Madre, Obviamente. Eran modelos más grandes. Yo le saqué una de las que él se había separado, y la olí. La Mamá Tendría unos 40 años. Muy bién llevados por cierto. No había quién no le mirase el culo cuando pasaba.
“Te vas a pajear con las de tu Mamá” le dije con Naturalidad. Como aprobándo su decisión.
“Sí. Las de mis hermanas son muy “Fuertes”” replicó.(Nada sabíamos de Edipo, ni de la necesidad que tiene un chico de afirmar la Inexistente figura Paterna haciéndose Penetrar).
Yo había separado 4. 3 eran de la mayor. Tenían Un “Yogurcito” adelante, y unas gotitas marrónes por detrás. donde la tela se achicaba.
Nos sentamos en el piso. Estaba helado. Y comewnzamos a oler. A mí me excitaban mucho aquéllos manjares. pero más me excitaba verlo a Horacio con los ojos cerrados, dar profundas aspiradas. Sosteniendo el aire, como queriendo retener a alguien en su interior. Mis respiraciones eran más entrecortadas. Rápidas. Mi Nariz iba de la parte blanca a la marrón. Deteniéndome de vez en cuando. La zona de la cola era maravillosa. El olor no era a caca. Todo lo contrario. Era un olor parecido al que le había salido del culo a Horacio, cuando se abrió las nalguitas.
Seguíamos los dos completamente extasiados. Tanto, que ni siquiera nos habíamos desvestido.
Saqué mi pantalón, y me arrodillé. Comencé a pajearme por debajo del calzoncillo. Él me siguió. Se desbrochó el pantalón, y se tocaba por sobre el slip con dibujos de animales. Comenzó a mirarme fijo la mano. Olía profundo pero ya no cerraba los ojos. Me miraba la mano. Se empezó a pajear.
“La tenés dura?” Me dijo. “A verla?”
Saqué la Pija haciéndome rogar. Primero le dejé ver la cabeza por un rato, y luego me bajé el boxer.
Él se masturbaba frenéticamente.
Yo estaba Muy caliente. Ésos olores eran hermosos. Pasaba de una a la otra. Él hacía lo mismo.
“Prestame una de tu vieja”le dije.
“Tomá ésta” y me pasó una muy manchada. Era un olor hermoso en verdad. Más suave que el de las hermanas, pero igual de Embriagante.
Se la devolví. Dejame verte el culo, le dije.
“No. Pará. Aún no.”
“Dejame vértelo. Sólo verlo. No te voy a hacer nada”. de mala gana se puso en cuatro apuntándo su culito hermoso hacia mí.
Estiré mi mano para buscar su agujerito, y me la corrio. Seguía pajeándose como drogado.
Volví a estirar mi mano, y se dió vuelta con furia: “Basta!! Pará. Vos querés todo, y yo qué? Que me das?”
“Y Qué querías vos? Me pediste pija. Qué más querés?”
“Quiero que me hagas la paja” dijo.
“Estás en pedo!!” exclamé.
“Bueno. entonces, la cortamos acá. Yo te dejé que me cojas y vos no me querés ni hacer la paja?”
Lo pensé en un segundo, y tenía razón. Además, si se enojaba, me iba a perder todo ése inicio maravilloso de sexo, pajas y fetiches.
“.Ok. Te la Hago.” dije de mala gana. Sin imaginar qué se sentiría tener una pija que no fuese mía en la mano.
“Pero vos te pones de espalda. Te pajeo por delante”
accedió inmediatamente. Se dio vuelta y me apoyó el culo en mi pija dura. Yo comencé a pajearlo.
“Más despacito” suplicó. Su pija era más chica que la mía y no tenía pelos. Pero estaba durísima. Me excitó la sensación. Su culo, su pija en mis manos. Él me daba órdenes del como y cuándo. En Un momento, se ve que estaba por acabar, y me apartó la mano. para después pedirme que siga. quería estirar al máximo el placer.
No sé bién porqué, pero yo al verle el culo tan cerca, me agaché un poco más, y le pasé la lengua. Se sorprendió. Lo volvió a apretar contra mi cara. Yo lamía, y me pajeaba. Su olor era como el de la hermana. Hermóso!. Me pidió que siguiese, y lo pajée más fuerte. La punta de Mi lengua entraba en su hoyito. Yo tampoco quería acabar. Pero me estaba siendo difícil. De repente, me dijo que no aguantaba más. Que lo pajeara más fuerte. El momento fue excitante. Lo hice lo más fuerte que pude, y sentí cómo algo parecido a mi leche, pero de menor volumen y color, me mojaba los dedos. Antes de acabar, había llevado la bombacha de la Madre delante de su pija y la frotaba. Se acostó boca abajo, dando espasmos y gritos de placer.
“Vos tampoco cuentes a nadie que te hice la paja, eh” le dije.
Inteligentemente, me respondió: “Siempre que lo vuelvas a hacer, no diré nada”
Yo volví a lo Mío. Seguía empalmado. Tomé otra vez la bombacha y le pedí que se ponga en 4
Lo hizo y separó sus cantos. Metí mi dedo en su hoyito. Despacio, como me pedía. Yo estaba muy caliente. Despacio el culito fue cediendo y mi dedo entro todo. Él se apretaba contra mi mano. Yo no aguantaba más.
“Voy a acabarte” le dije. “Pajeáme” como entendiendo que ya me venía, se dio vuelta y tomo mi pija con la mano. Comenzó la faena. Me tumbé boca arriba con 2 sucias en la nariz. Él me pajeaba fuerte. ´
“Poné la boca” le ordené.
“No. Dale. acabá así. Acabame en la mano” dijo tembloroso y excitado aun. Con su otra mano, seguía masturbándose. tenía la pija semidura.
Inevitablente, reconocí los espasmos. Me sacudí elecrocutado, y lo llené de leche. Ni sé dónde salpicó. Él se agacho, casi recostado sobre mi pija,aspiraba mi olor.
“No es fea. Qué blanca te sale! Éso me dejaste en el culo? Con razón cagué clarito” dijo casi riéndose.
Nos bañamos? le dije?
Dale. Busco toallón.
Nos bañamos juntos, sin Mariconadas. Jugamos un rato al Ludomatic, y antes de que viniesen sus Hermanas, me fui..
sigue contando amigo muy buenos relatos.. 🙂 😉 🙂 😉
Buen avance.. vamos a ver si nace el amor y surge el primer beso en el próximo episodio. Me gusta como llevas esta historia. poco a poco y sin apuros. Eso es bueno para el desarrollo de la historia, sus personajes y la relación entre ambos. Sigue así.